CAPITULO 14- PROBLEMAS DOBLES.



NARRA DANIEL

En este momento, no sabía qué hacer, miré de reojo a los pequeños, buscando una excusa o una explicación para intentar librarme de ellos, esos no podían ser mis hijos, no, no y no definitivamente no, de verdad que no me veía cambiando un pañal o dándole un biberón a unos niños, no sé lo que se traería entre manos Erika, pero no echando cuentas y sabiendo cuando fue mi último polvo con Erika, los niños deben tener 2 meses y medio o tres, como mucho, definitivamente, esto no podía ser real, le mentí y le di de lado cuando al tercer día me de tener algo serio, sé que estaba muy mal mentirle a las chicas, pero yo no podría tener nada serio con ninguna no estaba preparado, y a decir solo me atraían sexualmente, por así decirlo.

- tenemos que hablar, te he buscado desde hace poco más de dos semanas, hay algo que tengo que contarte, si hubiese podido evitar esto, lo hubiese hecho, pero lo siento... -Erika prosiguió su relato- intenté tenerlos yo sola, estuve ayudada por una amiga, cuando me enteré que estaba embarazada, no dudé en tenerlo, pese a todo lo que supondría, al fin y al cabo podría cuidar a uno, pero todo fue a peor cuando en la segunda ecografía me dijeron que venían dos mis padres todavía no lo sabían y cuando se enteraron de que estas dos preciosidades venían en camino y que no tenía novio, me dieron de lado, dejaron de enviarme el dinero con el que me podía mantener aquí, les tuve que decir a los de la cafetería que iba algunas tardes para ganar dinero y cuando vieron lo que todo esto suponía, me echaron, estuve mantenida por Sofía, ella pagaba su parte del piso y el mío... - Erika comenzó a sollozar mientras contaba su relato-

- ¿Por qué no abortaste? –pregunté casi sin pensarlo, ante la mirada de odio de Erika en ese momento, quizás esa pregunta no era la más adecuada, en estos momentos, si ella estaba nerviosa yo aún más-

- ¿abortar? ¿Preferías que hubiese abortado? Veo que sigues siendo el mismo egoísta, al que conocí, Daniel ¿Cómo iba a abortar? ¿No te dan pena tus hijos? Ellos no tienen la culpa de que su padre no se pusiera el plastiquito, antes de dejar tirada a su madre –estaba asustada ante mi pregunta, y yo estaba aterrorizado ante lo que me estaba contando, sí quería dinero se lo pasaría, pero no me casaría con ella ni mucho menos cuidaría niños- me mentiste, me diste un número falso, yo no quería ser tu novia, yo solo quería ir al cine, a comer, hablar cuando estuviésemos mal... pero tu preferiste cortar por lo sano y cuando te pregunté tu teléfono y se convertía en algo más que tener un rollete conmigo, me dejaste mintiéndome.

- No me voy a casar contigo, Erika – respondí serio, ahora sabía lo que pasaría y me negaba, definitivamente no, me daba igual lo que tuviera que contarme y aunque todo esto me daba pena, pensando en mí no estaba capacitado-

- No vengo a pedirte que te cases conmigo... ni tampoco quiero tu dinero, vengo a que me escuches, termina de escucharme, por favor, todos me dieron de lado, tuve que dejar la universidad, todos me miraban mal, Sofía, le contó a sus padres lo que me pasaba, y ellos gentilmente me ayudaron económicamente y psicológica mente, me pagaron este carro para los niños, me compraron ropa para ellos, cosa que tú te deberías haber hecho cargo, pero no te busqué porque no te quería molestar, era mi responsabilidad, lo tendría sola,  efectivamente, poco después los niños nacieron, hace tres meses, hasta ahora los padres de Sofía, sin poder le han comprado a los niños todo lo que necesitaban, pañales, ropa, papillas, todo... Sofía me seguía pagando la parte del piso, me he tenido que gastar todo los ahorros que tenía en ellos, pero ahora algo ha cambiado -

- Yo no puedo darte mucho dinero, yo tampoco tengo una situación económica muy buena, Erika, no puedo, no quiero, no estoy capacitado para ser padre, todo esto me ha cogido de sopetón, yo no voy a ser un buen padre, no soporto a los niños, y no sé cuidarlo – me sinceré, todo eso era cierto, había momentos que no me sabía cuidar ni yo, contra más para cuidar a dos bebés pequeños-

- Daniel, déjame continuar, no pienses tanto en ti y escúchame... el contrato de Sofía se le ha acabado, la empresa aquí ha cerrado y los padres de Sofía ya no pueden hacer gasto a más, nos vamos a quedar en la calle, porque no tenemos para pagar el piso de alquiler en el que vivimos, los pobres bastante hicieron ocupándose todo este tiempo, ellos no son sus abuelos, son los padres de mi amiga... he buscado trabajo por cielo, mar, tierra y aire, te lo prometo Daniel, pero aquí ni en los alrededores hemos encontrado trabajo, en la misma empresa donde estaba Sofía me han ofrecido un puesto a mí y a ella –

- Oh, pues eso es genial, no veo ningún problema para... -terminaba de decir pero Erika negaba con su cabeza-

- Sí hay un problema, el trabajo está en Mallorca, Daniel, nos pagan muy bien, es algo que no puedo rechazar, estoy sin trabajar, no puedo mantenerlos... pero de los niños no me puedo hacer cargo en Mallorca, allí estamos solas, Daniel, solas, no tenemos a nadie, mientras estemos trabajando, no nos podremos hacer cargo de ellos, encima nos vamos a un piso compartido para ahorrar gastos, Daniel, son tus hijos te tienes que hacer cargo tú –Erika comenzó a llorar fuertemente y yo me empecé a agobiar-

- No... yo....- intenté hablar pero Erika volvió a tomar la palabra, estaba asustado , quizás esta situación me estaba sobrepasando-

- No puedo quedármelos, de verdad Daniel, volveré a por ellos en cuanto pueda, pero... por eso te he buscado, necesito que tú te comportes como su padre, necesito que te encargues de ellos, a quien mejor dejárselos que a su padre, no he tenido otra opción te lo prometo, no quiero ver a mis hijos encerrado en un internado, ni con gente que no sé si lo van a querer y a amar tanto como lo hago yo, si todo esto no hubiese pasado, te prometo que jamás los dejaría pero no puedo... no puedo hacerme cargo, son dos, el doble de dinero, el doble de tiempo, el doble de preocupaciones, y yo no puedo Daniel por favor –por unos momentos me estaba convenciendo, pero que digo, yo tampoco puedo, yo tengo mis problemas, y yo no quería a estos niños-

- yo... - intenté buscar una excusa para no hacerlo, pero al no encontrar ninguna decidí lanzarme a expresar mis sentimientos- yo, no sé cuidarlos, no, como tu bien has dicho soy un inmaduro, un irresponsable, alguien que no sabe cuidar ni de él mismo, ¿de verdad crees que soy el adecuado para que se quede con tus hijos- pregunté y ella solo se limitó a asentir con la cabeza-

- En la maleta, está un cuaderno con todo lo que debes hacer, la marca de leche que toman, que hacer en casos extremos cuando se ponen a llorar y qué hacer si tiene fiebre o están malitos, los dos tienen una pulserita con sus nombres Ethan y Martin... Daniel, está muy pendiente de Ethan, que eché sus gasecitos después de tomar el biberón, le cuesta mucho, vigila que Martin no le quite la comida a Ethan, que Martin tenga su osito preferido para dormir, solo lo hace con él y si no lo tiene, no duerme, y por favor cuídalos, estos niños son mis hijos, son mi vida y me sabe muy mal tener que hacer esto, no puedo cuidarlos, lo prometo, me cuesta mucho separarme de ellos – en ese momento Erika llorando se acercó a la cuna para darle un beso a sus hijos, cuando terminó de dárselo, echó a correr, intenté alcanzarla, pero con todos los bártulos que había a mi alrededor no podía alcanzarla, era más veloz que yo -

No me lo podía creer, que iba a hacer yo con dos niños, las primera idea que se me pasó por la cabeza, era avisar a la guardia civil o a servicios sociales para que se hicieran cargo de ellos, definitivamente yo no podía cuidarlos, dos pequeñas vidas no podían depender de mí, yo era un desastre, cogí el carro donde iban los niños, uno estaba dormido pero otro no, nada más verme una sonrisa se le formó en su pequeña carita y empezó a mover sus bracitos, desde luego no podían negar que eran míos, eran dos calcos de mi hermano y yo cuando teníamos su edad, por las fotos que he visto, éramos iguales, lo único que diferenciaban a estos dos de nosotros era el pelo, nosotros lo teníamos castaño y ellos un poco más rubios, me fijé en el otro y tenía mi misma forma de dormir, le estaba tocando la oreja a su hermano, esa era mi misma manía, para dormir y muchas veces a lo largo del día recurría a mis orejas o a las de algún conocido para mi relajación, sin saber que hacer comencé a andar me encontré con un banco en el cual  me senté en un banco que había en una plaza cercana, para ver que hacía con estos dos, necesitaba pensar, reflexionar y sobre todo pedir ayuda. Alguien me tenía que ayudar, pero quien, una larga lista de nombres, se me pasó por mi cabeza, pero al llegar a uno, una lucecita se encendió dentro de mí.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------

La que se ha liado pollito parte 2,,,,,,,,,,, danielin lo que se te viene encimaaaa.... pongo la foto de los gemes de bebes, quien mejor que eso para hacer de sus hijos, si son iguales... ¿a quien le pedira ayuda Daniel??' hay que me lo han dejado solitosssssssssssssss MUCHAS GRACIAS POR VOTOS Y COMENTARIOS... estoo sigueeeeeeeeeeeeeeeeeeee en el proximo capitulo mas y mejor, y algo más de salseoo.... si habeis oido bien empieza el salseooo Danete, que vas de machomen  y en el fondo es que mas recibe 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top