Rumor #8: El vídeo vergonzoso del gigante III
—¿Qué hago de nuevo aquí? —Yeol está con los brazos cruzados, mirando mal a la consejera— No necesito su consejo para nada.
Jessica revisa entre los expedientes, encontrando el de Chanyeol para leerlo por milésima vez. En serio está cansada que los profesores lo envíen aquí en vez de mandarlo a dirección.
Ella ya intentó darle orientación desde primer año, ¿Cuándo entenderán que necesita un poco de disciplina por parte de la familia y los altos cargos? Esto no es una guardería.
—Veamos, Park —ella suspira con cansancio—. Sabes que tienes privilegios en la escuela —dice sin precisar mucho para no meterse ella en problemas—, pero en esta mitad de semestre ya he oído muchas quejas de alumnos que han sufrido tu acoso, ¿no tienes límites? ¡Ya no sé cómo ayudarte!
Le sorprende que haya llegado a hacer daño a alguien que fue su pareja, es decir, ni con personas con las que ha sido cercano se ha podido controlar.
El pelirrojo bufa agobiado, no entiende porqué deberían ayudarle.
—No necesito ayuda, ellos son los que no colaboran.
—¿En qué no colaboran? —pregunta colocando su mano en la barbilla— ¿En dejar que consigas lo que tú quieras de ellos? Estoy recibiendo, últimamente, más quejas de chicas y eso me preocupa. Estás perjudicando la tranquilidad de los pasillos, tú con tu grupo de segundo.
Jessica siempre tiene un pequeño buzón en la puerta de su oficina para aquellos que quieran poner alguna queja o preocupación sin necesitar entrar a consejería. Además, había incrementado la cantidad de alumnos que pedían cita a ella solo para desahogarse de la molestia que da Yeol en clases.
Como profesora, le daba impotencia no poderles ayudar por culpa del director y el subdirector, además de, su primer intento de quejarse casi le gana un despido.
Abre el cajón de su mano derecha, y observa una lista de toda la gente que ha venido por el asunto Park.
Son demasiados...
Chanyeol se levanta de su asiento y mete las manos en su bolsillo.
—Solo no se entrometa y podrá conservar su trabajo.
Lo que le faltaba, una amenaza de un niño.
En fin, buscará otra manera de ayudar a sus alumnos. Ahora solo necesita una taza de té para relajarse.
La puerta es tocada varias veces.
—¡Pasa!
—Profesora Jung...
—¿Byun?
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El grupo regresa de la ciudad con un montón de compras para el evento de los clubes después de haber estado todo el día fuera. Todos se ven cansados y, sobre todo, con la panza más grande que cuando se fueron.
Minseok y Kyungsoo llegan a su habitación, dejando las bolsas en la cama —en este caso, el de segundo año deja todo en su cama inflable del suelo— y saludan a Junmyeon, quien recién sale del baño después de haber estado lavándose los dientes.
—¡Chicos! —nunca pensó en echarles tanto de menos— ¿Cómo les fue?
El segundo mayor se sienta en la cama para escuchar las crónicas de su paseo.
—Todo bien —comenta Kyungsoo, sacándose la chaqueta—, conseguimos lo necesario para que nuestro club destaque —revuelve la bolsa para enseñarle a su amigo algunos materiales para hacer pancartas, o incluso, pintura para decorar los muebles.
Minseok no duda en ordenarlo todo antes de que le gane su obsesión con la limpieza y el orden. Consiguió papel fotográfico y algunas cartulinas para hacer publicidad de su club, así como Kyungsoo le propuso. Estuvieron hablando de ideas para su stand y quedó satisfecho con su jefe de imagen Do.
—Fue divertido, menos cuando casi detienen a Jongdae, pero esa es otra historia —suspira este por el problemático de su novio—. Comimos bien y conseguimos muchas cosas a buen precio, ¿qué tal te ha ido a ti?
—Y a Sehun —añade Kyungsoo, de espaldas para que no se note su cara de chismoso.
Junmyeon cruza sus brazos, pensando en dar el reporte más neutral que pueda.
—Desayunamos y almorzamos juntos, luego vimos una película y además estuvimos en el club —explica este sin darle muchas vueltas—. Todo tranquilo.
Recuerda el encuentro con Chanyeol en la cafetería, pero cree que es mejor no darle interés a eso y preocuparlos. Pensará en cómo recuperar la habitación de Kyungsoo de una manera más sencilla que salir con ese horrible ser.
—No pasó nada, entonces —concluye Minseok—. Kyungsoo...
Soo saca un billete de su monedero y se lo da, mientras Junmyeon los observa con un rostro de indignación.
—¿Qué rayos apostaron? —Jun frunce el ceño y los mira con enojo. Al no ver respuesta de sus amigos, se echa por completo en su cama— Ah..., no importa... No tengo ganas de enojarme ahora.
Los dos restantes se colocan el pijama y se acuestan, teniendo solo la tenue luz de una lámpara iluminándolos.
—Jongin dijo que el evento es el otro fin de semana —comenta Kyungsoo, mirando el techo—. Mañana es domingo, aprovechemos para avanzar con las cosas —la verdad que la idea de organizar algo le emocionaba, y más si se trata de hacerlo en compañía de amigos—. El resto de la semana estaremos ocupados con las tareas.
—Cierto, aprovechemos.
—Le diré a Jongdae que nos tome fotos jugando a fútbol, mañana tenemos práctica —este voltea para ver a sus compañeros de cuarto—. Si las tomo yo, no saldría en ninguna.
—Solo aclárale a Jongdae que necesitas fotos de TODOS —añade Junmyeon—, es muy probable que solo te saque a ti si se lo pides.
Kyungsoo ríe y asiente ante esa verdad.
—Buen punto —Min intentará no olvidar precisar eso—. Buenas noches chicos.
—Buenas noches.
—Descansen.
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Llega domingo como un día de relajo para unos y para otros, hacer todo lo que la semana siguiente podría no dejarles realizar.
Como es de esperarse, el comité organizativo de la feria decora las paredes reemplazando todos los afiches del baile por los del evento de los clubes. Además, se añade un plus para que todos quieran esforzarse más: se aceptará visita del público externo.
El motivo de esto es para publicidad de la escuela y que los estudiantes puedan vender cualquier producto hecho por ellos mismos, hasta para mostrarle sus habilidades a, quizá, captadores de talentos.
Nunca se sabe.
Después de un desayuno tranquilo, donde la mitad del grupo no se presentó por estar durmiendo a pierna suelta, el club de carpintería llega a su local para ponerse manos a la obra.
—¡Vivi! —el perrito blanco corre hacia su dueño y le ladra como bienvenida— hoy estaremos todo el día junto, ¿está bien?
Kyungsoo se acerca al cachorro, con el ceño fruncido y dando un aura muy terrorífica, haciendo que Vivi se ponga en alerta.
—Buen perrito~ —la cara de Soo cambia por completo para acariciar con mucho amor al perro—. En los días de la feria, podremos sacarlo a pasear sin que se vea sospechoso.
—¡Cierto! Le diré a mi madre que compre una correa. Aunque no sé si podrá venir.
Mientras los menores andan en su charla, Junmyeon trae todo el material necesario para trabajar.
—A ver, chicos —da una fuerte palmada al aire para llamar la atención de los miembros— Kyungsoo, ¿te encargas de los afiches? Y, Sehun aún no puedes hacer mucho, no queremos que te pase algo más en la nariz, supervisa.
—Claro, yo haré los afiches —Kyungsoo acepta con gusto la tarea que se le da bastante bien—, haré unos cuantos diseños en la computadora y alguno a mano con recortes.
Saca la computadora de su mochila y se sienta en uno de los espacios para dibujar que no está siendo utilizado.
—Genial —a Jun solo le queda asentir, sabe que no debe preocuparse si lo deja en manos de Soo—. Sehun, primero ayúdame a cargar unas maderas a la mesa para cortarlos.
—Vale... —este se soba el brazo, aún con un poco de pánico con este tipo de máquinas.
¿No que no quería poner en riesgo su nariz?
Todos comienzan a hacer sus tareas asignadas, sin hacer mucho ruido —a diferencia de las máquinas— y muy concentrados. Pasa un buen rato hasta que uno de ellos quiere iniciar una conversación.
—Hyung...
El sonido de la sierra circular no deja a Junmyeon escuchar, quien concentrado, termina de cortar una tabla de madera.
—¡Hyung! —Sehun toca el hombro del mayor, lo que le hace apagar la máquina y alzar sus gafas protectoras.
—¿Qué pasa? ¿Te corté un dedo? —el de tercero frunce el ceño un poco preocupado.
Este niega y se rasca el cuello.
—Ya que hemos avanzado un poco el trabajo, quería comentarte un chisme... —este juega nervioso con las manos, esperando a no ser regañado—, bueno, no un chisme porque el mismo involucrado me lo dijo...
Junmyeon se saca los lentes de protección se apoya a la mesa cruzando los brazos y mirándole arqueando una ceja.
—¿Qué pasó ahora?
—¿Te acuerdas de Tao?
—Sehun, claro que me acuerdo —Jun ríe por eso—. Lo vi ayer.
Este suelta una risa inocente apenado por el descuido.
—Cierto, cierto —ahora hace un gesto de que le preste atención a lo siguiente—. En fin, él y Baekhyun son miembros del club de costura... en realidad, él ya me lo había mencionado antes, ya sabes, que está en el club con él... pero me dijo que se creía mucho y no hablaba con el resto de miembros.
Junmyeon se concentra en lo que dice el menor una vez que este menciona a Baekhyun, quien, literalmente, ha estado metido en el ojo del huracán muchas veces.
—Supongo que ese no es el problema, ¿no?
—Por el asunto del video, ayer Chanyeol fue a buscar a Baekhyun al club, creyendo que él es el que lo subió —le explica serio—, casi le golpea en mitad del pasillo, pero menos mal que Tao pudo defenderlo...
Vaya, ya había escuchado que estos dos se pelearon una vez en los pasillos, pero en esta ocasión suena más violento. Ese Park necesitaba que le hicieran bajar de la nube lo antes que pueda.
Si nada más ayer quiso hacerlo parte de su circo para "ayudar" a Kyungsoo.
Parece ser un chico muy mimado, está seguro que lo mandaron a un internado para que no moleste en casa.
Claro, envíenlo a molestar a los demás...
—Suena grave —es lo único que dice Jun antes de sumergirse en sus pensamientos— Uuhmmm...
En realidad, no es su problema lo que haga Chanyeol, pero... por una parte está Kyungsoo sufriendo la mayor parte del tiempo, sin tener la habitación que se le asignó hace casi tres meses.
Kyungsoo es demasiado tímido y entiende que no pueda confrontar al más alto ¿Cuántas veces lo habrá hecho menos?
Según él y Jongdae, que pertenecen al segundo año, no hay un día en que el pelirrojo no haga de las suyas. Peor aún, desde que su pelea con Baekhyun separó a los "populares", y hasta, el incidente del baile, que hizo a su reputación quedarse por los suelos, por lo que parece estar con más ansias de hacer daño para poder recuperar "la atención".
Es un tema complicado.
¿La solución? Que lo expulsen.
Pero no, básicamente el director le lame los pies a sus padres.
—¿Hyung?
—¿Sí? —Junmyeon parpadea al darse cuenta que está con la mente en otro lado.
—¿Esa es tu cara de "tengo que hacer un plan aunque no quiera involucrarme"? —dice el menor, emocionado.
Junmyeon chasquea los dedos.
—Así es, pero... —ahora observa los materiales en la mesa. No puede perder más tiempo—, será mejor acabar con esto, en la noche hablaremos sobre el tema.
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—Tao~ —Baekhyun aparece con una lonchera con estampado de perritos— ¿comemos juntos? ¡Hice un poco para ti!
La voz melodiosa de Baek se gana la atención de los demás miembros del club de costura, quienes trabajan arduamente en hacer sus uniformes para el evento. Es raro que Baekhyun le dirija la palabra a alguien de primero.
—Ay —Tao lo mira aburrido y un poco molesto por ser distraído de su estado de concentración máxima—, ya te dije que no me hables cuando estoy trabajando.
—Pero ya son las dos de la tarde, ¡debes comer algo!
—Qué pesado, eh.
No sabe que mosca le picó a Byun, solamente le ayudó ayer y ahora lo tiene detrás todo el rato.
¡Necesita respirar!
Puede que lo haga en agradecimiento, pero Tao no necesita nada de eso, él vive bien solo y tranquilo. Ahora es como tener a una mascota rondando hiperactiva por sus piernas.
Debe mantenerlo distraído hasta que acabe lo suyo.
—Ya sé —menciona Tao—, pruébate el uniforme para asegurarme que está bien y vamos a comer.
Tao le proporciona a Baek uno de los primeros modelos del uniforme.
—¡Claro! —este corre hacia los servicios más cercanos a probarse la vestimenta.
Tao se mentaliza y hace un ejercicio de respiración para mantener todas sus chacras en calma. Tiene que ver esto como algo positivo, es decir, en volver a Baekhyun alguien decente.
Por otro lado, Baekhyun se dirige al baño de hombres con la vestimenta en su brazo. Se asegura que no esté el alto por los alrededores.
Ahora sentía la necesidad de vigilar por si acaso. Sabe que con lo que conversó con la señorita Jung no tendrá que preocuparse en un futuro.
Antes de ingresar al servicio de varones, escucha unos llantos en el de mujeres.
Aquí empieza sus ganas de hacer el bien, sí sí. Tao y la profe hubieran hecho lo mismo.
Observa esto, Luhannie.
Frunce el ceño, y asoma su cabeza para ver que no haya ninguna chica que lo pueda regañar, entonces entra. Busca por debajo de los cubiles, viendo cuál está ocupado con la chica que llora.
—¿Estás bien? —pregunta al encontrarla— te escuché llorar y entré...
Escucha como se sorprende la otra por oír a un hombre ahí dentro.
—Estoy bien... solo que... —escucha cómo la chica vomita—, últimamente estoy teniendo muchas nauseas...
—Uuh... ¿comes a tus horas? ¿lo necesario?
—No, yo creo que...
—¿Acaso quieres verte más delgada? —pregunta— yo solía hacer lo mismo, pero al final, es mejor disfrutar de las comidas~
—No es eso.
—¿Entonces?
—Creo que estoy embarazada...
Baekhyun se queda callado ante esa declaración.
Eso fue fuerte.
—Espera, qué....
—No le puedo decir a nadie, tengo miedo de que me expulsen... Por favor, mantén el secreto.
—Bueno, ni siquiera sé quién eres... solo... uh... —Baekhyun saca su teléfono—. Dame tu número, ¡te ayudaré en lo que pueda! No será mucho, pero al menos en apoyo emocional.
La chica dicta a duras penas su número para que Baek lo registre.
—Gracias...
—En fin, ahora sí me tengo que ir —comenta apenado—. Intenta cuidarte leyendo algo en internet.
Consejo del año.
La chica asiente y se despide también, no sin antes agradecerle. Lo menos que quiere es que le vean la cara.
Baekhyun desaparece para probarse rápido el uniforme y no preocupar a Tao. Por suerte, todo queda en su sitio, y al verse al espejo, posa con su aspecto de camarero lindo.
La idea del club de costura es lucir sus lindas vestimentas mientras venden café y pastelitos, haciendo un mini café. Lo bueno es que la mayoría del club tiene rostros visuales y no será difícil atraer a la gente.
Además, lo tienen a él.
Regresa al club, modelando a vista de todos y dando vueltas para que alcancen a ver lo bien que se ve.
No faltan los fans de Baek admirándole y elogiando su atractivo.
Tao se acerca a mirarle de arriba abajo, muy serio antes de dar su veredicto.
—Creo que, si le agregamos un chalequito, estará genial... —este asiente y obliga a Baekhyun darse la vuelta—. Sí, uh, está todo perfecto. O sea, yo lo he diseñado, obvio iba a estar bien, pero creo que el chaleco es lo que falta...
—¡Yeey!
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—¡Aaaaaaaaaaah! ¡Minnie! ¡Eres tan lindo! ¡Ánimoooooo! —la voz de Chen atormenta al equipo de Minseok, quienes pierden la concentración a cada rato por culpa del ruidoso enamorado.
Al menos está sacando buenas fotos, tomó prestado (o eso creen) la cámara profesional del club de fotografía. Después de todo, les debían una luego de lo de Junmyeon.
—Hey, Jongdae —Jongin aparece para tomar asiento a su lado—, uuuh~ ¿partido de práctica?
—Síp, Minseokkie pertenece al equipo amarillo, se han dividido en dos grupos para hacer un pequeño partido amistoso —dice Dae, poniéndole en contexto—. Estoy tomando muchas fotos, es una tarea MUY importante.
Jongin mira asombrado cómo juegan y gritan para que les pasen el balón.
—Seguro que con la ayuda de Kyungsoo hyung y de él cómo jefe del equipo, harán un buen trabajo en el evento.
—Ejem...
—Y de tú ayuda.
—Exacto —Jongdae ríe, luego se percata de porqué Jongin está aquí— ¿No tienes cosas qué hacer? Cómo bailar o, no sé... ¿dar piruetas?
Jongin niega aburrido.
—Estoy descansando, mañana tenemos una especie de audición para ver quién hará el solo en la apertura de la feria —comenta tranquilo, ocultando todo su nerviosismo—. Soy muy bueno memorizando coreografías, así que después de tenerlo en mi cabecita, estoy estirando las piernas un rato.
—Oh~, seguro saldrá bien ¿quieres que vaya a animarte?
—Eeh...
Minseok se acerca a los chicos, con una gran sonrisa en el rostro por verlos.
—¡Chicos! —Jongdae le pasa una toalla y una botella de agua— gracias, Chennie.
—No hay de qué~ —este lo ve embobado mientras se seca el sudor— Por cierto, ¡les tengo un chisme!
Jongin y Minseok lo miran un poco preocupados.
—¿Fantasmas? —pregunta el moreno.
—¿Foto de partes íntimas? —pregunta el mayor.
—Quizá... ¿rumores de infidelidad?
Jongdae niega haciendo una "X" con sus brazos.
—Según mis fuentes de información, es decir, mis secuaces de segundo... —dice este divertido—, ayer le dieron la tunda de su vida a Park Bullyeol —la voz de Jongdae adquiere un tono de señora chismosa— ¿se lo pueden creer?
Minseok frunce el ceño ante la noticia.
Ya podrían hacerle lo mismo a Yixing, ¿quién habrá sido lo suficientemente valiente para enfrentar al gigante?
—¿Pero por qué? —Jongin no cree que haya sido alguno de sus víctimas, por lo que no se le ocurre cuál fue el motivo.
—Esa es la parte más interesante del chisme, mi querido Nini —el de la boca gatuna chasquea con sus dedos.
—Al grano, Jongdae —Minseok da otro sorbo a la botella.
—Vieron que Yeol acorraló a Byun Baekhyun en el pasillo, pero de forma muuuy violenta —explica con toques de dramatismo—. Hasta que apareció un chico de primero, conocedor de artes marciales y... ¡Uaayah! ¡Hyaaaa!
Los gestos de Jongdae imitando los ataques de Tao son demasiado tontos para tomarlos en serio.
—Ya era hora —comenta Min—. A ver si así se le quita lo idiota.
—¿Tú crees? —añade Jongin— Si hyung le puso una rata muerta como advertencia y ni con esas aprendió. Necesita un castigo más severo.
Minseok y Jongdae se miran al ver que el moreno tiene parte de razón.
—Yo digo que en la feria... ¡Le hagamos pasar miedo encerrándole en un almacén!
—Claro que no haremos eso —regaña el mayor de todos—. Tiene que ser algo que le haga avergonzarse tanto... ¡que se orine en público!
Jongin suelta una carcajada sonora.
—¡Hyung! —le llama la atención el moreno— Eso es bullying, no podemos rebajarnos a su nivel —Minseok lo mira raro porque él también dio una opción muy malvada— ... así que... —ahora mira a Jongdae.
—Mosquetegoooooooos~ —grita Jongdae—, ¡exijo reunión del equipo maravilla!
—¿Por qué deberíamos encargarnos de esto, ahora que lo pienso? —Minseok coloca sus manos en la cintura.
Jongdae se pone de pie y obliga a Minseok a sentarse para dar su cátedra de las razones por las que deben salvar al estudiantado de Chanyeol.
—Razón número 1 —levanta su dedo índice—, Kyungsoo es nuestro amigo y por lo que sé, es el más afectado con todo esto. Le quitaron su habitación y... pues, desde principios de años se notó que era la víctima favorita de Chanyeol.
—Es cierto —Jongin se encoge de hombros, preocupado por eso—, lo peor es que ni le tomamos importancia hasta que nos hicimos amigos de él. Creo que reaccionamos cuando ya no es tan "ajeno" a nosotros, eso me hace sentir con más ganas de darle una lección ¿cuántos estarán en la misma situación sin nadie que los apoye?
Minseok suspira por sentirse identificado con lo que Jongin menciona. Y aunque hay más de segundo fastidiándole la vida a otros, el cabecilla siempre ha sido el pelirrojo, todos ellos querían de su atención y solo lo conseguían teniendo de victimas a los mismos que Yeol persigue.
Gente sin personalidad.
—Razón número dos...
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—¿Uh? —Junmyeon arquea una ceja— ¿Por qué haría algo como eso? Necesito algo más concreto que una idea en el aire.
—Jongin, repítele a Junnie la razón número dos, venga.
El moreno traga rápidamente el trozo de pollo para cumplir lo que su mayor le pide.
—Sehun y tú son populares —dice este, jugando con la cena—. Son la imagen de todo lo que está bien y de lo que los demás quieren ser. Todos quieren hablar con ustedes.
Sehun alza su rostro, orgulloso de escuchar eso, lanza una mirada a Junmyeon, pero este sigue con su cara de "de qué demonios hablan".
—A ver —Jun pide que todos le presten atención, golpeando la mesa—, ¿quieren que Sehun y yo ayudemos a hacer que Yeol entre en razón? ¿Cómo haríamos eso?
Para el jefe del club de carpintería, Park Chanyeol no tiene ninguna pizca de humildad ni bondad dentro de él, o quizá de consciencia para que llegue a reflexionar por todos sus actos.
Peor si gente de su edad intenta actuar.
—Bueno, Minseok, Jongin y yo, hemos pensado en que podríamos aprovechar eso para ayudar a Kyungsoo y a las demás victimas para darle una lección justa a Chanyeol.
—Solo que, necesitamos una buena idea para eso —añade Minseok.
La voz grave de Soo entra en la conversación.
—Podemos encerrarle en una habitación con un vídeo de asesinatos sin censura que lo traume lo suficiente para disociar sus personalidades y así brindarle una que sea amable y buena —el aura de Kyungsoo se vuelve muy oscura, asustando al moreno que está a su lado—, podríamos empezar un proyecto MK ultra con él y hacerlo nuestra marioneta.
Largo silencio del grupo.
—Rayos, Kyungsoo —contesta Jongdae— ¡Me encanta!
—No entendí —Min se queda mirando a la nada. Kyungsoo siempre tenía referencias muy raras.
Sehun levanta la mano para obtener el turno de palabra.
—Adelante, Sehun —Junmyeon suspira al ver que todo esto no va a ninguna parte.
—Mi idea es aprovechar el evento de la feria y evidenciarlo en público —dice con mucha tranquilidad—, habrá la cantidad suficiente de personas y si tenemos mucha suerte, estarán sus padres.
Junmyeon asiente muy a favor de la idea de Sehun.
—Si sus padres ven que muchos alumnos declaran haber sido victimas de Chanyeol delante de gente importante, padres y alta dirección, podremos ponerlo en apuros.
—Me gusta, me gusta —Jongin levanta el dedo pulgar—. El tema ahora es... ¿qué haremos para que manifiesten haber sido víctimas?
Chen levanta sus brazos para recibir la atención.
—Lady Jun o el Príncipe Hun puede subirse al escenario para "dar un discurso" ¿no? —propone Jongdae— Los del comité están buscando gente para que hable frente a todos ¿quién mejor que la parejita favorita?, si escogemos un espacio en la programación para hablar últimos, sería más que perfecto.
Sehun asiente con total convicción.
Por otro lado, Minseok coloca un dedo en la barbilla pensativo.
—Cierto, esto no perjudicará a los demás números de presentación.
—Kyungsoo —el moreno voltea hacia este—, ¿sabes más o menos quiénes han sido sus víctimas?
El bajito se queda pensativo ante esta pregunta. Conoce a unos cuantos, pero no sabría decirle realmente, mucho de estos acosos han sido por lo bajo y no se puede ver a simple vista.
—Es difícil, conozco a los más evidentes —menciona—. Debemos hallar la manera de conseguir un gran número de ellos para que la denuncia se haga notar.
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Ya anochece haciendo que todo el grupo regrese a sus respectivas habitaciones. Más o menos se hicieron una idea de lo que van a hacer, pero falta concretizar ciertos puntos.
Tienen una semana por delante y mucho qué hacer.
—He vuelto... —Sehun retorna a su habitación, dándose palmaditas en la barriga por la cena— ¿Eh?
—Ah, hola —Tao se encuentra sentado en el borde de la cama, muy serio.
—¿Qué ocurre? ¿Por qué estás así?
Tao arquea la ceja sin saber a qué se refiere.
—Taoshi~ —Baekhyun sale del baño con el uniforme retocado— ¿qué tal así?
Sehun se queda boquiabierto por la repentina aparición de Baek.
—¿¡Pero qué!? —este lo señala como si no pudiera creerlo— ¿Por qué está en la habitación?
Tao no cambia para nada su expresión. Entiende que Sehun no quiera estar en el mismo lugar que el ex infiel, pero solo estaba usándolo de modelo.
—Ah, solo vino a probarse mi modelo final —comenta como si nada—. Tranquilo, Baekhyun se pasó al lado de los buenos ¿Ok?
Sehun le lanza una mirada incrédula.
—No puedo confiar en eso.
El rubio se muerde el labio inferior, no tiene excusa que dar. En serio se merece que desconfíen de él.
—Aprendí la lección ¿vale? —dice por fin el rubio— Perdón por todo, Sehun... solo que... ¡argh! Estaba cegado por la fama...
—Uh... No sé...
Tao se pone de pie hasta llegar a ellos.
—Ya se disculparán como es debido en otra oportunidad, serás sincero con él ¿está bien, Baekhyun?
—¡Sí!
Vale. Todo esto es muy raro ¿por qué Baek lo ve con ojos brillantes y de admiración?
Parece que Tao hizo un cambio en él al salvarlo, pero no puede creer que Baekhyun parezca humano.
Aunque ahora que lo piensa... ¡Puede ser una oportunidad!
Baekhyun siempre ha estado junto a Chanyeol, debe saber más o menos quienes eran sus objetivos.
—Oh, Baekhyun... —Sehun se rasca el cuello—. Escuché sobre lo que te hizo Chanyeol ayer... Espero que estés bien —Este no responde por lo que el menor sigue hablando—. No sé si sea bueno decirlo, pero... estamos buscando la manera de darle una lección y bajarle los humos, para ello necesitamos a gente que haya sido lastimada por él... ¿no te gustaría unirte?
Tao se sorprende por la propuesta de Sehun.
Nunca lo imaginó tan cooperativo con el bienestar estudiantil, pues su personalidad frágil es muy contraria para enfrentar situaciones difíciles como esa.
—Yo... —Baek frota su brazo con la diestra—, lo haré. Es más, tengo algo que podría ayudarles...
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