Esa mañana estaba yo sentada en la cama del hotel, mirando al infinito pensando en lo rápido que había pasado el tiempo....pasados unos minutos me fui al baño para ducharme, vestirme y peinarme. Después bajé al salon del hostal para desayunar, y mientras se hacía mi comida salí a la terraza a hablar con la ancianita.
-Oh, buenos días Sapphire ¿Qué tal has dormido?
-Muy bien gracias.
Continuamos conversando hasta que derrepente el cielo se tornó oscuro y empezó a notarse humedad en el ambiente y empezó a llover muy fuerte.
-Vaya, no había visto una lluvia tan fuerte en mi vida.
-Nunca había pasado esto...el despertar de Kyogre y Groudon está cerca.
-¿Groudon y Kyogre?
-Si, los creadores de la tierra y del agua. Como ya te conté el otro día, hace cientos de años tuvieron una batalla ver por cual conquistaba el mundo, pero gracias a Rayquaza ambos se calmaron y volvieron a las profundidades para descansar. Era de esperar que en algún momento volviesen a despertar pero no esperaba que fuese tan "pronto"...puede ser que el futuro halla decidido que eso sucediera ahora para ponerte a prueba y ver de lo que eres capaz.
-No creo que sea por eso...
-¿Y por qué no niña? Ya te dije el otro día que tú serías la elegida para traer la paz definitiva entre esos dos pokemon.
-No creo que el destino me halla elegido a mi para poder vencer a dos seres legendarios yo sola...
-Es qué no confias en tu poder...
-No es eso, pero si llegase a encontrar a Groudon y Kyogre lo más probable es que terminen aplastandome sin ningún problema. Además, creo que si hay alguna persona en Hoenn capaz de ponerles frente a tales pokemon...ese sería el campeón.
-Prueba a intentarlo, por qué crees que yo nada mas conocerte te dije que serías la elegida...veo en tu aura algo especial, de verdad Sapphire, confia en mi.

Sus palabras me dejaron impresionada, y me llenaron de confianza. Pensé en ir a la busca de Groudon y Kyogre pero...no tenía la menor idea de donde encontrales.

-Puedes pedirle ayuda al octavo lider de gimnasio de Hoenn, acercate a Arrecipolis y él te ayudará con lo que necesites.(me dijo la ancianita)

Y eso hice, fui hasta Arrecipolis y me acerqué al gimnasio para hablar con Plubio

-Buenos días Plubio.

-Hola Sapphire, que te trae por aquí.

-Verás, una mujer me dijo de unos pokemons legendarios, que Hoenn estaba en peligro y que tú me podrías ayudar a encontrar a esos pokemons.

-Si, es cierto...vayamos a mi casa y te contaré todo sobre esos legendarios.

Fui con él hasta su casa, hizo un café y nos sentamos a hablar.

-Y bien, ¿qué es lo que quieres saber sobre los legendarios?

-Solo quiero saber donde encontrarlos.

-Si quieres puedo acompañarte.

-Vale.

-Pero, una pregunta, ¿Cómo es que una niña tan joven como tú quiere desafiar a esos dos grandes pokemon...?

-Confianza en mi misma...es solo eso.

Luego de un rato charlando salimos y nos encaminamos a nuestro destino. Llegamos a una islita enmedio del mar, bastante más abajo de Ciudad Algaria y más lejos de Pueblo Oromar. Cesó la lluvia y vino un calor terrible e insoportable que ni la brisa fresca del mar conseguia rebajarlo. Derrepente oimos unos fuertes ruidos y sentimos grandes olas y temblores, de la superficie del agua salian dos enormes pokemons peleando, se lanzaban ráfagas de agua y violentas caidas de rocas gigantescas. Yo miraba a Plubio sin saber que hacer, ahi me di cuenta de que no fue muy buena idea haber ido...pensé que todo estaba perdido.

-Plubio, tenías razón, no deberíamos haber venido, lo siento de veras.

No me contestó, por lo que pensé que estaría enfadado. Giré mi cabeza y no lo vi, giré mi cabeza un poco más y le ví nadando sobre su pokemon a toda velocidad "gracias Plubio" pensé. Me puse a mirar al cielo, pensaba que iba a morir.

-Sapphire!!!

Me volví a girar con el pensamiento de que era un espejismo por el miedo pero no, veía una silueta que poco a poco se iba acercando a mi.

-Ruby!! ¿Qué haces aquí? Que grata sorpresa.

-Me he enterado de que habías venido aquí con Plubio...pero dónde está...

-Pues, ha huido.

-Bueno. da igual. ¿Sabes qué podemos hacer para parar a Groudon y  Kyogre?

-Em...no.

-Ah...bien. Oye, ¿por algún casual no habrás oido hablar de los orbes no?

-¿Orbes?

-Si, los orbes que guardan el poder necesario para calmar la furia de los pokemon Groudon, Kyogre y Rayquaza...cuenta la leyenda que los orbes quedaron a cargo de unos ancianos en la cima del monte pírico junto a los prismas...

Iba a contestar a Ruby pero derepente me empujó hacia el suelo, gracias a eso no recibí el golpazo de la garra de Groudon, lo malo es que le golpeó a él.

-RUBY!!

Cayó inconsciente al mar, yo me quede quieta, paralizada por el miedo sin saber que hacer. Todo esto había sido por mi culpa, "no puedo dejar que Ruby se ahogue" dejé mi bolsa en el suelo y me lancé al agua de cabeza. Intentaba nadar lo más rápido posible pero Ruby se hundia aún más rápido...estaba desesperada, quería gritar pero obviamente no podía hacerlo entonces lo di todo por perdido...