La mente de Mika era un desastre por completo, enfrentar las reglas impuestas desde siempre por los Tepes, o el humanismo y cariño que Yuu tenía por su gente.

Se salió de sus pensamientos al ver al susodicho Yuu entrar por la habitación, sin tocar antes.

-- ¿Yuu-chan? Quiero estar solo, por favor retirate --el rubio soltó un suspiro fuerte masajeando sus sienes. Aún estaba un tanto sentido de las palabras dichas por Yuu antes, diablos, su corazón dolía y estaba tan triste--.

-- Hablé con tu madre y con Shinya. Sé que esto es complicado para ti Mika, pero no te dejaré sólo en esto --Yuu se acercó, intentando tomar las manos de Mika, sin embargo el rubio lo alejó rápidamente--.

-- No Yuuichiro. No sabes qué significa para mí, después de todo yo soy un cínico e insensible ¿no? --una mirada de resentimiento fue dedicada a Yuu, quien frunció el ceño--.

-- ¡Me preocupo por ti y por mi gente Mika!

-- ¿Y si ellos me mataban? O matarte a ti.

Yuu miró sorprendido al rubio, quien suspiró un poco fastidiado. Deseaba que Yuu entienda la gravedad de la situación, sin embargo no podría hacerlo entrar en razón. Por un momento pensó que Yuu sentía más cariño por su pueblo que por él mismo, sabía que Yuu era muy querido por todos, y la muerte del joven promesa, que amaba a su pueblo y buscaba una mejora, sonaba tan trágico...

-- ¡El pueblo no podría soportar tu muerte, Guren no podría, yo no podría.... Yuu-chan --el rubio miró al azabache-- déjame solo.

Mika recordó sobre la conversación con su madre acerca de ser coronado, lo andaba evitando tantos años y ahora que no quería tomar decisiones de la realeza, debía ser coronado.

Quizá Yuu estuviese muy enfadado con él por ser inhumano, pero ¿Qué le podría pedir al hijo de la mujer más temida del continente? Krul lo educó con reglas estrictas desde postura hasta pensamientos, abandonar la doctrina que tuvo desde pequeño era tan difícil. Aún más ahora cada que sentía tanta pena al pelear con Yuu.

-- Te quiero Mika --lo escuchó murmurar antes de atraparlo en un abrazo, Yuu brindó su calor al rubio, su tranquilidad y le hizo entrar en paz. Embriagado con el olor de lavanda y azúcar proviniente del cuerpo de Yuu--.

No quería, no quería corresponder a su cariño, no quería que Yuu piense que bajó la guardia y le perdonó haberle llamado cínico. Yuu debía aprender que no podía hablarle de esa forma, debía saber que aún estaba enojado.

Sin embargo las defensas de Mika bajaban cuando Yuu tomaba su rostro en sus manos y brindaba besos en su frente, mejillas y nariz. "Tranquilo Mika", "Lo resolveremos juntos", "Te apoyo". Susurros y cariños que hacían que sus mejillas tomen un color suave en ellas y que sus brazos dejen de intentar alejar al demonio de él. Cuando Yuu se inclinó en el rostro de Mika, queriendo acercarse un poco más a probar esos bonitos labios rosados y delgados suyos fue cuando Mika recobró fuerzas y lo empujó lejos.

Estaba seguro de que si Yuu no fuese un demonio, hubiera salido lastimado del tremendo golpe que se dio con el librero del rubio.

-- Escucha Yuu. No quiero hablar con nadie, ni con mi madre, ni con mis sirvientes, ni contigo --soltó lo último en un gruñido-- estoy metiéndome en demasiados problemas porque no estas de acuerdo en matar a esa gente que nos quiso lastimar, solamente porque tú no quieres que mueran. Si ellos salen libres van a matarnos.

Yuu miró a Mika un poco triste, tenía razón, el rubio no la estaba pasando bien, suspiró y besó la mejilla del rubio con cariño antes de irse.

-- Perdón por llamarte así Mika. Si es por insultarte que no quieres verme n-ni besarme, está bien --suspiró y salió de la habitación del rubio, quien soltó un suspiro fuerte--.

Se sentó en su cama y miró al techo. Si era coronado como Rey antes de ese juicio, significaba que tendría fuerte participación en este. No quería... Pero el pueblo comenzaría a hablar sobre cómo había estado evadiendo su responsabilidad durante los últimos años. Igualmente quedaba aún capturar a los líderes de ese grupo terrorista, según Krul, eso ya estaba en manos del poder judicial.

Entonces solamente debía encargarse de su ceremonia de coronación y arreglar sus problemas con Yuu. Quería a Yuu en su coronación, al menos para que los medios olviden los rumores de que casi mueren por un grupo de personas anti monárquicas. Solamente debía decidir la fecha, su ropa, su corona y su vida daría un giro se 180, quizá ya no podía volver a ver a Yuu por las responsabilidades de ser Rey, quizá Yuu iría a visitarlo a menudo.

El pueblo estaba muy ocupado chismeando de su amorío con su azabache que los rumores de un posible ataque a los príncipes era opacado completamente. Pero ahí estaba.

__________

Llegada la mañana, el rubio pidió sangre en el desayuno, y que llegue a su habitación. Aún no quería ver a Yuu, estaba quizá un poco molesto con él, se sentó en la cama y cepilló sus rizos dorados con un lindo peine de plata que le regalaron por su cumpleaños los Hiiragi, tenía pequeños cuarzos como decoración.

Hoy iría a hablar con su madre sobre su coronación, hablaría del tema del juicio y quizá podría hablar con Yuu si se sentía tranquilo. El toque de la puerta lo interrumpió mientras pensaba.

— Pasa Akane, espero hayas traído ese pastel que te dije... Es bastante rico —hablo de espaldas a la puerta, mirando el bonito paisaje por la ventana—.

— Dime de qué es ese pastel, puedo pedir que te lo hagan ahora mismo

Una voz que no fue la de Akane lo interrumpio, armado con el peine de plata amenazó con el objeto a la persona en frente suyo, sorprendiendo se de encontrar a Yuu. Su corazón de sintió mucho más tranquilo ahora, a comparación de hace unos momentos que se sentía pesado, su cuerpo había dejado de temblar y ahora estaba quieto.

— Te dije que no me busques —murmuró, mirando como el príncipe cerraba la puerta de madera, caminando hacia él—.

— Lo siento Mika, pero necesito que me perdones... Estoy muy alterado, realmente no pienso mal de ti —susurró, atrapando al rubio en un abrazo y haciéndole bajar el peine de plata— Estaré para lo que necesites, te quiero Mika —susurró, acariciando el cabello de su amado. Separándose un poco para dejar un beso en su nariz—.

Mika miró sobre el hombro de Yuu a la bandeja que trajo al entrar a su habitación, flores que él no conocía cortadas y arregladas horriblemente en un ramo igual de espantoso, su sangre se veía bien en la copa de vidrio en la que estaba servida, pero no había pastel.

— ¿Tú hiciste todo eso? —Susurró, señalando la bandeja. Yuu se separó y sonrió un poco tímido—.

— Eh Sí. Me levante temprano y corté unas flores del jardín, también te preparé de mi sangre —sonrió un poco tímido, abrazando al rubio por la cintura—.

Mika suspiró, zafandose del agarre del príncipe para ver las flores. Tenían un aroma delicioso, eran en tonos azules y blancos. Quizá unas rosas, tulipanes, y flores más pequeñas, tomó su ramo y lo miró dulcemente. Era la primera vez que Mika recibía un regalo hecho por las manos de alguien más, incluso el peine de plata que le gustaba, no se compraba con su ramo de flores.

— ¿Te gustan? —sonrió mirando a su rubio, esperando ansioso por alguna respuesta—.

— Esto... En realidad es muy lindo de tu parte, Yuu-chan —sonrió y se acercó al príncipe, regalandole un pequeño abrazo— no creas que te he perdonado solo por traerme sangre y unas flores Yuu-chan —advirtió, separándose un poco y poniendo un dedo sobre los labios del menor cuando este se quiso acercar más para besarlo—.

— Hum. Debía intentarlo al menos —Suspiró con derrota, mirando a su novio— ¿No me has perdonado ni si quiera un poquito? —le sonrió, haciendo un gesto con el dedo índice y pulgar para gráficar su enunciado—.

— Bien... Sólo un poquito —sonrió ligero, siendo atrapado por los brazos de su azabache otra vez, mirando sus ojos con cariño y acariciando la piel morena de su rostro y lindas mejillas— te quiero Yuu-chan —susurró, acercándose poco a poco para juntar sus rostros—.

Yuu insistía mucho y él estaba alcanzando el límite... ¿Hace cuanto no besó a Yuu? Quizá fue antes de comenzar a hablar de temas políticos con él. No era necesario acercarlo, Yuu, a un paso tímido se acercaba al rostro de su novio y plantaba un pequeño beso sobre sus labios.

La unión tímida y movimientos suaves de Yuu sobre él hicieron que Mika esté calmado, siga con cuidado el ritmo de su beso y lo separe después de un momento, sintiendo ahora las manos de Yuu buscar las suyas, para entrelazar sus dedos.

— ¿Entonces puedo decir que me perdonaste? —le sonrió dulcemente, sentándose en la cama y con el rubio a su lado—.

— Quizá... Sigue siendo lindo y puedo pensar en perdonarte algún día de mi longeva vida —sonrió al escuchar un bufido de Yuu y más quejidos infantiles mientras tomaba de la exquisita copa de sangre que le había regalado.

Claro que necesitaba eso, relajarse junto a Yuu hizo que su organismo funcione bien, ya no estaba tan estresado, no le dolía la cabeza y se sentía como nuevo. Se acercó a Yuu y dejó un piquito con sabor a sangre en sus labios, estaba muy ansioso por besarlo, de verdad, Yuu lo abrazó y él se dejó mimar.

No estaba molesto con él, pero podría conseguir que lo mime por más tiempo si seguía diciendo que estaba enojado. Le gustaban los cariños en su cabello y besos pequeños, que le acaricie las mejillas y que le diga que piensa que es lindo. Sentir su cuerpo removerse y gustar de sus toques era genial, podría acostumbrarse a estar así.

Ser rey junto a su amado Yuu, estar tranquilos siempre y poder besarse en eventos reales, poder hacerse cariños sin levantar escándalos, bailar juntos siempre, quizá traer uno o dos herederos a la unión Inchinose-Tepes.

Solamente Yuu, solamente lo quería a él, ser feliz junto a su amado. Lejos de estrés, solamente despertando a su lado y amandolo todos los días, siendo libre de demostrar su amor a su acompañante de vida y que los medios hablen de lo lindos que se ven los reyes. Solamente con Yuu, quería estar con él para siempre, entre sus brazos y recibiendo sus cariños hasta que ya no puedan más.

______________________

Holiras ;;

El capítulo tardo bastante jsjdjd quería que vean que Mika sí puede ser orgulloso con Yuu jsjdjd.

Espero hayan disfrutado el episodio uwu seguiré intentando actualizar seguido. Les tengo una pregunta a la gente que me lee.

¿Qué les gusta más sobre la relación que tienen Yuu y Mika en la fic?

A mí me gusta que sean tan fluff y cariñosos. No puedo con tanto amor, me gusta escribirlos así de cursi akskdke.

Gracias por leer!