El ceño de más joven se frunció al notar el inquietante movimiento de piernas del hombre bastante guapo, sentando justo a su lado. Ver tal movimiento que no se ha detenido desde que empezó solo le estaba provocando mucha irritación al mas joven, de cabello plateado tan idéntico a la persona junto a él.

Era muy parecidos pero al mismo tiempo no, pero lo suficiente para decir con una sola mirada de que llevan la mismas sangre. Que son padre e hijo solo que, uno es ya es mayor y tiene ojos sumamente profundos, ambarino.

-Padre, dejá de moverte tanto como si tuvieras hormigas encima.-Creo que Hayden no debió de invitarlo sabiendo que mi padre se podrían en este estado, nervioso, ansioso.

Si los empleados o socios lo vieran asi de inquieto mostrando mas expresiones de las que suele mostrar, se sorprenderían y pensarían que estan viendo mal o que es un doblé.

-No es como si no hayas conviviendo anteriormente con Hayden.-Cruza sus piernas con su vista fuera de la ventanilla, apoyando el codo a un lado de ese mismo lugar mientras los dedos de su mano recae entre su barbilla y sus labios.

El pasar una vida juntos los volvía demasiado cercanos como para sentir incomodidad, nerviosismo, ahora que se iban a reunir para celebrar el regreso de los señores King, como la llegada de posiblemente dos pequeñitos a la vida de la feliz pareja. También sería la primera vez que el señor Sincleir estaría conociendo a Maximiliano, el alfa que tiene sumamente enamorado a su protegido.

-La última vez que vi Hayden en persona era solo un adolescente de 16 años.

En el colegio en el que estudió Darrell era y sigue siendo muy famoso por tener grandes genios en todas las diferentes áreas y, una de ellas eran los deportes, gracias a eso solían realizarse varías competencias contra diferentes ciudades, países. En un de esas tantas competencia fue cuando conocí por primera a Hayden, solo eran preadolescencia de casi trece años.

Sin embargo, pese a su edad era tan ágil y bueno en cualquier área en la que compitiera. Al verlo tanto mi difunda esposa y yo pensamos lo mismo, "¿Darrell se llevará el trofeo este año." Para ese entonces; mi hijo ya estaba cursando su último año de secundaria.

Si no estoy equivocado fue entonces el inicio de su amistad, algo que nos sorprendió a mi esposa y a mí porque Darrell no es de los que permitía tan fácilmente el entrar a su vida . Sin embargo, Hayden quizás lo hizo desde el instante en que le hablo en un tono nada respetuoso.

Cuándo hablan con mi hijo lo hacía solo por su nombre, "Darrell" no como "jóven maestro" al igual que los demás compañeros. Eso influyó mucho en su cercanía, amistad ahora que lo pienso. En toda su estancia se mantuvo cerca de Darell también era lo mismo con el otro chico. Nikita creó que se llamaba si mal no recuerdo, tenía unos ojos verdes y cuidaba a Hayden como si ese fuera su trabajo.

Y desde el instante en que vi Hayden también se me hizo bastante conocido, como si ya lo hubiese visto anteriormente. Sin imaginarme ni esperarme que Hayden era nada menos que el hijo de ese primer amor no correspondido, de mis últimos años de secundaria.

No me sorprendió que él se haya casado con Mika lo que si fue molesto y repugnante saber fue lo que le hicieron a Hayden. Frederick lo descuidó, dejándolo con sus padres mientras que Mika los abandono y realizo una nueva vida dónde era feliz, sin remordimiento de lo que hizo. Cada uno tuvimos nuestro final solo que algunos más lamentable, horrible, triste, que otros. En mi caso, triste. Mi esposa murió no hace mucho.

-Y ahora que lo volveré a ver en persona es para felicitarlo porque será padre.-Limpia sus lágrimas mientras observa a su hijo.

No le he conocido ninguna pareja a mi hijo así haya sido por una noche, semana, nada. Lo mande a investigar por si tenía a alguien escondido o escondida, pero no obtuve nada porque él se enteró antes de tener algo. Su secretaria, Nora. Y asistente, Reece. Son dos personas muy buenas en lo que hacen, no se les escapa nada y no tienen consideración con nada que no sea su jefe, tampoco le guardan secretos.

En eso puedo estar tranquilo porque Darrell esta libre de traiciones, a su alrededor también se encuentran personas que estarían dispuestos a dar la vida por él. Aunque espero que eso nunca llegue a suceder.

-¿Y tú cuando piensas darme un nieto?-Quiere ser abuelo y si es pronto mucho que mejor.-Podria morir el día de mañana y...

-Muy lamentable, tendre que sepultarte junto a mamá, no te preocupes por eso.-Respondió como si nada.-Esos nietos que tantos esperas ver, visitaran tú tumba y la de mi madre cada vez que puedan...

-¡Darrell!-Que hijo tan insensible el que tengo, a este paso de verdad moriré sin conocer a mis futuros nietos mucho menos la persona que logre tal hazal, ablandar su corazón y volverlo estúpido.

-Deja de gritar que no estoy sordo.-Esbozo una sonrisa.-Tendras que vivir por muchos años si quieres llegar a conocerlos, come bien y mantente saludable.-Esa persona sigue sin aparecer frente a mí, padre. Por lo que no habrán nietos por el momento, pero cuando lo encuentre no lo dejaré ir.

-Eso no es algo que pueda disponer yo, hijo.-No soy Dios.-Como sea, no hablemos de cosas triste.-La seriedad cambio a una amplia sonrisa.

-Que no se noté que te emociona mucho el saber que Hayden será papá.

-No eres nadie para decirme eso cuando te la pasaste investigando que regalarle.

-Eso es porque el darle algo a Hayden es complicado cuando lo tiene todo.-No aceptará que se quedo despierto buscando un buen regalo, uno que estaba distiendo al bebé y no a Hayden ni a Maximiliano.

-No es nada difícil aceptar que estas feliz porque serás tío.

-Vasta de charlas y baja del auto que ya llegamos.

-¿Todo el edificio es de ese joven Withe?-Es una de las familias con las que me este relacionando en este país, hablando de negocios y como futura familia porque veo y quiero a Hayden como si fuera mi hijo.

El señor Sincleir no lo dice y tampoco lo piensa pero Darrell si, de que Hayden si sería su hermano de sangre si su padre y Frederick hubieran sabido que sus sentimientos si eran correspondidos, pero que lamentablemente la envidia y odio de Rodolfo por haber sido rechazado por el señor Sincleir. Les quito tal futuro juntos.

-Sí, todo le pertenece al cuñado.-Le señala la cajuela del auto a Reece.-Sube los regalos y ten cuidado.

-Déjemelo a mí.

-Vamos.

-Sí.-Camina junto a su hijo hombro con hombro, el señor Sincleir no es tan pequeño que se diga.

Su intención era no llamar la atención pero era complicado el no hacerlo, desde que bajaron del auto los empleados o las personas que iban pasando se les quedaban viendo sin ser esa su intención. Ellos era dos imanes andante.

El padre de Darrell seguía en su mejor momento donde todavía no usa un bastón y tampoco se encorva al caminar, su espalda sigue siendo admirable, ancha. Eso sí, mantiene una limpia y recortada barba de candado. Resaltando su ya muy masculina apariencia y elegancia.

-¿otra vez nervioso?-Suben al ascensor.

-Un poco.-No sé porque lo estoy si ver a Hayden será como si el día de ayer también nos reunimos, nada incomodó.

La verdad razón detrás de su nerviosismo es por el hecho de tener que hablar con los abuelos de Hayden, a esos señores con los que en su momento tuvo una alusión de que serían sus suegros.

-Joven maestro y señor Sincleir.-Saluda respetuosamente.

-¿Jacinto?-Hayden comentó que era un "calvito" como suele decirle, pero ya no es posible llamarle asi cuando tienen un ondulado cabello rojo cobrizo.

-Sí. Soy yo, señor Sincleir.-El joven Hayden comentó que el señor Sincleir era un anciano, que no podía caminar y tenía que ayudarle... Me engaño, otra vez. Este señor se ve todo menos anciano.

Jacinto los estuvo esperando fuera del ascensor desde que se le aviso sobre su llegada, que estaban subiendo en el ascenso y no tardaban en salir. El recibirlos de esa manera fue la orden que se le dió antes de que su maestros salieran. Ser respetuoso y atento en todo momento con ellos.

-Hayden te jugó una broma, ¿verdad?-Preguntó el señor Sincleir, al ver como Jacinto esconde el bastón detrás de su espalda.

-Eso parece, lo siento...

-Jajajajaja.

Jacinto temía haberlo ofendido o cualquier otra cosa al verlo tan serio, pero en menos de un segundo su expresión cambio y sonrió a carcajadas. El guardaespaldas estuvo esperando de todo menos que sonriera de esa manera, lo que le dió entender que el señor Sincleir está muy acostumbrando a la personalidad de Hayden, esa de la cual ellos no se terminan adaptar porque siempre sale con cosas que no se esperan.

-No te pongas tan tensó que no haré nada.

-Lo agradezco mucho.-Señala la puerta.-Pasen por favor.

-Jacinto, ya regreso Constantine con las compras que lo envié a, ¿Darrell?...

-¡Niki!-Extiende sus brazos.

-¡Tío!

Nikita corrió abrazarlo al igual como lo hace con el abuelo de Hayden, el señor Night (el que le heredero la organización a Hayden) ambos señores aprecian mucho a Nikita. El tener un vínculo de amistad tan único y unido con el Omega ha llevado a Nikita el conocerse a grandes, amables personas.

-Hayden no me comentó de que estabas viniendo.

-Ya sabes como es Hayden de bromista y misterioso cuando se trata de dar sorpresas.

-Solo digamos lo que es, un loco.-Darrell asintió en acuerdo.-Hola, Darrell.-Solo volvió a sentir.-Tan piedra como siempre.-No sé ni cómo me hice amigo de él pero lo entiendo sin que diga una palabra.

-Ya no eres ese chico de escuálida figura, has crecido y sigues creciendo.

-Me hidrato y como saludable.-Sobre todo a mi alfa, me encanta hacer mucho cardio con él, unos ejercicios verdaderamente disfrutables.

-Niki, ya regresé...-No tardo en oscurecerse su mirada al ver que su joven alfa está siendo abrazado.

- Mantén la calma.-Fue hacia él y ni bien había llegado cuando fue brazado y impregnado de feromonas.

-¿Quién es?

-El padre de Darrell.-Le dio una breve explicación.

‹Constantine últimamente a estado muy sensible por decirlo asi, quiere estar junto a mi la mayor parte del tiempo. Y cuando no puede verme se siente ansioso lo cual no me molesta, me gusta que quiera estar conmigo como yo, quiero estarlo encima o las suyo.›

Nikita solo sonrió mientras que el señor Sincleir "al par de amigos les gustan los mayores por lo visto." Pensó al ver los brillantes ojos de Nikita tras sentir la posesividad de Constantine.

-Ya que están aquí y son los primeros en llegar, ¿me ayudarían con las últimas preparación? ¿Hornear una torta o a inflar los globos?- Se necesita mucha mano de obra no le dije a mi papá que me ayudara porque, se daría cuenta de lo que estamos preparando.

-Darrell que ayudé a inflar los logros tiene buenos pulmones...

-Para eso está Reece.-Respondio al instante.

-Enseguida.-Se puso manos a la obra.

-¿Dónde están los futuros padres?-No los ve por nigún lado y Hayden no le comentó que saldría.

-Ellos fueron a recoger a los abuelos King.-Informo.-Pero no tardan en venir, se fueron hace rato y el avión ya debe de estar aterrizando.

Nikita no estaba del todo equivocado el avión está a segundos de aterrizar, Hayden abraza muy íntimamente a Maximiliano a la espera de sus amados abuelos. Pensando en que tal vez no podrá contenerse y les contará sobre la gran noticia, de que seran abuelos.