5 Conociendo a la tripulación

A la mañana siguiente.

Nami: Siente unos golpes en su rostro.- ¿Hum?- Comienza a abrir los ojos y ve que era su hijo el que la golpeaba.-Diasuke, no seas así.-Coge la mano con la que le golpeaba.-Eres igual que tu padre.-sonríe.-Ven aquí.- lo coge y Diasuke intenta encontrar el alimento de su madre.-Ya voy mi vida.

Un rato más tarde.

Zoro: Comienza a abrir los ojos y la escena con la que se encuentra es a Nami dando de comer de su pequeño.- Buenos días.

Nami: Buenos días.-sonríe.

Zoro: Parece que se nos ha adelantado.

Nami: Si...

Zoro: Hola hijo.-le intenta acariciar pero Diasuke se lo impide.

Nami: Parece que no le gusta que le interrumpan mientras come.-dice entre risas.-Menos mal que despertaste porque el resto está fuera esperando para entrar.

Zoro: Ahora les digo que pasen.-se levanta de la cama y sale de la habitación para decirles a los demás que ya pueden pasar.

Minutos más tarde.

Nami: ¿Y los demás?-se extraña al ver que sólo entra Zoro.

Zoro: Dijeron que tenían que ir a coger una cosa y que volvían enseguida.-coge una silla y se sienta al lado de la cama.

Nami: Vale.

Zoro: Así que después de comer te pones a dormir. Eres un flojo.-le dice con ternura a su retoño que se había quedado dormido sobre Nami nada más había terminado de comer.

Nami: Técnicamente un bebé no hace mucho más que comer o dormir.-le acaricia la espalda.-Se ha quedado como un rey.

Zoro: Pero como no esté calentito nos va a dar guerra. Mejor lo tapamos.- extiende la colcha por encima de su hijo hasta que sólo se le pudiera ver la cara.

Nami: Pero si es un ángel. No nos darás la tabarra, ¿verdad mi pequeño príncipe?-Diasuke como respuesta se acurruca un poco más sobre Nami y balbucea.-Me tomaré eso como un si.

Zoro: Parece que te contesta.

Nami: Claro. No iba a dejar sin respuesta a su mamá.-oye como llaman a la puerta.-Pasa.

Todos: ¡¡Felicidades!!-gritan cuando entran. Lo malo fue que con todo ese griterío Diasuke se despertó y el llanto no se hizo esperar.

Todos: ¡Luffy!-miran todos al capitán de la tripulación.

Luffy: ¿Qué? Me pareció una buena idea.

Nami: Ya, ya, tranquilo-va calmando a su pequeño poco a poco hasta que vuelve a dormirse.

Robin: Felicidades.

Nami: Gracias Robin.

Sanji: Fijaos, es un minimarimo.

Zoro: No es un minimarimo ero-cook.

Luffy: Si lo es. Es tu hijo, ¿no?

Zoro: Señor...- se lleva la mano a la cabeza.-¿Te lo dije o no te lo dije?- pregunta a su chica.

Nami: Tenías razón.- admite.

Franky: ¿Y qué es? ¿Pelirrojo o peliverde?

Nami: Miradlo vosotros mismos.-les indica que se acerquen y destapa la cabeza de su hijo pudiendo ver así que había heredado el color de pelo de su madre.

Robin: Es pelirrojo.

Luffy: ¡Si, he ganado! ¡Me debes mil beris Sanji!

Sanji: Porras, perdí la apuesta.-le entrega el dinero.

Zoro: Eh, ¿de qué va todo esto?

Robin: Capitán-san y Cocinero-kun apostaron para ver si el bebé era pelirrojo o peliverde.

Zoro: ¡¿Cómo se os ocurre apostar con mi hijo?! Os voy a...

Nami: Ya Zoro tranquilo que lo vas a despertar de nuevo.

Zoro: Si tienes razón. Perdona.

Usopp: ¿Cómo se llama?

Nami: Roronoa Diasuke.-vuelve a ponerle el gorro.

Sanji: Bonito nombre, lástima que sea el hijo de marimo.

Zoro: Si no fuera porque Diasuke está dormido te enteras.-se empieza a cabrear.

Sanji: No pongas de excusa a tu hijo, sabes perféctamente que no me puedes ganar.

Zoro: ¡¿Qué has dicho?!

Sanji: ¡Lo que has oído!

Franky: Ya, paren.- los separa.

Nami: Gracias Franky.

Usopp: Mira Diasuke.-empieza a ponerle caras junto a Luffy, pero el recién nacido apenas podía mantener sus ojitos abiertos.

Sanji: Es imposible que pueda reírse mientras duerme tontos.

Luffy: Nami, ¿puedes destaparlo para que lo podamos ver bien?

Nami: Vale, pero poco que hace frío.

Luffy: Vale, vale.

Nami destapa a Diasuke y todos se quedan embelesados mirándolo al ver lo pequeñito que era.

Robin: Es una monada.

Franky: ¿Algo tan pequeño puede tener vida?

Zoro: Eso me pregunté cuando lo tuve en brazos.

Todos se quedan sorprendidos.

Zoro: ¿Qué os pasa?

Usopp: Es que no te pega decir esas cosas ni ser así.

Zoro: Pues os tendréis que acostumbrar.

Sanji: Ahora será un marimo amoroso.

Zoro: Ya me da igual.

Luffy: ¿Ya lo tapas?

Nami: Si Luffy. Lo que pasa es que hace frío y él es muy pequeño.

Robin: ¿Saben que significa el nombre Diasuke?

Zoro: asiente.-significa "bendición".

Franky: Un nombre muy apropiado. ¿No creen?

Nami: Si, tienes razón. Este niño ha sido una bendición para esta tripulación.

Luffy: Bienvenido a la tripulación Roronoa Diasuke. A por cierto nos marchamos esta noche.

Zoro: No podemos Luffy. Nami se tiene que quedar aquí hasta mañana porque no tenemos médico de abordo.

Usopp: Ahora si.

Nami: ¿A qué te refieres?

Robin: Entre doctor-san.

Por la puerta entra Chopper en su forma bestia-humana.

Chopper: Ho-hola.-dice con un hilo de voz.

Nami: Si él es nuestro doctor entonces no me preocupo.

Usopp: Nosotros nos vamos para preparar todo para zarpar esta noche. Hasta luego.-comienzan a salir de la habitación.

Zoro y Nami: Adiós.

Chopper: Zoro, Nami...

Zoro: ¿Si?

Chopper: Tendré el trineo listo en un par de horas. Lo digo por si os queréis ir arreglando.

Nami: Vale, gracias Chopper.

Chopper: No creas que me halagas dándome las gracias, tonta.-comienza a bailar y a ponerse colorado.

Zoro: Eres de esos que no saben esconder sus sentimientos, ¿verdad?

Chopper: Os espero en el patio en cuanto termine.

Nami: Vale.

Zoro: Bueno, habrá que arreglarse.

Nami: Eso parece.-se sienta en la cama y mira a su hijo durmiendo.-Es un dormilón.-le acaricia la tripa.

Zoro: Pero a mucha honra.

Nami: Que a gustico que está. ¿Te acuerdas del día que hablábamos de como le quedaría este conjunto a nuestro hijo?

Zoro: Esta más guapo de lo que me imaginé. Y el chupete va a juego.

Nami: Está muy guapo. Zoro cuida de él, yo voy a cambiarme.

Zoro: Tranquila. Yo cuido de él. Tarda todo lo que necesites.

Nami sale de la habitación y Zoro se queda mirando a Diasuke. No podía parar de observarlo. No se creía que él fuera padre de ese pequeño ser. Era lo más bonito que había visto en la vida.

Zoro: ¿Qué quieres Diasuke?-dice cuando su pequeño vuelve la cabeza hacía donde está él. Obviamente todavía dormía.-Ay mi pequeño.

Llaman a la puerta.

Zoro: Adelante.

Kureha: Hola muchacho.

Zoro: Doctorina. ¿Qué hace aquí?

Kureha: Quería comprobar una cosa del bebé.-se acerca a Diasuke.-Vale, esta cogiendo un buen color.

Diasuke comienza a sollozar.

Zoro: Tranquilo, tranquilo.-lo carga a lo que Diasuke se va calmando.-Eso es.-le da el chupete que se le había caído.-Estás un poco tontorrón.

Kureha: Ponle esto.-le lanza una manta.-Cuando son tan pequeños enferman con mucha facilidad.

Zoro asiente y empieza a colocar la manta sobre su hijo quien dormitaba a gusto en los brazos de su padre.

Nami: Ya estoy Zoro. ¿Doctorina qué hace aquí?

Kureha: Venía a ver el estado del bebé y de paso a despedirme de vosotros.

Nami: Ah, vale.

Diasuke se vuelve a despertar y se queda mirando a su madre con los ojos entreabiertos. Nami se percata de esto y se dirige hacia Diasuke poniéndose a su altura.

Nami: ¿Qué pasa mi vida?-Diasuke a modo de respuesta estira la mano hacia su madre y se agarra a ella.-Ven con mami.-lo coge y Diasuke va cerrando los ojos hasta que acaba dormido.-Dormilón.-le dice con un tono cariñoso.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top