Zoro: ¡¿Qué haces aquí?!- esconde a Diasuke detrás suyo mientras toda la tripulación se pone en guardia al ver que el Shichibuckai Mihawk, Ojos de Halcón, había aparecido.

Mihawk: Solo quería avisarte de que mañana llegaréis a la isla en la que me encuentro yo. Mañana pelearás contra mí.

Diasuke se asusta y se aferra más a la pierna de su padre. Sabía perféctamente que si su padre quería convertirse en el mejor espadachín del mundo tenía que vencer a ese hombre.

Mihawk: ¿Es tu hijo?-lo señala.

Zoro: Sí. ¿Algún problema con eso?

Mihawk: Y debo de suponer que tú eres su madre. ¿Me equivoco?

Nami: En absoluto.

Mihawk: ¿Tú eres Diasuke?

Diasuke: mira a su padre mientras tiembla y éste le indica que puede contestar a esa pregunta. Luego mira a su madre y ella también asiente.-Sí, soy yo.

Mihawk: Me alegro de saberlo. Nos vemos mañana Roronoa.

Zoro: Allí estaré.

Luffy: Suerte Zoro.

Zoro: Gracias.

Durante el resto del día todos hacían sus tareas habituales. Diasuke recorría todo el barco una y otra vez como si andase buscando algo.

Diasuke: Aquí no...aquí no...y aquí tampoco. ¿Dónde las dejé?

Nami: ¿Buscas algo Diasuke?-se da cuenta de su extraño comportamiento.

Diasuke: No encuentro mis gafas. No me acuerdo de donde las dejé.

Nami: ¿Qué gafas?

Diasuke: Las que me regalásteis.

Nami: No te preocupes, ya aparecerán.

Diasuke: Vale.

En la noche

Diasuke: Mamá, papá, ¿puedo entrar?

Nami: Claro Diasuke.

Zoro: Creía que esta noche íbamos a estar solos.-dice sensualmente.

Nami: Zoro...

Zoro: ¿Qué?-entierra la cara en el pecho de Nami.

Nami: Tienes un hijo de tres años del que te separaron durante dos años. Se un poco más sensible.

Diasuke: Entonces...¿me quedo o...

Nami: Ven. Papá solo bromeaba.

Diasuke entra al cuarto de sus padres y se dirige a la cama en la que se encuentran y se pone en medio de los dos.

Zoro: ¿Qué pasa?

Diasuke: No puedo dormir.

Nami: ¿Y eso?

Diasuke: Tengo miedo.-dice mientras esconde la cara en el pecho de su madre.

Zoro: ¿De qué?

Diasuke: D-de que...mañana pierdas y te mate.- empieza a llorar.

Nami: Diasuke...-lo abraza.

Zoro: No perderé. Lo prometo.

Diasuke: ¿De verdad?

Zoro: De verdad.

Nami: Venga, ve a dormir. Mañana será un día agotador.

Diasuke: Vale mamá.

Pvo Diasuke

Acababa de despertar y no había nadie en el Sunny. Todos estaban en la playa. Y mi madre lloraba desconsoladamente.

Nami: Sé que es duro...pero papá ha muerto.

Diasuke: No...no...¡NO!

Desperté en el Sunny. Todavía era de noche. Sin pensármelo dos veces fui corriendo al camarote de mis padres.

Pvo escritora

Diasuke: ¡MAMÁAA! ¡PAPÁAA!-grita llorando mientras golpea la puerta del cuarto de sus padres.

Nami: abre la puerta y Diasuke se lanza contra su ella abrazándola.- Diasuke, ¿qué pasa?-lo coge en brazos.

Diasuke miró por encima del hombro de la navegante pudiendo observar a su padre durmiendo tranquilamente.

Diasuke: ¡Menos mal!-vuelve a echarse a llorar.

Nami: ¿Qué pasa? ¿Te duele algo?

Diasuke: Mamá, ¿puedo dormir con vosotros hoy?

Nami: Claro que si. ¿Me dices qué te pasa?

Diasuke: He soñado que papá perdía y ese señor lo mataba.

Nami: Tranquilo. Eso no pasará. Conozco muy bien a tu padre.

Diasuke: Vale.

Nami: Esto me recuerda a cuando eras un bebé.-deja a Diasuke entre medio de Zoro y ella.

Diasuke: ¿Y eso por qué?

Nami: Pues...-se acuesta.-Cada vez que tenías miedo de tus tíos o de otra cosa solo te calmabas si estabas conmigo. Ni siquiera con tu padre dejabas de llorar.

Diasuke: ¿Por qué tenía miedo a los tíos?

Nami: Cuando eras un recién nacido, a tus tíos se les ocurrió asustarte y desde entonces hasta que cumpliste más o menos los 4 meses les tenías mucho miedo. Me acuerdo de una vez que me fui con tu tía y te quedaste solo con tu padre y tus tíos.

Diasuke: ¿Qué pasó, qué pasó?

Nami: Había pasado jústamente una semana desde que naciste.

Flashback

Nami: Zoro, ¿te puedo pedir un favor?

Zoro: ¿Qué pasa?

Nami: Me voy al pueblo con Robin y pensaba que si tú podrías...

Zoro: Que si, que si, cuidaré de nuestro pequeño. Tú vete tranquila.

Nami: Gracias amor.

Media hora después.

Nami: Nos vamos ya. Hasta luego.-da un beso a Zoro.

Zoro: Hasta luego.

Nami: Pórtate bien mi príncipe. Vámonos Robin.

Robin: Voy.

Con Zoro

Zoro: Ahora somos tú y yo, mi pequeño pelirrojo.

Luffy: Zoro, ahora que Nami se ha ido y Diasuke está durmiendo, déjame cargarlo un poco.

Zoro: Luffy, ¿no te acuerdas de lo que pasó? Cada vez que uno de vosotros lo carga se pone a llorar y solo se calma con Nami. Así que no.-termina la conversación y se dirige a su camarote.

Luffy: Pero Zoro...

Zoro: He dicho que no.-se va al camarote.

Zoro deja a Diasuke en la cuna y sale un momento para ir a por sake.

Luffy: Aprovechemos ahora que se ha ido.

Usopp: Como se entere Zoro...

Luffy: Que no pasa nada.-coge a Diasuke.-¿Lo veis?

Chopper: Yo me voy.

Luffy: Espera Cho...-los llantos de Diasuke lo interrumpen.

Sanji: Ya te dijimos que no era buena idea.

Usopp: Mira Diasuke.-le pone caras pero no sirve de nada.

Zoro: Ya Diasuke. Papá está...¡¿Se puede saber qué hacéis aquí?! Os dije que le dejarais dormir.-lo coge pero Diasuke no se volvía a dormir.

Franky: Ya te lo dijimos.

Zoro: Ahora largaros.

Todos abandonan la habitación.

Zoro: Eh Diasuke. No temas. Papá te protegerá.-Zoro comenzó a andar por la habitación con Diasuke en sus brazos. Intentó de todo: carantoñas, cantarle, hacerle reír...pero nada funcionó.-No será que tienes hambre.- sale con Diasuke hacia el comedor.- Oye ero-cook, ¿podrías prepararme un jugo?

Sanji: Ahora mismo.

Chopper: ¿No se duerme?

Zoro: Pues no. Pensé que tal vez tuviera hambre.

Sanji: Toma.

Zoro: Gracias.

Zoro se sentó en la silla, acomodó a Diasuke y le intentó dar el jugo, pero éste se negaba y comenzó a llorar más fuerte.

Zoro: Pues va a ser que hecha de menos a Nami. Ya veré sin lo puedo dormir.-sale de la cocina.

Cuando llega al cuarto los llantos de Diasuke cesan y cae dormido en los brazos de Zoro.

Zoro: ¿Estás cansado verdad?-le dice con ternura.-Vamos a echarnos una siesta.

El espadachín se acuesta en la cama con su hijo sobre su pecho y extiende una manta por encima de ellos.

Horas más tarde Nami y Robin volvieron al barco encontrándose con todo la tripulación desanimada en la cocina.

Nami: ¿Se puede saber qué os pasa?

Todos: Nada.

Nami: ¿Y Zoro?

Chopper: En vuestro camarote.

Nami: Gracias Chopper.

Nami intenta abrir la puerta pero ésta estaba cerrada con llave, lo que le extraño un poco. Cogió la llave que llevaba en su bolsillo y abrió la puerta.

Nami: Ya he vuelto Zo...-cuando entra encuentra a Diasuke dormido sobre el pecho de Zoro quien todavía dormía.- Que monos.-se une a ellos y al poco tiempo cae dormida.

Paso una hora y Zoro de iba despertando notando algo a su lado. Cuando abre los ojos ve. Que era Nami la que ahora dormía junto a ellos.

Zoro: No sé como pude acabar con una mujer tan bella.

Nami: Hacía mucho que no me decías cosas como esas.

Zoro:¿E-estabas despierta?-dice un poco sonrojado.

Nami: Sí.

Zoro: ¿Qué tal por el pueblo?

Nami: Al final le he acabado comprando ropa a Diasuke. ¿Por cierto, qué les pasa a los demás?

Zoro: Pues verás...-le cuenta toda la historia.

Nami: ¿Así que me ha echado de menos? Yo también a él.-acaricia una mejilla de Diasuke.

Zoro: ¿Cómo consigues que se duerma?

Nami: ¿Se ha despertado cuándo no estaba?

Zoro: Sería más correcto decir que lo han despertado.

Nami: ¿Otra vez?

Zoro: Sí.

Nami: Si siguen así Diasuke no va a perder el miedo que les tiene.

Zoro: Ahora respóndeme a la pregunta.

Nami: No sabría que decirte. Es algo natural. Se duerme escuchando mi corazón. Es un calmante para él.

Fin del Flashback

Diasuke: Entonces, ¿era un llorón?

Nami: No, solo los primeros meses. Luego ya no llorabas nada. Además, se te quitó la mimada muy rápido y yo podía irme tranquila con tu tía y tú te quedabas tan a gusto con tu padre. Creo que conforme ibas creciendo me di cuenta de lo afortunados que somos de tenerte.

Diasuke: ¿En serio?

Nami: Claro. Venga descansa. Mañana será un día agotador.

Diasuke: Si. Buenas noches.

Nami: Buenas noches.