28. Deseo
El día anterior había sido algo incomodo y no quedan muchos días por delante como para empezar a definir una amistad que realmente no quieren forjar, pero ese día en específico, a diferencia de los otros anteriores, se había levantado con un extraño deseo en mente, después de que cierto detalle lo hiciera permanecer despierto más allá de lo recomendado; conoció a Oneiros cuando vestía ropa normal y probablemente se iría de la misma manera así que ¿Cómo se supone que era su Surplice?
Preguntarle a Shion directamente sonaba como la mejor manera de quitarse la dichosa idea de encima, pero era complicado dar con el por las mañanas cuando recientemente había estado utilizando el tiempo para ir y venir entre China o Jamir, eso sin contar que con Dohko nuevamente joven, la posibilidad de que estuvieran durmiendo en Libra había aumentado exponencialmente conforme tenían mucho tiempo libre durante las mañanas y realmente no tena ninguna clase de deseo por encontrarse a, literalmente, sus padres en una situación no muy presentable. Ya no tenía 5 años como para interrumpir en su habitación de esa manera.
Saga, por supuesto, le había recomendado que buscara información en los pergaminos del santuario, después de todo, algo tendría que encontrar por ahí, excepto, claro, que probablemente él era demasiado vago que ni siquiera se quiso tomar la molestia de preguntarle a algún erudito de la biblioteca si sabía algo y prefirió tomar la ruta más corta y razonable.
Pedírselo directamente a Oneiros.
Claro, probablemente fue su emoción por tal idea, que cuando el dios menor llego a su punto de reunión normal dio instintivamente un paso atrás, posiblemente asustado o desconfiando totalmente de la agradable bienvenida que recibió cuando llego, pero ninguno de los dos dijo nada sobre aquello, en cambio, decidido actuar rápido para no quedarse con la duda, empujando por los hombros a Oneiros para comenzar a caminar hacia algún lugar deshabitado, casi volviendo sobre el mismo camino que usaron ayer.
—Entonces, ¿me vas a decir que pasa o piensas seguir empujándome? —planto los talones en el suelo, sin ganas de seguir avanzando de aquella manera, obligando a que Kanon también se detuviera.
—Oh, ya estamos lo suficientemente lejos. —comento con cierta alegría, dejando los hombros de Oneiros en paz y simplemente frotándose las manos con impaciencia, lo que claramente no ocasiono una buena reacción el de cabello plateado cuando se giró para verlo.
—Kanon, me estas empezando a asustar —dijo incomodo, un sentimiento que no había tenido en todo el mes al lado del géminis o que al menos no recordaba haber tenido con esa intensidad—. ¿Hay alguna razón en específico por la que estamos aquí? Creí que iríamos a comprar "recuerditos" por todo el tiempo que pasamos juntos.
—Eso podemos hacerlo mañana, hoy quiero que hagas algo para mi —choco las palmas de sus manos con cierta ilusión antes de seguir hablando— ¡Quiero verte con tu Surplice?
—¿Eh?
—¡No es la gran cosa! Vamos, quiero ver si se parece a la de los otros espectros.
Hubo un silencio no realmente incomodo entre ellos, con Kanon mirando con ilusión hacia el dios menor y él otro regresando la mirada, claramente asqueado por su actitud, antes de bajar la mirada y frotarse el puente de la nariz.
—Haber, dime, ¿Por qué razón, causa o circunstancia, debería de aceptar mostrarte como me veo con mi Surplice?
—No lo sé, ¿Por qué lo deseo? ¡Anda, no seas egoísta, tú de seguro sabes cómo es la armadura de géminis!
El silencio perduro un poco más, nuevamente, con ambos mirándose fijamente mientras el silencio a su alrededor era de vez en cuando interrumpido por la manera en que el viento ocasionaba que las ramas de los árboles se golpearan entre ellas, antes de soltar un suspiro, claramente derrotado por la extraña emoción que el otro irradiaba.
—Está bien, lo hare.
Oneiros levanto las manos, como si hubiera sido derrotado por las escasa palabras de Kanon, concentrándose lo suficiente para evitar que cosmos fuera a llamar demasiado la atención, aunque normalmente era Ikelos el que usaba la habilidad para desplazarse atravesó de la realidad, no tuvo mucho problema para realizar dicha técnica y poder atraer su vestimenta oscura, controlando todo a su alrededor para que las piezas se pusieron cada una en su lugar correspondiente a pesar de la mínima cantidad de cosmos que estaba intentando utilizar, permitiendo que sus pies tocaran nuevamente el suelo después de alzarse por unos pocos centímetros para no tener problemas con la parte del calzado y una vez fue seguro acercarse, a Kanon no le tomo mucho tiempo comenzar a dar vueltas a su alrededor para apreciar el diseño de su Surplice.
—Emm, te sigues viendo igual de bajito que todos los días —Kanon utilizo su pie derecho para golpear la parte de los pies de Oneiros, antes de apartarse un poco y dirigir su mirada directamente a las alas—, no esperaba que también tuvieras alas, se ven incomodas.
—No lo son realmente, tienen un tamaño adecuado para pasar por puertas y marcos, al menos es más sencillo que cuando otros lo hacen. —ignoro por completo el comentario sobre la estatura, pensando en las alas que Hypnos y Thanatos lucían en sus propios Surplice, tan cargadas y en ocasiones molestas, era incomodo caminar detrás de ellos.
—Me doy cuenta. —estando en confianza y habiendo pasado el deseo, siguió la curiosidad, esa misma que le hizo levantar la mano y acariciar el metal oscuro, sintiendo un extraño frio que fácilmente podría calarle hasta los huesos si mantenía su mano demasiado tiempo en aquella posición.
—¿Quedo saciado tu deseo y curiosidad? —pregunto Oneiros, antes de estirar el brazo y apartar la mano de Kanon, consciente de que las Surplice no eran para que los mortales las tocaran por mucho tiempo, no estaba seguro de si había una regla a la inversa con las armaduras de oro, pero al menos tenía consciencia suficiente sobre su propio ropaje.
—Sí, creo que sí... —aparto su mano sin oponer mucha resistencia, antes de dar otro paso más de confianza y tomar los costados de su diadema—. Esta cosa es extraña, ¿tu hermano tiene un Surplice igual?
—No, con la apariencia que tiene ahora, su Surplice es revelador. —observo la emoción con la que los dedos de Kanon se seguían moviendo, sin ninguna clase de preocupación por la información que le estaba dando, dudaba mucho que este géminis fuera a ir a documentar sobre su Surplice e igualmente tenía cierta seguridad de que la información sobre ellos seguía igual de pobre que varias generaciones atrás.
—¿Con la apariencia que tiene ahora? —detuvo el movimiento de sus manos, buscando los ojos de Oneiros tras escuchar la extraña manera en que había comentado aquello.
—.... —guardo silencio un momento, procesando la manera en que acababa de decir cierto detalle que Phantasos obviamente ocultaba siempre, sobre todo ahora que estaban en la superficie y se divertía a costa de otros con sus exuberantes atributos—. Nada importante, vámonos a seguir caminando, creo que aún puede aparecer gente en cualquier momento.
Retrocedió de inmediato, olvidándose por completo de retirarse el Surplice mientras comenzaba a caminar con la intención de adentrarse al bosque y pensar rápidamente en una manera de distraer a Kanon y hacer que se olvidará de su comentario. Phantasos se iba a enojar mucho si soltaba esa información.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top