La caja número 7

-¡Ah estúpido reloj cállate!-gritó molesta al escuchar ese insesante ruido fastidioso que arruinaba sus horas de sueño. Eran las 6:00 am eso quiere decir que otro día de trabajo iba a comenzar en unas cuantas horas. Ya ha pasado un mes desde aquel "castigo" impuesto por sus padres, la vida privilegiada de aquella joven se había esfumado. Su rutina ahora era levantarse, arreglarse, desayunar algo, salir de casa, tomar el autobús, ignorar a todo el mundo incluyendo a su jefa cuando la encontraba, ir al trabajo, que a veces consistía en acomodar la mercancía, inventariar los productos recién llegados o de cajera aunque eso último lo hacía muy mal, luego almorzar en un lugar apartado ya que alguien de su status no se juntaría con gente de esa clase, después volvería a su puesto, finalizando con salir de ese lugar hasta volver a su hogar agotada.
Extrañaba ir a fiestas con gente importante, salir de compras con sus amigas gastando hasta el último centavo en joyería o ropa de marca o irse a un salón de belleza a consentirse ahora a duras penas le alcanza el tiempo para ver alguna serie y con lo que gana no le alcanza ni para un calcetín.

Se levantó de mala gana después de unos minutos y antes de entrar al baño sonó su teléfono celular. Se dirigió a su mesita de noche donde se encontraba ese aparato y vió un mensaje de Boscha.

Boscha en línea

Boscha:Hola Blight tanto tiempo sin saber de ti, ¿Qué te has hecho?, No me digas que te fuiste a un crucero y no me invitaste ¿Eh?-6:15

Amity:Hola Boscha no he tenido tiempo de hacer esas cosas, he estado ocupada-6:18

Boscha:¿Y eso?-6:19

Amity se quedó un rato viendo su teléfono, le daba vergüenza que supiera lo que estaba haciendo, sería la burla en su círculo social así que decidió "retorcer la verdad".

Amity:Mis padres me dijeron que necesitaban ayuda en su empresa así que apoyo a mis hermanos y por eso no he tenido tiempo de hacer esas cosas-6:22

Boscha:Ay que mal Amity pero ¿si vas a ir a mi fiesta?, recuerda que es dentro de dos semanas y habrán chicos guapos allí, tal vez allí aparezca mi príncipe azul jaja-6:23

Amity:Por nada del mundo me perderé tu fiesta, hasta compré un vestido divino para la ocasión-6:24

Boscha:Eso espero y mejor te dejo para que te prepares para ir a trabajar que de seguro tienes que ir puntual, mientras tanto yo iré de compras, he oído que hay una nueva tienda de zapatos así que iré a ver qué compro, bye-6:26

Amity sentía envidia por su amiga, como le gustaría estar en su lugar, haciendo lo que más le gusta hacer pero eso ya quedó en el pasado, ahora su vida era aburrida y limitada económicamente ¿cómo es que la "gente pobre" puede soportarlo?. Frustrada dejó su teléfono en su cama y fue a arreglarse. Salió de la ducha y con desdén se puso su uniforme. Se maquilló como era costumbre y metió su celular en su bolso.

Bajó las escaleras y fue a la cocina, allí se encontraba su padre quien leía el periódico y por momentos bebía de su humeante taza de té.

-Hola Amity buenos días- dijo Alador mirándola de reojo aún soteniendo el periódico.

-¿Qué tiene de bueno papá?-respondió molesta.

Alador dejó el periódico en la mesa y miró seriamente a su malcriada hija sin moverse de su lugar.

-Ya un mes y aún sigues con esa terrible actitud, ¿cuando vas a cambiar?.

-Tal vez nunca, después de todo me arruinaron mi estilo de vida, ustedes sabían que estaba contenta como vivía ahora ni tengo tiempo para ir alguna plaza a salir con mis amigos, con la gente de nuestra sociedad porque este horrible trabajo me consume mi tiempo, me consume mi vida, mi juventud...

Harto de escucharla se levantó de su lugar y se acercó molesto hacía Amity.

-¿Otra vez con esto?...Mira tu madre y yo hicimos esto por tu bien y si no te gusta esto puedes irte de aquí...

-Ahora se quieren deshacer de mi ¿no?, ¿saben que? eso haré y ahora sí me disculpas iré a ese inmundo lugar donde me obligaron a trabajar. Con permiso-tomó sus cosas y salió de su casa con una rebanada de pan tostado que había tomado minutos antes.

-¡AMITY VUELVE EN ESTE INSTANTE!-gritó enfurecido pero solo recibió el famoso dedo de enmedio. Suspiró de tristeza y volvió a su asiento. Sacó su billetera y observó una pequeña foto de sus hijos cuando eran pequeños. Sus ojos se llenaron de lágrimas al ver que su angelito ahora era un demonio -ay esta niña-suspiró una vez mas-¿Cuándo aprenderá?, pero al rato me va a escuchar junto a su madre, que hay que hablar seriamente con ella aunque no lo deseo-se frotó las sienes mientras volvía a leer su periódico. Una pequeña lágrima se escapó pero rápidamente fue limpiada de su arrugado rostro. En unas horas debía de ir a una importante junta y no permitiría que esta situación lo hiciera sentir miserable y desdichado.

La ida a su trabajo de Amity fue tranquilo, el mismo camino, la mayoría de las personas estaban en lo suyo, hasta que ella apareció con una sonrisa.

-Oh, hola buenos días señorita Amity- dijo Luz mientras se sentaba a su lado-que inesperado reencuentro.

-Mmh que tiene de bueno...-replicó sin dejar de mirar en la ventana.

-Bueno veo que no tiene ganas de platicar pero le digo que cualquier cosa que necesites me puede decir, no me vea cómo su jefa sino como una compañera más pero mejor no molesto y dejo que siga en sus pensamientos-dicho eso sacó su teléfono para ver si tenía mensajes.

Amity solo se limitó a escuchar lo que pasaba alrededor pero ella permaneció callada, ¿cómo es posible que alguien como ella le tuviera empatía cuando desde el primer momento la había tratado mal?, nunca pudo comprender ese comportamiento por parte de su jefa. Mientras continuaba el trayecto hacia su trabajo seguía pensando en Luz, si lo que decía era verdad o solo formalidades de jefa-trabajadora. También pensó si algo tenían que ver sus padres con la actitud de ella porque tenían una relación muy buena. Sus pensamientos se disiparon cuando vió que la morena se levantó de su asiento, eso era señal de que ya había llegado a su destino. Ambas chicas bajaron del autobús cuando Amity se detuvo.

-Luz ¿verdad?, siento mucho haberte hablado así hace un momento es solo que...

-Amity ¿podríamos hablar de esto en mi oficina por favor? así estarás más tranquila, mira ve a checar su entrada y nos vemos allí en unos minutos-le dedicó una sonrisa y se fue a hablar con unos empleados que parecían necesitar su ayuda. Una vez resuelto el dilema fue hacia Amity quien ya estaba a punto de entrar al edificio.

Las dos entraron al mismo tiempo. Luz saludó a la guardia Eda como era costumbre mientras que Amity solo la observó de reojo. Cada quien se fue oie su camino. La peli verde al checador y luego a dejar sus cosas en su locker. Minutos después fue a la oficina gerencial. Tocó la puerta con delicadeza, escuchó un "adelante" que la invitaba a pasar.

-Muy bien Amity toma asiento y dime qué es lo que le ocurre. Perdón que me meta en su vida personal pero la vi mal desde que la encontré en el autobús.

-Aprecio que quiera ayudarme y como te decía allá afuera lamento mucho hablarte de esa manera siempre, ya sabes cortante pero entiendeme que estoy en un lugar donde me obligaron a estar, además peligra mi reputación, no me lo tomes a mal pero aquí solo va gente, ya sabes, de la baja sociedad.

Eso último que dijo Amity no le gustó para nada a Luz pero tuvo que contener su enojo porque este no era un lugar para armar escándalos.

-Y eso arruinó mi vida por eso siempre estoy de mal humor, tampoco tengo nada en contra de nadie-dijo sinceramente.

-Entiendo su malestar pero estás aquí por un motivo y es ser más humilde y servicial con los clientes que al fin y al cabo ellos son los que dan el sueldo que cobra cada mes Amity y con respecto a sus compañeros por allí me enteré que has tenido problemas con alguno de ellos así que te imploro que cambies tu actitud por favor.

Haré eso para largarme de este lugar-pensó.

-Bueno durante esta semana estarás en la caja número 7, ¿sabes cómo usar una caja registradora no?, supongo que no, ve hacia allá y en un momento iré a enseñarle.

-Como digas jefa...-dijo sin muchas ganas.

Amity salió de la oficina y fue a la caja mencionada por su jefa, vió a varios compañeros mirarla algo confundidos y se inquietaron más cuando vieron llegar a la gerente hacía ese lugar. Le enseñó como usarla y se fué. Amity abrió la caja y comenzó a atender a los clientes. Algunas personas comenzaban a contar su vida sobre todo la gente mayor, tenía que mantener un semblante tranquilo con tal de salir de ese lugar lo más rápido posible. Luego fue a almorzar a un restaurante cercano, no era aquellos lujosos lugares a donde solía ir pero era acogedor. La comida tenía una buena pinta, su sabor delicioso y lo mejor de todo es que estaba económica. Luego volvió a su puesto hasta acabar su turno. Estaba muy agotada física y mentalmente, eso de fingir tranquilidad cuando no lo estaba le costaba mucho. Al llegar vió el auto de su madre en la casa cosa extraña ya que ella volvía una hora después, al entrar vió a ambos que estaba esperándola.

-Ahora querida,¿cómo te fue el día de hoy?-preguntó su madre con un rostro serio. Estaba tomando una taza de té que según servía para los nervios o eso había leído Amity en la caja cuando buscaba algo para comer.

-Pues como siempre mal, triste y frustrada por mi cambio de vida...

-Entonces es cierto lo que me dijo tu padre, el me contó que tuvieron una discusión esa mañana y eso no está bien Amity. Tu padre y yo...

-..lo hacen por mi bien, eso ya lo se, me lo dicen todo el tiempo pero ¿acaso no piensan en mi y mi felicidad?. Hago este trabajo que no deseo, arriesgo mi integridad y mi prestigio al estar en ese lugar, ¿se imaginan que alguien como Boscha me viera allí o cerca?, me moriría de vergüenza.

En eso salió Alador de la cocina quien tenía una manzana a medio comer. Se encontraba enojado con ella por la discusión de esa mañana.

-Y sigues con esa actitud de niña malcriada Amity...¿y piensas irte de aquí o ya cambiaste de opinión? por que ya no toleraremos está actitud tuya, mira si te vas no te quitaremos de ese trabajo pero ahora tendrías que olvidarte de todas tus cosas, tendrías que rentar y comprar todo con tu salario ¿acaso quieres esto señorita?.

-No padre, no haré eso ya que no pretendo perder mis cosas. Nada más les diré que continuaré con ese inmundo trabajo hasta que ya me dejen en paz para volver con mi vida, si me disculpan tendré que prepararme para cenar, bañarme y luego dormir que mañana vuelvo a ir allí, nos vemos.

Amity se fue a su habitación dejando a sus padres molestos por lo ocurrido minutos atrás, ambos fueron al estudio a platicar sobre aquella situación, que esto no podía quedarse así.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top