O1O || Verdaderos villanos

—Como que Luna se ha tardado mucho, ¿no?— Jim frotó sus manos ansiosa

—Bueno, supongo que éste tipo de cosas llevan tiempo— Simón rascó su nuca haciendo una mueca

—Hola chicos— todos voltearon al oír la voz de Ramiro, hasta Ámbar, Emilia y Benicio que estaban en la barra —Ahm... Yo, bueno, quería disculparme por todas mis actitudes pasadas y me preguntaba si... podíamos quedar de nuevo como amigos

El Jam & Roller se miraron entre ellos como consultandose con la mirada una respuesta para Ramiro, pero la única que parecía susceptible a que Ramiro volviera ser su amigo. Pero antes de que pudieran responder algo más Luna entró al Roller y todos se levantaron mirándola fijamente.

—Hola— saludó casi en un suspiro

—¿Cómo te fue? ¿Aceptaste la propuesta?— preguntó Jazmín levantando su tablet que ya estaba encendida en cámara

—No, no la acepté— la quijada de todos casi cae al suelo por su respuesta

—¿Por qué no?— preguntó ésta vez Simón

—Porque la oferta era ser la imagen de una marca de patín muy importante, pero... la propuesta era sólo para mí

—Es decir, ¿que no aceptaste ésa gran oportunidad por nosotros?— preguntó Jim con una sonrisa

—Obvio, no los iba a dejar, ustedes son mis amigos y mi equipo— les sonrió al igual que todos, después volteó y alzó ambas cejas al ver a Ramiro, nisiquiera había notado su presencia —Oh, hola Ramiro

—Hola, hiciste muy bien en rechazar ésa oferta por tu equipo, posiblemente hubiera hecho lo mismo y todo seguiría igual— forzó una sonrisa y se fue a los lockers

—¿Que no habla..?— pero antes de que Emilia pudiera terminar su pregunta Ámbar ya se encontraba yendo tras de Ramiro y todos en el Roller se dieron cuenta de la cara de enojo de Ámbar

La rubia de ojos azules llegó a los lockers donde estaba Ramiro sacando sus patines, ya que al rato habría entrenamiento. Pero Ámbar cerró el locker con fuerza y suerte que Ramiro sacó su mano a tiempo sino la pisaba

—¿Qué fue eso allá afuera?— el chileno de cabello rizado rodó los ojos

—Fueron unas disculpas

—¡Sé que fueron unas condenadas disculpas! ¡A lo que me refiero es qué quisiste decir con que todo seguiría igual! ¿Acaso te arrepientes de haber entrado en los Red Sharks?— preguntó lo ultimó un poco más calmada pero también con un poco de tristeza en su voz

—Sí, Ámbar, me arrepiento de haber entrado en los Red Sharks, gracias a mi ambición perdí a todos mis amigos, y desde que entré en ése equipo que supuestamente me iba a abrir puertas al Roller le fue y le va mejor que a nosotros— colgó sus patines en su hombro y salió dejando a Ámbar cabizbaja

—Ámbar— la rubia reconoció ésa voz y rápidamente se secó la lágrima que había rodado por su mejilla —¿Estás bien?— intentó poner su mano en hombro pero ella lo movió bruscamente haciendo que Simón quitara su mano

—Estoy perfecta— respondió una vez que volteó y se dió cuenta que no venía solo sino también con Matteo —En la pista en cinco minutos, sin retrasos— fue a su locker para sacar sus patines pero Simón y Matteo seguían viéndola un poco extrañados —¿Quieren dejar de mirarme como un par de boludos y buscar a sus amiguitas? Gracias— salió de los lockers

—Sí, definitivamente está bien— Matteo rodó los ojos, cuando Ámbar los insultaba se iba toda preocupación que pudo tener por ella

—No parece— murmuró Simón viendo hacia la puerta por donde salió

***

—De acuerdo, ya que hicimos el calentamiento practicaremos la flecha, así que todos pónganse en parejas, por favor— indicó Ámbar poniendo las manos en su cintura, vió como Matteo se ponía con Jim, Emilia con Simón, lo que no la sorprendió tanto, era obvio que ambos estaban empezando a interactuar más pero dejó de prestar atención a los demás cuando vió a Ramiro dirigiéndose a ella y ahogó una carcajada —Estás loco si crees que yo voy a pati...— pero paró de hablar cuando vió como Ramiro pasaba a su lado como si ella no existiera, volteó confundida y vió a Ramiro frenar junto a Luna

—¿Juntos?— Luna sonrió y asintió para tomar su mano, ambos fueron al centro de la pista y empezaron el paso mientras Ámbar retrocedía lentamente mirándolos con los ojos entrecerrados

Debía admitir que lo hicieron muy bien, eso la hizo rodar los ojos

—¿Me permite?— Ámbar rió mirando a Benicio y a su mano extendida, la tomó y ambos fueron al centro de la pista

Se miraron y asintieron, hicieron el paso pero lo complementaron con giro por parte de ambos al final, miraron retantes a Luna y Ramiro. Ellos se miraron y Luna logró susurrarle algo, ambos fueron hacia el centro

—Se puso rudo, eh— le susurró Simón a Emilia y ella sonrió mirando a ambas parejas

Empezaron retrocediendo poniendo un pie tras de otro, fueron hacia el frente en un largo deslizamiento, hicieron un salto abriendo ambas piernas, hicieron la flecha y terminaron con un giro parecido al de Ámbar y Benicio pero con más vueltas. Luna y Ramiro chocaron los cinco y fueron de nuevo a la barra de metal sin apartar su mirada de Ámbar y Benicio

Ambos fueron al centro, hicieron un túnel Ámbar pasando debajo de Benicio, después hicieron de nuevo la flecha, cuando la bajó se alejaron un poco y empezaron a hacer como cinco giros con la pierna extendida, pararon y vieron a Luna y Ramiro indicándoles que ya habían terminado y muy confiados de que no los superarían

Luna y Ramiro iniciaron con cierta distancia para acercarse uno al otro haciendo vueltas de ballet, cuando Ramiro quedó junto a Luna la tomó de la cintura y le dió una vuelta en el aire pasándola por encima de su hombro, hicieron la flecha, cuando Luna estaba en brazos de Ramiro dio una vuelta en el aire (el paso que hicieron Emilia y Benicio en su enfrentamiento en el parque de patín) una vez Luna pisando la pista dieron un giro igual al que ellos habían hecho anteriormente, hicieron una piruta de estrella, Ramiro le dió una vuelta a Luna y la apegó a él para mirar a Ámbar de reojo

—Bien, creo que fue suficiente entrenamiento por hoy, pueden irse— Simón fue hacia Luna y Ramiro que estaban tomando agua para felicitarlos, Matteo y Jim decidieron quedarse a dar unas vueltas y Emilia fue donde Ámbar y Benicio

—¿Entrenamiento? Pensé que era un enfrentamiento— Ámbar tomó uno mechón de cabello de Emilia y lo haló —¡Au!

—Te lo merecías— Ámbar volvió su mirada a Luna y Ramiro —Ahora que son la parejita de siglo se creen también los reyes de la pista, pues eso no lo voy a permitir

—¿Qué vas a hacer?— preguntó Benicio cruzando los brazos

—Vamos— corrigió mirándolos a ambos —Los tres vamos a demostrarles quien manda en la pista, conocerán a los verdaderos villanos

Emilia y Benicio intercambiaron sonrisas orgullosas, la Ámbar que ellos conocían seguía ahí después de todo

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top