↷ ✦ ; scream. ❞

"esto es tan incómodo..." minho susurró, mirando hacia su ventana donde se colaban pequeños rayos de sol de madrugada.

jisung estaba en su quinto sueño, roncando de una manera considerablemente alta, mientras que una de sus pesadas piernas abrazaba toda la cadera de minho.

minho no se quejaba por el amarre, sino por los ronquidos que no le dejaron dormir en toda la noche, más porque jisung tardó en decidir en qué lugar de la cama quería dormir.

inconscientemente y cansado, dejó reposar su mano zurda en el muslo del menor, resoplando un poco por el cansancio y el pesar de sus ojos. intentó conciliar el sueño de nuevo; pero una mano que se empezó a deslizar por su torso lo volvió a despertar, jisung ahora lo tenía abrazado como si se tratase de un koala.

intentó calmarse, los cabellos del menor rozaban su cuello y llegaba a un punto de picarle, los aretes que ahora estaban fríos por el aire acondicionado estaban teniendo contacto directo con su hombro descubierto y ni hablar de que sus labios estaban a nada de tener contacto con su piel.

podría pensar que eran más o menos las seis de la mañana y en cualquier momento podría sonar su alarma de las siete y media para levantarse; pero como era viernes, sus padres estarían preocupados en otras cosas que levantarlo así que tenía un punto a su favor.

"jisung..." el pelinaranja intentó despertar al ajeno, fallando múltiples veces sin ninguna recibir alguna respuesta coherente.

lo maldijo, ¿sus papás no se preocuparían por él? intentó moverle unas cuantas veces más, sin éxito, de nuevo. así que con un poco de valentía tomó sus hombros y los empujó para apartarlo, pero el agarre en su cintura se hizo igual de fuerte, llegándolo a lastimar un poco.

quejó por lo bajo, pero sin dejar de empujarlo, hasta que se cansó y dejó de empujar, haciendo que la fuerza que jisung hacía para mantenerlo cerca hiciera efecto y por consecuencia, terminar pegado completamente con minho quedando el menor encima de él. de nuevo todo silencio.

jisung abrió levemente los ojos, topándose con que estaba a escasos centímetros de los labios ajenos, así que tragó levemente, respiró hondo y volvió a cerrar sus ojos.

minho se lo esperaba pero a la vez no quería esperar eso, se sentía incómodo pero a la vez feliz, y eso que jisung solo había posado sus labios encima de los propios.

nada se movía, hasta dejó de respirar, ¿era una señal? el mayor ladeó su cabeza para que sus labios encajaran y así empezar a moverlos contra los del menor. jisung respondió al instante a la misma velocidad sin querer separarse algún centímetro de su cuerpo para acabar con la unión. el pelinaranja subió su otra mano libre hasta el mentón del menor y lo acarició lentamente sin tener segundas intenciones.

notando eso, jisung se acomodó mejor encima de él, colocando ambos de sus muslos a los costados del ajeno para intentar profundizar el beso. minho terminó por aceptar y el ósculo cada vez fue subiendo de intensidad; jisung acunó el rostro ajeno y sonrió de por medio cuando minho bajó ambas de sus manos hasta sus muslos.

así siguieron por quien sabrá cuántos minutos más, se separaban por segundos sólo para respirar o mirarse entre ellos y sonreírse. minho no quería hablar, sabía que si lo hacía lo echaría a perder todo con su orgullo y narcisismo, así que por primera vez en su vida dejaría pasar lo que sea.

tampoco es como si quisiera arruinar el aura del momento con palabras, no las sentía necesarias porque el lenguaje de su cuerpo se estaba entendiendo perfectamente con el peliazul.

jisung por su parte era la persona más feliz del planeta en esos momentos. el hecho de tener debajo de él a la persona que, literalmente, admiraba era lo mejor que había vivido en años. jamás se había sentido tan lleno, tan bueno, y tan deseable hasta ese momento.

rozaron sus narices unos momentos y luego el menor soltó una pequeña risita, por un momento dejó de aparentar que era alguien arrogante para sorprender al chico con quien quedó cautivado desde el minuto cero, convirtiéndose así en una bolita de amor mimosa que buscaba atención del mayor.

dejó por un instante mostrar su verdadero ser hacia minho aunque él no lo estuviera notando por completo ya que estaba muy perdido en su rostro como para decir algo. de igual manera tenía que admitir que este lado de lee no lo conocía, el atrevido, simple y coqueto minho lo dejó asombrado.

minho sonrió levemente al escuchar la melosa risa del ajeno y guio su diestra para acariciar los mofletes ajenos, se detuvo unos segundos para volver a admirar a jisung; lo besó de nuevo.

"honnie, dice jeongin que ya ba..." la voz de minjeong espantó a ambos, haciendo que separen, pero jisung yendo por la dirección equivocada y cayendo al frío suelo. "¡¿quién eres?!"

minjeong gritó, alarmando así a su otro hermano, jeongin. "¿qué pasa?" llegó corriendo, mirando a su hermana y luego a los dos chicos. "¿¡qué hace él aquí!?"

minho reaccionó y gritó, jisung seguía un poco mareado por el golpe pero sobando su cabeza enfocó su mirada hacia los dos hermanos menores. "mierda..." susurró.

"¿qué pasa, chicos, están bien?" la voz de su papá alarmó a minho, haciendo de este modo que se levante para tirar las sábanas encima de jisung, pero por alguna extraña razón estas volaron lo más lejos posible de él. cuando su papá llegó y miró la escena sacó a sus hermanos. soltando un suspiro y masajeando su sien izquierda, se volteó a ambos menores: "no le digan a su mamá." fue lo que expresó antes de cerrarles la puerta en la cara.

para cuando volteó su rostro viendo a jisung en el suelo sobando su nuca y a su hijo tapándose con una almohada, supo el 'drama' que se vendría.

"¡no hicimos nada, lo juro!" minho se intentó justificar de primera, levantándose para así ayudar a jisung a levantarse del piso. "¿estás mareado?"

el menor asintió sin entender mucho, estaba aturdido de muchos gritos. "¿estás bien, jisung? ¿qué pasó?"

el señor lee caminó hacia ambos chicos, notando pequeños detalles que los delataban, pero decidió callar. suficiente pena estaban pasando los dos casi-ya-no-adolescentes.

"jisung... simplemente se quedó a dormir y... y así." minho sentó a jisung en la cama mientras que él seguía de pie mirando a su papá.

"hm... ¿seguro?" volvió a preguntar sólo para molestar y su hijo asintió muchas veces. "bien, jisung creo que sabrás que no podrás salir por la puerta principal porque... a su madre le dará un paro cardíaco. de esta manera que ¿te sientes bien como para... salir por la ventana?"

ignorando la cara de sorpresa de su hijo, se acercó a revolver los muy despeinados cabellos del peliazul.

"sí puedo, yo sí puedo." parecía que casi hablaba consigo mismo, pero se intentó levantar y volvió a ver estrellitas. "okay, bueno..."

"¿tanto te dolió caerte?" minho se inclinó para contemplarle y cuando tocó su nariz jisung quejó agudo. "oh no, oh no, no me digas que tu perfecta nariz se dañó, oh no..."

"estoy bien, soy jisung, estoy muy bien." se levantó de nuevo y acomodó sus cabellos. "gracias, señor lee."

"papá, él no puede salir por la ventana, ni que fuera qué." minho tomó a jisung de su brazo para ayudar a levantarlo de la cama y caminar ambos hacia el centro de la habitación.

"¿qué, crees que tu novio se va a morir? por dios minho, si yo conozco todos los secretos para esconder a los enamorados, dile a tu madre cómo la escondí el día de san valentín." el pelinaranja negó rotundamente a tan siquiera la idea de imaginarse a su madre y a su padre teniendo algo más que besos casuales. "ahora, ponte duro porque vas a salir con él."

resignado a no poder cambiar de opinión a su progenitor, minho abrió la ventana e intentó salir de esta, apoyándose en la rama del gran árbol y con la ayuda de su papá ayudaron a jisung a que pasara a la rama; ya los dos allí, el mayor bajaba con cuidado para luego bajar a jisung hasta el pasto. "cuidado."

minho limpió alguna suciedad que jisung tuviera por consecuencia de arrastrarse en el árbol y luego con mucha cautela saltaron la reja de su casa para así acompañar al menor a su casa.

"hey, hasta aquí." jisung lo paró justo antes de trepar la reja de su casa.

"¿por qué? ¿qué tal si te caes desde tu ventana?" reprochó con voz baja, tampoco quería llamar la atención a su alrededor.

"estaré bien, lo hago desde hace mucho." el menor le restó importancia, empezando a escalar su reja.

"pero aún así..." jisung se bajó de la reja de un brinco para luego tomar el cuello de minho y besar sus labios de nuevo; fue rápido pero duro, diferente a los que se habían dado hace no más de una hora. "te podrías lastimar."

"ve a prepararte para ir a la universidad, y luego para la noche; espero que sea tu noche." jisung le guiñó un ojo y luego volvió a lo suyo.

minho quedando medio atónito, regresó a su casa, no obstante cometiendo el grave error de entrar por la puerta principal.

"¡castígalo!" jeongin gritó divertido al observar a su hermano mayor pasar por la puerta principal.

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"¿sigues vivo?" felix chasqueó sus dedos enfrente de él.

"wow, tiene ojeras." seungmin habló por lo bajo, abrazándose más a felix.

"tienes razón. no tiene maquillaje, ¿lee? ¿los extraterrestres de abdujeron y ahora eres un prototipo de un minho cambiado?" felix asintió, acercando su dedo a uno de los ojos de minho.

"déjenlo, parece sonámbulo." hyunjin se unió a la conversación, sentándose en la banca de la cafetería donde normalmente se veían.

"me besé con alguien..." minho susurró, mirando hacia un punto fijo, vestía un hoodie gris y pants del mismo color, sus tenis eran rosas y ni siquiera le había dado tiempo de maquillarse un poco. "estoy acabado porque sé que me gusta y quiero buscarlo de nuevo."

"estamos perdiendo a nuestro minho." hyunjin se levantó de nuevo para ir hacia minho y agitar su mano para darle aire. "¿¡qué dices?!"

"que me gusta, creo." se encogió de hombros, intentando analizar bien sus raros sentimientos que apenas notó tener después de ese beso con jisung.

aparte, ahora que recordaba, nunca negó cuando su padre en la mañana llamó a jisung 'su novio' ni mucho menos le pareció incomodarle verlo de esa manera...

"¿¡piensas!?" hyunjin rodó los ojos, pegando su frente. "¿quién es?"

"no les contaré..." estaba negado, sabría lo que pasaría si declarara el nombre del quién se supone es su contrincante en todo.

"¡cuenta chisme!" hyunjin sacudió un poco sus hombros.

"joder, estás muy imperativo." minho susurró recostándose en la mesa.

justo en ese momento pasaba changbin con su grupito, llamando la atención de hyunjin. "hola lindo."

"hola, hola, ¿listos para esta noche?" y todavía tiene el descaro de hablar de su fiesta a la que no fue invitado enfrente de él.

"oye, cualquiera con invitación si lleva a una pareja que no tiene invitación, ¿de todos modos pasa?" minho se atrevió a preguntar, levantando su mirar hacia el ajeno.

"claro, ¿por qué lo dices? ¿piensas colarte?" changbin interrogó levantando una ceja.

"hey." hyunjin intentó intervenir pero fallando al ser ignorado por ambos coreanos.

"claro, porque voy a opacarte." minho se burló un poco, para luego levantarse y burlarse internamente de la expresión de changbin. feliz, salió de gran lugar, siendo seguido por un chico de apariencia somnolienta.

sin embargo no parecía feliz.

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