|| Rocking my Heart ||

Intro:

Los destellos fugaces de las brillantes luces inundando el oscuro salón.

El sonido de la música más los gritos de la gente tan fuertes, que no pueda oír ni mis pensamientos.

Es lo único que necesito aquí, en este espacio donde puedo gritar todo lo que quiera hasta quedarme sin voz. Donde el mundo no vale nada y los problemas son tan solo algo que se lleva el tiempo.

.

.

_______

━ ¡Oye viejo, hoy estuviste de lujo!

Aún con sus bastones de batería en las manos, el joven pelirrojo de dientes afilados felicita a su compañero, recibiendo un gruñido molesto por parte de este.

━ ¡Oye, Eijirou!, no lo alabes tanto que se le inflan los humos...━ reclama un rubio mal teñido, con una extraña línea negra en su cabello, la que no combinaba para nada con el resto, sentado tranquilamente arriba del parlante de la sala de ensayos, bailando despreocupado con los pies en el aire.

━ Es que Denki, no entiendo a sus fans. Se sube al escenario y canta gritando como un completo demente, ¡y todas se vuelven locas!, con esa cara de perro estreñido que tiene... Demonios, no sé cómo lo haceー. Se queja soltando un suspiro frustrado mientras, más que ordenar, juega con los cables de los otros instrumentos. Enrollándolos sin guardar nada realmente.

ーTan solo estás celoso...ー sentencia su amigo, bajándose del parlante para darle una palmada reconfortante en la espalda.

ー No lo estoy, es solo que... ¡Es tan injusto! Como baterista estoy muy atrás... ¡Ninguna chica linda me ve!ー lloriquea en un berrinche infantil que delata sus obvios celos al respecto.

ーNo sé si será culpa de eso...ー responde, aguantándose la risa para no lastimarle más, Kiri era gracioso pero, también bastante sensible ー Además, estás siendo excluyente. También vi varios chicos con carteles gritando hoy. Nuestro galán se los trae a todosー se burla, cambiando el depresivo ambiente y su mueca se va volviendo maliciosa mientras dirige su mirada a su líder de banda, quien ocupado les ignora, revisando las grabaciones del concierto.

ー¿En serio? Entonces creo que mejor me quedo atrás, ahí tranquilito estoy mejor ー Kirishima le sigue el juego fingiendo espanto, para luego, soltar una fuerte carcajada de esas que sólo le salen a élー ¿Tú que opinas, Shouto?

ーA mí mientras venda, me da igual quién rayos vengaー responde el heterocromático joven, de cabello también desigual. Con su apática expresión de siempre y su bajo ya guardado. Como siempre, era el primero en estar listo para irse.

ー¡Malditos pendejos!, ¿pueden dejar de hablar tanta mierda y guardar los putos instrumentos? Quiero irme a beber algo... ¡Estoy hasta la puta madre de ustedes dos! ーbrama el rubio de ojos rojizos, quitando su vista de las grabaciones y lanzándoles una mirada enrabiada, al par que aún no guardaba absolutamente nada.

ー¿Te das cuenta cuantas groserías puede decir en una oración?ー continúa hablando el dúo de Kiri y Denki, ignorando por completo el arrebato de su líder de banda. Ya estaban acostumbrados a sus ataques de rabia y no temían...

Tanto.

ーMe voyー se despide el de cabello bicolor. Ahorrándose el presenciar la paliza que a su parecer, el trastornado vocalista les iba a dar al par de vagos que tenía como compañeros.

ーUstedes dos sí que les gusta sacarme la mierda...

Se escucha la voz grave de Katsuki y ambos presentes dan un respingo, lanzándose una mirada cómplice antes de ordenar todo en menos de un segundo y salir disparados de ahí.

ー¡Mañana nos vemos, jefe!ー grita Denki, huyendo de la escena. Siendo seguido rápidamente por el pelirrojo.

Hasta ahí llegó su valentía.

ー¡Recuerde no maltratar las cartas de sus lindos fans! ー grita este último, antes de desaparecer.

________

Capítulo 1. "Cartas de un fan".

.
.

Llevo cantando desde que tengo uso de razón. Al principio en la calle, luego en los bares, fiestas, clubs...

Fue un arduo camino lleno de momentos de los que no me avergüenzo, pues fueron parte del camino que me llevó hasta lo que soy hoy.

La industria de la música no es fácil, menos con apenas 17 años. En ese limbo donde no eres joven ni adulto.

Para empezar, nunca me interesó ser famoso. Sólo quería cantar, es lo único que me mantiene cuerdo.

Tengo trastorno explosivo intermitente, me lo diagnosticaron a los 15 años, aunque probablemente lo tengo desde que nací.

Siempre tuve problemas en la escuela. Me peleaba con todos mis compañeros hasta dejarlos sangrando en el suelo y prácticamente vivía en la oficina del director. Mis padres me enviaron a un reconocido psiquiatra que me dio un tedioso tratamiento para lograr controlar mis "ataques de ira", pero por desgracia no funcionó.

La ira seguía reprimida en mi pecho como una bomba a punto de explotar...

Hasta que llegó ese día, el que decidí cantar. Aunque más que una "decisión", ahora que lo pienso, fue algo accidental. Estaba el micrófono y el salón de música vacío y tan solo lo tomé y me puse a gritar, encolerizado. Probablemente para no irle a partir la cara a alguien.

Entonces apareciste...

Y le diste un sentido a mi vida.

.
.

____ ¤ ____

12 años atrás.

ー ¡Tienes muy buena voz, deberías cantar!

Interrumpe la voz alegre de un niño que nunca había visto. El cual me observa detenidamente desde la puerta del salón de música. Sus ojos tímidos parecían brillar de emoción, como si hubiera visto algo realmente increíble.

ー ¿Y tú quién carajos eres?ー pregunto alzando una ceja, incrédulo.
Nunca había recibido halago alguno en el colegio, menos de algún compañero. Todos eran tan sólo una bola de imbéciles adinerados a los que odiaba con todo mi serー... ¿Lo dices de verdad?ー Pregunto, sin poder evitar emocionarme.

Es el primer cumplido que recibo de alguien de mi edad.
.
.

ー¡Por supuesto que sí, ha sido genial! Nunca había visto a alguien gritar así... Sonabas como esos cantantes punkー chilla emocionado, aún desde su lugar. Tenía bastante energía, a pesar de lo lento que se veía ーOh, mi madre ya llegó. Debo irme... ¡Cuídate!

ー¡Oye espera!, ¿cómo te lla-mas?...ーPregunto, por desgracia, ya muy tarde.

Saliste corriendo tan rápido que, aunque me asomé en el pasillo a buscarte, ya no te vi. Al otro día volví a buscarte.

Y al otro, y al otro...

Nada.

Desapareciste de forma tan fugaz como llegaste y no alcancé a preguntar absolutamente nada de ti. Con el paso de los años apenas me acordaba de cómo eras.

Sólo podía recordar tu tonta sonrisa antes de irte y...

Pecas.

____ ¤ ____
.
.

Inmerso en mis recuerdos llego a mi departamento, vivo solo desde el año pasado cuando mis padres decidieron irse al extranjero.
Gracias a mi creciente fama, no tenía problema alguno con los gastos, mi vida podría decirse iba en perfecta armonía, a excepción de una cosa:

Los fans.

Hay momentos en los que realmente les odio. Ya sean mujeres, hombres, adultos, niños...
Odio que me sigan, odio que me pidan autógrafos y por sobre todo, odio que me dejen cartas.

Ya es la octava que recibo del mismo anónimo y lo peor, es que para burla de todos, se había confesado hombre.

Desde que en un momento de relajo luego de unos tragos, cometí el error de contarle al grupo imbéciles que tengo por colegas. No me habían dejado en paz.

Excepto Todoroki, a ese parecía valerle mierda absolutamente todo. Podría ser un Dragqueen y nunca me enteraría. No dice un carajo. Sólo viene, toca y luego se va.

Si bien, mi mánager me pide sonreír a las cámaras y contestar a los fans, no sabía ni quién era el idiota que me enviaba esas cursis cartas como para responderle algo "amable" (no se puede pedir demasiado) y luego mandarlo a la puta mierda.

ーQue fastidio...ーsuspiro, yendo a darme una ducha para relajarme un poco.
Este tema me pone de los nervios.

______

.
.

ーTerrible.ー Sentencia el de ojos rubíes, dándole un golpe en la cabeza a su perdido tecladistaー Denki, ¡No sé qué mierda te fumaste ayer pero eso estuvo de la mierda!, otra vez.ー exige, volviendo a su lugar en el micrófono y haciéndole una ceña a Kirishima para que marcara nuevamente el tiempo.

ーPero si yo no fu-

ーLamento interrumpir su fallido ensayo, pero tengo los regalos del concierto de ayer. Así que van a tener que intentar luego. ー Anuncia su mánager, entrando y desconectando el pie de corriente de todos los instrumentos.

ー¡Al fin una carta para mí, dime que tienes algo jefazo!ー soltando todo, el pelirrojo corre hacia el gran carro de regalos. Comenzando a buscar entusiasmado.

ーPor desgracia, para ti no hay nada...ー Revela, haciendo que el rostro ilusionado de su pupilo, se caiga en mil pedazosー Aunque espera... Sí recibiste algo, esto es para tí.ー Anuncia, entregándole un papel de cobros, por la chica que hirió con los bastones en el último conciertoー No vuelvas a romper y lanzar los instrumentos, es peligroso.

ーVale...ー responde desanimado, volviendo a sentarse en la batería con cara de muerto.

ーDenki, a ti te ha llegado un teclado nuevo de parte de la compañía con la que hablamos el otro día.

ー¡Genial!ー se acerca el rubio a por su nuevo teclado. Abrazándolo emocionado mientras lo lleva hacia el soporte.ーEres precioso...ー halaga al objeto inanimado con devoción, como si este le escuchara.

Mientras, el deprimido Kirishima continúa en su nube depresiva
ーNadie me va a querer...ーmurmura desolado.

ーShouto, esto es tuyoー interrumpe el monólogo deprimente.

ー¿¡Ah!? ¡No jodas amigo!ー Reclama el pelirrojo, saliendo de su tristeza de la sola rabia, al ver la montaña de regalos y cartas para el desinteresado bajista. Quien tan solo las acepta, metiéndolas a una bolsa que parecía de basura.

ーBakugou...ー llama el azabache entregándole una grosera bolsa de regalos y cartas. Las cuales lo más probable este ni viera.

ーUy... Cartas para el líder.
¿De quién serán?, ¿quieres que te ayude a buscar alguna en particular?ー pregunta el pelirrojo, burlándose mientras toma las cartas de éste hasta dar con la que buscabaー¡Bingo!

ー¿Envió otra?ー pregunta curioso el tecladista, acercándose para ver tambiénーEste tipo sí que es insistente.

ーQuerido Bakugou...ーcomienza a narrar con voz de protagonista de una novela barata.

ーHey, ¡No te pongas a leer mierda que no es tuya!ーordena Katsuki alarmado al notar como el pelirrojo, al parecer, piensa en leer la carta en voz alta.

Menuda humillación.

ーTu concierto de ayer fué increíble, tu voz es lo más maravilloso que he oído y quiero disculparme por... ¡Auch!ー Se queja cuando luego de un buen golpe, Katsuki finalmente se la quitaー ¡Estaba en la mejor parte viejo!, vamos, no seas así. Déjame leer, que no tengo nada mí... Por favor ー pide haciendo un fingido puchero, poco convincente.

Pero que de alguna forma
logra funcionar.

ーHaz lo que quieras... Solo porque me das pena, idiotaー responde chasqueando la lengua y pasándosela para que vuelva a leer.

Tampoco es que fuera a haber algo importante, siempre escribía lo mismo. Muchos halagos y una ridícula nota de ánimo al final.

ーQuiero disculparme por no presentarme adecuadamente, soy algo tímido. Me gustaría mucho poder finalmente conocerte. Mi familia lleva un café justo al frente de donde tienen su próxima presentación. Si quieres, puedes pasar y tomar algo, la casa invita.
Estoy perdidamente enamorado de tí.

ー¿¡Qué!?ーgritan todos, menos Shouto, quien permanece normal.

ーOk, eso lo agregué, lo que no quita que sea real. Esto es mejor que Romeo y Julietaーse defiende el pelirrojo, ondeando la carta frente al avergonzado rubio. Quien aún sigue shockeado por la declaración final, aunque fuese de mentira.

ーY una mierda, ¡No voy a ir! ー Sentencia, tomando la carta para arrugarla y tirarla al suelo, con total desprecio.

ーComo mánager, opino también que es mala ideaー apoya el azabache, tomando la carta del suelo para verla mejor ー pero como ser humano, te digo que deberías siquiera pasar y agradecerle. Vive enviando cartas, hasta te compró una guitarraー agrega, abriendo uno de los almacenes, para sacar la costosa guitarra eléctrica con flamas pintadas en los bordes.

ー¿Qué?, oye viejo nunca nos contaste eso. De verdad este tipo se la está jugando ー asombrado Denki observa la costosa guitarra ante sus ojos.

ーYa cállate, idiota y deja de decir cosas extrañas. Es sólo un regalo no hagas tanto escándalo.

ーYo creo que es un regalo bastante dedicado y que sería muy cruel no le dieras ni las graciasー intenta convencerlo mientras, aún asombrado, contempla el instrumentoー .A todo esto, ¿Por qué no la usas?, está mucho mejor que la mierda que tienes.

ーLe debe dar vergüenza, ¡Imagínatelo en el escenario con la guitarra que le regaló!, el pobre fan se va a morir de un ataqueー explica Kirishima, simulando un ataque al corazón.

ーYa déjenlo. No usaré la guitarra de ninguna forma, pero iré. Sólo para decirle que deje de enviarme tanta mierdaーsentencia pateando una silla y saliendo a tomar un poco de aire, dando un fuerte portazo antes de desaparecer.

ーPara mí que le arruinamos todo el jueguito romántico al pobre admirador. ¡Míralo, parece una bestia! ¿cómo puede gustarle ese animal?ー Pregunta el baterista a su amigo en el teclado, quien solo se encoge de hombros antes de responder:
ーCreo que no puedes elegir quién te gusta.

ーYa déjenlo...ー los regaña el azabache ーEs mejor que tan solo se encuentren.ー Agrega esbozando una extraña sonrisa antes de irse, la que nadie logra notar.

Puede que las de ese mocoso sean las pecas de las que me hablaste.

.

.

.

______________

+ Notas de la autora:

¡Bienvenido/a a RMH! Si eres nuevo te doy la más calurosa bienvenida y si estás releyendo ya tienes mi corazón.

Estoy re-subiendo esta obra, así que verás constantes actualizaciones de ella. Tenía muchos errores que he decidido arreglar, antes de seguir avanzando.

Se acercan los 10k y no me siento merecedora de tanto amor. Quiero entregar algo a la altura del cariño que he recibido.

¡Como siempre, un abrazo y nos estamos leyendo!

Canción: Avalanche- Bring me the horizon