Jimin sonrió victorioso al salir con sus compras de aquella tienda de ropa infantil.
Había peleado con la dependienta y de no ser por Yoongi posiblemente se habría ido a los golpes.

♡

— Mira este suéter Yoongi, es lindo. —Dijo Jimin sosteniendo un suéter blanco el cual era adornado por lunares de colores.

— Buenas tardes, ¿le molesto con una pregunta? —Preguntó la dependienta quién desde que entró a la tienda lo miraba con desprecio— ¿Qué está esperando?

— Un niño. —Contestó Jimin feliz

— Esa ropa es de niña, usted está en la sección de ropa de niña.

— No importa creo que este suéter es lindo.

— Su bebé no puede usarlo porque es ropa de niña. —Dijo con molestia.

— No veo en ningún lado que diga "para niña" solo veo un suéter blanco con puntos de colores.

— Es de niña. —Insistió queriendo arrebatarle la prenda.

— Lo compraré, no me importa

♡

— Es ropa para un bebé de 1 mes, el no me va a decir "papá quitame esto, es horrible" —Habló Jimin molesto— Maldita bruja.

— Son personas con la mente cerrada que le cuesta entender que la ropa no tiene género, se hizo para usarse y ya. —Yoongi se encogió de hombros— Ignorarlos.

— Es que me da tanto coraje que no me haya dejado comprar esa prenda por las buenas, al final de todo le iba a dar mi maldito dinero, ¿qué le importaba lo que iba a comprar?

— Conseguiste comprar todo lo que te gustó, pero para evitar malos tratos simplemente hubiéramos ido a otra tienda.

— Sí, pero eso sería darle la razón y no estaba dispuesto a ello. —Sonrió sacando el suéter de la bolsa— Es lindo.

— A él le gustará porque lo escogiste tú. —Dijo Yoongi abrazándole por atrás— ¿Ya te dije que te quiero?

— La gente se nos quedará viendo. —Dijo Jimin pues aún seguían en el centro comercial.

— No me importa. —Dijo Yoongi volteando a Jimin delicadamente haciéndolos quedar cara a cara.

— Yoongi, estamos llamando la atención, hay que separarnos un poco. —Murmuró— Nos ven raro porque estoy embarazado y... quizás también porque ambos somos hombres.

— ¿Y? —El pelinegro arqueo una ceja.

— Yoongi, ve el desagrado en esas miradas, nos miran igual que esa mujer.

— Las personas de aquí tienen asuntos más importantes que vernos mientras nos amamos, solo somos tú y yo en nuestra burbuja. —Le dio un beso al menor.

Yoongi era el lugar seguro de Jimin, no importaba qué, los brazos del mayor siempre le reconfortaban.
Después de pasar a comprar un helado para que Jimin olvidara aquel mal sabor de boca ambos decidieron regresar a casa.

— Tengo que salir, quizás regrese tarde. —Anunció el pelinegro— Si sales no olvides llevar tu juego de llaves, no me gustaría encontrarte afuera esperando porque olvidaste tus llaves de nuevo

— No tengo planes de salir, de hecho me quedaré en casa viendo alguna serie o algo en la televisión. —Jimin se encogió de hombros sentándose en el sofá— ¿A dónde vas?

— Iré a cenar con Jungkook, dijo que quería hablar conmigo, creo que intenta arreglar las cosas. —Habló Yoongi acomodándose su chaqueta, pues a pesar de ser abril el clima por las noches era un poco fresco.

— No seas obstinado, déjalo hablar.

— Si sigue en la misma posición dudo mucho que volvamos a ser amigos o siquiera a hablar como antes. —Jimin se levantó y tomó ambas manos del pelinegro entrelazando sus dedos.

— Jungkook simplemente se enamoró, no le puedes culpar.

— De todas las personas que habitan en Busan tuvo que escoger a alguien tan nefasto como Taehyung. —Yoongi negó con la cabeza— No lo entiendo.

Jimin suspiro y le miró a los ojos.

— A veces en el corazón no sé manda. —Remojó sus labios ligeramente con saliva— Yo ya tuve mi historia con Taehyung y sé perfectamente que no es la mejor persona, pero quizás Jungkook sea la persona indicada para él, quizás lo haga cambiar, todos merecen una segunda oportunidad. Perdona si no te he contado mucho de mi pasado, es algo difícil.

— ¿Estamos hablando de la misma persona? Jimin yo solo me crucé con Taehyung dos veces y te aseguró que si lo veo una tercera vez lo golpearé sin cansancio. —Soltó con suavidad las manos de Jimin— Sé cuanto te ha dañado, se atrevió a dejarte solo y ni siquiera ha preguntado por el bebé y la forma en la que habla solo me hace querer matarlo ¿y tú hablas sobre perdonarlo y dejar que sea feliz? —Dijo incrédulo.

— Jungkook parecía tan feliz con él aquella vez en la cena y en la fiesta que... lo consideré. ¿Soy malo si no lo perdono? A veces pienso que todos debemos de ser felices.

— No cariño, no eres malo, hay un karma y Taehyung tendrá que pagar cada daño que ha hecho. —Dijo Yoongi— De hecho todos tenemos un karma pero unos más que otros.

— Tienes que sacar a Jungkook de ahí antes de que Taehyung se convierta en su verdugo. —Murmuró serio Jimin.

— Lo haré entrar en razón, he sido su mejor amigo desde sus 20, lo conozco de pies a cabeza. —Dijo con seguridad— Quédate tranquilo bebé.

Y con un beso fugaz en los esponjosos labios del rubio Yoongi se despidió, yendo a su cita con el castaño.

Mientras tanto Jimin se quedó solo reflexionando sobre su pasado y sus decisiones, ¿por qué se sentía como el malo de la historia cuando sabía lo malo que Taehyung podía llegar a ser? Jimin sabía lo erróneo que era su pensamiento sobre segundas oportunidades, algunas personas no las merecían ni volviendo a nacer.
Estaba tan sumido en sus pensamientos hasta que alguien tocó la puerta del apartamento.

— Hablas de no olvidar las llaves y tú olvidas las tuyas. —Murmuró con diversión mientras se dirigía a abrir— Yoongi tontito.

Pero cuando abrió la puerta se quedó sin palabras, no era Yoongi quien estaba atrás ni mucho menos alguien que esperaba ver, aquella despreciable persona que tanto habían nombrado momentos atrás estaba parado con una enorme sonrisa y un impecable traje gris.

— ¿No me vas a invitar a entrar? —Habló Taehyung viendo como el rubio se había quedado estático ante su presencia— Vaya, que descortés. —Entró sin invitación empujando ligeramente a Jimin.

— ¿Qué haces aquí? —Preguntó sin rodeos.

— Este lugar sigue siendo una ratonera. —Miró con desagrado el lugar— Vine a hablar contigo, claramente, no es porque quiero verte.

— No hay nada que hablar. —Sentenció impidiéndole el paso a más allá de la sala.

— Te dije que cuidaras tu figura, tapas tu sólito todo el pase. —Taehyung rio ante la acción de Jimin para impedir que se adentrara aún más al departamento— Engordaste como una vaca gorda, ahora eres tan ancho. Qué asco.

Taehyung sin importarle que Jimin estuviera en estado, sacó con naturalidad una caja de malboro sacando de ella un cigarrillo, llevándolo a su boca y encendiéndolo.

— No puedes fumar aquí, apaga esa cosa. —Exigió Jimin— El humo se quedará dentro.

— Sí bueno, abre las ventanas y ya.

— Creí que no fumabas, creí que lo odiabas tanto como yo lo hacía cuando estábamos juntos.

— La vida a veces da sorpresas Jimin, descubrí que me gustaba el tabaco. —Exhaló el humo del cigarro— Lo que vine a hablar contigo te ayudará.

Era una completa mentira Taehyung odiaba fumar, en realidad solo lo hacía para molestar a Jimin, sin importarle más.

— ¿Puedes apagarlo e irte de una vez? —Preguntó Jimin intentado no respirar.

— No, ahora cierra la maldita boca y escucha. —Elevó la voz intimidando un poco a Jimin— Tu padre planea quitarte al niño.

— ¿Q-Qué?

— Lo que oíste, piensa que teniendo al bastardo tendrá todo el poder y los Park seguirán con su legado, estúpido, ¿cierto? —Se burló— La única manera de que tu padre deje de ser CEO es muerto o por una votación entre los mayores accionistas de empresas Park, cosa que no creo que suceda.

La sed de poder del señor Park era tanta que incluso veía como una opción que Jimin se haya embarazado a propósito para arrebatarle todo con el pretexto de tener a un "heredero Park" un pensamiento ilógico, pero una gran herramienta para Taehyung.

Park Seung quería evitar a toda costa que el legado Park terminara con su muerte, porque una vez que pasara esto al estar en deuda con el imperio Kim, todo pasaba a manos de Kim Young Hoon, como pago de la deuda que Seung tenía, pero si aquel viejo hombre lograba conseguir un heredero la deuda se tranfería al siguiente Park, pero claro, él no permitiría que Jimin tomará un puesto tan importante siendo defectuoso, su única opción era criar a aquel bebé y prepararlo para tomar el cargo cuando cumpliera la mayoría de edad.

— A mi padre no le importaba antes, mucho menos ahora, eres un imbécil mentiroso. —Dijo con voz temblorosa.

— ¿Tienes la osadía de usar esas palabras conmigo? ¿Cuándo te volviste tan rebelde? Sin embargo aún eres un corderito asustado por el lobo feroz. —Taehyung quiso tocar las mejillas de Jimin, pero este alejo su mano de un manotazo— Me prendes cuando eres reacio, me prende aún más que cuando eras sumiso, si tu cuerpo fuera el mismo de antes me encantaría hacerte tantas cosas, pero tu sobrepeso me repugna.

— ¡Lárgate! —Dijo Jimin— ¡LÁRGATE AHORA MISMO!

— ¿Rechazas a una buena alma que vino a ofrecerte ayuda? Jimin, él puede quitarte a esa cosa, tu padre tiene muchas palancas, lo va a lograr. —El apartamento se comenzaba a llenar de olor a tabaco gracias al cigarro de Taehyung— Pero siempre hay una solución, en términos legales esto solo puede pasar si se te declara incompetente para el cuidado del niño y en caso de que seas su único tutor pasa a manos del familiar más cercano, el señor Park.

— ¿C-Cuál es la solución? —Preguntó con temor.

— Fácil Jiminnie, le daré mi apellido a tu mocoso, perdonando así toda infidelidad, ya no me importa cuantos penes tuviste dentro de ti estando aún conmigo. —Apagó su cigarro en la pared más cercana dejando caer los restos al suelo— Si tu padre logra declararte como alguien incapaz de hacerse cargo de un bebé, mi apellido lo salvará, sería su tutor legal y más adelante podrías reclamar tu parte como accionista de empresas Park, aquí todos ganamos.

— Pero yo no estoy interesado en nada que tenga que ver con mi padre, no quiero sus acciones.

— Entonces es más fácil, tu padre no podrá quitarte al niño porque tendrá mi apellido y yo me encargaré de manejar todo el tema empresarial, tú y tu pequeño parásito pueden vivir una vida tranquila. —Sonrió con falsedad.

— Hacer que mi hijo lleve tu apellido sería lo último que haga y si tanto les asusta perder ese sucio dinero, no se preocupen, no pediremos nada ni aunque estemos muriendo.

Taehyung pudo irse y ser feliz con esa declaración, pero siempre era mejor asegurarse de todo.

— Kim es un apellido muy privilegiado, muchos morirían por tenerlo, le estoy dando una gran oportunidad de vida a ese niño.

— No me interesa. —Habló molesto.

— Espera... ¿Esperas que ese inútil doctor le dé su apellido al bastardo? —Se burló— ¿Prefieres Min antes que Kim? Dime Jimin ¿qué te puede dar él?

— No tienes derecho a opinar sobre mi vida personal cuando ya no somos nada.

— No opino... Es solo que me parece divertido que pienses que Yoongi realmente te quiere. —Una estruendosa carcajada se escuchó en aquel lugar— Nunca fuiste inteligente, no sé por qué me sorprende, y no, no hace falta que lo digas, sé que tienes sentimientos por él, no eres muy bueno ocultándolo, no es por ofender, pero si él te hace caso será por lástima o porque sabe sacarte provecho, digo, al menos sabes como mantenerle la casa limpia, eres un simple criado, porque para sexo dudo mucho que te use. —Dijo pasando sus dedos por la mesita de café, limpiando el inexistente polvo.

— Tú no sabes nada. —Resentimiento y odio era todo lo que Jimin transmitía con su temblorosa voz.

— Tan inocente, tan ingenuo, ¿piensas que Yoongi te seguirá queriendo sabiendo que tú fuiste la razón de la muerte de su padre y el desempleo de su madre? Tú fuiste la causa de sus carencias de joven, Jimin le hiciste tanto a Yoongi.

— Yo no soy culpable, no hice nada, no sabía nada de eso hasta ahora. —Murmuró con voz temblorosa— No sabía.

Jimin era el villano de una historia mal contada, o al menos él se sentía de esa forma, había hecho que la madre de Yoongi se quedará sin trabajo gracias a su incapacidad por guardar dieta y es que era tan pequeño, todo era tan confuso para él, no sabía la razón por la que le prohibían comer, la pobre mujer solo le llevaba comida a escondidas, no hacía mal, lamentablemente ambos fueron descubiertos no una, sino dos veces, Jimin sentía que pudo haberlo evitado si tan solo hubiera hecho caso la primera vez que fue descubierto por su padre, pero no fue así, su hambre era tanta que le fue imposible rechazar aquel pedazo de pan, causando el despido de la señora Min.

Con la muerte del señor Min realmente no tuvo que ver, solo escucho el disparo desde dentro de la casa, pero se sentía tan culpable, culpable por callar y no denunciar todo lo que pasaba tras esas paredes, jamás tuvo la valentía de acusar a Seung, después de todo era su padre.

— Yoongi te odiará tanto, me sorprende que no lo haya descubierto ya, vive con la persona que se encargó de destruir su familia, debe de estar ciego. —Miró a Jimin y sonrió al ver su rostro afligido— No me digas, ¿vas a llorar? No tiene caso llorarle al pasado, al final no puedes cambiar nada.

— Si le explico quizás me perdo–

— No puedes perdonar a alguien que no lo merece. —Le interrumpió— Seamos sinceros Jimin, si los papeles se invirtieran tú tampoco lo perdonarías, eres un monstruo.

— Deja de hablar, detente por favor. —Susurró con voz entrecortada llevando sus manos a sus odios intentando taparlos.

— Solo digo la verdad, ¿te duele? ¿Te duele saber que nadie realmente te ha amado? —Se acercó al rubio quitando las manos de sus oídos bruscamente— Nadie te quiere, eres solo un estorbo, Yoongi y los demás se cansaran de fingir un día que realmente les agradas.

— No... —Las mejillas de Jimin se comenzaban a humedecer.

— ¿No qué? ¿No quieres aceptar tu realidad? —Taehyung apretó su agarré en las muñecas de Jimin— ¿No me crees? ¿Qué fue lo que dijo Jungkook el otro día? Oh sí, que le parecía irritante que te comportarás como un niño de 7 años, tan infantil. Siendo honestos soy aquí el único que te soporta.

— Yoongi no me odia. —Susurró.

— Tal vez no ahora, pero cuando sepa la verdad, cuando sepa quien realmente eres ¿te seguirá tratando igual de bien? No lo creo. —Le soltó— Cuando eso pase puedes correr a buscarme siempre tendré los brazos abiertos para ti Jimin.

— Yoongi no me odia. —Volvió a susurrar.

— Es tu asunto si quieres vivir en esa mentira, yo solo quise abrirte los ojos.

— Él no me miente, nunca lo ha hecho.

— Yo te mentí por 5 años, jamás sentí nada por ti, fingí incluso en la cama, nunca fuiste bueno para ello, tenía que embriagarme antes de follarte para evitar tenerte asco, siempre tenía otras personas en mente mientras tenía sexo contigo e imaginaba que eran ellas en tu lugar, todo eso por 5 malditos años y jamás te diste cuenta, creías ciegamente en un amor que jamás existió, no me sorprende que sigas igual de iluso con las mentiras de Min.

Fue hay cuando Jimin se desconectó de la realidad, de sus ojos salían lágrimas, su mente trabajaba a mil por hora haciendo tantas preguntas, se sentía tan miserable, tenía tantos sentimientos juntos, temor, dolor, culpa, solo quería abrazar sus piernas y llorar en un lugar donde nadie lo viera.

— Parece que el ratón te comió la lengua. —Dijo divertido— Bueno Jimin, piensa en todo lo que te dije, ya sabes donde buscarme si decides aceptar lo que hablamos al principio, dejando de lado nuestro pasado recuerda que yo siempre seré tu persona de confianza.

Después de decir eso salió del departamento, Taehyung se sentía con un peso menos en los hombros después de confesarle a Jimin que jamás le amo, el castaño se sentía feliz y con esperanza de que todo saliera a su favor, después de todo era un Kim y los Kim jamás perdían.

Mientras tanto Jimin se encontraba sentado en el suelo llorando en silencio, escuchar todo lo había dicho el mayor lo hizo sentir mal, tenía muchas cosas que pensar, tenía miedo, miedo de quedar solo, miedo de que Yoongi lo rechazara, en ese momento se odiaba tanto, solo quería huir, no le importaba a donde, quería irse de Busan y si era posible de Corea, ya no quería estar ahí.