cuatro.

Tambaleándose entre risas y besos que no podían controlar, Minho y Jisung entraron a la habitación de hotel cerrando con una patada.

Después de una romántica sesión de besos en las orillas de la playa, sus lobos tomaron el control del cuerpo humano y decidieron llevar la situación a otro nivel.

El alfa no podía dejar de besar al omega quien se dejaba llevar por lo bien que se sentía ser besado de esa manera. Caminaron con pasos pequeños y torpes a la cama, Jisung se dejó caer en ésta y segundos después Minho se encontraba encima de él besando su cuello.

-Lindo omega-Gruñó

Minho quitaba con dificultad cada botón de la camisa del omega hasta que su desesperación ganó y rompió la camisa, haciendo que los botones se salieran de su lugar y por fin dejara ver el hermoso cuerpo de Jisung.

Sus ojos recorrían cada centímetro de la piel del omega, como si quisiera memorizar cada detalle, cada curva que tenía su precioso cuerpo. Jisung, con las mejillas sonrojadas y la respiración entrecortada, lo miraba desde abajo con deseo, mordiéndose el labio mientras esperaba el siguiente movimiento del alfa.

Con la respiración agitada, Minho comenzó a recorrer el cuerpo del omega dando besos en todo su torso haciendo que el omega soltera suaves e inaudible gemidos, sonido que hacia sentir exitado al alfa.

El dulce y embriagador aroma de Jisung parecía intensificarse con cada beso que Minho daba en su cuerpo, a él y a su omega les gustaba esa sensación, se sentía tan bien que quería más.

Minho se acercó a la oreja del omega dejando un suave beso en ella y una mordida sacando un gemidocde sorpresa en Jisung.

-¿Quieres más omega?-Susurró. Jisung movió su cabeza asintiendo, cerró sus ojos y se dejó llevar por el increíble sentimiento que acababa de conocer gracias a Minho-Pídeme que continúe

Jisung lamió sus labios y gimió ante los toques que Minho comenzaba a darle a sus pezones, y con voz temblorosa Jisung se decidió a hablar.

-Por favor... Alfa, te necesito-Habló con dificultad haciendo sentir feliz a Minho y su lobo, ambos felices por tener la aprobación del omega para continuar

El alfa comenzó a quitar su cinturón y su pantalón junto a su ropa interior y, sin dejar de mirar al omega comenzó a hacer lo mismo con su pantalón.

Minho contemplaba el hermoso cuerpo desnudo del omega, era simplemente perfecto que no podia dejar de verlo. Jisung no perdió la oportunidad y mientras el Alfa admiraba su cuerpo posó sus manos en el pecho de Minho y comenzó a acariciarlo.

El lobo del omega estaba feliz de tener a Minho como parte de su primera vez y no quería esperar más. Tomó a Minho del cuello y lo acercó a él comenzando a besarlo con desesperacion.

-Hazlo ya, alfa-Gimió cerca del oído del alfa tratando de provocarlo

Con un movimiento ágil, Minho capturó las muñecas de Jisung y las colocó sobre su cabeza, un gesto que hizo delirar más al omega.

Minho tomó su miembro y comenzó a introducirlo con delicadeza en la entrada del omega, sintiendo cómo la calidez y la suavidad de Jisung lo envolvían. Ambos se estremecieron dejando escapar un suspiro acompañado de un gemido provocando que las chispas recorran sus cuerpos.

—Minho...—Gimió Jisung mientras se acostumbraba a la sensación en su interior

El alfa vió la expresión de placer en el rostro del omega y comenzó a moverse aumentando la profundidad y el ritmo poco a poco mientras su mano se deslizaba por el cuerpo de Jisung, acariciando su suave piel.

Minho tomó una mejor posición tomando las piernas del omega y cruzándose en su cintura, juntó sus pechos sintiendo cómo el corazón de ambos latiendo con rapidez ante la acción que estaban teniendo, el omega por instinto abrazó al alfa haciendo que su agarre sea más fuerte al igual que las estocadas que recibía.

Minho sentía cómo el cuerpo de Jisung se ajustaba a él. Cada embestida lo acercaba más a un clímax que deseaba alcanzar junto al omega. Jisung, en respuesta, movió su trasero en busca de más contacto, quería tener más, mientras sus brazos se aferraban a la espalda musculos del alfa, ahogando los gemidos que salían de su boca.

El ritmo se volvió más frenético, la habitación resonando con sus respiraciones entrecortadas y los sonidos obscenos de sus pieles. Minho, perdido en el placer, sintió cómo el cuerpo de Jisung temblaba debajo de el y supo que estaban a punto de llegar al límite juntos.

El alfa no detuvo sus movimientos, tomó el trasero del omega con fuerza y comenzó a dar fuertes estocadas al omega hasta tener el placer que ambos buscaban. Minho dejó salir su semilla hasta que el nudo comenzó a formarse, besó los carnosos labios del omega brindándole algunas mordidas que los hacía exitar nuevamente.

Jisung y su lobo habían tocado el cielo, todo había sido tan maravilloso, se encontraba feliz y lleno de energía, lo contrario al alfa quien parecía estar perdiendo fuerza al estar sobre su cuerpo sólo apoyando los brazos a su costado.

—¿Cansado Alfa?—Murmuró Jisung entre el salvaje beso—Es mi turno, descansa—Habló con un tono coqueto haciendo sonreír a Minho

Cuando sintieron que el nudo había bajado, Jisung se levantó y dejó al alfa recostado con los brazos detrás de su cabeza.

—¿Qué harás omega?—Jisung volvió a besarlo, el olor a alcohol aún no desaparecía de sus bocas

El omega tomó el miembro de Minho y lo colocó en su entrada bajando con suavidad hasta que todo estuvo dentro de él. Minho miraba cómodamente al omega brincar sobre él con sus manos recorriendo su pecho hasta llegar a sus hombros y sostenerse de ahí.

Su cuerpo es tan maravilloso...

El lobo del Alfa se estaba volviendo loco con cada movimiento que hacía el omega, su rostro demostrando placer lo hacía sentir en las nubes y los gemidos eran un hermoso sonido musical para sus oidos.

Minho no lo pudo aguantar más, estaba a punto de correrse y para volver a hacerlo tomó impulso con sus piernas y ayudó al omega a moverse rápido para llegar al clímax juntos.

Jisung se sentía tan extasiado que cayó sobre el cuerpo del alfa al haber llegado a su nivel máximo, ahora sentía su cuerpo y sus ojos pesados, había tenido una buena noche. Minho tomó el rostro del omega en sus manos y lo besó castamente.

Y nuevamente, el nudo se había formado dejándolos atrapados por algunos minutos. Decidieron pasar aquellos minutos besándose hasta que el nudo por fin había bajado y pudieron tomar una posición para dormir tranquilamente.

La mañana siguiente, la luz del sol se filtraba suavemente a través de las cortinas, bañando la habitación con un resplandor cálido.

Jisung fue el primero en despertar quejándose por el dolor de cabeza. Había bebido mucho que no recordaba haber llegado a su habitación o haberse lavado el rostro.

Al removerse un poco notó el calor de otro cuerpo a su lado y un brazo rodear su cintura. Fue entonces que giró su cuerpo y abrió los ojos lentamente, para su sorpresa, vió a Minho profundamente dormido junto a él.

Sonrio al verlo tan cerca de él, era aún mas guapo de cerca, el cabello despeinado, sus pestañas largas, una nariz tan fina, unos labios carnosos y lindos, recorría su rostro con felicidad hasta que notó que el alfa no traía camisa, sus ojos se agrandaron al darse cuenta que él tampoco traia algo encima, ni su ropa interior. Ambos estaban totalmente desnudos con sus cuerpos entrelazados bajo las sábanas.

¿Qué... qué pasó anoche?. Pensó Jisung con su corazón acelerándose mientras su mente trataba de hacer memoria con los recuerdos de la noche anterior. Recordaba haber estado en el restaurante con todo el equipo, las risas y buenas noticias pero después de eso no recordaba nada.

¿Cómo llegó a esta situación con Minho?.

El alfa, entrando su cuerpo lentamente, abrió los ojos en ese momento. También parecía desorientado, con una mano frotándose la frente mientras trataba de enfocarse en la realidad que lo rodeaba.

Cuando sus ojos se encontraron con los de Jisung, ambos se quedaron congelados, sus expresiones reflejando la misma sorpresa. El omega se levanto sentándose en orilla de la cama y cubrio su cuerpo con la sábana.

—¿Qué... qué hicimos anoche?—Preguntó Minho con voz ronca por el sueño y el desconcierto.

—No lo sé... no lo recuerdo bien—Respondió Jisung con un tartamudeo, sintiendo cómo sus mejillas se sonrojaban

Miró alrededor de la habitación, su ropa y la de Minho se encontraba en el piso, incluso sus telefonos se encontraban en el piso. El omega trataba de encontrar alguna pista que le indicara que no se había entregado al alfa, pero todo apuntaba a lo que ya era evidente.

Ambos se quedaron en silencio, Minho se incorporó un poco, revisando su propio cuerpo antes de mirar al omega otra vez, con una mezcla de sorpresa y confusión.

—Nosotros... ¿Realmente...?—Murmuró Minho todavía sin creerlo.

Jisung asintió lentamente, sin saber qué más decir. Ninguno de los dos podía recordar con claridad, pero el estado de la habitación y de sus cuerpos no dejaba mucho a la imaginación.

Jisung, con el rostro completamente encendido de vergüenza volvió a recostarse y cubrio todo su cuerpo con la sábana.

No podía creer lo que estaba sucediendo.

Su mente seguía enredada en los fragmentos de la noche anterior, pero el calor en sus mejillas y el incómodo silencio entre ambos lo hicieron sentir más vulnerable de lo que había imaginado.

—Yo... lo siento mucho—Murmuró aún estando bajo las sábanas

Minho lo observaba, igualmente desconcertado, pero no pudo evitar notar lo adorable que se veía el omega, completamente avergonzado. Se pasó la mano por el cabello, tratando de calmarse y pensar en qué decir.

—Tranquilo Jisung—Dijo Minho con voz suave, pero notaba cómo Jisung temblaba levemente— Yo tampoco recuerdo mucho, ambos estábamos borrachos y no fue tu culpa.

Jisung, aún más apenado, no pudo evitar morderse el labio nerviosamente. Sentía cómo el peso de la situación lo oprimía y, aunque las palabras de Minho eran tranquilizadoras, no lograba calmarse.

—Pero... pero no debería haber pasado algo así... No entre nosotros—Balbuceó Jisung sin descubrir su rostro

Minho suspiró, sintiendo también la incomodidad, pero no quería que el omega se sintiera tan mal. Se acercó un poco más, colocando su mano suavemente sobre la sábana y dejando al descubierto el rostro de Jisung.

—Escucha, fue un error, algo que sucedió porque no estábamos en nuestros cinco sentidos, además, no hay razón para sentirte mal—Le sonrió

Jisung asintió aún con el rostro sonrojado, aunque su mente seguía abrumada. Aún no podía procesar cómo había llegado a estar en esa situación con Minho.

Ya no iba a tomar ni una sola gota de alcohol por el resto de su vida. Aunque, debía admitir que fue genial despertar con Minho a su lado, pero, ¿Y si hubiera sido alguien más?.

—Yo... me cambiaré primero—Habló Jisung con timidez y se levantó recogiendo su ropa del piso, corrió hacia el baño y se encerró

Minho rió por el tierno correr del omega, dejó caer su cabeza en la almohada y miró al lado de la cama donde estaba el omega. ¿De verdad había tomado a Jisung? No recordaba absolutamente nada y el dolor de cabeza no ayudaba en nada.

Levantó su ropa y comenzó a vestirse antes de que el omega saliera, se veía tan avergonzado que ni siquiera le dirigía la mirada.

Mientras tanto, Jisung lavaba su cabello y su cuerpo cómodamente, había revisado su cuello en el gran espejo del baño, afortunadamente no había ninguna marca lo cual, lo dejaba más tranquilo.

—Jisung ¿Terminaste? Me gustaría hablar contigo—Tocó la puerta levemente y el omega abrió de inmediato

—Terminé—Sonrió sin mirar al alfa a los ojos y salió del baño

Jisung miró la habitación, ya no había ropa ni accesorios tirados, la cama estaba tendida y todo se veía como si no hubiera pasado nada.

—Jisung, lo que pasó anoche fue algo que hicimos inconscientemente, quizá además de haber estado borrachos, nuestros lobos se dejaron llevar y terminamos así

—Tienes razón—Soltó una risa nerviosa—Quizás nuestros lobos tomaron el control—Minho asintió

—No me gustaría que ésto afecte la buena amistad que tenemos, ¿Te parece bien si... lo olvidamos? Como si nada hubiera pasado

—Si—Soltó sin dudarlo ni un poco—Olvidemos que esto pasó y continuemos...—Guardó silencio cuando la puerta de la habitación se abrió

—¿Minho? Ahí estás hombre ¿Jisung, que haces aquí? Creí que estabas en tu habitación, tu manager fue a buscarte—El manager del alfa entró a la habitación recibiendo miradas sorprendidas de ambos—La puerta estaba medio abierta, no la cerraste bien Sung

El corazón de Minho y Jisung latía con fuerza, habían dejado la puerta abierta y no se dieron cuenta. ¿Habrán notado algo extraño anoche? Esperaban que no.

—Llevamos esperándolos por media hora, debemos irnos ahora o el camión se irá sin nosotros—Jisung se daba una palmada mentalmente, viajarían de regreso a Seúl después de terminar las grabaciones y ya era tarde—¡Vamos chicos! El camión no esperará más por nosotros

Hyunjin salió de la habitación informando a los demás que había encontrado a los chicos que les faltaban. Minho tomó lo que había traído y lo guardó rápidamente en su maleta.

Jisung había regresado a su habitación y con rapidez pero con orden comenzó a guardar su ropa y accesorios que había traído, podía imaginar ya el regaño que le daría Chan al no estar en su habitación.

Minho y Jisung salieron de sus habitaciones corriendo hacia el elevador para su encuentro con los demás. Al llegar, Jisung miró a su manager y no lucía nada feliz. Minho caminó con rapidez entregándole su maleta a Hyunjin recibiendo un par de quejas por haber tardado y dejarle a cargo su maleta.

Ambos subieron al camión siendo Jisung el último en subir, todos los asientos estaban llenos y sólo había uno disponible.

Cruzó su mirada con el Alfa y suspiró, tomó asiento junto a Minho evitando hablar con él o dirigirle una mirada. Se sentía extraño desde que despertó, ahora en lugar de sentirse emocionado se sentía nervioso y avergonzado pero su lobo parecía todo lo contrario, estaba feliz y satisfecho.

¡Bienvenidxs a un nuevo capítulo!
¿Qué tal estuvo?

¡Ahora si tenemos detalles!
¿Qué creen que pueda suceder después?
¿Será que Jisung si pueda ver a Minho
como si no hubiera pasado nada?

No olviden votar si les gustó, pueden
dejar un comentario haciéndome
saber que les agradó el capítulo.

¡Gracias por leer!

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