Siguiendo con la declaración de Hyunjin, no quería escuchar a Nick, estaba allí porque mi madre me había obligado a venir, ya que era mi deber. Pero si soy sincera, mis piernas flaqueban al estar allí arriba, al ver tan de cerca a ese maldito que me arrebato a la única persona que podía entenderme perfectamente, a la única persona en este mundo que estuvo para mí siempre que lo necesite.
Ahora que me doy cuenta, necesitaba más a Han de lo que podía demostrarle.

—No quiero alargarme mucho.—Empezó Hyunjin.—Pero dejame decirte que eres un maldito desgraciado. Te creía capaz de muchas más cosas que esa bajeza que cometiste.—Me sorprendió el escuchar a Hyunjin soltar malas palabras e insultar de esa manera a Nick, pero supe que lo merecia.—Me encontraba observando a mi compañera Alexandra y Han...Su mejor amigo que está muerto, por tu culpa.—Me sorprendi al escuchar que el me estaba observando aquel dia.—Mientras intentaba dibujar algo de sus facciones, la alarma de incendios sonó y supe que debía evacuar, me encontraba tranquilo, ya que era rutina, pero al verte ahí, con esa arma y decidido a acabar con todo lo que se te pasase por en frente, supe que debía correr. No pude correr hacia el salón, ya que estabas como un maldito idiota disparando aquella arma como si de sobrevivir se tratase y justo allí vi a Alexandra, totalmente shockeada y sin moverse y supe que debía sacarla de allí como fuese.—Me miró por un segundo y le asentí devolviendo su mirada a Nick, quien se encontraba cabizbajo—Así que la jale del brazo e hice que corriera hacia los baños, encerrandonos en un cubículo por largos cinco minutos, escuchando como destrozabas muchas vidas a tu paso y como hacías de nuestra vida una mierda.—Se detuvo a tomar un poco de aire.—A mi también me arrebataste la esperanza, me lo quitaste todo en un segundo y así seguiste con tu cometido, dejando a tu paso charcos de sangre y desilusiones, sueños rotos y muchísimas más cosas de las que no eres consciente. Te odio como no tienes idea y espero que se haga justicia por Han, por Ale—Temble al escucharlo decirme por mi apodo o diminutivo "Ale"—Y por todas las personas que dejaste al fondo de una noche muerta y una habitación de hospital.

Estalle en llanto.

No podía soportar más aquel dolor que se llamaba: "Cargar con un trauma más" ¿como iba a poder soportar el ver a mis compañeros de aula destrozados? El ver a Nick tan tranquilo solo hizo que mi ira aumentase mucho más y que me hiciese odiarlo cada segundo que pasara, por arrebatarme la tranquilidad, la felicidad, por quitármelo todo.

1 2 3, el reloj avanzaba y con el, el dolor aumentaba. Aquella sala se hacía más oscura y yo iba desfalleciendo cada vez más. Hyunjin me observaba desde el otro lado de la sala, sin poder concentrarse en todas las declaraciones del resto de la escuela, mientras que para mi el tiempo se hacía eterno.

Me levante y salí de aquella sala, no soportaba un segundo más allí dentro, escuchando como el autor de esta masacre hacia todo lo que hacía en la que se suponía que era mi escuela.

Sin darme cuenta, Hyunjin me había seguido hasta donde camine.

—¿Por qué saliste?—Hablo con su típica voz gruesa, que a decir verdad, me gustaba.

—Porque no podía seguir escuchando más. No podía ver a ese gilipollas ahí tan tranquilo sabiendo que me arrebato todo en un segundo.—Murmuré.

—Eres débil.

—Y tu, un cabron. Tira, largate.

—No puedes lidiar de esa manera con el dolor.

—¿Y guardarle tanto odio como tu lo haces? No gracias, Hwang.

—¿Desde cuando me llamas por mi apellido?

—Desde siempre.

—No mientas, Grey.—Hizo que lo mirara a sus ojos, sus tan lindos ojos.

—Y tu no sigas siendo un insensible, borde de mierda.—Lo miré con mis ojos llenos de lágrimas.

—No soy un insensible, solo se guardar mis sentimientos para las personas que lo merecen.

—¿Yo no lo merezco?

—No te conozco de nada.

—Ni yo a ti, niñato. Pero siempre quise hacerlo, Han también quería conocerte.

—No hables conmigo, Ale, no tenemos el mismo trauma.—Solto viéndola fijamente.

—No tenemos el mismo trauma, Hwang. Lo se.

—¿Por qué sigues intentando?

—Porque quiero descubrir que mierda te hizo ser un borde del demonio.

—No ocurrió nada, Alexandra. Soy así desde que tengo memoria.

—Hablemos, Hwang. No tienes que pasar esto solo.—Lo miré suplicante.

—Debes aprender a rendirte cuando la situación lo amerita.

—Después de todo, ¿Quieres que me rinda?

—No me refiero a eso, Alexandra.

—Eres difícil, Hwang Hyunjin.—Lo miré mientras caminaba.—Pero eso te hace más interesante.—Dije mientras me alejaba de él.

—No quería lastimarte.—Murmuró.

—Y créeme que no lo hiciste.—Me encamine hacia la sala, tomé aire y volví a ingresar.

Me sente en el mismo lugar en el que estaba, mientras volvía a sentir aquella opresión en mi pecho. El dolor no había cesado a pesar de intentarlo mil veces.
Los flashbacks de aquel día llenaban mi cabeza mientras aún seguía escuchando los relatos de todas las personas que estuvieron allí, viviendo el mismo infierno que yo viví.
Mi corazón latía con fuerza al escuchar como repetían el nombre de todas las víctimas, entre esas, el nombre de mi mejor amigo.
Aun no puedo superar el hecho de que ya no esta conmigo, de que ya no sentiré su olor, los latidos de su corazón. Ya no más.

Hyunjin regreso a la sala posando su mirada en mi y yo al sentir la penetracion en mi cuello, lo miré. Sentí aquella conexión que siempre he sentido con el, abrí los labios intentando decir algo, pero los volví a cerrar, desviando mi mirada hacia el frente.

¿Que me hiciste, Hwang Hyunjin?

Termino la sesión y rápidamente salí de la sala, en busca del aire que le faltaba a mis pulmones a causa de toda la presión que tenía sobre mi. Hyunjin me siguió hasta el lugar donde me encontraba, estaba preocupado aunque no lo demostrase, yo sabía perfectamente lo que el podía llegar a sentir.

—¿Por qué eres tan complicada, Ale?—Murmuró Hyunjin.

—Ahora la complicada soy yo, Hwang.—Lo miré.

—Eres a la única a la que no he podido descifrar.—Sonrio por lo bajo.

—Pues que bien.—Sonreí sarcasticamente.—Tira Hyunjin, largate de aquí. No somos amigos así que no tienes porque sentir lástima por mi.

—No es lastima, Alexandra.

—Entonces, ¿Empezaste a sentir?—Lo miré con un pequeño brillo de emoción.

—No. Simplemente te comprendo.

—Maldita sea.—Rodee los ojos.—Sigues siendo el mismo borde de mierda.

—Siento no ser quien quieres que sea, Grey. No puedo sentir nada hacia nadie.

—Eres un insensible, no sientes nada por nadie, ni por ti mismo.—Murmuré.

—¿Por qué piensas eso?

—No lo pienso. Lo eres.

—No hagas esto más difícil de lo que ya es, Ale.

—Tu lo haces difícil, Hyunjin.—Lo miré con mis ojos llenos de lágrimas.—Llevo meses intentando ser tu amiga, intentando que me quieras. Pero ya me di cuenta que debo rendirme de una vez por todas.—Limpie mi nariz y camine hacia mi hermana mayor.

—Alexandra...—Murmuró.

-With love, Danna Kim <3