Lucius regresa a Hogwarts con todos los demas estudiantes dejando solos al menor y Abraxas , sentados en el comedor hay dos frascos de pociones vacias al lado de Rigel las ha tomado diligentemente desde que regreso a la mansión luego de estar hospitalizado ha comido lo mejor que puede no acostumbrado a grandes cantidades de comida.

–¿Que tanto hablas con nuestro señor me encuentro intrigado?– inquiere tratando de que el niño le revele el secreto. Abraxas no sabe que tipo de relación lleva con el mayor ¿Amigos con derecho, amantes, novios? Le cuesta demasiado no intervenir , le cuesta demasiado ver a su señor y no pensar en que ese hombre , ese adulto que fue compañero suyo en clases que podria ser el padre de Rigel tambien se encuentre en una relación . Con su hijo menor de edad.

Todavia guarda ese secreto , no desea revelar esa noticia a Orion.

–Oh me encuentro curioso por formar parte de sus caballeros, después de todo en algo puedo ser util.De hecho dijo que vendria en una semana .

Otra vez, piensa Abraxas disgustado y sabe perfectamente que el hombre su amigo no vendra a charlar . Deberia dejar en claro el asunto con el antes de ver avanzar el asunto de ellos dos. Sin embargo se encuentra de conceptos debiles por que...Rigel parece feliz y su señor lo busca , es el adulto quien busca a su hijo.¿No es eso interes?.

–Tenemos cita con el sanador mañana , para que te revisen los pulmones .

–Si. Se– susurra el chico -¿Puedo hacerte una pregunta papá?

–Claro– con un jadeo casi imperceptible responde no acostumbrado a que otro chico le llame papá. Se siente bien honestamente.

–¿Si estas enamorado de mi padre por que no lo traes hacia aca, has preguntado a padre sobre lo que dije tambien?

–Bueno– vacila –Admito que siento cosas por Orion pero no puedo obligarlo a venirse , esta casado y cumple un papel como señor de su casa ademas Orion no desea dejar solo a Regulus. Y sobre lo ultimo Orion tiene una cita con un sanador este fin de semana dijo que estaria ocupado con algo.

–Hm– murmura el joven –¿Te molesta si me uno al señor oscuro?

–Obvio no– hasta la pregunta ofende piensa Abraxas –Todos estamos a su lado si tu también quieres serias muy bienvenido.

–Pero, no te molesta que diran los demas...soy un chico enfermo Abraxas no soy tan fuerte cono parezco y ...antes de morir yo estaba muy mal de salud sigo igual pero con este tratamiento me siento mas lleno de vida que antes.

Abraxas sujeto sus manos sobre el comedor dandole un fuerte apretón

–Los Malfoys somos seres muy orgullosos Rigel, muy seguros de nuestra fortuna, estatus y belleza nos gusta ser el centro de atención nos gusta lo mejor de lo mejor. Tu eres uno de nosotros no solo la sangre Black corre por tus venas todo lo que diga la gente no debe de molestarte por que todos ellos estan debajo de nosotros hijo. Metetelo en la cabeza siempre ponte arriba, ponte de primero que el que desea verte mal nunca bajes la cabeza podrán decir mucho sobre nosotros pero no somos cobardes en palabras vulgares los Malfoys tienen pelotas para responder . Asi que no te menosprecies por que eres amado y cualquier cosa que los demas digan de ti nunca cambiara mis sentimientos siempre sere tu padre muchacho.

Rigel sonrio

–Gracias

No sabe en que momento comenzo a llorar pero supo que Abraxas estaba a su lado de repente abrazandolo.

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Ya paso en plazo de una semana no le preocupa la promesa de Thomas, si no la falta de presencia de su padre Orion no ha regresado desde hace una semana y es preocupante por que el hombre vivia llegando diario prácticamente vivia en la mansión Malfoys asi que es un tanto extraño que no haya aparecido y Rigel sabe que Abraxas esta preocupado aunque no lo muestre ha tenido que ir a trabajar como siempre y cuando regresa espera siempre encontrar a Orion.

–Debes ir a buscarlo– murmura una noche –Ve y búscalo ...por favor.

–No creo que sea bien recibido en la mansión Black. Ni mucho menos que me dejen entrar .

–Puedo hacerlo– Rigel deja su cena olvidada –Soy un Black las protecciones me dejaran pasar y a ti conmigo dejemos la incertidumbre mi padre puede estar en peligro y hemos esperado demasiado tiempo.

–Lo se, tienes razon– Abraxas se abriga y abriga a su hijo saliendo para aparecer Rigel los deja justo enfrente de la mansión –Quedate junto a mi por cualquier cosa.

Todo silencioso y oscura como es le trae recuerdos amargos , sigue a su padre hacia la sala vacia.

–La habitación de ellos es la ultima al pasillo izquierdo.

Abraxas con varita en mano sube ayudándole al menor. A Rigel le causa ternura ya no necesita ayuda, ya no necesita su inhalador pero es dulce la preocupacion del hombre asi como la de su señor dejando su palma en su corazón.

Llegan a la puerta indicada el mayor abre la puerta y justamente Orion esta ...dormido en la cama. Solo.

–Que extraño– Rigel avanza dentro a la par de Abraxas.–¡Padre!– mueve su brazo

Gris y azul se ven alarmados a la falta de vida.

–Orion– abraxas retira la mantas alarmado al ver la mancha de sangre pintadas en las sabanas blancas –Oh dioses– Abraxas sujeta el cuerpo de Orion –¡Orion, Orion!– golpea su mejilla

–Llevalo a san mungo

–Tu..

–Papá llevalo a San Mungo ahora– enfatiza en voz alta –No te preocupes por mi .

Abraxas levita el cuerpo saliendo de la mansión para poder aparecer. Rigel se dirige a su habitación empaca sus libros, ropa y retratos se sienta sobre la cama con desanimo y decepcion se tardaron mucho en venir por ayuda pensando que su padre debia estar lleno de trabajo, cansado y ocupado literalmente desafortunadamente se equivocaron.

Bajo lentamente las escaleras

–¡Kreacher!

–Amo Black– el elfo aparecio en una reverencia hasta el suelo

–¿Donde esta Walburga?

–La ama se fue ayer señor hacia el amo Cygnus escuche decir que el amo Cygnus tomaría el liderazgo Black.

–¿Hace cuanto lleva mi padre en cama y no digas que no sabes, se que lo haces?– ordena , el elfo se mordio los dedos

–Cuatro a tres días se le ordeno a Kreacher no buscar ayuda ni ayudar al amo Black.

–Muy bien , gracias Kreacher, puedes irte.

Rigel salio de la mansión recibiendo el aire fresco de la noche , gélido al igual que su corazon. Rigel se aparecio hacia San Mungo de inmediato.