Capitulo 08


Grace:

Las siguientes tres horas estuvimos hablando de cosas random, hasta que se llegó la hora de acostarse, todos desdoblamos nuestras bolsas de dormir en el piso de la sala y apagamos las luces. Me estiró para agarrar mi celular se la mesa que está en la sala, con cuidado de no despertar a Angel, y reviso la hora dos y cuarenta y cinco de la mañana, me acuesto nuevamente sobre mi bolsa de dormir revisando mis redes sociales, en busca de sueño.

No se a que hora me quede profundamente dormida, pero lo que si se es que el sueño que tuve fue horrible.

✨✨✨✨✨✨✨

Estaba otra vez aquí, en este lugar en frente de la antigua casa de mis abuelos antes de ese horrible y fatídico incendio. Camino a lo que solía ser la cocina, aún queda un poco de la estructura paseo por  las cenizas de la cocina tocando uno de los mesones, y rápidamente los recuerdos llegan a mi.

10 años atrás...

— Grace, te toca— Max suelta la carta.

— Ya va Max, primero quiero ir a la cocina por galletas— le digo soltando las cartas y poniéndolas en el piso— ¿Quieres ir conmigo?.

— No,— menea la cabeza— ve tranquila.

— No veas mis cartas— le suelto una mirada amenazante, antes de irme hacia la cocina.

Cruzó la entrada de la cocina, abro la nevera en busca de mis deliciosas galletas de fresas con chispas de vainilla, pero cuando abro la nevera no las veo, muevo algunas cosas para ver si estan detras de algun paquete de comida pero no, no las encuentro. Busco en las gavetas de abajo pero nada.

— Uhm, si yo fuera mi mami en donde escondería las galletas— me llevo la mano al mentón pensando,— uhm— muevo la cabeza por toda la cocina, hasta que mis ojos se posan en el gabinete que está encima de la cocina— Ahí deben de estar— doy un pequeño brinquito, caminando a esa dirección.

Me pongo al frente de la cocina, y levantó la cabeza al ver que obviamente no puedo alcanzarlas, busco una silla de la mesa que se encuentra en el medio de la cocina y la arrastró hacia donde está el gabinete empotrado. Me subo encima de la silla y aun asi no llego, me monto en la cocina y abro el gabinete y me emociono al ver que allí están agarro el paquete y cierro la puertita del gabinete, intento bajarme de la cocina para volver a la silla; pero mi pie se resbala con miedo de caerme me siento sobre las ornillas y pongo mis pequeños pies sobre la silla, vuelvo a poner la silla en su lugar y le hecho un vistazo a la cocina inspeccionándola viendo que no le hice nada, cuando veo que uno de sus pequeños botones esta un poco hacia la derecha. Lo miro un poco más de cerca, pero veo que no es nada, porque ese botón siempre está en esa dirección cuando mi abuelita cocina, salgo victoriosa de la cocina con mis galletas y me dirigo a donde estoy jugando cartas con mi hermano.

✨✨✨✨✨✨✨

— Creo que buscare agua a la cocina,— Max anuncia parándose de su lugar— ¿Quieres pelusa?.

Yo meneo la cabeza.

— Bueno entonces ahorita vuelvo.

Veo a Max yendo a la cocina cuando se detiene en la entrada.

— ¿Grace?.

Me nombra, captando mi atención.

— ¿Si?.

— ¿Cuando entraste a la cocina no olía raro?— pregunta volteandose para verme.

— Aa—  cantareo meneando la cabeza.

— Okey.

Y lo veo adentrarse a la cocina, en un abrir y cerrar de ojos escuchó una fuerte explosión, me levantó alarmada viendo que viene de la cocina y Max está saliendo de allí con la cara llena de rasguños y su ropa, un poco queman

— ¿Que paso?— le pregunto alarmada.

— No lo se,— tocé— entre a la cocina y encendí la luz y todo empezó a arder en llamas.

— Tenemos que avisarle a los abuelos— le digo corriendo hacia las escaleras para ir a su habitación.

Ya en el segundo piso, me dirigo a su puerta y la toco frenéticamente, a lo que ellos no me abren y entro, al entrar no los veo y salgo al pasillo. Escucho sus voces al otro lado del pasillo a la derecha, corro hacia allí y los veo durmiendo a mi primito de tres años.

— Hola mi niña— me saluda con el bebé en las manos— ¿que ocurre?.

Yo jadeo intentando regular mi respiración— Es, es— mi voz está temblorosa.

— ¿Es que cariño?— mi abuela que estaba sentada en la mecedora, se levanta abrazándome.

— Es la cocina,— hablo— se está quemando.

Al soltar esas palabras veo los ojos de mis abuelos abrirse como plato al escuchar "quemando". Los veo alarmándose, y corriendo por todas partes.

 — Amor busca el extintor, que está en la lavandería— mi abuelo le dice aun con el niño en los brazos.

Mi abuela sale rápidamente del cuarto, en busca del extintor. Mi abuelo y yo salimos del cuarto hacia la sala, me pasa a mi primito; mientras que mi abuela le pasa a el el extintor, nos encontramos con mi hermano y mi abuelo nos dice que salgamos a fuera para que estemos mas seguros, le hacemos caso y todos salimos pero cuando ya estamos a unos cuantos metros de la casa, escuchamos un gran explosión desde dentro de la casa.

— Tom— mi abuela grita desesperada volteando a ver a la casa que ya estaba completamente en llamas.

Max llama a los bomberos dándole la dirección, y en como diez minutos pero ya era muy tarde.

 El bombero se le hacerca a mi abuela— Lo sentimos Sra. Castillo pero su esposo.

En eso mi abuela se desploma en el piso, llorando a mares Max se arrodille a su lado llorando, escucho unos autos estacionarse pero no volteo para ver cuando siento un abrazo.

— ¿Que paso hija?, ¿y tu abuelo?— mi madre me pregunta, viendo la escena.

— El, el— tartamudeo— el ya no está,— le digo y siento como un par de lágrimas ruedan por mis mejillas.

Ella se sorprende, y veo sus ojos cristalizarse y juntas lloramos.

Todo esto pasó, y por tu culpa una voz en mi cabeza me hablar.

✨✨✨✨✨✨✨

Me despierto de un sobresalto, sudando frío. Y con el corazón a mil por hora.

— Grace— una voz adormilada me hablar.— ¿que tienes? estabas gritando— un Angelo somnoliento se sienta a mi la

— No,— me volteo rápidamente a verlo— no me pasa nada— respondo nerviosa.

— Ey,— el se acerca más a mi,— dime enserio— pone su mano sobre mi mejilla— somos mejores amigos, puedes contarme todo.

En ese momento siento que unas lágrimas que no sabia que estaba conteniendo ruedan por mis mejillas.

— Grace, no llores— mi mejor amigo me abraza, y yo le correspondo el abrazo aferrándome a el con fuerza.— Aqui estoy para ti mi pequeña— siento que me besa el cabello— desahogate.

Empiezo a llorar, me desahogo lloro y grito y de repente siento más brazos a mi alrededor pero no le tomo importancia estoy concentrada en llorar y llorar.

Todo eso, pasó y todo por tu culpa, esa horrible voz tenía razón yo era la única culpable de todo.


Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top