A partir de este punto los detalles son mayores ya que los recuerdo mucho más frescos en mi cabeza como si hubiera sucedido ayer, eso sí, también en este punto me dolerá cada vez más porque por un tiempo logré cambiar este dolor a pesar de todo... Espero quién lea estos mensajes grabados, entienda y si no esté aquí, para que sepa, que solo, falle...

Hacía un día muy cálido, el sol se asomaba en las ramas de los árboles dando un gran espectáculo visual, el aire asomaba en todas direcciones y solo se escuchaba las risas de Isacc, Valéry, Mafer, Fátima, Naivy y Erick, yo por otro lado, estaba riendo y limitándo me a estar con Isacc y Valéry.

-Ya casi se van a cumplir dos meses de mis "predisillas" aún espero que nada sea verdad y solo allá cido pesadillas -dije con un claro tono de miedo.

-No te preocupes, Ricardo, todo saldrá bien -me dijo Valéry dándome una amplia sonrisa.

-Y si fuera así tendríamos un plan para que no pase nada malo con nadie, estaremos todos bien -dijo Isacc con un hilo de voz.

Unas horas después cuando todos se abrían ido ya que el cielo tenía un color anaranjado y cambiando poco a poco a azul fuerte y algunas estrellas apareciendo en el cielo, yo me abía quedado sentado con Isacc y Valery quién no se irían a no ser que me fuera con ellos. Y aquí fue donde comenzó la primera víctima, Naivy.

Naivy estaba caminando a una esquina la cual era para esperar su transporte a su casa, ella parecía que estaba distraída en otras cosas en la última vez que la ví, su cabello negro con las puntas rojas sangre le resaltaban mucho y más cuando llevaba prisa y el sol se reflejará en su cabello, ahh como sea, cuando estuvo esperando en esa esquina y esa calle solía ser muy ocupada, pero esa noche estaba desierta y de pronto se le acercó una limusina.

Vio su propio reflejo en el vidrio negro y solo parecía aliviada. La puerta de la limusina se abrió ante ella y una voz serena y calmada le dijo -sus padres la esperan señorita naivy- y en ese momento subió para marcharse a su casa.

Al día siguiente no la vimos en todo el día, cuando estábamos en nuestras casas por la tarde hubo un reportaje el cuál decía que una limusina fue robada con la hija de la segundas familia o la primera, no recuerdo, más poderosa de la ciudad de México, en ella estuvieron: un chófer lobo con traje negro y gris, un gorila guardaespaldas y la hija lona con el cabello negro con puntas rojas, Naivy, como a las 11 de la mañana fue encontrada la limusina estrellada cerca del parque donde se encontraba la entrada para poder llegar al bosque de las afueras de la ciudad. Lo último que se supo era que abía señales de lucha y los cuerpos del chófer y guardaespaldas a unas cuadras alejado del parque. Todos nosotros estuvimos en shock al saber la noticia que Naivy fue secuestrada y que era la hija de la familia más poderosa de la ciudad.

Isacc, Valéry, Mafer y Fátima estaban deprimidos al saber la noticia y más Vannesa quién era con la que más pasaba el tiempo, yo intenté aguantar las lágrimas al saber que una amiga estaba secuestrada o mue... ufff aún no es fácil decirlo. Esa misma tarde el padre de Naivy, Wiliam, fue el mismo a todos los departamentos de policía y fuerzas especiales para que dieran la mayoría de esfuerzos para encontrar a su única hija. Dió un comunicado, a través de las noticias, que quien sepa o ayude a la búsqueda de su hija, tendría un empleo en su empresa y le ayudaría a sus gastos más necesarios por un mes y medio. La madre Margareth, solo pidió a Dios que le ayudarán a que regresara su hija con salud y bienestar, y de su parte lloro en sus rutinas diarias o al menos eso fue lo que estuvieron diciendo los que pasaban en las noticias.

En ese día, sentí que solo era una maldita coincidencia y no tenía nada que ver, pero... esa misma noche entre sueños. Logré ver a Naivy quién estaba vagando sin rumbo a un túnel el cual no tenía luz al final, tenía miedo y la intenté seguir pero parecía que no me movía y solo la veía irse. Desperté a las 3:29 de la madrugada sudando y con lágrimas callendo hasta mi osico y de una forma aún sabiendo que era un mal augurio no podía hacer nada en esos momentos, a la chica que le decía gorda... Ahh escalofríos.

A la mañana les dije a todos que llegarán a nuestra guarida y les expliqué lo que veía en mis sueños con una angustia para morirse.

- ¿Crees que sea algo más que solo un sueño? -me pregunto Valery -seria demaciado curioso que el sueño sea que Naivy podría estar a punto de mo... -pero no logro acabar, se le avía formado un nudo en la garganta y le costaba respirar.

Isacc la abrazo para que no llorara y me volteó a ver con una mirada de dudas -todo lo que viste ¿Fue todo?

-Todo lo que recuerdo, todo al rededor estaba oscuro... Pero recuerdo una risa, que era algo que le divertía demasiado, es difícil de explicar, pero creo que -de repente abía cortado parado y un dolor en el pecho, justo en mi corazón, fue quien me interrumpió y este fue tan fuerte que sentía que perdía la respiración.

-¡¡Ricardo!! -gritaron Valery e Isacc a la vez.

-Estoy bien... No pasa nada -me costo respirar un poco pero logré calmar mi dolor.

- ¿No necesitas descansa un poco? - dijo Isacc con un hilo de voz.
-Si, ve a descansar viejo -contesto Valery con angustia.

-No, solo fue un dolor de no tener su amor - dije en broma y a lo cual Valéry me dió un golpe en la parte de atrás de la cabeza-. Tampoco es para tanto, era solo un chiste malo.

-Pues no lo hagas, esto es tenso para todos -dijo Isacc con voz irritada.

-Perdón, no era mi intención -me arrepentí al decirlo.

La media hora que seguíamos ahí fue solo de intentar desviar el tema pero mientras, yo estaba pensando en que podría paras después, tenía en claro que algo así podría pasar de nuevo o incluso algo peor y de la nada, como si no fuera yo, me dirigi a todos y les dije que tuvieran cuidado ya que podría pasar algo malo siendo accidente o no.

- ¡¡Lo tendremos -dijeron todos como si fueran un coro de una canción.

-Gracias... -abia dicho con un gran alivio en la voz y el dolor en mi corazón disminuyó.

Llegaba la tarde y con muchas nubes grises, los árboles daban una hermosa melodía de paz y quietud, solo pensaba si era adecuado para poder caminar un rato y perderme en el bosque y tal vez, ver una criatura mística, pero por supuesto no lo hize tenía muchas cosas en la cabeza como para buscar en hacer amigos de las criaturas mágicas, pensaba que tenían ya sus propios problemas y yo solo sería otro el cual trataría como si fuera una enfermedad y no los culpo, algunos de nuestra ciudad casi mataba a las pobres criaturas.

Fátima y Mafer se fueron adelantando a una cafetería "cafetería los colmillos" la comida exquisito y sus bebidas eran sacadas del mismísimo cielo, algunos solo decían que era para atraer más gente pero no importan ya que su comida y bebidas eran suficientes como para que medio mundo llegará a su local.

Aún no entiendo cómo es posible que recuerde todo a detalle exato pero supongo que todos los acontecimientos de ese día, y con tener el deseo de perder mis memorias para que no me duela ni el corazón ni mi cabeza, pero todos los lugares que visitaba decían que era imposible, las memorias son una maldita maldición.

Ya todos fuimos a "cafetería los colmillos" y para fortuna de todos, logramos olvidar lo que estaba oscuro hablando pero en ocasiones me dolía la cabeza por pensar en el sueño y no solo eso, cuando veía pasar los coches que algunos frotaban en el aire para ir más rápido y otros que usaban las llantas, sentía que alguien me estaba observando y lo sentía muy cerca, pero sin embargo, mi olfato o mis orejas no detectaron nada y peor cuando era especial.

El chef era un gran amigo mío y de Donovan, era por decirlo así su hermano de otra madre, desde un inicio fue algo brusco al conocerme pero eventualmente me concidera como su hijo y tanto sus hermanos e hijos me consideraron de la familia y al parecer están en el mismo proceso con mis amigos, aunque no sea tan rápido.

- ¿Qué les sirvo esta vez? -dijo una voz encantadora, era la hija mayor Bevely que era de la especie de los zorros y para todos era muy encantadora y con un corazón de oro.

Todos ordenaron lo que se imaginaba Bevely, no era la primera vez que les daba lo que pidieron que eran: algunos tacos de varios tipos, algunos refrescos y algunas pocas ensaladas para equilibrar la alimentación, era curioso, a pesar de saber que seríamos como familia, ser clientes frecuentes, a ver tenido una gran confianza en ellos, aún así siempre me a parecido curioso, y aún hoy en día me reciben muy bien aunque no sea lo mismo sin todos.

Perdone me quiénes estén escuchando esto, soy muy cencible con este tema, aún cuando allá pasado ya más de 60 años, pero en fin continuemos una vez más.

- ¿Quieren algún postre para finalizar? -dijo Beverly pero sin embargo dijimos no con la cabeza -bien, les traeré la cuenta.

Todos aportaron cierta cantidad de dinero para poder pagar lo que habiamos comido y eso que no fue tanta como no lo esperábamos ya que nos quitaron un poco del costo real.

-Espero que les allá gustado la comida, les recomiendo que prueben la especialidad, para la siguiente vez que vengan -dijo Beverly con una gran sonrisa y ginandonos con un ojo, en acto siguiente fue a atender a una pareja de leones que estaban al otro extremo de nosotros.

-Bien y ahora a ¿donde vamos? o ¿qué hacemos? Porque no podemos quedarnos aquí y no podemos ir al parque porque está serrada, ni en el "parque acuático las focas" porque están en remodelación con su nueva atracción -dijo Isacc tomando una postura relajada y con una mirada perdida.

-Al bosque para buscar la casa que no está y poder tener nuestra foto por hallar lo que no tenemos, también pasear por el centro y comprar lo que nos hace falta para nuestro proyecto del concurso que está próximo a venir, o incluso solo ir a una casa de todos nosotros y jugar un videojuego o un juego de mesa o hacer una guerra de almohadas -dije con una expresión de aburrimiento y fatigado.

-Aun no puedo salir, tengo que regresar rápido y terminar lo que me hace falta del quehacer y con suerte poder tener permiso para quedarme en casa de alguien de ustedes -dijo Valéry con una débil sonrisa.

-Le puedo pedir a tus padres que te dejen salir ya que me tienen un gran estima dese la última vez -suguirió Fátima volteando la mirada de Mafer a Valéry.

-Sí, nosotros también podríamos ir y pedirles permiso para que salgas con nosotros y que logremos jugar -continuó Mafer.

-No déjenlo así -dijo Valéry un tanto desanimada de la reacción que tendrían sus padres.

-No -dijimos todos a la vez -somos tus amigos y les preguntaremos a tus padres si puedes salir.

"Del dicho al hecho" aún cuando Valery accedió sus padres no fueron tan fáciles de convencer, tardamos una media hora y eso que no dimos suplicas ante el tema, todo fue tan genial, pasar todo el rato con los amigos, al fin y al cabo nos divertimos en casa de Mafer. Incluso nos quedamos a dormir un error a ver quedado ahí, casi nadie podía dormir por el otro pero aún así se logró.

Mientras tanto en el campamento de Osvaldo:

- ¿Que hacemos con la chica? -dijo un perro guardián al frente de la chica.

-Es la hija de la gente más poderosa, creo que ahí que mandarle un mensaje a su familia para que sepa que tenemos a su hija, se la entregaremos a cambio de sus bienes y así seríamos los más poderosos en toda Latinoamérica -dijo Osvaldo con una mirada de placer y una sonrisa retorcida -pero creo que sería mejor que nos den primero sus recursos y luego deshacernos de ella, así Ricardo aprenderá que no se debe meter con la familia Organza -miro a Naivy quién está estaba llorando del miedo e intentando desamarrarse de los nudos y del bozal.

-Y a donde la dejaremos para que muera o que le aremos señor -dijo el perro guardián.

-Dejemos que nuestro general decida eso, que creo que le encantará poder vengarse de su familia - dijo Osvaldo agarrando a Naivy y observarla con más detalle.

Naivy tenía una mirada de miedo total, estaba respirando aceleradamente y no paraba de llorar, en cambio el perro guardián estaba asustado, no quería hacer lo que le ordenará Osvaldo si se tratara de dañar a Naivy, pero este no lo logro hacer nada por el momento y solo se quedó observando con miedo y con remordimiento.