-"... Sé por qué se le preguntó", -murmuró el mayordomo-.

-"...Sí." TaeHyung dio un pequeño suspiro. "No creo que nadie apreciaría que entrara y saliera de la casa demasiado a menudo. Así que, por favor, haz todo lo que puedas".

-"No se preocupe, mi señor. Me aseguraré de que no haya ningún inconveniente".

-"Confío en ti". TaeHyung dio una última sonrisa y luego cerró la ventana. Tan pronto como el carruaje comenzó a moverse, se apoyó en su asiento y cerró lentamente los ojos.

-"¿Lo llevo al Palacio Imperial, Mi Señor?" -preguntó el conductor del carruaje-.

-"No".

Hoy quería descansar un poco. Había estado cansado últimamente, y ahora que SoGe no estaba por el momento, decidió tomar un pequeño descanso.

-"Vamos a la finca del Marqués Park."

-"Su Majestad, su hermano dice que volverá a casa a la finca Park hoy temprano", -informó Mina-.

-"¿En serio?" -murmuró JiMin-, mirando desconcertado mientras caminaba por un jardín. "Eso es extraño. Normalmente se queda en el palacio hasta la noche."

-"Dijo que estaba cansado y que SoGe no estaba aquí".

JiMin asintió con la cabeza en señal de comprensión.

-"Muy bien. Tae necesita un descanso".

Él mismo estaba dando un necesario paseo por el jardín. El hecho de que la ausencia de SoGe fuera necesaria para que él tuviera paz mental era molesto.

JiMin arrancó una pequeña flor roja.

-"El Emperador debe estar un poco aburrido hoy."

-"No creo que tenga la oportunidad. Está muy ocupado estos días", -dijo Mirya-.

-"Está ocupado todo el tiempo, pero aun así tuvo tiempo para SoGe", -respondió cínicamente JiMin-.

Continuó su paseo, y encontró su parte favorita del jardín. Cuando sus ojos se posaron en otra persona allí, suspiró y se dio la vuelta. Era profundamente afortunado.

Fue Mina quien habló.

-"Ah, ¿no es ese Su Majestad?"

Mirya parecía avergonzada por la falta de tacto de Mina para con JiMin, pero él respondió en un tono casual.

-"Así es".

Mina tarareó con interés mientras observaba a YoonGi desde lejos.

-"Oh, eso es un poco extraño."

-"¿Qué pasa?"

-"Su Majestad". Mina se volvió hacia Mirya. "¿No crees que no se ve bien?"

-"¿Qué quieres decir?"

-"Su tez. De alguna manera se ve mal".

Las palabras de Mina despertaron la curiosidad de JiMin, y miró a YoonGi. YoonGi se quedó quieto, mirando las flores en plena floración. Su cara se veía enfermiza, tal como Mina lo había notado.

JiMin lo miró fijamente durante un corto tiempo, y pronto sacudió la cabeza.

-"Vámonos".

No era alguien en el que él debería estar interesado de todos modos.

JiMin se alejó.

***

JiMin se fue a la cama un poco antes de lo habitual. Normalmente lo hacía debido a la tensión del trabajo, pero hoy había completado la mayoría de sus tareas. Cerró los ojos y dejó que su pesado cuerpo se hundiera en la cama.

No era insomne, pero no había podido tener un sueño reparador desde que se convirtió en regente. El estrés excesivo también lo desgastó desde que entró en el palacio.

Los párpados de JiMin cayeron lentamente por el agotamiento, pero luego se abrieron de repente. Pateó su colcha con una mirada nerviosa y se sentó en la cama.

-"¿Qué es ese sonido?" -murmuró-. Un ruido siguió molestando sus oídos. Llamó a Mirya, y la dama de compañía entró corriendo en la habitación.

-"¿Sí, Su Majestad? ¿Qué sucede?"

-"¿Tú también lo oyes?"

-"¿Qué? ¿Qué quieres decir?"

Mirya agitó la cabeza confundida.

-"Ese sonido. ¿No lo oyes? ¿Sólo está en mis oídos?" -dijo JiMin cansado-.

-"No escucho nada, Su Majestad. ¿Lo has oído mal?"

-"No, Mirya. No te llamaría en medio de la noche si ese fuera realmente el caso. Quédate callada y escucha".

Mirya cerró la boca y se concentró en escuchar. Ahora que lo pensaba, probablemente había escuchado algo, pero era un sonido muy débil. Le impresionó que JiMin pudiera detectarlo.

-"Lo oigo, Su Majestad, pero apenas. ¿Le molesta?"

-"Lo siento, Mirya, pero estoy un poco sensible. Me despierto fácilmente con los pequeños sonidos."

-"No hay necesidad de lamentarlo. ¿Cómo puede alguien no entender cuando has estado bajo tanta presión estos días? Averiguaré lo que está pasando".

Ahora que JiMin se había despertado, le resultaba imposible volver a dormir. Su frente se arrugó en un momento de pensamiento, entonces se levantó y se puso un chal sobre su camisón de seda color perla. Mirya lo miró inquisitivamente y JiMin le explicó.

-"Ya estoy despierto, así que creo que será mejor que salga yo mismo. Me pregunto quién puede hacer este sonido en el palacio a altas horas de la noche".

-"¿Estarás bien? Lo que importa es tu seguridad..."

-"Hay guardias. ¿Puedes conseguirme una lámpara?"

-"Sí, Su Majestad. Por favor, espere un momento".

Mirya pronto le trajo una lámpara. JiMin la sostuvo en alto con una expresión apagada, y salió de la habitación, trayendo sólo a Mirya y a Mina con él.

JiMin comenzó a caminar por el pasillo con pasos parejos. ¿Quién crearía un disturbio en el palacio a esta hora?

-"..."

Se concentró en el sonido, y los tres no dijeron una palabra mientras caminaban por el oscuro edificio. El sonido venía claramente del palacio del rey. ¿Era una de las criadas?

JiMin continuó su búsqueda con un esfuerzo concentrado. El palacio del rey era grande, y llevaría mucho tiempo recorrerlo en círculos. Sin embargo, él simplemente siguió el sonido, y no tardó mucho en hacerse más fuerte.

Era de alguien sollozando. ¿Qué demonios? No podía decir si el llanto provenía de un hombre o una mujer, pero sonaba como si estuviera en una profunda desesperación.

-"Su Majestad".

Una voz sonó, y JiMin giró la cabeza. Una anciana se precipitó hacia ellos. Las cejas de JiMin se levantaron cuando la reconoció.

-"... ¿No eres una criada del palacio central?"

La mujer los alcanzó, casi doblándose para recuperar el aliento.

-"¿Adónde... adónde va?", -jadeó-.

-"No tengo que informarte a dónde voy", -dijo JiMin fríamente-, y la mujer se estremeció. De repente, sintiéndose apenado, JiMin decidió responderle. "Estaba tratando de dormir y escuché un sonido extraño. ¿Por qué lo preguntas?"

-"Yo—" La mujer se mordió el labio. "No tienes que salir. No es necesario".

-"¿Qué quieres decir?"

-"Bueno, eso es... ¿no puedes dejar que una de las criadas lo haga?"

-"Por supuesto, pero esta es mi decisión. No tienes derecho a cuestionarla".

-"No puedes pasar..."

La mujer no pudo terminar de hablar y cerró los ojos. JiMin levantó una ceja. La mujer se comportaba de forma extraña. Era como si estuviera aquí para bloquearlo.

-"Más importante aún, ¿por qué está aquí una criada del palacio central?" -preguntó JiMin-. "¿Te envió Su Majestad?"

-"Eso... es..."

-"¿Por qué no puedes responder? Si no es Su Majestad, entonces quién es..."

En ese momento, JiMin dejó de hablar. El sonido era más fuerte que antes. Miró a la mujer temblando ante ella y volvió a hablar.

-"¿Tienes algo más que decirme?"

-"Su Majestad, no tiene que ir allí..."

-"Si no es importante, dímelo después. Ahora estoy ocupado." JiMin giró el talón. Podía sentir a la criada moviéndose detrás de ella, y sabía que la mujer estaba allí para detenerlo.

¿Pero por qué? ¿Había algo peligroso en el palacio del rey? ¿Algo aquí que no se le permitió ver?

De cualquier manera, JiMin tenía que saberlo. Él se apresuró, y el sonido se hizo más fuerte.

El reconocimiento pasó por su mente, y sus pasos se detuvieron repentinamente. No puede ser... no puede ser...

-"...Mirya, Mina," -dijo-, y dos voces respondieron.

-"Sí, Su Majestad."

-"Por favor, habla".

La voz de JiMin era firme.

-"Ustedes dos esperen aquí."

Los ojos de Mirya y Mina se abrieron de par en par en shock.

-"¡Su Majestad...!"

-"¿Vas solo? Su Majestad, podría ser peligroso."

Si la suposición de JiMin era correcta, entonces no era peligroso. Sin embargo, su voz temblaba mientras hablaba.

-"Es una orden. Esperen aquí. No... no se preocupen. No va a pasar nada".

-"..."

Ninguna de las dos parecía querer seguir esas órdenes, pero no podían desobedecer. JiMin no les daba órdenes directas muy a menudo, pero lo seguían sin que él tuviera que usar esas palabras. Para que él lo diga... debe ser serio. Mirya y Mina dejaron de caminar.

-"... No las haré esperar," -dijo JiMin-.

Se alejó rápidamente, y Mina y Mirya miraron fijamente a su figura en retirada. ¿En qué demonios estaba pensando?

Volví gente, me volví a lesionar, de nuevo, lamento la demora, estuve trabajando en esto desde hace un mes, pero estaba tan ocupada q ni tiempo me dio, lo siento

🍏Jae