Uno de los aspectos más positivos de ser rey para JiMin era que tenía entrada libre a la Biblioteca Imperial. Su marido tenía poco interés y tiempo para él, y hasta ahora, la Duquesa Ephreney había estado manejando la mayoría de los asuntos de la Casa Imperial. JiMin abandonó el palacio central con el pretexto de querer disfrutar del clima soleado.

La biblioteca estaba en silencio cuando entró, y se preguntó si la bibliotecaria había ido al baño. JiMin se movió lentamente a lo largo de las filas de estantes, pensando que habría trabajado como bibliotecario si no se hubiera convertido en rey.

Como de costumbre, JiMin se dirigió a la sección de historia. Tuvo un encuentro con SoGe en este lugar hace unos tres meses, y el recuerdo de ello oscureció su humor. Maldita sea, JiMin maldijo por dentro, pero luego sacudió la cabeza para apartar esos pensamientos. Sólo porque el encuentro había ocurrido aquí, no significaba que dejaría que su recuerdo manchara el lugar.

Con un leve ceño fruncido, se puso de puntillas y sacó un delgado libro de tapa dura de un estante. Se apoyó en la estantería y abrió el libro, sólo para descubrir que una de las páginas estaba arrancada. Hubo un sonido cerca de la entrada de la biblioteca, lo que probablemente significaba que la bibliotecaria había regresado. JiMin se dio la vuelta y abrió la boca para hablar con la bibliotecaria, pero se encontró cara a cara con otra persona. El rostro de JiMin se endureció.

Era SoGe.

JiMin rápidamente puso una expresión más seria. No fue tan tonto como para dejar que SoGe lo sorprendiera viéndose infeliz.

"... No te he visto antes." -dijo JiMin-

SoGe se acercó a él con una brillante sonrisa.

-"Oh, debes haber olvidado mi cara."

-"Ah." JiMin fingió ignorancia. "Pensé que eras la sirvienta de alguien."

-"..."

La molestia se reflejó en la cara de SoGe, pero rápidamente la reprimió de nuevo. Era buena en el manejo de sus expresiones faciales. JiMin sonrió como si no hubiera visto el cambio.

-"Fuiste el candidato a rey que se convirtió en rey".

-"Sí, tuve suerte."

Sí, qué suerte la suya. Deseaba haber tenido más mala suerte. Sin embargo, no podía decirlo delante de la concubina del Emperador.

-"¿Quién es usted?" -preguntó JiMin-

-"¿Yo?"

-"Sí, usted. ¿Eres la madre del Emperador?"

SoGe se sonrojó de furia, mientras JiMin soltaba una risa que parecía inocente. Lo único que SoGe consideraba una desventaja era que era mayor que el Emperador. Los bordes de su boca se apretaron al reconocerlo, pero JiMin la miró con indiferencia.

-"El Emperador es el único que puede sostener su cabeza tan rígidamente ante el Rey del Imperio." -dijo JiMin- "Y su madre. Tú no eres el Emperador, así que sólo puedo asumir que debes ser su madre."

JiMin miró fijamente a SoGe sin pestañear. Sin embargo, el cuello de SoGe se mantuvo obstinadamente recto. Incluso delante del Rey, la concubina se negó arrogantemente a humillarse. JiMin casi se mordió el labio, pero no podía permitirse parecer débil delante de SoGe.

-"Entonces, ¿quién eres?" -volvió a preguntar JiMin-

-"..."

-"Habla. Por lo que llevas puesto, no creo que seas sólo una criada. ¿Eres una dama de compañía del Palacio Central?"

SoGe no pertenecía allí todavía, no hasta que JiMin dio su aprobación oficial. Bajo tales circunstancias, SoGe no era tan tonta como para llamarse a sí misma la concubina del Emperador. JiMin se puso curioso sobre cómo respondería SoGe.

-"Me presentaré formalmente a usted pronto, Su Majestad." -dijo SoGe- "Hasta entonces..."

-"¿Qué tan pronto es 'pronto'? ¿Hay alguna razón por la que no puedas responder ahora?"

-"..."

Una extraña expresión cruzó el rostro de SoGe. Parecía estar en algún lugar entre nada y una sonrisa.

JiMin presionó un poco más fuerte, sintiéndose ofendido por la mirada.

-"No era mi preocupación cuando no dirigía la Casa Imperial antes, pero las cosas son diferentes ahora. No estoy seguro de lo que pasará si no te identificas. Así que te ordeno que hables." JiMin miró fijamente a SoGe. "¿Quién es usted?"

-"... Saludos. Soy SoGe Mary la So, del Barón Darrow".

-"¿Por qué la hija del barón Darrow está vagando por el palacio? Si no me equivoco, el barón está en su casa ahora, ¿no es así?"

-"Tiene razón".

-"Eso no explica por qué estás aquí cuando él no está."

-"Eso es..."

SoGe vaciló debido a la mirada de JiMin. Se sacudió la cabeza sobre qué decir, cuando una voz diferente se oyó de repente.

-"Eso puede explicarse." -dijo una voz familiar- Una voz que JiMin no quería oír ahora. Sus ojos se abrieron de par en par.

El Emperador estaba caminando por la entrada de la biblioteca y el rostro de SoGe se iluminó.

Mientras tanto, todos los músculos del cuerpo de JiMin se endurecieron.

-"... Su Majestad."

-"No te lo expliqué en su momento. Es por eso que este... desafortunado incidente ocurrió."

-"Desafortunado incidente".

JiMin repitió la palabra con incredulidad. ¿Fue malo que él y SoGe se encontraran? ¿Fue tan lamentable para él?

JiMin se mordió el labio, rompiendo su promesa de no revelar su debilidad. Si no lo hubiera hecho, no sabía qué más haría en este momento. JiMin se rio en su interior de sí mismo. Juró vivir tranquilamente y no revelar sus sentimientos, pero cualquier contacto con SoGe interrumpía su tranquila piscina de pensamientos.

No era de extrañar que TaeTae hubiera cambiado. ¿Cómo podría alguien tolerar esto repetidamente durante tres años?

-"La presentaré." -dijo finalmente YoonGi- "Esta es la señorita SoGe de la familia del Barón Darrow, y será honrada con el título de baronesa, como os he dicho. Su dama de compañía podría haberle dicho que lleva un año en el palacio, pero supongo que nadie lo ha mencionado."

JiMin se preguntaba seriamente de dónde venía la arrogancia del Emperador. ¿Cómo podía presentar a su concubina delante de un funcionario del gobierno así sin volverse loco? Incluso si podía hacer lo que quería, tenía que tener al menos algo de cortesía.

JiMin, sin embargo, luego cambió de opinión. No debía esperar nada de este hombre desde el principio, y se cansaba de hacerlo. Sonrió amargamente, pensando que sería más fácil rendirse.

-"No hay razón para que mi dama de compañía me hable de una concubina que no ha sido reconocida durante un año."

-"... Entonces tendrás que reconocerla de ahora en adelante, ¿no lo crees?"

-"Tengo que hacerlo, me guste o no. Incluso será una baronesa".

JiMin dejó el libro que sostenía en el escritorio de la bibliotecaria. Había venido a la biblioteca para levantarse el ánimo, pero ahora pensó que debía dejar de visitarla por un tiempo. Sólo necesitaba pensar y dormir un rato. Esta vez, no sólo había un montón de basura delante de él, sino dos. Si se metía en ella, sólo lo dañaría más.

-"Su Majestad, no es bueno para su imagen ser visto con una concubina a plena luz del día, así que mejor quédese aquí si no quiere que sus subordinados hablen de usted."

JiMin se dio vuelta y dejó la biblioteca sin decir una palabra más. Lo mejor para su salud mental era sacarlos de su vista lo antes posible. No ocultó su disgusto mientras sus zapatos resonaban agresivamente en el suelo de mármol. Si no expresaba su ira de alguna manera, rompería su primera promesa.

Finalmente, SoGe Mary la Darrow se convirtió en la Baronesa SoGe Mary la So. A través de sus súplicas, YoonGi hizo que la alojaran en un palacio más grande. Esto ocurrió sólo un día después de que el Rey JiMin le diera permiso, que concedió sin decir mucho. Eso no significaba que SoGe se arrodillara de agradecimiento por él.

-"Felicitaciones por su ascenso, Baronesa." -dijo la dama de compañía de SoGe, Glara-

SoGe sonrió.

-"Aún es muy pronto para abrir el champán."

Baronesa era todavía una posición demasiado pequeña para ella. ¿No debería ser reina? Sonrió fríamente y murmuró para sí misma.

-"El Rey es muy joven."

SoGe se acercó lentamente a su cama con una expresión engreída y cayó en el suave colchón. Barrió la palma de su mano apreciando las frías sábanas.

-"Mi plan comienza ahora." De baronesa, a duquesa, a reina, a reina madre...

Mientras le daba vueltas a su plan en su cabeza con calma, soltó una risa. SoGe no era una tonta, podía lidiar con ese joven rey. No importaba que ese chico hubiera obtenido esa posición, no sabría cómo luchar en el barro. Un joven que creció en una familia armoniosa y amorosa nunca podría ser fuerte. Nunca podría derrotar a un monstruo.

La boca de SoGe se movió hacia arriba, y se volvió hacia Glara.

-"¿Algún movimiento en el lado del rey?"

No esperaba que pasara nada todavía, pero aún así todo estaba demasiado tranquilo.
Aunque SoGe estaba bajo la protección del Emperador como su concubina, todavía tenía que tomar la iniciativa para defenderse.

-"No ha habido ningún movimiento todavía, mi señora. Tal vez esté asustado y temblando."

-"Aun así, no puedo bajar la guardia. Sigue siendo el hijo de un marqués después de todo. Puede que haya muchos nobles que me ataquen por mi origen."

SoGe lo tenía todo: el favor del Emperador, gran inteligencia, un rostro hermoso y una personalidad encantadora. Todo estaba en su lugar, excepto por un componente que estaba fuera de su control: sus antecedentes.

"Se puede resolver si das a luz a un príncipe." -dijo Glara- "El actual Rey es estéril, y Su Majestad preferiría una línea de sucesión directa. Si el Rey tiene un problema con otro niño, puede ser usado como una excusa para abolirlo y hacerte reina en su lugar."

SoGe asintió y sonrió alegremente. Desde el principio, había planeado cambiar la tercera prueba por un examen de salud. La prueba nunca se había hecho antes, pero era plausible, así que los nobles no la desafiaron. ¿Quién se atrevería a ignorar la intención de tener un consorte sano y un compañero fuerte?

SoGe dio un ladrido de risa.

-"¡No tengas hijos con la concubina, ja! Si él no tiene hijos, entonces el Emperador tendrá que hacer un sucesor con otra persona. El sueño de la infertilidad es grande."

Fue por eso que JiMin fue seleccionada como rey, venciendo incluso a Lady SuJi. El examen de salud era una excusa para juzgar la fertilidad o la falta de ella.

Desafortunadamente, Lady SuJi era muy fértil. JiMin, en cambio, era la elección perfecta, y su línea familiar terminaría con él.

SoGe se volvió hacia Glara.

-"¿Garantizaste la cooperación del médico de la corte?"

Glara asintió.

-"No se preocupe. No ha dicho nada, y probablemente mantendrá la boca cerrada si no quiere morir."

-"Si hace algún movimiento extraño, elimínalo. No, no importa. Sólo mátalo de todos modos después de unos días."

Había demasiadas vulnerabilidades como para dejarlas en paz. Si el plan se filtraba, el Rey JiMin podría ser reemplazado por Lady SuJi, y la posibilidad de un regreso convergería en cero. No había forma de que SoGe pudiera superar a la hija de un duque que tenía una excelente fertilidad. El uso de métodos solapados requería un toque de atención.

-"Parecerá sospechoso si los matas ahora mismo, ¿entiendes?"

-"Lo entiendo, mi señora."

SoGe relajó sus hombros y tarareó mientras tomaba un frasco de perfume del tocador y se rociaba. YoonGi vendría pronto.