Cada cierto tiempo aparecen jóvenes con un poder desbordante, con una habilidad insuperable o con una comprensión sobre el maná que ninguna otra persona puede igualar en cien o en mil años. Yuno, del Amanecer Dorado era un ejemplo de lo que algunos jóvenes habían logrado con esas habilidades o poderes desbordantes. El actual Rey Mago era otro ejemplo de lo que eran los genios que aparecían cada cierto tiempo, teniendo un poder capaz de controlar el tiempo.

Este tipo de magos eran capaces de llegar a ostentar los cargos más altos dentro de las ordenes de caballeros y eran reconocidos como héroes. Por eso el capitán del Amanecer Dorado no dejó pasar la aparición de Yuno y por eso Julius ascendió al puesto que ocupaba actualmente como Rey Mago dentro del Reino del Trébol, siendo el mago más poderoso de todos los que estaban dentro del reino.

Pero algunos genios son reconocidos solamente por otros genios.

Naruto, un simple huérfano sin hogar, un arma humana capaz de matar a cualquier persona con un simple palillo era uno de estos genios que fue reconocido por el propio Rey Mago. Tenía poder, tenía habilidad y comprendía el maná de una manera que el propio Julius no había visto hacer a nadie. Era debido a eso último que Naruto contaba con hechizos de cualquier distancia, de cualquier tipo y que podía deshacerlos como si solamente fueran un pequeño rompecabezas para él.

Un genio superior a otros genios. Un genio que solo aparecía cada mil años.

Naruto tenía poder, pero no era tan abrumador como el de Julius y algunos lo vieron como un poder más delicado, más fluido. Tenía habilidad, pero no una habilidad capaz de suplir la experiencia. Como un joven que era, cumplimentaba ambas para poder superar a sus adversarios con la mayor rapidez que podía.

Y tenía comprensión sobre el maná, aunque él lo había conocido como chakra cuando era apenas un infante. Y en su pueblo todos los niños fueron educados para comprender el chakra y usarlo desde que entraban a la academia militar, un nombre demasiado inocente para lo que fue en realidad.

Los jóvenes ninjas fueron entrenados con armas, guiados para ser expertos en su uso. Era extraño que los magos usaran algún arma a menos no fuera convocada por su grimorio o su propia magia. Y esta cualidad estaba presente en Naruto y Yami. El más joven fue entrenado en el uso y la historia de cada una de ellas y el mayor aprendió su uso en su propio hogar antes de naufragar en las costas del Reino del Trébol.

Ambos eran magos extranjeros de una forma u otra y ambos eran usuarios de magia sobre armas. Por ello Yami y Naruto se conocían también, se llevaban bien.

―*Bostezo* Esto no estaba en los planes. Que un Caballero Mágico de tal nivel simplemente sea un segundón... ¿Dónde están los datos de este chico?

Rhya de la Traición estaba desconcertado. Habían conocido la habilidad de anti-magia de parte del chico sin maná y sabían los estándares de fuerza que un capitán de orden tenía. Era por esos datos que habían lanzado el ataque contra la Capital Real. ¿Por qué un simple vicecapitán de orden los estaba presionando? Vetto seguía vivo y sin heridas; pero el chico lo había derribado completamente con un hechizo extraño y ahora había partido en dos la zona de la batalla.

―Lo odio. Lo mataré por insultar a Licht.

Fana del Odio dejó que todos vieran porque su sobrenombre. Cada una de sus palabras y frases, iba ligada al odio que sentía por las personas que estaban en contra de sus propios compañeros y su líder, a quien llegaba a amar demasiado.

―Para eso antes debemos terminar con este mocoso humanos―Vetto había salido de los escombros sin herida alguna. A pesar del extraño hechizo, el miembro del Tercer Ojo había usado un hechizo para protegerse del daño que el Rasengan podría haberle causado―. ¡Voy a hacerlo desesperar!

―Desesperación, odio y traición. Son la contraparte de la esperanza, el amor y la sinceridad. Pero creo que vosotros, Ojo de la Noche Blanca, habéis olvidado algo―el brillo sobre el grimorio de Naruto se desvaneció, permitiendo así que los enemigos observaran las cuatro hojas en él―. La suerte es el cuarto elemento de nuestro trébol, del Reino del Trébol. Si queréis vencernos, ¡tendréis que superar lo que los Caballeros Mágicos somos!

El maná se arremolinó alrededor del vicecapitán del Ciervo Aguamarino. No había rasguño alguno sobre su ropaje ni signo alguno de cansancio o falta de maná en el muchacho. Estaba como si recién hubiera aparecido en el campo de batalla, como si no hubiera estado peleando contra los tres miembros del Tercer Ojo del Ojo de la Noche Blanca, lo que era extraño para sus adversarios y compañeros.

―Ni siquiera ese hechizo ha resultado, humano―Vetto golpeó su abdomen―. ¡No has superado la defensa de alguien bendecido por el maná!

―Je―Naruto cerró los dedos de forma firme sobre el mango de su espada―. Tu estilo de lucha consiste en usar tu desbordante maná como una defensa o como una ofensiva total. ¡Es maravilloso en diversos aspectos! Sin embargo―un crujido llamó la atención de los tres combatientes. La sangre inundó la boca de Vetto cuando fragmentos de maná aparecieron y cayó sobre sus rodillas, regando un charco de su propia sangre sobre el suelo―; mi magia no solamente daña. Rasengan daña hasta un punto celular que supera casi cualquier armadura. Supera, por supuesto, las armaduras sólidas generadas por maná y, tras traspasarla, golpea a mi enemigo con todo el poder hasta quemar sus células. ¿Increíble verdad?

―Explicar tu técnica, diría que es de idiotas.

―¿Seguro, señor Odio? Por más que explique mi hechizo, el resultado siempre será el mismo. Generalmente termina con mi enemigo muerto, pero veo que el hombre perro llamado Desesperación ha sabido sobreponerse a algo que lo mataría sin duda alguna.

Ninguna de las palabras fueron mentira; pero la restricción de la información fue elevada. Naruto no contó todo sobre su técnica insignia ni dio explicaciones de más, pues no era precisamente una técnica con maná solamente. El usuario debía tener un control descomunal y tener la suficiente vitalidad para realizarlo, lo que una vez en su pueblo llamaron energía física, la mitad que completaba el chakra.

―Tu eres un pequeño bastardo. ¡VOY A LOGRAR TU DESESPERACIÓN A TRAVES DEL DOLOR!

Sin un pensamiento razonable, Vetto salió disparado hacia Naruto invocando las Garras de Oso y con la intención de destripar a su enemigo, algo que el vicecapitán observó al sentir la urgencia en la voz del hombre bestia.

―Incluso tu mente es más animal que humana.

El primer golpe falló. El segundo pasó por encima de la cabeza del Caballero Mágico cortando solamente aire, lo que le dio a Naruto un gruñido del lado de Vetto.

―¡Humano!

Naruto saltó hacia atrás ganando espacio entre él y su adversario. Justo detrás del Uzumaki, Rhya hizo su aparición lanzando un corte de oscuridad encontrando solamente una imagen residual.

―¿Oh?

―Con el uso del viento―detrás de Rhya, la figura del vicecapitán hizo acto de presencia―; puedo doblar el mismo aire y ocasionar reflejos dados por la luz y el agua. ¡Un simple espejismo!

Ambas espadas chocaron.

―Magia Espiritual de Fuego―al lado derecho de Naruto, Fana del Odio apareció junto a su espíritu―. Garra de Salamandra.

Una enorme garra de fuego generada mágicamente cayó sobre Naruto envolviendo una zona del campo completamente en llamas ocultando el cuerpo del vicecapitán de la vista de Rhya y liberando a este de su presión.

―Ay, ay. Que me caigo.

Trastabillando, Naruto apareció alejado de la zona golpeada por el hechizo de Fana, demostrando su velocidad y percepción a pesar de no tener el don de la visión.

―*Bostezo* ¿Cómo alguien ciego puede siquiera moverse así de bien?

―No lo habéis pillado―desde su posición sentado contra una enorme roca, Yami expulsó una enorme nube de humo que ascendió hacia el hueco de la cueva―. Él solamente usa el Ki para moverse. Os siente, tanto el maná como al Ki y se mueve como en una danza.

A lo largo de la historia del Reino del Trébol y las ordenes de Caballeros Mágicos, nunca se había mencionado un mago completamente ciego. Ver uno en acción, que se moviera por instinto y su percepción, era maravilloso a la vez que espeluznante.

―¿En eso debo fijamente, capitán Yami?

―Exacto, mocoso. Debes observar lo que hace, como lo hace, como se mueve. El chico lleva años haciendo uso del Ki y el maná para conseguir su estilo de lucha.

El cuerpo de Naruto se movía solo. Sus músculos reaccionaban a años de entrenamientos, a años de preparación en distintos campos físicos. Sin el don de la visión, el vicecapitán repelió los ataques conjuntos de Rhya y Vetto mientras Fana intentaba calcinarlo desde la distancia.

―¡Humano!

―...

Naruto bloqueó el brazo derecho de Vetto con su espada, lo que le hizo perder el arma y fue empujado por el izquierdo, siendo estrellado contra el suelo.

―¡Sin esa espada...!

Las palabras murieron en la boca de Vetto. Usando una fuerza sobrehumana, traspasando la defensa del maná de Vetto de la Desesperación, Naruto aplicó un directo contra el rostro de su enemigo, enviando a este a volar hacia atrás.

―Un guerrero que se precie, un luchador que amen la batalla no depende de un arma o la magia―siguiendo su instinto, Naruto apartó el rostro y evadió la hoja de la espada de Rhya―. ¡Simplemente pelea hasta el punto en el que no puede más!

Rhya abrió los ojos cuando los brazos de Naruto se enredaron en su extremidad. Siendo movido de su puesto, sintió como su espalda chocaba con el suelo ante el movimiento de llave por parte de su adversario, sintiendo a su vez su boca llena de sangre.

El fuego golpeó la espalda de Naruto. El vicecapitán movió el brazo y guio el viento para cortar el fuego que intentaba quemarlo.

―Te odio.

―El control del viento me permite eliminar cualquier llama. El fuego se alimenta de oxígeno y puedo hacer desaparecer eso con un par de hechizos complejos.

Un pestañeo.

Fana sintió como el aire comenzó a desaparecer, como le costaba mucho más respirar ante la ausencia de oxígeno. En tres minutos se encontró de rodillas, luchando por respirar, con las lágrimas desbordando por la comisura de sus ojos.

―El control del viento, da un control del aire completo. Eliminar el oxígeno y matar a alguien es demasiado sencillo para los magos que podemos tener este "control" del área.

El sonido de ahogo desapareció y un su lugar un suspiro de alivio ocupó el lugar de los agónicos gemidos de la bruja.

―Tienes un control excesivamente bueno, chico. ¿Cuál es tu nombre?

Envuelto en las llamas regenerativas de Fana, Licht habló directamente con el vicecapitán del Ciervo Aguamarino intrigado por la habilidad que el joven estaba demostrando. Ni siquiera él cuando fue un elfo pudo tener tal control sobre el maná.

―Naruto Uzumaki, vicecapitán del Ciervo Aguamarino.

Por una fracción de segundo, los ojos del líder del Ojo de la Noche Blanca se abrieron de más, reflejando un sentimiento de sorpresa e intriga ante aquel nombre.

―Deberías servir a una mejor causa, Naruto―cambiando completamente de actitud, Licht intentó convencer al caballero sobre sus lealtades―. Un don así no debería estar al servicio del Reino del Trébol.

―Un don así no debería estar al servicio de nadie, realmente―Naruto respondió―. Soy un Caballero Mágico miembro del Ciervo Aguamarino. Con mi juramente de lealtad, sirvo al Rey Mago y al Reino del Trébol en cualquier conflicto, contra cualquier enemigo, así tenga que dar mi vida para ello.

―Diría que me sorprende esa disposición cuando sabes que podemos eliminarte; pero tu familia nunca ha roto un juramente―suspirando, Licht entendió que no podría usar al chico de aliado―. Tendremos que eliminarte entonces. ¡No debemos permitir que crezcas completamente, muchacho!

―¿Oh?

Una lluvia de espadas de luz cayó sobre el joven. Naruto, haciendo uso de magia de viento se desplazó evadiendo el ataque del usuario de Magia de Imitación, desviando algunos de los ataques con un campo de viento a su alrededor.

―*Bostezo* Si Licht dice que no dejemos que vivas, tendremos que hacerlo.

Vetto apareció detrás del Uzumaki. Su brazo derecho fue rodeado por su Magia de Bestia formando la Garra del Oso que formaba parte de su estrategia en el combate cuerpo a cuerpo.

―¡Desespérate humano!

Sintiendo el Ki de su adversario, Naruto agachó su cuerpo por inercia. Colocó las manos en el suelo y evadió el segundo ataque dando una voltereta circense, quedando encima de Vetto.

―Te falta elegancia, chico perro.

―Magia de Imitación: Cuchilla Negra.

Haciendo uso de la Magia de Luz, Rhya apareció detrás de Naruto con su espada sobre su cabeza, preparando un tajo vertical hacia abajo con el que eliminar a su objetivo.

El mago terrorista bajó la espada con la intención de cortar en dos al Caballero Mágico.

Los ojos de Vetto se abrieron y Rhya chasqueó la lengua. El ataque que intentó utilizar contra Naruto golpeó directamente el cuerpo de su propio compañero y Vetto se estrelló contra el suelo sintiendo como sus costillas se fracturaban.

―Espejismo, chicos.

Naruto apareció con su kantana nuevamente. Sin poder evadirlo por la sorpresa y por el momento, Rhya sintió como su piel era cortada, como su carne gritaba de agonía y se vio forzado a utilizar la magia de Licht para escapar y no ser partido en dos.

El Corte Perforante había dejado su huella en el miembro del Tercer Ojo, quien ahora sostenía su abdomen mientras la sangre se filtraba entre sus dedos.

―Esto no me lo esperaba.

―Jejeje, ¿a que soy genial, bostezos, perro?

Rhya y Vetto entrecerraron sus ojos formando dos rendijas. Estaba claro que Naruto se estaba burlando, que intentaba hacerlos moverse impulsivamente para seguir recibiendo heridas en el cuerpo, para "morir" por su mano.

―Licht. Déjame matar al mocoso, déjame...

―No, Vetto―el líder entendió a lo que su compañero se refería―. No es un momento para usarlo en este lugar, no todavía al menos y no con alguien como él.

―El calvito me está menospreciando, ¿duh?―agitó la katana esparciendo la sangre de Rhya por el suelo pedregoso―. Si ustedes no se toman esto, "Tercer Ojo", tendré que mostrarles porque el Trébol sigue por encima en la cadena alimenticia, pequeños pececillos.

Antes de que Vetto pudiera reaccionar, Naruto estaba frente a él moviendo la katana perpendicularmente con el suelo, cortando el espacio en un tajo horizontal que rompió el sonido mismo con un sonido silbante y traspasó la armadura formada de maná que envolvía al miembro del Tercer Ojo.

Un grotesco sonido acompaño al rugido de Vetto de la Desesperación cuando su piel fue traspasada, su carne cortada y su pulmón izquierdo completamente perforado por la hoja, siendo triturado por el viento que envolvía la katana como un manto.

―*Gha* ¡Humano!

Los brazos gruesos y musculosos de Vetto aferraron las bien formadas extremidades del vicecapitán.

―Perro.

El rechinar de dientes fue un sonido musical para el Uzumaki. Sintió como los dedos de su adversario se apretaban contra sus antebrazos, como intentaba destrozárselos con pura fuerza física. Pero él no era el único capaz de generar una envoltura con su maná.

Como si una corriente lo golpeara, Vetto se apartó de Naruto cuando sintió sus manos siendo cortadas por la cobertura de maná que lo envolvió. Sus extremidades habían sido cortadas, generando una envoltura sangrante en sus dos manos.

―Eres bueno. Esto es algo que te reconozco, mocoso. ¡Pero aun tenemos algo por lo que combatir, algo por lo que luchar!

―Un sueño, ¿eh?―Naruto rascó su nuca. Él tenía un sueño también, todos lo tenían―. Pelear por un ideal o por un sueño, es algo que admiro y que respeto; sin embargo, no puedo tomar en serio vuestras palabras.

―¡¿?!

―Os estáis conteniendo.

Superando los ojos de Vetto y la reacción de Rhya, Naruto golpeó el estómago del primero haciendo uso del Rasengan nuevamente, envolviendo a su adversario en una explosión de maná azul que finalizó con el miembro del Tercer Ojo tirado en el suelo y heridas severas por todo su cuerpo.

―*Bostezo* No nos estas matando. Vetto se recuperará en unos minutos de eso.

―¿Ah? ¡Oh! Veo que la herida que te infligí se ha recuperado completamente, tipo vago. Pronto tu compañera se despertará y el perro de dos piernas se levantará. ¡Podemos seguir jugando!

―*Bostezo* Sería algo interesante; sin embargo, como tú has dicho, nos estamos conteniendo incluso en esta "forma". Creo que queríamos ver de lo que eras capaz y Licht mismo ha señalado que debemos eliminarte. Ahora, tomarme en serio las cosas es demasiado molesto; pero tengo que hacerlo. Eres una piedra en el camino de nuestro objetivo.

―Jejejej, gracias por el halago, pero ya tengo una doncella a la que enamorar.

La espada de Rhya chocó con la de Naruto.

―*Bostezo* Veamos como puedes moverte a la verdadera velocidad de la luz.

―¡Rhya! ¡Termina con su vida ahora!

Ante los ojos de la pequeña audiencia, el baile de espadas comenzó tras la orden directa y urgente proveniente del líder del Ojo de la Noche blanca. Tras esas palabras, esa frase acompañada de un ligero tono de mando, Rhya comenzó a moverse usando la Magia de Luz y comenzó a presionar a su adversario con movimiento superiores al ojo humano, superiores al sonido, siendo la velocidad de la luz misma.

[Esto se ha complicado. El mocoso del Ciervo Aguamarino se ha confiado demasiado]

El capitán de los Toros Negros había estado analizando todo el combate, todos los movimientos resultantes y sacó sus propias conclusiones de los posibles resultados. Estaba claro que el Tercer Ojo era poderoso, que sus tres miembros estaban por encima de lo que era su líder en batalla y que Naruto hubiera jugado con ellos, solo podría haber pasado si ellos mismos querían.

Pero el Tercer Ojo se había cansado de jugar y había comenzado a moverse pasando del calentamiento al verdadero enfrentamiento. Tal vez, siendo egocéntrico, Naruto los dejó crecer.

[¿Vivirá el chico de la cabeza de tomate?]

―¡Tengo que ayudarlo!

―No, mocoso. Ahora serías un estorbo para el chico del ciervo y cambiarías el ritmo de todo el combate. Es mejor que nos centremos en otro objetivo a batir...

Naruto derrapó por el suelo. Flexionando las rodillas, evadió los siguientes cortes y se movió saltando entre escombros envolviendo sus piernas en viento intentando así tomar distancia de la constante persecución de Rhya y sus persistentes ataques.

―¿Uh? Has roto un poco mi ropa. ¡Y era mi favorita!

Formando otra Cuchilla Negra, Rhya intentó partir por la mitad a su adversario; pero como en la ocasión anterior, se encontró golpeando el suelo en lugar de a su objetivo.

―*Bostezo* ¿Ni siquiera usando la luz puedo alcanzarte? Esto se está volviendo un completo fastidio...

―No es que no puedas alcanzarme―los cortes en la ropa del Uzumaki eran una prueba de que su adversario estaba acertando ligeramente. No ocasionaba herida alguna que fuera un problema para el rubio; pero estaba golpeándole constantemente y generaba algunos cortes suaves―; es que soy "sensible" a todo lo que me rodea.

Desde niño Naruto había tenido que moverse por el mundo sin el don de la visión. Había entrenado en las artes de su pueblo con este impedimento y había crecido creando un sistema con el que percibir los movimientos de su enemigo. Aprendió a percibir el Ki de forma inconsciente y comenzó a dejar que su cuerpo se moviera sintiendo el maná que rodeaba completamente la zona de batalla.

Juntando ambas percepciones, Naruto creó lo que llamó Danza del Dios del Viento, su estilo de batalla y de vida que solo podría usarse si no se tenía el don de la visión, si uno era completamente ciego.

Y lo había practicado por años.

―*Bostezo* Ese estilo de pelea tuyo realmente es molesto y demasiado persistente. Cada vez te mueves mejor, percibes mejor y comprendes mejor. Creces durante el enfrentamiento y has jugado con nosotros siempre con un par de pasos por delante llegando a superar mi movilidad con la Magia de Luz.

―Jejeje, gracias.

Avergonzado, Naruto rascó su nuca mientras sus mejillas mostraban un enrojecimiento causado por las palabras de su adversario.

―Supongo que podrías tomarlo como un halago―Rhya suspiró―. Usar la Magia de Imitación constantemente, solo hace que sea mejor y la comprenda mejor.

―De nada por este momento de práctica, tipo vago.

El Tercer Ojo del Ojo de la Noche Blanca había sido superado por un solo Caballero Mágico, todos ellos. Naruto había demostrado estar mucho más unido al maná y superó a sus adversarios con su habilidad de batalla dejando a sus enemigos fuera de combate.

―*Bostezo* Licht. ¿Debemos de seguir en el combate? Este chico es demasiado problemático sin que mostremos lo que realmente tenemos bajo la manga.

Licht había llegado a esa conclusión. Podría dar pie a que sus compañeros dieran todo, que mostraran el poder escondido y que debían hacer uso de su verdadero poder contra él. Pero ¿qué pasaría si eso tampoco funcionaba? Aun necesitaba a esos tres para llevar a cabo sus planes.

Antes de que Naruto y Rhya pudieran moverse para reiniciar el combate, un agujero espacial apareció sobre Licht.

―Sabía que harías eso, ¡Yami de los Toros Negros.

El humo escapó de entre los labios del mago extranjero.

―Me alegro de que pensaras eso.

―¡¿?!

―¿Uh? ¡Así que el enano se ha movido!

Haciendo el enorme mandoble anti-magia de su Grimorio, Asta golpeó el costado de Licht usando toda su fuerza, rompiendo las costillas del líder del Ojo de la Noche Blanca y sorprendiendo a los semi recuperados miembros del Tercer Ojo.

―Magia de Oscuridad; Manto de Oscuridad: Cuchilla Negra.

Licht no pudo reaccionar al segundo ataque. Yami descargó un tajo completamente vertical y envió al hombre contra el suelo en una explosión de escombros y polvo.

―¡Licht!

El Tercer Ojo reaccionó con sorpresa y dolor. Su líder y hombre amado había sido golpeado y herido, enviado contra el duro suelo y evitando que siguiera recuperándose de sus heridas anteriores.

―Esos dos son realmente sorprendentes. ¡Me gustan!

Naruto sonrió. Él había sentido el Ki de Asta y de Yami cuando se movieron entre sus ataques y los del Tercer Ojo, así como la magia espacial cuando el capitán fue enviado sobre Licht. Por eso no se sorprendió demasiado cuando Asta golpeó al líder del Ojo de la Noche Blanca o cuando Yami lo atacó como una distracción.

―*Bostezo* Estamos en un ligero problema aquí.

El golpe con la espada anti-magia había liberado el verdadero poder Licht; un poder que el cuerpo de su líder no estaba preparado para soportar. Moriría si esto seguía así.

―¡Wow! ¡Esto se ha vuelto demasiado brillante!

Colocando la mano izquierda como una visera sobre, Naruto miró hacia Licht, quien estaba elevándose sobre el suelo envuelto en un capullo de maná que daba la imagen de una enorme explosión futura que podría enviar Nairn a su desaparición del mapa.

―Esto si que no me lo esperaba.

Removiendo el cigarrillo de su boca, Yami observó el resultado de su ataque sin inmutarse ni un poco.

―¡Capitán Yami!

―No te desesperes, mocoso. Aun no...

―¡Rhya!

Vetto miró con urgencia a su compañero.

―Lo sé, lo sé. movámonos ahora o no podremos seguir con el plan a futuro―Rhya miró por un solo segundo a Naruto―. Terminaremos con esto en un futuro.

Naruto no se movió. Como respuesta a un futuro enfrentamiento, el vicecapitán envainó su katana permitiendo de esta manera que los miembros del Tercer Ojo tomaran posiciones. Tal vez podría terminar con la vida de Licht haciendo uso de uno de sus hechizos, pero sin conocer al cien sus resultados, no podía permitirse ese camino si hería a sus compañeros.

―¡Magia de Sellado: Sello Mágico de la Trinidad!

Formando un triángulo, Fana, Rhya y Vetto comenzaron un hechizo de sellado sobre su líder a punto de explotar, conteniendo el poder mágico de su compañero antes de que su cuerpo fuera desintegrado. Aun debían seguir con el plan, con el renacimiento...

―Un sello, ¿eh? Es ingenioso e inesperado. Pero supongo que nos hemos salvado de una muerte casi segura.

Después de sellar la posible explosión, el Ojo de la Noche Blanca desapareció de la zona de batalla dejando a los caballeros del trébol observando la destrucción del combate.

―Estoy algo cansado―dejándose caer, Naruto miró hacia el cielo, hacia un carruaje hecho con Magia de Acero―. Los refuerzos han llegado.