Bienvenidos a todos a mi primera historia Sonadow. Mi nombre es Misha.

Esta historia se situa justo cuando Sonic derrota a Merlina y le dan el titulo de rey Arturo. 

Sonic y Shadow tuvieron más tiempo para convivir antes de que Merlina fuera revelada como la villana.

Creo que es todo por el momento, sin más que decirles, empezemos con la historia.

- Recuerdas el rostro de nuestro rey - pregunto aquel erizo de puas blancas hacia su padre.

- No, nunca ha mostrado su rostro desde que derroto a Merlina, y Excalibur lo declaro como el rey Arturo -.

Ambos erizos se encontraban comiendo su desayuno en una pequeña recamara que se les habia dado a los caballeros en común para poder disfrutar sus comidas, aunque Lancelot y Galahad pertenecen a la mesa redonda, y disponian de un lugar más propio a su nombre, preferian comer con sus camaradas.

- En realidad todo lo que rodea al rey es un misterio - simplemente asintieron ambos erizos al comentario de un tercero dentro de la recamara - ¿Qué tal que algún día nos traiciona como Merlina? - aquello provoco que Lancelot fulminara con su mirada al caballero que soltó aquel comentario - N-no era mi intención -.

- No me interesa tu intención, le debemos respeto a nuestro rey, él nos salvo en aquella ocasión y no ha parado de dar todo por mantener a raya al Chaos que aún acecha con arrazar al reino - tras un silencio, Lancelot simplemente continuo con su comida junto a Galahad, que se encontraba sumergido en sus pensamientos - ¿Qué haces?, hijo mio -.

- Que no me llames de esa manera -.

- Es la unica manera en la que me respondes rápidamente - rió tajante ante la cara del blanco.

- Que molesto eres, sabes que ni siquiera soy tu hijo biologico -.

- Bueno, te llevo educando desde que tenias unos 5 años, ni siquiera lo recuerdas -.

- De todas formas...-.

- Y bueno... ¿Por qué me preguntaste por el rostro de nuestro rey? - eso exalto un poco a Galahad, solamente soltó el comentario al aire de forma inconciente.

Galahad se quedo un rato observando la comida que tenia delante suya sin saber si comentar o no lo que tenia en mente, hasta que finalmente solto un gran suspiro y levanto el rostro para encontrarse con los ojos de un impaciente azabache - En el ultimo ataque de Chaos... ví el rostro del rey - aquel comentario no sorprendio unicamente a Lancelot, sino que a todos los caballeros que se encontraban cerca. 

- No puede ser cierto - comento rapidamente Lancelot.

- No tienes que creerme sino quieres - Galahad rodo los ojos en forma de molestia, ya sabia que las cosas serian de esta forma y intento ponerse de pie para irse, pero paro cuanto vio a Gawain entrar junto a Percival, parecia que venian a decir algo importante.

- Chicos, tenemos un problema - comento Percival.

- ¿Qué sucede? - dijeron al unisono Galahad y Lancelot mientras se ponian de pie.

- Tranquilos, tenemos una misión - comento algo confundida la morada - El rey nos mando a recoger un paquete con la dama del lago, parece ser algo muy importante -.

Todos se alistaron para el día en que partirian al lago, por indicación del rey irian los 5 caballeros de la mesa redonda, cosa que les causaba mayor intriga a los involucrados, normalmente enviaban a alguno de ellos con un pequeño grupo de caballeros, pero esta vez eran los 5 y eso era algo nunca antes visto, aunque solamente irían 4 de ellos. Solamente estaban a espera de la despedida del rey, quien no tardo mas de 5 minutos en aparecer con su inrreconocible armadura dorada con capa roja, siempre tan brillante y sublime - Me da mucho gusto volver a verlos a todos reunidos, he tenido la mente algo ocupada en otros asuntos y no he tenido tiempo de hacerles frente en alguna charla, pero el asunto de hoy es sumamente importante para mi, necesito que vayan con Nimue y me traigan algo que les dara ella, realmente no sé lo que sea, simplemente me pidio que los mandara a los 5 y no soy quien para negarme a la dama del lago, aunque es una lastima que nos falte uno de ustedes, espero que tengan un viaje con bien y recibirlos en unos días -.

Todos se encontraban arreglando lo ultimo para partir, pero teniamos a Galahad perdido hacia el balcón en donde recién habia dado su discurso el rey. Lancelot fue el unico en darse cuenta de ello y se acerco - ¿Todo bien? -.

- Sabes... creo que necesitamos platicar sobre unos asuntos en el camino, creo que algo extraño esta pasando aquí y no me siento comodo - Lancelot simplemente se limito a asentir a la petición del menor y finalmente partieron en su viaje.

-----------------------------------------------------------------------------

- ¡Rey!, ¿donde se encuentra?, por favor digame que se encuentra bien... -  Galahad llevaba un rato buscando a su rey, quien se habia separado de él cuando la batalla se ponía más caotica, normalmente todos en la mesa redonda apelaban para que su rey no fuera a la guerra, pero siempre era un rechazo rotundo de su parte - Por estas cosas no quería ser el unico que viniera... ¡Rey! -.

Tras un rato de buscar sin respuesta alguna pudo observar como una oleada de energia se dirigia hacia él, era la clasica señal de que habían derrotado al comandante del Chaos del ataque, corrio como pudo hacia el origen del ataque y pudo observar a su rey, quien sin estar al tanto de su presencia decidio quitarse el casco un poco, entonces es cuando pudo observar a un erizo azul de ojos verdes con una mirada que expresaba cansancio y tristeza, sostenia en su otra mano una pequeña flor amarilla - ¿Por qué te esfuerzas por crecer?, nadie te mira, nadie te felicitara por llegar a tu explendor por más bella que seas... Me pregunto si empiezo a ver el mundo como ella...-.

Silver no pudo evitar pisar una pequeña rama y hacer ruido, eso llamo la atención del azulado, pero en contra de lo que esperaba Galahad, el simplemente se acerco sin colocarse el casco nuevamente y le sonrio cuando estuvieron lo suficientemente cerca - ¿Estas bien pequeño Galahad? - no sabía que decir, seguia muy sorprendido por verle el rostro por primera vez, después de todo el rey Arturo lleva en su trono ya 10 años y en ese tiempo nadie más que la dama del lago conocía su rostro, penso que tenía algo que esconder, pero no había nada extraño para el blanco.

- Es muy bello - comento al aire Galahad, cosa que sorprendio al azulado y continuamente le provoco una risa.

- Oh, vaya... Supongo que muchas gracias - Galahad estaba lo suficiente avergonzado para no saber donde meter la cara, no es que le gustaran los chicos, pero simplemente penso que debia decirlo, él más que nadie admiraba al rey, después de todo lo conocia desde muy joven y sentia mucho orgullo del heroe que salvo a su reino de Merlina, la maga del Chaos.

- Nunca habia visto su rostro, me sorprendio -.

Arturo se quedo en silencio un momento, después se separo un poco y finalmente se coloco el casco de nuevo - No tendría problemas en quitarme esta armadura al estar con ustedes, pero aún no es tiempo, sigo superando las cosas... Me resulta dificil imaginarme un escenario en particular -.

- ¿A qué se refiere?, sabe que todos en el reino lo admiramos, nada malo podría pasar -.

- Oh, pequeño Galahad... Tengo que mantenerme de esta forma si quiero seguir protegiendolos por mucho tiempo - después de eso el rey simplemente siguio su camino de regreso a casa junto a un Galahad confundido, el rey normalmente solia hablar de forma extraña, decia cosas complicadas de entender y no sabía si debía preocuparse o no.

-----------------------------------------------------------------------

- Eso fue lo que paso - los 4 caballeros se encontraban situados alrededor de una pequeña fogata bajo el cielo oscuro y estrellado - Siento que el rey tiene un problema que no nos comparte -.

Todos discutian sobre posibles situaciones, pero Lancelot se seguía preguntado porque sentia que la descripción fisica de su rey le sonaba con tanta familiaridad, como si él ya la hubiera conocido desde antes... Se sentía muy confundido - No puedo llegar a una conclusión, simplemente debemos afrontarlo y ya - comento Percival.

- ¿Quién lo hará? - comento cansado Gawain.

- Lancelot - dijo sin más Percival en forma de respuesta.

- ¿Perdón? - cuestiono Lancelot.

- Bueno, eres su tan confiable mano derecha, seguramente te tenga más confianza que a nosotros -.