Naruto ni Shuumatsu no Valkirye me pertenecen son de sus respectivos dueños así como los animes que salgan aquí.

Sin mas que decir se despide su amigo y que comience este jodido capitulo de mierda.

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Sentado en un árbol caído Naruto admiraba el desolador pantano frente suyo, guardaba silencio ya que no podi decir nada.

Debía actuar.

Podía escuchar a los pobladores atrás suyo y a su derecha habían varios viéndole con admiración o más bien su ropa.

Naruto sabía, nunca ellos habían conocido el color blanco en su vida, seguramente por ello era que estaban tan impresionados.

"M-Mi señor"

El líder de aquel pueblo de acercó a él con miedo de provocar su ira, más ya al poder haberla sentido una vez.

Recordar aquella presencia le provocaba una rabia inimaginable, un simple demonio intentando creerse rey de una tierra que no le pertenecía.

Eso le enfermaba.

-Habla-Hablo Naruto con tranquilidad viendo al hombre quien se estremeció bajo su mirada.

-Su pedido esta listo mi señor, todas las mujeres han echo la muñeca que has pedido-Hablo el hombre ya que no sabía para que era aquella muñeca.

Naruto entonces se erguio de donde estaba mientras que el hombre tuvo que verle para arriba.

Debido a si fisonomía titanica Naruto media más de dos metros, era el segundo más alto con Zeus superandole.

Zeus era un gigante, había heredado los 4 metros de su padre, pero simplemente el dios prefería encogerse usando magia para poder caber en las puertas.

-*Es un gigante*-Se pensó el hombre viendo a Naruto desviar su mirada a la izquierda.

Este hombre podía matarlos a todos, el lo sabia, en su ropa cuando se movía se marcaban sus músculos claramente, un físico que sólo un guerrero podía tener, un guerrero poderoso.

-Entonces guíame, debo acabar con esto lo mas rápido que pueda, debo encargarme de un parasito después de esto-Hablo Naruto observando donde podía sentir la magia de eso.

El saco de putrefacción intentaba oprimir su presencia, podía sentirlo maldiciendole con las más virulenta enfermedades.

Sin embargo era en vano.

El era un dios.

Su misma sangre era tan pura que no permitía que maldiciónes pudieran hacerle algo, aparte de parásito era un idiota.

-S-Si mi señor-Hablo el hombre mientras que daba media vuelta y comenzaba a caminar.

Naruto puso sus manos atrás mientras que caminaba con tranquilidad atrás de aquel enfermo hombre.

Naruto se sentía como animal en exhibición ya que todos se detenían al verle, incluso las muchachas se inclinaban al oler su fragancia dulce ya que nadie aquí había olido perfume.

Afrodita había sido la que había seleccionado su colonia, la mujer le había dicho que la usara siempre ya que encajaba con su apariencia.

Naruto y Afrodita tenían una relación de amistad, la diosa del té en ocasiones le llamaba para tomar té juntos.

Entonces llegaron a su destino.

Habían más de una docena de mujeres con muñecos de tela sucia, maloliente y mohosa esperando hablando entre ellas.

Todas se detuvieron al verle, unas cuantas vieron a Naruto con ojos abiertos llenos de impresión y otras se les pudo ver un pequeño sonrojo en sus pocas mejillas a causa de la desnutrición.

-Ustedes han sido elegidas para un honor, harán una fila, elegiré dos muñecas, solo dos, si la elijo no quiero escuchar reclamos del resto...-Hablo Naruto con tranquilidad y sus ojos analizando a cada una.

Varias se sonrojaron ante su voz, para ellas era suave y sedosa, como la de un amante susurrandote al oído.

-Por el momento debido al estado del reino entregado a mi no puedo dar algun tipo de premio por ello, pero después que mi reino esté en orden, las mujeres seran recompensadas adecuadamente, eso lo juro-Hablo Naruto mientras que ellas asentían.

Todas comenzaron a organizar una fila mientras que Naruto asintió ante aquello.

"No"

La primera mujer fue rechazada sin dudarlo, ella de deprimió ya que su trabajo no había cumplido la expectativa de aquel dios.

Flush.

Pero jadeo al ver que muñeca de trapo restauraba sus colores y sobre todo se limpiaba de todo tipo de suciedades.

-No la ocuparé, pero tu hijo puede gustarle, ve, puede ser un hermoso regalo de una madre a su hijo, hermosa sin lugar a dudas-Hablo Naruto dándole una sonrisa tranquila a la mujer.

Una lágrima escapó del ojo de la mujer.

-¡Gracias mi señor!-Hablo la mujer al oír que no decía nada menospreciando su trabajo.

La mujer apretó el agarre de su muñeca ya que no podía esperar para dársela a su hija.

Minutos después.

Naruto estaba perdiendo la esperanza, estaba a punto de pedir para hacer la muñeca el mismo.

Pero eso iniciaría una guerra.

Naruto sabía que se pelearán si una de ellas recibía una muñeca de echa por el y la otra echa por uno de sus súbditos.

-Ve, no sirve para el propósito que tengo previsto-Suspiro Naruto mientras que rechazaba a la que venía siendo la última mujer.

En su regazo había una mueca de trapo, Naruto casi podía saborear el amor con el que fue echa, a su lado derecho una anciana sonreía al ser elegida.

Incluso había recibido un beso en el dorso de su mano, ella no sabía que los dioses podían ser caballerosos.

"¡Esperen!"

Naruto entonces observó a la derecha donde una muchacha venía, lucía demacrada pero caminaba a ellos.

-Mi señor ha pedido mujeres con hijos, no puedes participar-Hablo el líder de aquel poblado impidiéndole el paso.

-Mi señor ha pedido a madres, yo me considero madre-Hablo la muchacha mientras que se sostenía la espalda.

Se podía notar el abultamiento en el estómago de la muchacha mientras que incluso en su estado había un brillo en sus ojos.

-Lord...-El hombre no pudo terminar se hablar ya que Narutp alzó su mano.

-Ella ha dicho que se considera madre, entonces ella es madre, has enorgullecido a tu rey pequeña, me alegra ver a una madre así en mi reino-Hablo Naruto con una sonrisa al oír que incluso sin haber nacido ella ya se consideraba madre de las trillizas que yacían en su útero.

La mujer se avergonzo al oír a aquel ser magnánimo haberla elogiado, lentamente camino a él mientras que enseñaba su creación.

El líder de la aldea iba a reclamarle a ella haber traído aquello, era un simple muñeco de ramitas, era demasido pequeño y un solo golpe le desarmaría.

-Le encantara-Susurro Naruto observando aquel muñeco en las manos de la muchacha embarazada.

-Es muy hermoso-Hablo la anciana también deacuerdo con una sonrisa en su rostro.

Naruto tomó el muñeco mientras que ahora con aquellos dos muñecos ya no tendrían ningún problema.

Era hora de seguir.

Flush.

El pueblo entero jadeo al sentir la tierra temblar mientras que un pilar de tierra se formaba al frente de Naruto.

El aura de Naruto salía fluida y sin detenerse pareciendo que nunca tendria un final, a diferencia de antes y su brutalidad esta no causó daños salvo el temblor generado.

Naruto cerró sus ojos mientras que vapor salía cuando exhalaba aire por su boca, todos veían maravillados aquello.

Naruto alzó su mano mientras que su aura seguía intensificandose cada vez más.

Vientos soplaron fuertemente mientras que varios gritaban de sorpresa ante aquello mientras intentaban no salir volando.

"Yo te invoco, responde a mi llamado, levanta de tu sueño y cumple mi voluntad, porque eres yo y yo soy tú, es hora de despertar... [Coupe Vitalité]

Una luz hizo a todos cerrar sus ojos a todos los presentes alrededor de aquel pilar de tierra.

Entonces lo abrieron.

Todos no pudieron evitar quedar impresionado ante la copa que yacía ahora en la mano de Naruto.

Era hermosa.

No, hermoso solo opacaba aquella copa, era lo más bello que ellos jamás habían visto en su vida y sabían que sería lo más bello que ellos verían.

Naruto puso su tesoro divino en medio de ambas muñecas mientras que daba un paso atrás.

Flush.

Naruto alzó sus manos mientras que un gran círculo de fuego exploto a su alrededor haciendo que todos dieran varios pasos atrás.

Crack.

El sonido fue escuchado cuando el fuego se movió creando runas marcando la tierra, Naruto movía su mano suavemente ya que él era el que estaba creando las runas.

El fuego se atenuo cuando ya las runas fueron creadas, ahora en lugar de aquellas llamas de color morado era un fino hilo en el suelo.

-Diosa de la abundancia, señora de las estaciones y la tierra, tú la diosa de la belleza y la fertilidad, les hago este llamado a ustedes dos mis congéneres y ofrezco estas muñecas como tributo, tejidas con el mas dulce amor de una madre a su hijo, por su tiempo...-Hablo Naruto en tono tranquilo mientras que todos veían maravillados aquello.

"La copa se está llenando"

Una de ellas habló maravillada al ver que la copa lentamente se llenaba, hasta que comenzó a ser mucho líquido.

La copa se desbordo.

Todos no pudieron evitar relajarse al oler aquella dulce fragancia salir de la copa que desbordaba aquel líquido.

-Respondan a mi llamado, Demetra, Venus, solicito su presencia-Termino Naruto mientras que entonces observó.

Flush.

Las muescas explotaron en fuego dorado mientras que Naruto sonrió al ver que su regalo había sido aceptado.

Entonces todos jadearon.

Menos Naruto.

Naruto abrió los brazos sonriendo con calidez y tranquilidad mientras que unos brazos se enrollaron a su alrededor.

"Te eh extrañado, sabes que no me gusta el nombre Demetra"

Una voz suave y sedosa hizo a los hombres presentes sonrojarse y más al ver de quien provenía.

Naruto antes que pudiera hablar sintió otro par de brazos en su espalda así como los atributos de una mujer tocar su espalda.

"Ciertamente Naruto, me siento ofendida que me hallas traído en una cita a este feo lugar"

-Vamos Afrodita, es mi reino-Se quejo Naruto al oír que su amiga le decía feo a su reino.

El lo veía bien.

Un poco descuidado pero bonito al fin y al cabo, aunque podría ser por su dominio en el inframundo.

Naruto sintió que las dos se despegaban de él mientras que entonces ambas diosas le veían con tranquilidad.

Demeter sintió una ceja temblar al ver a Afrodita aquí junto a ella, ella perfectamente podría cumplir el rol de Afrodita.

-Pero dime hermano, ¿Porque nos has solicitado?, por cierto...-Hablo Demeter viendo viendo a la mujer embarazada.

La muchacha se sintió incómoda al ver aquella hermosa mujer acercarse a ella mientras que entonces Demeter sonrió.

La diosa pudo una mano sobre su vientre.

-Tus hijos crecerán fuertes y sanos, este es mi regalo por ese hermoso muñeco echo de ramitas, sera atesorado por mi, lo juro-Hablo Demeter con tranquilidad ya que aquel muñeco había sido hermoso.

-Necesito pedirles un favor-Hablo Naruto mientras aue ambas le veían con curiosidad.

Demeter por dentro sonrió, cuando Posedeia se diera cuenta que Naruto acudió a ella y no a ese delfín malhumorado se pondría enojada

Ella quería verlo.

Posedeia debido a que tenía que compartir espacio con Zeus estaba de un humor terriblemente horrendo se podía notar al ver su rostro gélido

-Naruto, pidiéndome un favor, que podré pedir a cambio-Ronroneo Afrodita mientras que camina a a Naruto de nuevo moviendo sus caderas.

Los hombres tragaron.

Pero Afrodita parpadeo al ver que Naruto era movido por Demeter quien tiró de su saco con suavidad.

-Sabes que siempre tendrás mi apoyo Naruto, ¿Dime que ocupas?-Pregunto Demeter mientras que Naruto asintió.

Afrodita fruncio el ceño.

Demeter y Afrodita se vieron con intensidad mientras que Naruto sabía que podía llegar a esto.

Afrodita y Demeter no se llevaban bien, Afrodita era una diosa burbujeante y Demeter era una diosa calmada, ambas diosas eran nemesis de naturaleza.

-Esta tierra está intoxicada, pensar que Japeto la tendría tan descuidada, de verdad Japeto debe sentir vergüenza-Hablo Afrodita viendo a este montón de indigentes a su alrededor.

Sentía asco.

Hizo una nota mental de llegarse a dar un baño en su baño de agua ultrapura para quitarse todo este olor y sentimiento.

-Para eso las eh llamado, Afrodita por favor préstame tu dominio sobre la fertilidad, hermana ocupo tu dominio sobre la naturaleza y la abundancia-Hablo Naruto mientras que ambas diosas le veían.

-De acuerdo/ Si eres tu entonces sí-Afrodita y Demeter hablaron al mismo tiempo mientras que Naruto asintió ante aquello.

No quedaba mucho tiempo para que tuvieran que volver, la invocación de ellas solo era momentánea, para ingresar al inframundo debían hacerlo por la entrada principal.

El al ser el dios del inframundo podía doblar un poco las reglas, pero no podía pasarlas por alto ya que ellas mantenían el equilibrio.

Era hora de purificar esa tierra.

Las diosas ahuecaron sus manos al frente mientras que un brillo se daba en ellas, una esfera brillante apareció en cada diosa.

Naruto tomó su arma divina mientras que lentamente aquellas pequeñas canicas levitaban hasta ella.

Las dos esferas ingresaron en aquella copa que hizo desaparecer el agua completamente, las gemas de la copa brillaron mostrando asi cuanto poder tendría aquella copa.

-S-Señor que piensas hacer?-Pregunto el hombre mientras que Demeter le veía de manera fría.

Demeter iba a abrir su boca, un simple ser del infierno no debía cuestionar a su hermano.

Demeter se preguntaba dónde era que estaban, Japeto había sido un gobernante pésimo si esto era el inframundo Hades.

-Es hora de devolver mi reino su prosperidad-Hablo Naruto de manera tranquila mientras que entonces observó a su derecha.

Naruto dio varios pasos siendo observado incluso por las dos diosas mientras que entonces alzó su copa.

-Porque es hora de que cumplas tu promesa-Susurró Naruto mientras que entonces lentamente inclinó su copa.

Una gota.

Una sola gota cayó al suelo, era de un líquido verde brillante, pero nada sucedió, todos se preguntaron menos Demeter, Afrodita y Naruto si había fallado.

DUN.

Una pulsación hizo a todos los seres no divinos jadear, aquel sonido provino del núcleo mismo de la tierra.

Esta copa fue usada para purificar la comida de los dioses en la guerra, junto a Hera, Demeter y Hestia había sido el catalizador para evitar la fatiga en exceso.

Naruto nunca le había gustado batallar, no le llamaba la atención hacerlo, pero que no confundieron su pacifismo con dejación, Naruto sabía claramente que si tocaba pelear, tocaba pelear.

"¡MIREN TODO A NUESTRO ALREDEDOR!"

Un hombre grito mientras que veía con maravilla todos a su alrededor, lágrimas se estaban formando en sus ojos.

Como si fuera una simple ilusión todo comenzó a cambiar, lo negro se cambió por café y por primera vez en más de 200 mil de años vieron una pequeña hoja verde.

Luego siguieron más.

Los árboles pronto se llenaron de verde, vitalizados completamente, incluso algunos dejaron ver por primera vez en la historia registrada algo que sus antepasados habían llamado fruta.

Y entonces aparecieron animales.

Por primera vez ellos pudieron ver esos animales voladores de los cuentos, Naruto los habían creado usando su copa y la magia de ambas diosas.

Naruto se tambaleó.

Sintió como si el 70% de sus reservas mágicas habían sido quitadas de su cuerpo, no había sido una experiencia muy bonita ya que se sintió como su un cuchillo hubiera sido clavado en su pecho.

Pero sintió que Demeter se recostada a a él para evitar que le vieran tambalearse, Afrodita por su parte tomó la copa mientras que ella misma sacrificaba su magia.

Afrodita se mordió su lengua ante este dolor horroroso, de verdad Naruto tenía el tesoro divino más hermoso pero más doloroso.

-Un rey es inalcanzable, no puedes mostrar debilidad, un dios es un ser perfecto-Susurro Demeter mientras que tranferia un poco de su poder a su hermano.

La copa entonces dejó de brillar dando así por terminada la obra que había creado, Afrodita gimió de alivió al sentir que el dolor dejaba de fluir a ella.

"¡LOS PECES MIREN!"

"¡E-El AGUA ES CLARA Y HUELE BIEN!"

"¡ES UN MILAGRO!"

"SALVE NUESTRO REY"

"LARGA VIDA AL REY"

"LARGA VIDA AL REY"

"LARGA VIDA AL REY"

Las docenas de personas gritaron alabando a Naruto mientras que todos caían de rodillas.

Todos le veían con amor incondicional ya que por primera vez su soberano había echo algo para ellos.

En el castillo.

Bibian no pudo evitar quedar sorprendida al ver a su alrededor lleno de verde.

Entonces entendió donde había ido Naruto.

El cielo estaba lleno de la inmundicia pero ella sabía que los árboles recién creados harían el trabajo en un par de días.

Tanto poder.

Bibian babeo al poder sentir las pulsaciones de poder de Naruto a varios cientos de kilómetros, quería sentir más, solo Naruto la había echo sentir tantas emociones.

Ella estaba mojada.

Bibian se frotó sus muslos con un sonrojo, una sonrisa y mirada llena de lucura estaba en su rostro.

-Aaah~ De verdad eres solo tú, solo seré tu juguete lujurioso~-Gimió Bibian mientras que dos de sus cuatro manos estaban en su rostro.

"Oye pervertida, tienes que dejar de enviarme sujetos moribundos"

Clean entomces sin el verde vómito de antes ahora tenia un azul claro en su piel mostrando asi que estaba recuperando su salud.

Clean podía sentir el poder de la naturaleza converger en ella curandola desde su núcleo, cada célula de su cuerpo se sentía que estaba en una nube de dicha después de estar incómoda muchos días.

-La quitas lo divertido a la vida, además mi señor ha pedido explícitamente que entrene a esos debiluchos, si quieres culpar a alguien culpa a su debilidad-Se quejo Bibian al oír a Clean reclamarle sobre los heridos.

Clean y Bibian estaban reclamandose sobre aquel tema de los heridos mientras que la pila de heridos debajo de Bibian gemia llena de dolor punzante y agonizante.

Con Naruto.

Los pobladores gritaban llenos de alegría al ver aquel extenso bosque, por primera vez veían un árbol prospero.

Una docena de hombres traían frutas de los árboles que habían crecido, incluso algunos gemian llenos de satisfacción al comerse algo llamado "Mango".

El primer paso para Naruto había consistido en purificar la tierra llena de contaminación.

El siguiente paso consistía en conectar los pueblos de su reino, primero ir él mismo para así subyugar a los pueblos rebeldes.

Si, habría rebeldía.

Eso era seguro.

Muchos de ellos atribuirían a un milagro por lo que le darían la espalda a su reino, llendo el mismo eliminaría a las cabezas que quisieran hacerse con el poder.

El siguiente era activar la agricultura y caza mientras se generaban industrias sobre eso mismo en lugar de procesamiento de cadáveres.

Y el ultimo paso para así poder no morir de hambre era crear caminos para el paso de mercancía, era por ello que Bibian entrenaba a los soldados que serían los guardias de las carreteras.

Era simple, lugares fríos solo cultivan cosas de lugares fríos, lugares cálidos solo cosas de lugares cálidos, una vez echo comenzarían los trueques de "Yo tengo 10 kilos de papa, te lo cambio por 5 kilos de uvas"

La razón era simple, ellos no tenían una moneda, tampoco era factible crearla por ahora debido a la pobreza solo generaría inflación de precios.

Tenía mucho trabajo.

Naruto sabía que para crear esto simple al menos unos 5 años se tomaría si iba a toda máquina 10 si las cosas se complicaba.

*Beso*

Naruto beso el dorso de la mano de su hermana quien tuvo un tinte rosa en sus mejillas ante aquello.

-Gracias Demeter, gracias Afrodita, les debo una-Hablo Naruto mientras que ambas diosas sonreían.

-Solo asegurate de tener un bonito lugar, sería detestable que mi lugar de vacaciones fuera un chiquero, además me debes una cita-Ronroneo felizmente Afrodita mientras que desaparecía en un brillo dorado.

Demeter fruncio el ceño al oír a esa perra decir aquello, pero entonces vio a Naruto y su semblante se volvió serio.

-Naru, cuidate de Zeus, esta actuando extraño y déspota, ayer casi ha provocado una pelea con Posedeia y Adamas, esta intentando excluirte-Hablo Demeter pero entonces vio a Naruto sonreír.

-Quiero un reino libre del mandato de Zeus o su vigilancia, el Hades cumple con ello, por eso hago todo este tipo de cosas, Posedeia tiene un carácter fuerte y Zeus lo sabe, si se mete con ella tendrá que perder un brazo para detenerla y eso para él es inaceptable, sabía desde un principio que Zeus lo haría así, después de todo me pidió el Olimpo por ello-Hablo Naruto mientras que Demeter abría sus ojos al oír aquello de Naruto.

-Pero es tu derecho de nacimiento el guiarnos, el estar a mi lado-Demeter susurro la ultima parte para que Naruto no la escuchara.

La diosa abrió los ojos al ver que Naruto le abrazaba suavemente y de manera gentil, cerró sus ojos disfrutando el calor de Naruto.

Este calor.

Demeter podía sentirlo, este mismo calor protector era el que la cubría cuando su padre embriagado de vino la intentaba apalizar y Naruto la protegía con su cuerpo.

Todavía lo recordaba bañado en sangre sonriendole para calmarla incluso con las heridas de su cuerpo.

Despedazar al cadaver Crono había sido la cosa más satisfactoria que Demeter había echo.

-Ustedes son mi familia, los amo así como son, incluso al idiota de Zeus, además ustedes lo mantendrán a raya, después de todo en ustedes esta mi confianza, temo el día que nuestro tonto hermanito menor se quedara con el reino que yo ahora gobierno solo y con todo el poder, seria un Crono sin lugar a dudas, al menos com ustedes estoy seguro que Adamas le dirá la verdad en la cara-Hablo Naruto mientras que se separaba de Demeter quien tenía un puchero.

-Es injusto sabes, que puedas calmar a alguien en segundos, solo cuidate, no tardado estará intentando molestar por aqui-Hablo Demeter ya que Zeus era de esas personas que si no estaban intentando arruinar tu día no estaba tranquilo.

Aunque estos días había tomado una pasión insana por follar cuál conejo en celo, su templo parecía más un burdel que otra cosa estos últimos días.

Y así quería ganarse a Hera.

-Siempre puedes venir, aquí te abriré los brazos cuando quieras, cuando veas que Zeus esta insoportable ven aquí-Hablo Naruto ya conociendo la personalidad de su hermanita menor.

Zeus era el hermano molesto que no podía faltar, el que parecía una piedra dentro de la bota del pie de más apoyo.

-Lo tomaré, además traere galletas-Sonrio con cariño Demeter mientras que Naruto asintió ante aquello.

Ambos dioses se dieron el último abrazo mientras que Demeter desaparecía en un brillo dorado volviendo al Olimpo.

El rostro de Naruto se volvió gélido mientras que observó a su derecha dejando sentir su hostilidad.

Era hora de matar un gusano.

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Fin del capítulo.

Sin mas que decir se despide su amigo y pana del alma Escritor-san.