De vuelta al reino, Rashomon y Atsushi habían pasado todo el camino hablando y riendo, al parecer, la serpiente no salía mucho del oasis, así que ver como toda la tierra había cambiado le estaba fascinando, quiso ir por unas manzanas en un árbol, pero Atsushi no se lo permitió diciendo que aquello daba mal augurio.

En el reino, Atsushi le pidió a Rashomon ser amable con la servidumbre, Naomi, hermana menor de Jun'ichiro y criada de su padre, fue quien se encargó de darle un baño a Rashomon, mientras que Kenji preparo un nido en el jardín, algunos otros de la servidumbre acomodaron todo para Rashomon, esté le había dicho a Atsushi que no quería una habitación aparte, así que pensaron en el cómo un pequeño gatito y le pusieron un castillo para que escalará. Aunque para Rashomon fue extraño, se acomodó bien en el castillito – te dije que le gustaría – sonrió Tatsuhiko

- Al final del día, es una criatura mítica y poderosa, debería tener su habitación para descansar

- El insiste en estar conmigo padre – dijo Atsushi – pero, de todos modos, espero que podamos cuidar de él

- Gracias por tu cuidado Rashomon – dijo Kazuya, - estaremos agradecidos contigo por siempre

Rashomon miro a la pareja, luego miro a Atsushi y con cabeza baja hablo por fin, como si fuese un humano – discúlpenme, está vez, haré que vivan por muchos años más – expreso. Tatsuhiko y Kazuya sonrieron, pero Atsushi había entendido mejor.

Ahora no tenía duda, las cartas de sus padres eran falsas. En su antigua vida, ni siquiera supo cuando sus padres murieron. Apretó sus manos y fue con ellos, los abrazo fuertemente haciendo a estos sonreír y abrazarlo de vuelta.

Los días avanzaron, Rashomon siempre estaba en el hombro de Atsushi, en cualquier reunión gubernamental se escondía en su cintura o saco. Podían hablar telepáticamente, así que, si había alguna duda sobre algo y Rashomon sabía cómo arreglarlo, Atsushi lo exponía ante la mesa. Estaba más que seguro que sus días con Rashomon solo vendría paz y tranquilidad.

Fue el día en que los Akutagawa volvieron al palacio real, Atsushi estaba contentos de saber que llegarían de nuevo, los extrañaba en verdad. Así que organizo una gran fiesta de té, pasteles, y dulces, galletas y bebidas. Los padres habían decidido asistir, así que el ducado Akutagawa y los Reyes de Ruzel, cualquier que los viera pensaría que era una proposición matrimonial.

- Entonces, Duque Akutagawa – dijo el rey Tatsuhiko hacia aquel hombre - ¿Qué opina de nuestros hijos?

- Me alegra tanto que se conocieran, no solo por la hermosa amistad que han forjado si no por la salud que trajo a mi ducado

- Yo también estoy agradecido, creo que nunca había visto a Atsushi tan feliz por tener amigos, me hace feliz

- Me alegra escuchar eso

- Por eso, estoy considerando la propuesta que me hizo

- ¿está seguro?

- Si, pero, quiero la opinión de alguien importante también. – menciono, entonces su mirada fue al centro de la mesa, hizo sonar una taza haciendo al resto guardar silencioso. – debo admitir que nunca había estado tan feliz de estar reunido en familia, mi esposo Kazuya y yo, estamos tan agradecidos por ustedes, trayendo paz y tranquilidad, una enorme sonrisa en el rostro de mi pequeño príncipe – menciono haciendo sonreír a Atsushi mientras Rashomon devoraba una rebana de pan. – es por eso por lo que quiero dirigirme a ustedes, Ryunosuke, Gin.

- Si, su majestad – respondieron ambos alegres pero rectos hacia aquel hombre

- ¿Qué opinan ustedes de Osamu Dazai?

Los ojos de Atsushi se sorprendieron, ambos chicos sonrieron – es un chico genio de las finanzas

- Un hombre encantador

- Creo que su ducado es uno de los más grandes, si no es el primero

- Además de que es impresionante con la espada, ¿a escuchado de su guardián? Tengo entendido que es un hombre experto en artes, héroe de guerra.

Atsushi escuchaba a sus dos amigos, lo entendía, no conocían lo que era capaz su exesposo, pero eso era todo, no importaba cuando lo halagaran, Atsushi simplemente lo rechazaría cuando llegará el momento, no importaba que dijeran, o si era la mejor opción, tenía a Rashomon de su lado y eso era mejor que cualquier duque genio. – Bienvenido – dijo su padre sacándolo de su trance. Entonces Atsushi lo miro, allí estaba el castaño junto a sus padres, los duques de Wind.

- Sus majestades – dijo la familia mientras se inclinaban

- Precisamente hablábamos de ustedes – dijo Tatsuhiko – siéntense, bienvenidos – expreso alegre

Gin y Ryunosuke sabían de cortesía, así que se movieron algunos asientos para que los duques estuvieran a la par de sus padres y al lado del rey. Gin termino sentándose al lado de Atsushi así que, frente a él lo tenía, su exesposo ahora joven y sin nada que ver. Rashomon subió por los dedos de Atsushi desde que se acercaron, estaba oculto en su cintura. No quería ser visto por ellos. – Atsushi – hablo el rey – ellos son los duques de Wind, y su hijo, de quien hablábamos

Atsushi tomo su taza – bien – fue su respuesta seca y seria, aquello sorprendió a su padre mientras el chico solo bebió.

En el resto de la reunión Atsushi se mantuvo callado, aunque Osamu por su parte interactuó más con los adultos dejando en obviedad su gran inteligencia, maravillando más al rey, aunque esté miro un par de veces a Atsushi notando su seriedad y sin si quiera voltearlos a ver, mucho menos a sus amigos los Akutagawa, solo miraba su taza, bebía y repetía.

Mientras, claro, hablaba con Rashomon.

- Quisiera que lo mordieras y que sufriera como yo sufría antes de caer – menciono triste

- Lo lamento Atsushi, no puedo hacer eso, además, aún sigue siendo un chico inocente

- Tienes razón, no tengo forma de evitarlo o decir que es un asesino cuando aún no lo es, creo

- Pensaremos en una forma, tu padre está muy feliz con él, aunque no te cases seguramente pasará a ser parte de su mesa de confianza

- No podemos dejar que Osamu tenga absolutamente nada de poder, lo que hizo fue por poder, él quiere ser rey

- De acuerdo Atsushi, no te asustes, estoy para protegerte

- Gracias...

Entonces, Osamu miro al príncipe, estaba tan absorto que sonrió, se veía un chico tierno, tomo un pan dulce, lo puso en un pequeño plato color dorado y lo acerco a él empujando el plato usando las yemas de sus dedos. Atsushi subió la mirada, vio al castaño estirado en la mesa, entonces se sorprendió y sonrió – vaya, por fin alza la mirada príncipe. – menciono – pensar que el color de la vajilla es idéntico al de sus ojos. – dijo coqueto.

Atsushi lo supo, se había ruborizado, si algo tenía su exesposo es que sabia coquetearle. El rey se emocionó al ver al menor ruborizarse, pero Atsushi miro hacia la servidumbre, de inmediato, Naomi se acercó entendiendo la mirada del joven príncipe. – Príncipe Atsushi, ¿me llamo?

- Si, cambia el color de la vajilla del palacio, por favor – miro el plato con el pan – y tira eso

- Si, como usted ordene

El rey se levantó furioso mientras golpeaba la mesa del jardín – Atsushi, eso es grosero.

Atsushi se levantó de igual forma – entonces, discúlpenme por favor – hablo para entonces retirarse

Todos en la mesa se quedaron en silencio viéndose entre ellos, Osamu trago saliva y miro al rey – di-disculpé su majestad – dijo apenado – creo que cometí un error e hice enojar al príncipe. Ofrezco mi sincera disculpa

- No sé qué fue lo que le paso a ese chico – dijo el rey – discúlpenlo, el suele ser bastante educado. – suspiro profundo - Ryunosuke

- Si su majestad – hablo Ryunosuke

- ¿puedes ir a verlo?

- Oh, si – se levantó – disculpen

Ryunosuke siguió el camino de Atsushi, el resto se quedó en la mesa. Atsushi no había ido muy lejos, estaban en el jardín así que solamente comenzó a caminar lejos del comedor, pero aun en el jardín, Ryunosuke lo encontró – Atsushi, Atsushi – le llamo y esté lo miro - ¿Qué ocurrió allá atrás? – pregunto

- Nada, no es nada... - menciono – no me gusta que hable de mis ojos

- ¿no te gusta?

- No

- Pero, tus ojos son bonitos ¿Por qué no te gustan?

- Me gustan mis ojos, no que él lo mencione

- Pensé que era la segunda vez que ustedes se encuentran

Atsushi reacciono – solo, fue desagradable

- ¿no te gusta Dazai-san?

- No

- ¿Por qué no?

- Por qué no me gusta

- Es malo hacer eso Atsushi, tiene un gran potencial para ser tu pareja, ¿no dijiste que temías de tu futuro marido? Este chico es esplendido, tu padre estuvo preguntando por él a mis padres, nosotros los Akutagawa tenemos una brecha pequeña entre nuestro ducado y el de Wind, los Dazai son amables y buenas personas

Atsushi apretó sus manos – no me gusta

- Pero Atsushi, podrías considerarlo

- No, no me gusta

- ¿sin siquiera conocerlo? ¿vas a juzgarlo?

Atsushi apretó sus labios. El azabache lo miro – Atsushi, no quiero forzarte, simplemente que es un chico que me agrada, es un buen amigo, inteligente y responsable, si hay alguien que te puede hacer feliz, es él.

Atsushi simplemente se retiró sin decir nada, fue hasta su habitación donde se recostó un momento - ¿Qué hago Rashomon? Incluso Ryunosuke quiere lanzarme hacia mi asesino

- En el pasado incluso tu estabas insistente en casarte con él, podrías comprender que para ellos es tu mejor opción

- Lo sé... Por ese duele tanto, no saben que él solo piensa en asesinarnos a todos...

- Atsushi...

- Es frustrante, tan frustrante – expreso comenzando a llorar. 

...

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