Chapter 15: ...Y el Amor
Hinata había llegado a la casa, después de un largo día en el centro comercial con compañía de Tenten, era sorprendente ver el gran gusto y la fascinación de la joven castaña por las artes marciales. Tras que hubo llegado, se quedo mirando algo de T.V, esperando a que la joven Uchiha llegara para poder cenar ambas. Sin embargo, ya eran las siete y diez, y ni rastro de su amiga.
-¿Estará bien?-pensó la Hyuga.-Q-Quizá deba llamarle...-
Se levanto del sofá para ir por su celular, el cual al momento de tomarlo, sonó en un mensaje de Sasuke.
"Paso por ti en treinta, arréglate cariño, y asegúrate de usar ropa interior sexy"
-¿Eh?-Los tonos intensos llenaron el rostro de Hinata en toda su totalidad, incluidas sus orejas. Nerviosa por la respuesta que fuera a tener, respondió el mensaje.
"¿A-A donde vamos a ir?"
"Te explico cuando pase por ti"
Suspiro, si algo había aprendido de su relación con el moreno es que siempre tiene algo planeado. Aun que casi nunca sabía de que se tratara.
Sin mas que decir, o sin ninguna otra opción, fue a darse una ducha rápida. Tras aquella relajante ducha, fue a vestirse con un pequeño vestido azul oscuro, sujeto al cuello con un pequeño escote y un cinturón blanco. Un poco arriba de las rodillas a conjunto de unos zapatos negros, con respecto a la ropa interior... Solo opto por un conjunto en tono blanco con pequeños detalles en lila. Tomo un suéter blanco y salio de la habitación, justo al momento en que Sasuke le llamaba avisándole que ya estaba afuera.
Hinata estaba preocupada por la ausencia de Naemi, así que dejo una nota por si la rubia llegaba mas tarde. Salio del departamento cerrando la puerta con llave y bajo tranquilamente. No quiso maquillarse, solo cepillo su cabello.
Al subir al auto, Sasuke le miraba de arriba a abajo, como si se la comiera con la mirada, y es que para el Uchiha, ella siempre se veía mas hermosa cada vez que la veía.
-¿O-Ocurre algo?-tartamudeo la Hyuga al sentir aquella mirada tan intensa.
-No, nada...-No iba a decirle que se veía hermosa, aun que con su sola mirada lo gritaba.
Sasuke condujo directo a su casa, mientras le contaba a Hinata lo que había pasado. La ojos perla ahora mismo se había preocupado por su Padre y la empresa, ¿y si no se llegaba a un acuerdo?, ¿y si quedaban en la quiebra?
-¿Pasa algo?-dijo Sasuke, aprovechando que el semáforo estaba en rojo, dado que desde que le contó la vio demasiado callada y rígida.
-¿Y....Y si no se hace el acuerdo?-vio a Sasuke con tristesa.-¿Y...si quedamos en la bancarrota?-
-Habrá un acuerdo...-respondió con seguridad.-Y sino...podemos casarnos y crear nosotros el convenio-
Hinata le miraba, miraba aquella sonrisa ladina amplia y llena de malicia que provocaba escalofríos, agradables por cierto. Pero lo que mas le afecto fueron sus palabras.
¿Casarse?,...¡¿Casarse?!, si existiera un color que superara al rojo de los tomates maduros, ese sería el que Hinata expresaba en sus mejillas, mas bien, en todo su rostro. Su corazón latía incesantemente contra su pecho amenazando con salirse del mismo, la sola idea le hacía ponerse nerviosa, y sobre todo por que su mente le hizo imaginarse al moreno Uchiha en un traje negro. Y después la luna de miel...
-¡B-Basta Hinata!-se regaño mentalmente por solo imaginarlo.
Sasuke siguió conduciendo, él no se tomaba a juego eso, estaba seguro de lo que quería y de lo que pasaría, pero claro, cuando se hace un plan, siempre se debe tener un plan de contingencia. Ademas haberla visto ponerse así de roja por las cosas que debió imaginarse le causo gracia y se sentía complacido.
-¿Que te habrás imaginado, mi querida Hyuga?- Se cuestiono el Uchiha.
No olvidemos que si se casaba con su amada Hyuga por fin se la llevaría lejos y la tendría solo para él. Todos saldrían ganando.
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-¿Y como esta mi Tía?-pregunto Itachi a Obito, quien había llegado si acaso una hora mas o menos antes de las ocho, y al ver que ambos Uchiha necesitaban ayuda en la cocina... Puede que Madara sea uno de los mejores dentro de la Empresa, pero para cocinar...era todo un fracaso.
-Ya sabes, lo de siempre...aun sigue con sus viajes, quería venir a ver a Naemi junto conmigo, pero le surgió un trato importante en el país del Rayo..-contaba el pelinegro mientras hacia las brochetas de carne y verduras.
La idea era prepara algo de Kushiyaki y Gyoza.*
-¿Casi no se ven?-pregunto Itachi mientras ayudaba a Madara a rellenar los raviolis chinos.
-No tanto como antes...-respondió el pobre hombre con tristeza, lo que mas le dolía era que ya tenía mucho sin "Acción", los viajes por las naciones no le dejaban mucho tiempo para ver a su amada esposa.- Extraño abrazarla...besarla...Su calor, su aroma...-
-Tener sexo...-soltó Madara con normalidad.
-Tener sexo...-repitió Obito, para después darse cuenta de lo que dijo Madara y él.-¡Oye!- Reclamo él pelinegro molesto.
Itachi soltó algunas risas por la reacción de su Tío. Tan agua y aceite como siempre...
-Siempre tan pervertido-volvió hablar Madara con una sonrisa ladina.
-Tsk...idiota-refunfuño el contrario.
Itachi suspiro contento, desde la muerte de sus Padres, cada pequeño momento que pasaban juntos eran agradables y reconfortantes. Hacían mas soportable el hecho de que ellos ya no estaban... Incluso de pequeños, Itachi veía a Madara u Obito como su Padre y a su adorada Tía, Mina *, como su Madre.
-Por cierto...¿donde esta mi hija?-hablo Obito.
-Debe estar con los raros de sus amigos.-hablo Sasuke, quien entraba a la estancia junto a Hinata, justo en el momento en el que hablo Obito.
-¿Ehh?...¿Como es que quiere mas a sus amigos que a su propio Padre?-agacho la cabeza mientras era rodeado por una aura de depresión, literalmente claro.
-La dejas sola por meses...no te quejes-dijo Madara con suma tranquilidad y aquel tono cortante suyo.
-¡¿Que traes contra mi hoy?!-reclamo Obito, tras verse siendo victima de agresiones por parte de su "Camarada".
-Dramático-murmuro el contrario.
-¡Cállate!-
Itachi mantenía una sonrisa nerviosa, mientras que Sasuke se hundía de la vergüenza en su lugar. Quizá no habría sido tan malo, si Hinata no estuviera a su lado.
-Hola, Hyuga-san-saludo Itachi. A lo que los otros dos "adultos" voltearon a ver la joven.
-B-Buenas n-noches-saludo Hinata con amabilidad.
Los dos hombres Uchiha se intercambiaron miradas tomaron su postura, y después volvieron su estado de "madurez".
-Hinata, él es Madara, mi tutor legal-dijo Sasuke ya un poco mas recuperado de su estado de vergüenza.
Madara camino a presentarse con educación y caballerosidad, como era su costumbre.
-Un placer- tomo la mano de Hinata y le dio un beso.
-Y él es...-hablo Sasuke apartando a su Tío de ella. Los Uchiha siempre tan celosos...o posesivos.
-¡Uchiha Obito!-saludo alegre y sonriente.-¡Mucho gusto señorita!-Aquella sonrisa, y esa alegría le eran familiar.
-Él es el padre de Naemi- Ahora todo tenía sentido.
Hinata miraba aquel hombre sorprendida, Naemi no se parecía mucho a él, quizá en esa alegría que desprendía y la forma de aquella sonrisa radiante, y a juzgar por la forma en la que se comporto, era mas que claro que la personalidad la saco de su Padre y lo físico de su Madre. Pero lo que mas llamo la atención de la Hyuga, fue ver como el hombre tenía un parche en el ojo izquierdo que se camuflaba con el cabello negro y largo que que tenía.
-Tu novia es muy bonita, Sasuke-dijo Madara.-Me agrada mas que la otra chica...¿como se llamaba?...-
-Oh, cierto...-hablo Obito mientras que el otro Uchiha recordaba.-Naemi esta con sus amigos, ¿cierto?-
-No-Aquello sorprendió a los otros tres Uchihas.
-¿Donde esta mi pequeña entonces?- hablo con una tranquilidad que levanto sospechas en los otros dos Uchihas.
-Debe estar con su novio-soltaba aquello sin miedo a lo que Obito fuera hacer.
-¿Novio?-sonreía de una forma retorcida y escalofriante.-¿Mi niña?...¿Novio?-
Lo siguiente que paso, era una escena tan cómica que a Hinata le costo trabajo mantenerse seria.
-¡C-Calma Obito!-decía Madara mientras sujetaba al susodicho por de los brazos al igual que Itachi y Sasuke.
-¡¡LO MATO!!-decía Obito.-¡¡MATARE AL QUE OSE ARREBATARLE LA INOCENCIA A MI PEQUEÑA!!-
-¡Comportate ya!-decia Madara.-¡Maldición!, ¡Recuerda que tenemos visitas!-
-¡Perdona, Señorita Hyuga!-aquello no sonó tanto como una disculpa.
-¡T-Tío tranquilo!-decía Itachi.
La retención y forcejeo durante unos minutos, antes de ser detenido cuando llamaron a la puerta.
Tan rápido como sus cuerpos se movieron, retomaron sus papeles. Obito e Itachi entraron a la cocina y Madara fue a atender la puerta.
-Lamento que hayas visto eso-se disculpo el moreno. Quien quería que la tierra le tragara.
-No te preocupes, Sasuke...-sonrió ella.-Tienes una familia muy alegre- Sasuke sonrió levemente.
Era tan lindo ver a una Familia como la Uchiha, eran el claro ejemplo de las apariencias no lo son todo. Se veían tan fríos, distantes y amargados...pero tras lo que vio, se dio cuenta de que no era cierta aquella fachada.
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La cena había estado deliciosa. Hiashi le resulto extraño que su hija estuviera ahí, pero Sasuke le explico que quería aprovechar para presentársela a su Familia.
Después de la cena, Itachi sirvió unos cafés y saco unos pequeños pastelillos que habían en la alacena.
Era la hora de hablar de negocios.
-Sabemos que su empresa esta en apuros económicos, Hiashi...-hablo primero Madara.-Obito y Yo, tenemos listo un plan de pago,...le prestaremos el dinero que sea necesario para que compre las demás acciones que hacen falta para poder crear un poder en la empresa y así crear una alianza-
Hiashi miraba a ambos hombres seriamente al igual que su sobrino Neji. Hinata estaba sorprendida de ver las miradas serias y feroces de los Uchihas, y pensar que hace unos cuantos minutos presentaban todo lo contrario.
-¿Por que ustedes no compran el resto?-hablo Neji.
-Lamentablemente, con el poco poder que poseo, me negaran a adquirir mas, además...Orochimaru esta..."simpatizando" mas con el consejo, es mas que claro que si quiero tomar mas poder Orochimaru lo querrá también-respondió Obito con aquella seriedad característica de los Uchiha.
-Siendo Hyugas, los altos mandos les darán importancia, y una vez adquiridas varias acciones.-continuo Madara.- Crearemos una alianza entre nosotros tres, nuestro poder dentro de la empresa superara a que que pose actualmente Orochimaru, y sin mas acciones que comprar, el no podrá tomar el poder-
Hiashi ya no estaba tan seguro del plan, si bien las miradas de los Uchiha podían llegar a ser incluso mas frías que las de los Hyuga. Y sin duda, Madara no era alguien con quien le gustaría involucrarse. Obito por su lado, ya tenía mas conocimiento, era el Uchiha mas "tranquilo" de todos, pero aun así...tal y como su hija, también el podía tener sus momentos así.
Neji sabía que tenían que aceptar el trato, de lo contrario, la empresa Hyuga se vería en horribles apuros.
-¿Cual es el plazo a pagar?-hablo con un muy ligero tono de inseguridad el Hyuga.
-Sobre eso...-respondió Obito.-Queremos tener acceso a su cuenta bancaria hasta que nos pague por completo. No se preocupe, solo queremos ver como maneja sus inversiones, ya una vez que nos haya pagado, no nos volveremos a meter en sus cuentas, también no se preocupe, no pensamos robarle, solo...observar-
Hiashi seguía sin estar seguro, las cosas sonaban fáciles, demasiado para ser parte de los Uchiha, pero sino lo hacía...
-No parece muy convencido...Hiashi-hablo Madara, mirándolo de esa forma frívola y seria. Aquella mirada fue suficiente para hacerlo tragar saliva duramente.- ¿Ahí algo que no le agrade?-
-No...No es nada.-respondió.-No me queda otra alternativa.-
-Maravilloso-la sonrisa tétrica y retorcida de Madara se ampliaba en su rostro.-No se preocupe...su empresa estará en buenas manos-
Aquella frase le basto para erizarle todo el cabello y empezar a sentir un muy mal presentimiento.
Habían quedado en que el día de mañana irían a la empresa y comenzarían con todo. Itachi dijo que quería ir por si las cosas no salían bien o por si era necesaria la presencia de unos de los hijos del fundador de la empresa.
Incluso aun que fuera domingo, sino querían que Orochimaru siguiera tomando mas poder tenían que actuar rápido.
Mañana sin duda sería un gran día....O al menos eso pintaba a ser.
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Tras la cena, y los tratos. Los Uchiha se habían ido a dormir, y claramente Hinata se había quedado en la casa junto con Sasuke, estaban ambos en la habitación del Uchiha, y el moreno se había quedado sentado sobre su cama en ropa interior, mientras que Hinata se terminaba de "preparar" en el baño.
Se miraba al espejo, ya estaba en ropa interior y solamente se miraba. Por alguna razón se sentía nerviosa, ya habían tenido intimidad, pero siempre se ponía nerviosa por esa razón.
Sasuke comenzaba a molestarse, ¿por que se trataba tanto?, ¿que tanto hacia en el baño?
Ya estaba a nada de ir y sacarla del baño, pero la puerta se abrió mostrando a Hinata con ambos brazos tapando sus pechos desnudos y con solo sus bragas puestas, sus mejillas adorable mente rojas y con esa expresión tímida.
Embobado...era la palabra que describía a Sasuke en ese momento, quien sin importar cuantas veces la viera, siempre se vería mas bonita ante sus ojos, y en esta ocasión se veía adorable mente sensual.
Pareciera que seria la primera vez que lo harían, la primera vez que iban a entregarse.
Ella camino con paso trémulo y con muchos nervios, la mirada de Sasuke era tan intensa que le aumentaba los latidos del corazón.
Cuando ella llego hasta él, Sasuke se levanto de la cama y se acerco a besarla, pero ahora él no la besaba como era su costumbre, no la besaba con fuerza y fiereza como siempre, sino que en esta ocasión la besaba con mas dulzura y amor.
Era como si se estuviera tomando su tiempo, explorando la boca de Hinata, explorando cada rincón que no haya explorado antes.
Sus lenguas no luchaban, sino que danzaban a un ritmo tranquilo pero deseoso al mismo tiempo.
Se tomaban su tiempo besándose, disfrutando del sabor de sus bocas. Poco a poco, Sasuke acercaba a Hinata a su cuerpo y esta se dejaba hacer cual pequeña muñeca de trapo.
Mientras Hinata seguía sumida en la delicia de los labios del moreno, este la había estado moviendo para recostarla sobre la cama.
Le encantaba el sabor de sus labios, dulces, suaves y cálidos, adictivos como la droga mas placentera del mundo.
Una vez ambos sobre la cama, Sasuke dejo de besar aquellos labios tan deliciosos, y empezar a bajar ahora por la suave y fina piel de la Hyuga, saboreando, lamiendo, besando y chupando la misma. Besando y chupando la suave piel de su cuello, bajando lentamente para llegar a los senos de esta.
Aquellos que ya estaban endurecidos por la acción del momento.
Lamió y beso ambos pechos, besos húmedos y pequeñas mordidas para marcarlos como suyos al igual que lo había hecho anteriormente con el cuello de su pequeña. Por que si, esa noche el marcaría cualquier rincón del delicado cuerpo de su amada Hyuga como suyo.
Sus manos no estaban quietas, y estas mismas se paseaban por las piernas de la chica, acariciando cada centímetro de piel, la suavidad de sus piernas era suficiente para hacerle perder la poca compostura que tenía.
Paseo su lengua por uno de los pezones de la chica, lamiendo en círculos y después introduciéndolo a su boca, chupándolo ruidosamente.
Hinata se tapaba la boca evitando sacar aquellos gemidos que rogaban por escapar, por que aun que la emoción era mucha, no tenía que olvidar donde estaban...
En cuanto las manos del Uchiha hubieron llegado a la única prenda de ropa que le quedaba a su amada, la sujeto del borde y comenzó a retirarla con delicadeza. Una vez que se deshizo de aquella prenda y tras lanzarla a su suerte en alguna parte de su habitación, este dejo de darle atención a los senos de ella y volver a bajar tranquilamente por su abdomen plano, repartiendo besos cortos por el mismo hasta llegar a aquella zona a la que sin duda alguna disfrutaría como nunca.
Hinata volteo a verlo y Sasuke volteo a verla a ella, mientras que él le dedicaba una de las sonrisas mas perversas, mas pervertidas y llenas de lujuria que alguna vez haya visto.
Sasuke beso los labios exteriores de la feminidad de la Hyuga, haciéndola arquear su espalda sutilmente. Su tortura apenas iba a comenzar.
Inicio con una lamida larga probando los líquidos que salían, prosiguió a lamer, pero ahora de una forma mas profunda, saboreando mejor aun el elixir que salia de ella. Pero lo que Hinata no pudo reprimir fue cuando el moreno con una mano le abrió los labios e introdujo su lengua haciéndola soltar un gemido que no pudo ahogar a tiempo y encobrar aun mas su espalda.
Complacido por la forma en la que ella reacciono, continuo con su intromisión, la cual se intensifico cuando lamió en círculos el tan delicado clítoris.
Entre gemidos y balbuceos por parte de la Hyuga, él continuaba con su labor, pero aquello no termino, no, claro que no. Dirigió su atención al clítoris de ella y lo siguió lamiendo de esa torturas forma, mientras que con su mano libre, introdujo no uno, sino dos dedos de golpe haciéndola gemir mas alto.
Continuo con su tortura unos minutos mas, hasta que la pobre Hyuga se armo con el poco valor que podía juntar y lo hizo detenerse.
Confundido se detuvo, y ahora Hinata le pidió que se acostara. El obedeció y se recostó, dejándola ahora ella encima de él.
Ella volvió a besarlo, siendo ahora ella quien llevaba el ritmo. Lo beso unos minutos y después se separo de él para ir recorriendo su cuerpo con sus labios y sus manos. En esta ocasión ella le daría placer.
Besando su torso, y bajando por él mismo con besos, llego hasta esa zona. La zona que solamente estaba siendo protegida patéticamente por los bóxer del muchacho. Con nervios a flor de piel y con temblor en sus manos, le quito aquella única prenda dejando al descubierto la potente y dura erección del muchacho.
No era una experta, y poco que conocía era lo que el rubio le había enseñado en su relación, así que haciendo habilidad de lo poco que sabía comenzó ahora ella con la tortura placentera contra él.
Comenzó masajeando todo el tronco de arriba hacia abajo lentamente, sacando suspiros del moreno, siguió poco a poco con aquel masaje que fue aumentando su velocidad, sacando mas suspiros y lo que era los fluidos pre-seminales.
Cuando su mano estuvo llena de los mismos, sabía que ya era el momento. Acerco sus labios y beso dulcemente la punta del miembro masculino y poco a poco después empezó a metérselo en la boca, haciendo que él muchacho arqueara la espalda levemente y soltase una especie de gruñido.
Poco a poco, y con esa sensación única e inimaginable, Sasuke sentía que no tardaría mucho en llegar a su limite, dado que, ver la dulce expresión de la Hyuga haciendo aquel acto de perversión le excitaban a un ritmo nada normal.
Y antes de que este pudiera terminar, Hinata se detuvo y le dedico una sonrisita traviesa, dejando al moreno confundió y sutilmente molesto por haberse detenido.
La Hyuga se levanto de él y camino a su bolso para tomar el preservativo.
-Claro...esa mierda...-refunfuño el Uchiha. Hinata le entrego el sobre pequeño, y después él solo se coloco el condón.
Si bien, a Sasuke no le gustaba mucho usar el condón, prefería que la chica se cuidara sola, pero claramente eso era antes, ahora que su forma de pensar había cambiado, supo que no se le debe dejar toda la carga a ella. Mas aparte que le encantaba la sensación de sentir a su chica sin nada de por medio.
Ya una vez con su protección lista, volvió a tumbarse por orden de la tímida Hyuga. Esta vez estaba muy osada al tomar ella las iniciativas, aun que claro, eso no le molestaba.
Mientras que él estaba acostado, Hinata se coloco sobre el moreno, y comenzó a besarle, besarle con amor y cariño, un beso largo que se volvió exigente. Y mientras que él estaba distraído por el beso, no se dio cuenta de como la Hyuga sola se acomodaba para después separarse de sus labios y auto-penetrarse de un solo movimiento haciendo que ambos gimiesen levemente.
-Y-Yo...l-llevare el r-ritmo...-soltó jadeante.
-Como quieras-coloco sus manos sobre la delicada cintura de la Hyuga.
Hinata comenzó a moverse lenta y tortuosamente para él. No había prisa en terminar, pero con el pequeño juego previo, lo que mas anhelaban ahora era terminar.
Sasuke le ayudaba con el movimiento de caderas, disfrutando la espectacular vista que los senos de la chica le ofrecían. Ver ese sensual rebotar de los mismos, le hicieron morder sus labios deseoso por meterse uno a la boca.
Hinata movía sus caderas a un ritmo lento, el cual fue aumentando a medida que sus caderas se movían.
Sus gemidos, sus gruñidos y el sentirse el uno al otro eran afrodisiacos que aumentaban mas y mas su deseo.
Y antes de darse cuenta, los movimientos de ambos ya eran mas rápidos y las embestidas mas profundas.
Sasuke gruñía, y Hinata gemía.
-M-Me volverás l-loco-jadeo el Uchiha.
Por su parte la Hyuga no pudo decir nada coherente, solo balbuceo algo. Mientras que ella se sumía en el placer, Sasuke comenzó a mover las caderas de la chica en forma circular, buscando ese punto.
Al cual tras un par de movimientos, logro dar, Hinata sintió la embestida mas fuerte y profunda que las otras, menos mal que el Uchiha la tomo a tiempo del rostro y beso sus labios para que ella ahogara el grito que salio de su garganta.
-N-No olvides donde estamos...-gimió él a su boca, para después seguir besándola.
Aquel beso tan salvaje que les hizo llegar mas haya de lo que sus cuerpos resistieron.
Hinata exploto en un orgasmo poderoso, mientras gemía en la boca del moreno, la presión ejercida por las paredes vaginales de la chica al momento de su orgasmo, aquella deliciosa presión hizo estallar al moreno.
La Hyuga salio de él y se desplomo sobre la cama agotada por el esfuerzo físico. Respiraba agitada mente mientras que Sasuke trataba de recuperarse, aquella ojos perla siempre le dejaba satisfecho, y como todo hombre le costaba recuperarse de un buen clímax.
Cuando se recupero, se retiro aquel condón y fue hasta el baño a tirarlo a la basura. Salio del mismo para ver a su amada sobre la cama dormida.
Sonrió ampliamente, mirándola dormir. Era un ángel así dormida, y uno muy bello. Se recargo sobre le marco de la puerta soltando un suave suspiro.
Tenía tantas cosas en su cabeza que no sabía como le sería posible dormir. Su venganza, sus asuntos familiares, el asunto de Toneri y lo que era peor.... Cada que miraba a Hinata, desde el día que le contó su venganza, sentía que debía abandonar sus planes ahora que aun había tiempo. ¿Por que quería hacer eso?, él no lo entendía, y lo mas seguro era que no quería entenderla o de lo contrario terminaría cediendo.
Pero por mas que él quisiera dedicarse solo a ella... Solo en que ambos fueran felices, no podía, simplemente no podía. Sabía de sobra que no podría vivir consigo mismo si dejara las cosas como están. Sentía que su corazón no estaría en paz si dejaba todo así, quería su venganza, la necesitaba. La necesitaba para poder cerrar la herida que le causo aquella horrible apuñalada. Su mente no iba a ceder...
Ni su corazón lo haría.
Volvió a la cama, tomo una manta para taparse a si mismo y a ella. Se acerco a Hinata y la abrazo, ella entre sus sueños le correspondió al abrazo, acurrucándose en el suave y musculado pecho del moreno para poder quedarse dormida con la dulce melodía de los latidos de su corazón.
Sasuke se dejo llevar por el cálido abrazo de la ojos perla, por el aroma que desprendía su perfume y poco a poco se fue dejando caer ante el sueño.
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*u* Lo consegui terminar! Me siento tan feliz !
Como dije, hubo mas lemon ¬w¬
Pues no tengo mucho que decir, solo que se preparen para los siguientes capitulos...esos si se veran intensos ;u;
Como en el capitulo anterior dejo la canción que inspiro a la escena lemonistica (?) (Sigo dudando de que la palabra exista xD ). También hubo otra "canción" que inspiro...me la paso una amiga y ... Por kami, solo recordarla me da... *Se desmaya*
~Nota *
Kushiyaki - brochetas de carne y verduras.*
Gyoza- raviolis chinos, rellenos (normalmente) de cerdo y verduras. * ~
Por si no sabían que clase de platillos prepararon los Uchiha xD
¡Gracias por el apoyo y comentarios que animan mucho a seguir! ¡Gracias! ;w; !
Att
Midna-Nightly \(^o^)/
PD: ¿Alguna canción favorita que tengan?, La mía es "We Are" de Hollywood Undead :3
PD: ¡SasuHina! y ¡NaruNae! (?) xD x3
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