Parte 12

Pasaron lo días, día tras día se preguntaba por qué su onee-san le provocaba tantas mariposas en el estómago, cuando lo abraza se ponía más rojo que tomate recién cosechado, no lo entendía y eso lo frustaba. Pero al verla feliz le generaba una tierna sonrisa que no sabía si era inconsciente o no, lo único que si sabía que él le tenía gran cariño hacia ella aunque no supiera de dónde proviniese o hasta qué punto llegaría. Una vez más, Conan se levantó gracias a las llamadas constantes de ran, aún con sueño, se dirigió hacia la cocina donde estaba ran y el tío kogoro desayunando un par tostadas con una taza de café.

Ran: veo que ya te levantaste. Ven, te preparé un rico omelet.

Conan asintió, se sentó y empezó a devorar la comida con gran apetito.
.
.
.

Horas después, conan se hallaba dentro de un auto alquilado por el tío kogoro. Tenía vendado los ojos con un pañuelo. Ran le había dicho que tenía una sorpresa para él y no podía verlo ni deducirlo hasta llegaran al destino. Después del incidente matemático, no estaba segura que cosas recordaba y que cosas no; así que prefirió no tomar el riesgo de que conan pudiese adivinar el lugar por medio de las calles.

Cuando llegaron al lugar, Ran desató el fuerte nudo que había hecho tiempo atrás para evitar que conan no se lo pudiese sacar si su curiosidad aumentaba. Los ojos del pequeño detective se abrieron despacio debido a cantidad de luz que brindaba el sol en esos momentos.

Ran: ¡¡Sorpresa!!, ¡¡Bienvenido a tropicaland!!.

Tío kogoro: ¿por qué el entusiasmo? Está más que claro, lo dice en el gran letrero de arriba.- señalandolo con sus ojos y cabeza.

Ran: no le quites la emoción, papá. -_-

Ran: ¿Qué te gustaría ver primero, conan-kun?

Eso lo puso en duda. Ran le mostró el mapa con sus atracciones y restaurantes. Conan escogió uno al azar y se dirigeron hacia allá. Después se dirigeron a las más cercanas que se encontraban. Al cabo de unas horas, ran reaccionó sorpresivamente.

Ran: Ay no! Es tarde! ¡¡Tenemos que apurarnos!!

Tío kogoro: Ran, ¿qué pasa?

Ran: no te preocupes papá. Conan-kun ven conmigo tengo que mostrarte algo.

Ran cogió la pequeña mano de conan y apresuró el paso, ya que, estaban en dirección opuesta.

Tío kogoro: oye ran ¿y yo qué hago?

Ran: no sé, pregunta si el restaurante tiene alcohol, busca mujeres hermosas, yo que sé.

No sabía lo que decía, hasta el mismo kogoro see impresionó ante tal respuesta. Estaba más enfocada en llegar a tiempo a ese lugar.

Llegaron al lugar un poco agotados por la repentina corrida. Ran se puso en el centro y conan la seguió. El suelo tenía unos pequeños hoyos dando forma de círculos que era cada vez más pequeños hasta el lugar donde se encontraban.

Ran: diez, nueve, ocho, siete.

Conan: ran onee-san, ¿por qué cuentas?

Ran ignoró su pregunta para no perder la cuenta regresiva.

"Cuatro"

"Tres"

"Dos"

"Uno"

Inmediatamente unos chorros de agua salieron de esos hoyos en el piso con gran presión. Primero salieron los de más afuera y luego los de adentro.

Despues de asombrarse ante tal "mágico" acontecimiento dirigió su mirada hacia ran, mostrando su sonrisa maravillada, que lo hizo leventemente sonrojar.

"A ti te gustan estas cosas, verdad?"

Otra imagen pasajera pero esta vez el punto vista más alto como si hubiese estado a la misma altura que ella. El intenso dolor de cabeza volvió a aparecer, unos pequeños gemidos brotaron de sus labios, aunque lo suficientemente fuertes como para atraer la atención de ran.

- conan-kun ¿estás bien?

- sí, solo un pequeño dolor de cabeza, ya pasó antes, así que no hay que preocuparse.

- ¿Qué? ¿Cuándo?

-hace un par de días. Unas imágenes pasaron por mi cabeza diciendo cosas como: "eres sorprendente" y "no soy una llorona". Había algo más pero no lo recuerdo bien.

Eso dejó congelada a ran por unos segundos. "No soy una llorona"..., eso se lo dijo a Shinichi cuando lo conoció por primera vez en la guardería!!. Puso una cara de póker para no mostrarse muy exasperada y pedirle más información.

- y... ¿esta vez qué fue?

- cuando contabas los últimos cuatro número, escuché a alguien también los contabas pero era un hombre, su voz era más masculina.
Y después de que el agua saliera escuché a la misma voz decir: "A ti te gustan estas cosas, verdad?". ¿Qué crees que sea esto, ran onee-san?

Esta vez no pudo controlarse, su cara de póker desapareció completamente de su rostro. Esas palabras las pronunció Shinichi cuando le mostró esta misma escena. ¿le habrá contado Shinichi a conan-kun? Pero... ¿Qué ganaría con decirle eso?. Reaccionó cuando se dió cuenta que conan se la quedaba mirando.

-Ah...creo que es porque estas recuperando tus recuerdos.

- ¿Enserio? Que bueno.

- Sí...que bueno.

Después de aquel extraño suceso, se encontraron con su padre y fueron a disfrutar de las atracciones que les faltaba. Cuando cerraron se dirigieron al auto para ir a casa. Después de un par de agotadoras horas llegaron a su destino. Ran y conan se bajaron rápido para que el tío kogoro pudiera devolverlo en el plazo estimado.

Faltaban pocas escaleras para abrir la cerradura de la puerta y poder irse a descanzar pero en ese momento ran recordó algo importante.

- Ahh!, casi se me olvida!. Debo ir a recogerlo.

- ¿Qué cosa, ran onee-san?

- es una pulsera, me la dió Shinichi en mi cumpleaños. Creo que se me cayó ayer en la noche y si mi papá lo encuentra mañana, probablemente la botará o se la regalará a una mujer bonita.

- En ese caso, déjame ayudarte. Así la encontramos más rápido.

- Gracias conan-kun.

Bajaron las escaleras, abrieron la puerta y empezaron a buscar por todas partes, evitando formar desastre mínimo. Aunque no sabían que alguien más los estaban observando.
.
.
.

- ¿estás lista?

- sí, pero... ¿a quién le disparo?

- dispárale a la chica.

- pero no íbamos a matar a...ohh ya entiendo. Bien jugado...Gin.

- guárdate los halagos para alguien más, Chianti. Si no fuese por Malbec, quién se disfrazó de ese inspector, no hubiésemos sabido que esas ratas todavía andaban sueltas.

Ran y conan seguían buscando esa pulsera. Conan se había colocado detrás del escritorio y ran delante de éste para dar una última revisada al suelo iluminado por la luz de la luna, ya que el foco de la habitación se encontraba descompuesto y no iba a ser cambiado hasta mañana. Después de haberse perdido la mayoría de sus esperanzas, conan alzó la mirada para reportar las malas noticias hacia ran. En eso, vió una pequeña luz roja en dirección a la frente de ran. Lo reconoció enseguida...un rifle!. No faltaba mucho tiempo para el disparo.
Su cuerpo reaccionó inmediatamente y se movió en segundos, aunque entender la razón de esta acción solo le costó perder algunos microsegundos y decidió no poner resistencia ante ello.

- Adiós, Shinichi Kudo.- pronunció sus últimas palabras con una gran satisfacción.

La bala rompió el vidrio y se dirigió a la cabeza de ran. Un fuerte impulso le hizo perder el equilibro y caer contra al suelo, teniendo encima a conan. 

- ¿Estás bien, conan-kun?...¿conan-kun?

No respondía, pronunció su mismo nombre varias veces pero no hubo respuesta. Ran tocó la parte derecha de su espalda con su mano. Sintió su mano manchada por algo, retornó su mano y se dió cuenta que era sangre.

Conan había recibido el disparo.

Hola! Nunca había escrito 1200 palabras. Nuevo logro ^ ^. Pude ser puntual (bueno casi😅) .Al fin pude llegar a la parte que quería. ¿Qué les ha parecido?. Me esforcé poniendo tildes para no estar arreglando después. Aunque si me falta una o puse una de más no sería novedad 😂😂😂. Debo aclara algo: Malbec no es un personaje de la serie, solo decidí poner a alguien que no sea vermouth para disfrazarse. Espero que les haya gustado. Hasta el próximo mes :D

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top