Un regreso al pasado
Mika salió de la sala de cumpleaños a toda prisa, puesto que Arashi le había escrito por mensaje que una sorpresa le aguardaba, así que tenía que correr. El idol se preguntaba qué podía ser mientras corría, puesto que pensaba que su amiga no tendría nada más preparado para él después de la velada del día de su cumpleaños.
Iba tan ensimismado, que no se dio cuenta de que había alguien que pasaba por su lado, había fijado su vista en él y volteándose a saludarlo:
—Buenas tardes, Kagehira.
—Ah, buenas tardes, Oshii-san. Ahora no puedo hablar, que...—al darse cuenta de a quién había saludado, el de ojos dispares frenó en seco y se giró, asombrado—: ¿Oshii-san?
El líder de Valkyrie sonrió con ternura mientras abría los brazos, acogiendo entre ellos a su novio y compañero de unidad.
—¡Oshii-san, pensé que este año no te vería hasta Nochevieja!—el menor sonrió mientras se abrazaba al torso del mayor—. ¡Qué alegría que estés aquí!
—Me alegro de verte, Kagehira. Veo que te conservas en forma—dijo Shu mientras apartaba un poco a su novio y ponía su mano izquierda bajo el mentón del mismo—. No está nada mal.
Mika se sonrojó y rio levemente, lo que hizo sonreír a Shu.
—¡Ah, cierto, Naru-chan me está esperando con una sorpresa!—recordó Mika, dando media vuelta con la intención de marcharse.
—Eh, espera. Se refería a mí, tu amiga quería decirte que había venido por tu cumpleaños—lo detuvo su novio, cruzando los brazos sobre el pecho.
—¿De verdad?—Mika ladeó la cabeza mientras giraba su cintura para mirar a Shu.
—Sí, y realmente, soy yo el que tiene una sorpresa para ti—el líder de Valkyrie entrelazó su mano con la de su compañero con delicadeza antes de hacer que caminara con él—. Venga, acompáñame, antes de que se ponga el sol.
Mika volvió a ladear la cabeza, pero sonrió y asintió, haciendo caso a su novio.
*
El cumpleañero frunció los labios en un puchero mientras se subía la cremallera del traje que su novio le había pedido que se probara.
—No esperaba tener que probarme un modelito el día de mi cumpleaños, pero bueno, seguro que Oshii-san se ha esforzado mucho, así que no debería hacerle un feo—dijo Mika para sí mismo mientras se miraba en el espejo de cuerpo entero frente a él.
Creyendo que se veía decente, observó de nuevo el traje que Shu había diseñado para él: era un traje elegante, claro estaba, pero al mismo tiempo reflejaba un poco el estilo de Mika, como con su Exclusive Outfit. Si ese mostraba detalles de mariposa, éste se asimilaba más al de un pájaro, con el diseño de la parte del faldín similares a las alas de dicho animal. El traje era de un bonito azul claro con detalles ámbar, contrastando los ojos del cumpleañero. Como complementos finales, unos botines altos hasta la pantorrilla, un corsé que apretaba un poco, luciendo su cintura, y unos guantes negros.
Mika asintió antes de abrir la puerta que quedaba a su derecha, puerta que Shu le había pedido que abriera una vez hubiera terminado de probarse el traje. Grande fue su sorpresa al ver que la sala contigua había sido decorada para parecer el escenario de una ópera antigua... no, más bien, decorada para parecerse a un salón de baile de la época gloriosa de Versalles.
El idol sonrió al ver lo especiosa y bien decorada que era la sala, y más al ver a Shu en el centro de la sala, con una sonrisa en los labios y vistiendo un traje parecido al suyo, sólo que, en vez de tener detalles de pájaros, tenía detalles de las ropas imperiales de la antigua China.
—Oshii-san, ¿es esta tu sorpresa?—preguntó Mika mientras se iba acercando a su novio.
—Efectivamente: últimamente, en nuestras videollamadas, me encuentro con que estás leyendo revistas sobre este tipo de salas de baile o artículos del mismo estilo. Además, la última vez que llamé por videoconferencia a Wataru, salías de fondo practicando un vals frente a un espejo—contestó Shu, lo que causó que Mika se sonrojara.
Shu se acercó a Mika y tras encender con un control remoto un altavoz, tomó a su novio de la cintura con una mano y tomó con su mano libre una de las del contrario.
Ambos comenzaron a deslizarse por el suelo de la sala, al compás de "El Danubio Azul", tan común pero tan eficaz.
—¿Has alquilado esta sala sólo para contentarme... porque sabías que me estaba comenzando a gustar el vals?—pregunto Mika mientras daban una vuelta, haciendo que los faldines se mecieran con ellos—. ¿Y porque es mi cumpleaños?
—Es para estar al mismo nivel que la gymkana que me hiciste por mi cumpleaños—contestó Shu mientras daba unos pasos hacia delante, haciendo que Mika los diera hacia atrás.
—¿Ngah? ¡Pero hice la gymkana porque Oshii-san vino desde Francia por mi cumpleaños el año pasado!—replicó Mika mientras fruncía el ceño, aunque no por enfado. Seguidamente, dio una vuelta sobre sí mismo antes de volver a su posición original—. ¡Ahora tengo que hacerle algo más grande que esto para compensárselo, y...!
—Kagehira—Shu llamó a su novio, que alzó la mirada, conectando sus orbes dispares con las amatistas del contrario. Shu sonrió mientras inclinaba a Mika sobre su brazo y después inclinarse él sobre su novio—. No me debes nada. Si lo quieres hacer, hazlo porque sale de tu corazón, y no porque quieras hacer "un gran gesto". Me gusta mucho esta dinámica que hemos adoptado, porque así, tú me muestras cuánto me quieres, y yo te muestro lo mucho que te quiero a ti.
Mika parpadeó un par de veces antes de sonreír, y con las mejillas sonrosadas, se incorporó de golpe, se soltó de Shu y se puso un poco de puntillas mientras tomaba las mejillas de su novio entre sus manos, procediendo a besar sus labios con emoción.
Shu, quien en los primeros instantes se quedó helado en su sitio, se relajó, para después cerrar los ojos y posar sus manos sobre las de Mika, agradeciendo el contacto que el menor le ofrecía.
—Entonces, ¿este traje también es un regalo para mí?—preguntó Mika tras separarse un poco de Shu para poder hablar.
—Realmente, el traje es EL regalo—enfatizó Shu—. La sala de baile es sólo la guinda del pastel. Además, quería ver cómo te quedaba el corsé.
Mika se sonrojó ante las desvergonzadas palabras de Shu antes de reír levemente y abrazarse al contrario, que le devolvió el abrazo mientras comenzaban a mecerse de nuevo al compás del vals.
—Feliz cumpleaños, Kagehira—susurró el líder de Valkyrie—. Por favor, sigue siendo mi novio este año venidero.
El otro integrante de Valkyrie asintió mientras contestaba:
—El año que viene, y los que hagan falta. Te quiero—y tras esas palabras, Mika se volvió a poner de puntillas para besar de nuevo a Shu.
-MGGBBRAE
1.110 palabras. No está mal para un shot que comencé a escribir como a las 00.35 y sin ninguna idea en mente realmente :D (Ahora son casi las 01.20 en España).
No tenía pensado hacer nada por el cumple de Mika, pero ya me veis, aquí estoy: cinco días después (mejor tarde que nunca), y con un shot dedicado totalmente a marlySukisuki, que me pidió una continuación.
Por si acaso no publico nada en lo que resta de día, espero que paséis una feliz Nochevieja y feliz Año Nuevo a todos <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top