Habían pasado aproximadamente unos 12 años después de aquella menor de 8 años pudo escapar y encima destruir aquel horrible lugar y había logrado regresar a su hogar para poder hacer su vida normal, a pesar de ocultar su condición a todo mundo, incluyendo a su familia.

Aquella niña, ahora era una adulta de 20 años con una gran carrera en la ciudad de Nueva York, trabajaba como una veterinaria y su clínica llego a ser una de las mas prestigiosas en la ciudad, dentro de las mejores cinco.

Era una joven de estatura 1.65, el color de su cabello era negro con las puntas pintadas de un tono púrpura, su cabello era largo y lacio por lo que siempre lo dejaba suelto, su piel era de un tono pálido, el tono de sus ojos eran de un azul borroso y bajo aquellos ojos podían notar se un tono algo oscuro bajo sus párpados, siendo estas una ojeras que se notaban si alguien la veía con detenimiento.

Aquella joven se encontraba justamente trabajando en su clínica en constante movimiento, pues aunque tuviera un gran personal ella siempre iba a encargarse de algunas cirugías, supervisar a su personal en como hacían algunas de las cirugías o chequeos, también hacía algunos chequeos a algunos animales.

Eran aproximadamente las 2:37 de la tarde, para ese entonces ya había bajado un poco la cifra de animales que estaban en la clínica, a lo que se encontraba mas desocupada. Hasta que escucho la puerta de la clínica ser abierta a lo que alzo la vista mirando a quien iba entrando, siendo esta una chica de cabellos color azabache, ojos azules con una jaula con una tela cubriendo esta, obviamente la peli negra la reconoció, era una reportera del canal 6 y salía siempre todos los días temprano como a las 7 de la mañana.

Pero al notar mas aquella gran jaula que traía en sus manos dejo de lado el hecho de que fuera reportera, pues su ocupación era ver por el bienestar de aquellos animales no importa quien lo trajera o como fuera esa persona.

Aquella azabache fue acercándose a la recepcionista del lugar, siendo una joven de 23 años de cabellos color rubios y ojos cafés. -Disculpe señorita, vengo por una cita en nombre del señor Vernon Fenwick, me pidió como favor traer a su mascota- menciono la azabache mirando a aquella recepcionista quien al instante no tardo en ocultar cierta emoción al escuchar de aquel hombre exitoso que detuvo a Destructor la primera vez.

-Increible, el Halcón Fenwick, y tu eres la reportera del canal 6, esto es genial- mencionaba la joven mirando a la mayor mas reaccionó mejor para hacer su trabajo al observar a su jefa observarla, sabiendo que quizás la regañaria por distraerse y no atender como se debía, por lo que empezó verificar por su computador aquella cita. -Asi es, su cita es hasta las 2:40, llego a tiempo, permita me verificar que compañeros estén disponibles- menciono la joven apunto de levantarse de no ser porque miro a la mas baja y joven quien era su jefa.

-No hace falta, gracias por encargarte Topacio, yo haré el chequeo- menciono la de ojos azules borrosos a la mas alta quien solo asintió, a lo que volteo a ver a la azabache haciéndole una seña para que la siguiera. -Venga conmigo- menciono para empezar a caminar con la mayor detrás de ella.

Una vez llegaron a uno de los cuartos las dos chicas entraron, a lo que la peli negra con mechones púrpuras, empezó a ponerse aquellos guantes de látex. -¿Puede retirar la tela de la jaula?-

Al escuchar aquella pregunta de la mas joven la azabache no tardo en asentir con la cabeza para retirar con cuidado aquella tela de la jaula para revelar el animal que estaba dentro de esta, siendo un halcón joven a lo que pudo notar con la vista la de mechones púrpuras.

-Asi que...¿usted es Sarah Castillo?, la joven veterinaria de la cual todos los medios han hablado estos meses- menciono la azabache mientras miraba a la mas joven realizar aquel trabajo, mentiría si no le daba cierta sorpresa ver como ella siendo tan joven ya era toda una profesional y no solo eso, si no que siendo jefa de una de las veterinarias mas prestigiosas de Nueva York y probablemente con empleados que eran mayores que ella.

-Asi es, estoy al tanto de todo eso- comento sin mucha importancia a aquel asunto, pues se enfocaba mas en revisar a aquel joven halcón peregrino afuera de su jaula, tomándolo con sumo cuidado tocando con su dedo pulgar el costado de aquel halcón para tenerlo tranquilo, aunque tuviera aquel arnés colocado y cubriendo su vista debía de ser realmente cuidadosa, algo que había aprendido. -Sea sincera señorita O'neil, ¿Cual fue su principal razón para hacerle este favor al señor Fenwick?- pregunto esta sin titubeos inspeccionando con sumo cuidado la zona de las alas del halcón para comenzar.

La azabache al escuchar aquello realmente la tomo un poco de sorpresa, mas de cierta manera se lo esperaba, si bien estaba ahí principalmente para poder quizás probar suerte o realmente conseguir una entrevista con la oji azul borroso, pues ayudaría realmente en su trabajo, y realmente seria una gran exclusiva pero considerando el hecho de que cada reportero sabia que si quería entrevistar a la menor era muy probable que los mandara a freír espárragos, o en el peor de los casos denunciar al reportero por acoso y que le den una orden de alejamiento.

Sin embargo ese peligro no la detendría, así que escogió correr aquel riesgo, y al saber que su amigo había pedido una cita para su reciente mascota en aquella clínica decidió aprovechar aquella oportunidad para poder estar sin que la corrieran al instante.

-El estaba un tanto ocupado hoy para venir a traer a su mascota así que me pidió a mi como favor traerlo yo, es mi amigo y apenas hace unas semanas pudo tener este halcón- menciono esperando que la menor creyera aquello a lo que se mantenía con un rostro muy tranquilo.

La peli negra afiló un tanto su mirada al escuchar la respuesta de la mayor mientras la miraba de reojo para ver sus reacciones, no era una tonta si creía que se tragaría ese cuento estaba totalmente equivocada. -Ya veo...- fue lo único que menciono para después tomar con sumo cuidado a aquel animal y meterlo en su jaula de nuevo sin ningún inconveniente, pues ya había terminado de hacer aquel chequeo. -Bien, le falta realmente muchos nutrientes al halcón, es muy joven así que realmente necesita las proteínas para su crecimiento, ¿Sabes con que lo a estado alimentando el señor Vernon?- regreso su vista a la mayor esperando alguna respuesta por parte de esta a su interrogante.

La azabache sin embargo se quedo callada pensando en si el castaño le había dicho algo sobre la alimentación de aquella ave, mas no le dijo nada. -La verdad no, Vern no me comentó que es lo que le suele dar a su halcón- menciono la oji azul mirando a la joven y después al halcón.

La mas baja tan solo suspiro bajo tocándose la cien, de no ser porque la azabache estaba ahí en el lugar del verdadero dueño le estaría ya dando un total regaño. -De acuerdo, por el momento no es grave pero realmente necesita cambiar su alimentación, no puede seguir así y mas si esta en pleno desarrollo- menciono mientras sacaba un lápiz y anotaba en una hoja de papel de su escritorio para que recordara entregárselo al castaño. -Como es joven lo mas aconsejable es darle presas pequeñas como roedores, pero vivas y que el los aprenda a cazar, no es aconsejable darle al animal ya muerto o le puede transmitir enfermedades, ya cuando crezca las presas pueden ir cambiando- menciono después de terminar de escribir aquello en el papel, seguido de un recordatorio para que el fuera en un mes. -Y también dile que en un mes espero verlo a el aquí con el halcón para saber si ya esta mejorando con la nueva alimentación-

La mayor no tardo en tomar aquel papel, asintiendo con su cabeza a lo que decía la menor, siendo realmente profesional en su trabajo. -Me encargare de decirle, gracias- agradeció estando por irse, pero se detuvo antes de abrir la puerta y volver a ver a la mas baja. -Disculpe, señorita Sarah, se que estará sumamente ocupada pero me preguntaba si ¿Podría invitarla a comer en un restaurante cercano?, Solo para hablar- aclaro la azabache mientras miraba a la menor esperando que no fuera a rechazarle aquello.

La oji azul borroso no pudo evitar no ver con clara confusión a la mayor, mas pensó en aquella invitación, siendo claramente obvio que no iba a terminar solo así con aquella reportera, sin embargo su actitud era sumamente diferente a la de otros reporteros, mordió su labio inferior como consecuencia mientras pensaba si tenía algo que hacer además de que no le convencía mucho, sin embargo se rindió. -Bien, cerramos hoy a las 6 de la tarde así que esta bien- menciono aceptando aquella invitación sintiéndose algo extraña al aceptar la invitación de la mayor cuando ya tenía en mente el porque la invito.

La azabache de 30 años sonrió al escuchar que había aceptado. -Gracias por aceptar, regreso a las 6- menciono la mayor sin ocultar la sonrisa de sus labios para despedirse de la menor con clara alegría, llevándose consigo a aquel halcón después de volverlo a cubrir con aquella tela para evitar que alguien lo viera afuera.

Sin embargo la joven veinteañera se preguntaba por la estupidez que hizo, solo porque ella fuera mas agradable que los otros reporteros acepto aquella invitación, cuando quizás era otra clase de estrategia, sin embargo no podía hacer mas, ya había aceptado aquella invitación, ahora se jodía y cumplía con lo que acepto.

Las horas pasaron hasta que finalmente llegaron a ser las 6 de la tarde, la clínica ya había cerrado y tal como había prometido la azabache realmente se quedo esperándola hasta que termino de cerrar la clínica, siendo un amable gesto además de ser puntual.

Las dos chicas iban a caminando por las calles de aquella ciudad, unas cuantas cuadras hasta llegar a aquel restaurante, pasando y topándose a cada calle con cualquier persona algo un tanto con un tornillo safado probablemente, pero ya estaba acostumbrada a aquello la menor, después de todo, ya llevaba 3 años viviendo ahí. Eso no era nada nuevo para ella.

Una vez entraron a aquel restaurante, ambas se sentaron en una mesa para dos personas, y veían el menú del lugar, para seguido pedir que les tomaran la orden. Una vez se quedaron en espera de que les trajeran la comida se quedaron en un silencio un tanto incómodo, o al menos así lo sentía la mas baja, pues no estaba acostumbrada a juntarse con alguien o interactuar así mas que para labor de trabajo.

-Asi que...eh...escuchado que eres mexicana, dime ¿La comida de allá es tan buena como dicen?- comento la azabache para así empezar alguna clase de conversación con ella, esperando que todo después fluyera bien.

La menor sin embargo miro a la mayor con un tanto de extrañes pensando en su pregunta. -Bueno, realmente es muy buena, ahí mucha variedad- menciono la joven ya cansada de que la mayor se hiciera la que no supiera del porque la invito.

-Mira, no quiero ser grosera señorita O'neil, sobre todo porque a sido sumamente amable, pero se que realmente no me invitó porque si a comer, es una famosa reportera y hace un buen trabajo pero me temo que no aceptare hacer alguna entrevista- menciono la menor finalmente dejando en claro aquello para ver a la mayor con total seriedad.

Abril realmente se quedo un tanto sorprendida por la reacción de la menor, si bien si había sido ese su punto y motivo para invitarla. -Entiendo, pero al menos ¿Podríamos platicar un poco?, No para una entrevista, si no para conocernos mejor si usted gusta- menciono esperando que aquello llegar a relajar a la mas baja.

La peli negra miro con clara incredulidad a la mayor ¿Que clase de estrategia hacía?, No tenía idea pero realmente la dejaba confundida. Rasco un poco su nuca pensando en las palabras de la mayor. -Bien, solo una plática casual y hasta aquí- comento siendo clara con su punto mientras la veía.

La azabache simplemente sonrió y asintió comprendiendo. -Claro-

El tiempo fue transcurriendo algo rápido a la vista de la peli negra y después de aquella reunión que creyó que seria la última, la azabache siguió en contacto con ella. Si bien la menor no era de tolerar a la gente algo "pegajosa" estaba tolerando bastante bien a la mayor, hasta se sorprendía por eso.

Cabe decir que hubo veces que le preguntaba si podría tener la oportunidad de hacerle la entrevista, a lo que ella se negaba, no eran muchas las ocasiones sin embargo si le irritaban un poco.

Aquellas reuniones pronto se empezaron a hacer costumbre, llevando cada vez mas tiempo, tanto que al final se acostumbro a la presencia de la azabache en su vida, incluso de cierta manera se lo pasaba bien con ella en cada reunión, se divertía, mas no se convencía realmente de estar así, cuando después de aquel acontecimiento de hace 12 años había decidido no involucrarse con la gente, ni con platicas, y ni formar lazos como amistades o incluso pareja. Siendo así que nunca tuvo amigos a lo que se mantenía alejada, y por aquellas razones tampoco le agradaba ser el centro de atención.

Sin embargo con forme pasaba el tiempo fue aceptando a la reportera en su vida ahora, pasaba el tiempo, cada vez se conocían mas, hasta tener la suficiente confianza que Abril se autonombró su amiga, sin embargo la menor realmente no puso oposición a aquello, por primera vez había escogido dejar que todo fluyera, después de haber estado escondida y evitando a la gente por su condición por primera vez eligió permitirse tener una amistad.

Con forme pasaron los meses la confianza fue creciendo, siendo que pasaron ya siete meses desde que empezaron a juntarse ambas chicas, la azabache dejo de insistir al cuarto mes con la entrevista pues después de escuchar las razones de la menor y el hecho de que realmente le interesaba ser su amiga de verdad ya ni siquiera le intereso eso.

Lo cual la oji azul borroso aprecio realmente, incluso había dejado salir su personalidad real o bueno gran parte de ella.

Viernes 8:05 de la noche

Ya era de noche y como siempre a aquellas horas todo se encontraba oscuro, algunas calles se encontraban solitarias mientras otras estaban con un gran y largo tráfico. La peli negra como de costumbre al ser viernes siempre solía salir tarde, pues tenía ella la costumbre de asegurarse de que todo estuviera en perfecto estado, tanto como en la limpieza y si hacía falta ella volvía desinfectar todo, así como acomodar las cosas que estuvieran fuera de su lugar y cerrar la clínica de forma adecuada.

Una vez termino por cerrar todo, estaba por retirarse cuando sintió su celular vibrar, sabiendo que era de un mensaje lo encendió y observo que era de su amiga azabache pidiéndole si le podría hacer el favor de acompañarla pues no se sentía segura y incluso vio que le había enviado su ubicación actual, siendo eso muy extraño pero al no tener un buen presentimiento decidió ponerse en marcha al lugar en el que se encontraba su amiga.

Una vez finalmente llego a aquella zona hizo uso de una de sus habilidades que no dejaba notar y pudo detectar afortunadamente el aroma de la azabache cerca, lo que no se esperaba era que al apenas acercarse y saludar a la mayor esta la abrazara con sumo alivió, inclusive en su rostro y ojos demostraba al parecer que estaba realmente afectada por algo.

-¡Sarah!, Me alegra mucho el verte bien- menciono la azabache apretando incluso a la menor en aquel abrazo ignorando que muy probablemente casi la asfixiara en aquel abrazo.

-Okey...Abril primero...¿Podrías soltarme?, Me asfixias- decía la mas baja sin haber correspondido aquel abrazo por la fuerza que uso y además de que no estaba acostumbrada a tanto afecto de esa manera.

-Oh, perdón, pero de verdad me alegra verte a salvo- comento al separarse, dejando salir una gota de agua que había escurrido de sus ojos azules los cuales estaban algo rojos y aún cristalizados, como si ella hubiera estado llorando antes.

La de cabellos negros y púrpuras al notar aquello su actitud cambio a una mas seria y con preocupación total a su amiga. -¿Has estado llorando?...Abril mírame, ¿Que pasa?, ¿Porque estás así?- pregunto la menor a la azabache claramente preocupada y esperando una respuesta inmediata a sus interrogantes , no era tonta, era obvio que algo le pasaba además de que había notado el extraño comportamiento de la mayor desde una semana pero ella siempre lo evadía, ahora ella ya no podía evadirlo, tenia que decirlo si o si.

La azabache miro a la mas baja mientras se secaba aquellas lágrimas. -Yo...ya no puedo evadirte, Sarah lo que ocurre es realmente serio- menciono la azabache mientras miraba a la menor empezando a caminar junto a ella, tenía que decirle lo que ocurría por su seguridad.

-Es obvio que conoces el grupo criminal llamado el clan del pie, verás ellos hace unas semanas me han estado enviando mensajes de amenaza que si no les decía lo que querían iban a dañar a los seres que quiero, incluyendo a mis amistades, y hace unas semanas atacaron a Casey- comenzó a explicar hacía la menor, claramente omitiendo detalles que no podía decirle, claramente como el hecho de que la información que querían de ella era que les revelara la ubicación de sus amigos mutantes.

Aquella respuesta por parte de su amiga mentiría si no se quedo un tanto sorprendida o anonadada con lo que le decía, si bien sabía que los reporteros realmente corrían muchos peligros pero suponía que lo que querían aquel grupo criminal debería de ser algo muy serio y mas si lo sabía ella, realmente estaba metida en algo muy serio la azabache.

-y ¿Ya has ido a la policía?,Abril esto es muy serio, mira no se que información sepas pero realmente corres peligro- comento con total seriedad mientras caminaba a lado de la mayor, en dirección a su hogar.

-Lo se Sarah, y si ya fui con la policía pero aún así, me temo que también te estoy poniendo en peligro-

Al escuchar aquella parte realmente no le sorprendió a la menor, siendo que ya lo veía venir y se podría defender muy bien por su condición pero aquello no lo sabía la azabache y realmente la de mechones púrpuras no pensaba jamas decírselo por miedo a como reaccionaria ella o lo que podría decir.

-Abril puedes calmarte, además creeme que yo a comparación de Casey estaré bien, en todo caso estaré alerta eso no lo vallas a dudar- comento la mas joven con total seguridad, aunque aquello no la tenía del todo segura a la mayor pues claramente no conocía lo que podría ser capaz la menor.

Mientras caminaban las dos chicas todo iba extrañamente bien hasta que la joven peli negra pudo detectar con su aroma a aproximadamente unos metros de ellas a una persona, todo hubiera seguido bien de no ser porque pudo detectar a mas personas al rededor y que siempre y constantemente las estaban siguiendo, se sentía sumamente tensa, era como si estuvieran siendo acorraladas por una manada de depredadores y ellas eran las presas.

Miro de reojo a la mayor quien no tenía ninguna idea de lo que sucedía así que tenía que decirle para que estuviera atenta a su alrededor pero sin llamar la atención. -Abril no te alteres, no digas nada o reacciones mal pero...nos están siguiendo- comento en voz baja estando cerca de ella actuando "normal" ante aquello, pudo notar como la mayor se tenso ante esto, sin embargo siguió caminando junto a la menor siguiendo aquel consejo, pero metió una de sus manos al bolsillo de su pantalón para apretar el botón de un pequeño aparato.

Dicho objeto era una alarma de emergencia que su amigo Donatello había fabricado y le había dado en estos casos. Y aquella alarma comenzó a sonar en una zona de las alcantarillas con suma frecuencia mostrándose en cada una de las pantallas del lugar una ubicación.

-¿Que sucede Donnie?- fue el primero en preguntar aquel mutante de cinta roja al ser de los primeros en escuchar aquella alarma.

-Es la alarma que le di a Abril en casos de emergencia- respondió el de púrpura quien rápidamente miraba aquellas pantallas con la ubicación de la nombrada, siendo obvio que si apretó aquél botón era que se encontraba en problemas, y al saber de aquellas amenazas que le han sido enviadas a la mayor lo confirmaba.

-Vamos, no hay tiempo que perder- fue lo único que dijo como orden el mayor de cinta azul con aquel tono serio de siempre, para empezar a moverse junto a sus hermanos y equipo y ir a proteger a su amiga.

Las dos chicas corrían sin parar por las calles de aquella ciudad llegando a una zona de cargas con grandes contenedores, aquel lugar era como un maldito laberinto, mas la peli negra podía guiarse inexplicablemente a los ojos de la azabache pero aquella anomalía lo hablaría con la menor otro día.

-Okey...les tomara un tiempo encontrarnos entre este laberinto pero tranquila lo tengo calculado, saldremos de esta ¿Si?- decía la de mechones púrpuras mirando con suma seguridad a la mayor quien estaba mas asustada que nada, claro que mantenía su tono de voz siempre bajo para que no se delataran.

-Esta bien... confío en ti Sarah, pero...¿Como estás tan segura por donde...- iba a seguir preguntando la mayor cuando siente que la menor le tapa la boca y hace señal de silencio para quedarse quietas ambas, pues escuchaban los pasos de uno de los ninjas cerca.

Las dos estaban tratando de calmarse hasta que finalmente aquellos pasos se iban escuchando cada vez mas lejos, siendo un verdadero alivió para la azabache y la de mechones púrpuras.

Sería mucho mas sencillo acabar con esos mal nacidos pero debido a que la azabache estaba con ella, no podría hacerlo.

Todo estaba tranquilo hasta que pudo percibir a tiempo el aroma de uno de los ninjas arriba de los contenedores, quien encima les lanzo un shuriken agachándose a tiempo junto a la mayor para empezar a correr justo a la salida de aquel laberinto con los contenedores.

-Sigue corriendo pase lo que pase- menciono en voz alta hacía la mayor viendo como la miraba confundida y realmente preocupada por lo que podría ocurrir, sin embargo ella continuó corriendo.

La mas baja al ver aquello sonrió para subirse a aquellos contenedores y apoyarse en una pared para empujar con sus piernas aquel gran contenedor, pareciendo algo ridículo, sin embargo gracias a su sistema de retromutante, podía modificarlo cada que quisiera y su fuerza aumento considerablemente, escuchándose un claro chirrido de aquel gran contenedor moverse para seguido escucharse un gran estruendo aplastando a aquel ninja que iba detrás de su amiga.

Se seco el poco sudor de su frente para hábilmente saltar y caer de pie empezando a correr en dirección a su amiga después de haber hecho aquella distracción, en aquellos casos realmente agradecía de tener esas habilidades aunque hubiera sido a la fuerza.

Cuando la encontró, lamentablemente fue en un callejón sin salida y encima con varios ninjas rodeando a la mayor, al ver el rostro de claro temor y mas en sus ojos algo dentro de ella se había activado, siendo aquel instinto asesino de ella, al ver a quien consideraba alguien realmente importante en su vida, ser amenazada así.

-¡¡¡ATREVAN SE A TOCARLE UN SOLO PELO Y DESEARÁN NO HABER NACIDO!!!- Grito aquella joven oji azul borroso con total ira llamando la atención de todos, incluyendo la de Abril, importándole poco empezó a revelar aquellas partes únicas en ella, las pupilas en sus ojos se veían cada vez mas alargados, su dentadura empezó a crecer y a tornarse cada vez mas afilada, seguido de que en sus manos y partes de su rostro empezaron a verse escamas de un tono verde oscuro, alzo sus dos manos para sacar unas grandes y afiladas garras listas para traspasar la carne de los desdichados, empezó a gruñir enseñando sus dentadura afilada como amenaza ahora con veneno sumamente peligroso y ponerse en posición de ataque, era una de las pocas veces que sacaba tan siquiera aquella forma y mas enfrente de las personas.

Ante aquella situación ahora aquellos ninjas se habían girado en dirección a la de mechones púrpuras, siendo muy notoria su gran cambio de apariencia, sin embargo aquello no los iba a detener, iban por ordenes de su líder y lo iban a cumplir sin importar quien se interpusiera en su camino.

La azabache por su parte estaba realmente un tanto atónita por lo que veía ahora, siendo que su mejor amiga realmente no era del todo una humana por aquellas características parecidas a las de un mutante, podía ver como claramente ella peleaba con total fiereza contra todos aquellos ninjas, inclusive haciéndoles bastante daño que seguramente los dejarían con una gran marca o peor.

No muy lejos los cuatro mutantes se dirigían a aquella zona en la que se encontrarían con la azabache esperando haber llegado a tiempo, mas con forme se fueron acercando a la zona pudieron escuchar perfectamente un gran alboroto en aquel callejón, notando a su amiga pegada a la pared de aquel callejón observando la gran pelea que había al frente de ella.

-Esto es increíble, Puedo detectar ADN de mutante y humano cambiando constantemente- menciono el de púrpura mirando gracias a su tecnología aquellos datos que aparecían constantemente junto a la foto y datos de la joven peli negra.

-Eso lo veremos después, Donnie y Mikey, revisen que Abril no este lastimada y protejan la, Raph y yo nos encargaremos de los demás- termino por decir viendo como sus hermanos asentían para acatar sus órdenes.

Los cuatro jóvenes aterrizaron sin problemas en el suelo para separarse, los dos menores fueron a auxiliar a la azabache quien estaba aún al parecer en shock por aquello y los dos hermanos mayores iban a encargarse de los demás ninjas, quienes peleaban con aquella chica con aspectos mutantes.

Una vez se habían involucrado aquellos mutantes, los ninjas al verse claramente superados no tardaron en gritar "retirada", los que al menos podían retirarse dejando así a su suerte a sus compañeros que se encontraban inconscientes con heridas realmente graves gracias a la de ojos azul borroso. Mientras otros cuántos morirían en poco tiempo, debido a que había mordido a varios de aquellos ninjas, inyectándoles de su potente veneno.

Cosa que realmente no le interesaba a la joven veinteañera quien respiraba un tanto agitada por aquella gran adrenalina recorrer por su cuerpo la cual fue bajando hasta que se pudo tranquilizar y ver con más claridad a su alrededor al detectar el extraño aroma de dos seres cerca de su amiga y otros dos mas cerca, pero al voltear lentamente su mirada se topo con aquellos dos grandes mutantes de quizás 2 metros o mas, que gracias a su baja estatura tuvo que alzar su mirada y toparse finalmente con el rostro de aquellos mutantes, fijándose principalmente en el de ojos color zafiro intensos.

Sabiendo ahora que estaba frente a cuatro mutantes, mas su mirada se enfocó después en su amiga bien sabiendo que tenía que explicarle muchas cosas después pero primero tenía que ponerla a salvo de lo que quisieran hacer aquellos mutantes, los cuales desconocía totalmente y no sabía exactamente que podrían hacerles.

...

(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧(ﾉ◕ヮ◕)ﾉ*.✧

Acaban de leer 4712 palabras

Y bueno así concluye el primer capítulo de retromutante, el cual varias cosas se irán viendo.

Así como nuevos villanos y viejos villanos

Me tomo días investigar muchas cosas sobre los animales y los veterinarios, si no esta correcto me disculpo, sin embargo seguiré investigando de ser necesario.

Y explicare algunas cosas como de la especie de mi oc y como termino así.

Pero mas adelante en los próximos capítulos.

Oh y quería informar que estoy trabajando en otras dos historias, próximamente publicare una sobre el fandom de sonic, mientras que la otra se estrenara después.

Ya dicho todo esto, los veo en la próxima actualización!!!

(◍•ᴗ•◍)✧*