Esperamos les haya gustado mucho la dinámica de dejarlos elegir el sub género de su pequeño relato. A nosotros nos fue muy grato leer lo creativos que pueden ser y los nuevos usuarios que se sumaron al reto.

Sin más, les dejamos a los 3 ganadores.

Fandom: MarkSon

Un campo lleno de flores con hermosos colores, crecían en aquella parte de ese bosque donde también habitaban diversos animales únicos. Sentía que era libre en ese lugar. Pero, era su imaginación quien actuaba y no la realidad de que en ese momento se encontraba en su oficina, esperando ansioso la hora de poder irse de aquel lugar de una vez.

Golpes en la puerta interrumpieron su línea de pensamientos, Jackson se quejó en un susurro antes de alzar la voz."Adelante" habló, el tono de esta derrochaba frustración y claro, su mal humor por la hora -11pm-. Pero, cambiaría a ver a ese chico de cabello negro, ojos marrones y tez blanca, pasar por aquella puerta dejándolo sorprendido.

–siento la interrupción, Jackson–sonríe–no me esperabas?

–Claro que no BamBam, que esperabas que sea adivino?–rieron–tiempo sin verte.

–Bastante tiem–sus palabras fueron interrumpidas por el celular de Jackson–ve, yo me quedo aquí.

El mayor obedeció y salió de aquella oficina a la calle, no le importaba que estuviera lloviendo, pero nunca le gustaba hablar dentro de la empresa.

<<Sus amigos están internados en el hospital, por un accidente automovilístico>>fue lo único que escucho decir a esa señora, antes que la culpa lo invadiera, ya que fue El, quien apoyó a Jaebum y Yugyeom para ir a aquel viaje y ahora estaban internados sin saber sus estados actuales.

Empezaba a patear todo lo que se encontraba cerca, hasta que consiguió algo que le llamó la atención por completo, era un objeto que no había visto antes y con algo inscrito que hacia aumentar su curiosidad.

Al limpiarlo, automáticamente llego a su habitación que estaba un tanto diferente, toda blanca y con un chico de cabello rojo, tez blanca y unos hermosos ojos marrón oscuro, sentado en la cama viéndolo.

–Hola, soy Mark Tuan, pero llámame solo Mark, soy un genio–sonrió–y como me haz llamado,te cumpliré UN deseo. Solo que mi poder no tiene límites.

–Ah, yo soy Jackson–se notaba confundido–debo pedir un deseo?–el contrario asintió–solo quisiera reflexionar que está pasando...

Y ¡PUM!, cumplió el deseo, aunque no de la mejor forma.

<< Las palabras pueden cambiar momentos y esto sucedió>> suspiró el genio para ver las consecuencias.

El tiempo se había detenido, Jackson estaba en una caja oscura con una sola luz que hacía parcialmente iluminación en donde se encontraba y sus amigos, en otra, pero, a la diferencia ellos podían ver a Jackson y este no.

–POR QUÉ TODO ME PASA A MI?!–gritó.

–nada fue tu culpa, el accidente fue culpa de otro irresponsable, no tuya, por favor deja de culparte–habló Mark con lágrima en sus ojos– me afecta, aunque no lo creas...

–pero, soy culpable de todo...

–Que no... por favor... que no –miro a sus ojos llenos de lágrimas–Pide otro deseo aunque no sea correcto.

-que todo vuelva a la normalidad y que me acompañes... solo si quieres

<<El genio cumplió el deseo.>>

Fandom: Yuri!!! On Ice

En sus años como genio, Viktor nunca conoció a nadie como Yuuri Katsuki.

Al parecer, el joven tropezó con la lámpara y la recogió por accidente. Aquello ya había ocurrido, pero nadie reaccionó como él. Incredulidad, miedo, alegría... presenció todo tipo de emociones, y después, estaba Yuuri.

-¡Eres el primer genio que conozco!-exclamó entusiasmado, y Viktor se percató de que estuvo bebiendo antes de hallar la lámpara, lo que corroboró cuando su nuevo amo se le colgó del cuello-¿O sea que si te froto bien, cumplirás mi deseo?

Eso también fue inesperado. Aunque era un "ser místico", Viktor experimentaba ciertas cosas como los humanos, por lo que en ocasiones se veía atraído por sus amos y éstos hacia él. Así que se saltó el protocolo de preguntar por su deseo y se dejó arrastrar por Yuuri, quien quería bailar con él. Con un chasquido, proveyó la música y aprovechó para examinarlo. Era muy atractivo, incluso las gafas le quedaba perfectas, a diferencia de esa horrible corbata y ese traje que ocultaba su figura (ojalá pidiera un mejor sentido de la moda), aunque pronto dejó de preocuparse puesto que Katsuki decidió desvestirse. Y por primera vez en su existencia, Viktor tuvo un anhelo personal: conservar a ese alocado joven a su lado para siempre, lo que quizás fuera posible si jugaba bien sus cartas.

-Hablemos de tu deseo-sugirió, sentándose en un sofá que apareció de la nada. Yuuri prefirió acomodarse en su regazo y el genio se sonrojó-Riquezas, fama... amor. No hay límites, pide y lo cumpliré. Katsuki frunció el ceño, reflexionando y Viktor pensó que los efectos del alcohol pasaron... hasta que lo escuchó hablar.

-Quiero ganar el Grand Prix Final. No supo qué responder. Nunca le habían pedido algo tan inusual. Yuuri continuó.

-Carezco de confianza en mí mismo-admitió, sonriendo tristemente-Aún así, no quiero renunciar al patinaje. Lo que más deseo... ¡Es ganar el Grand Prix Final!

Así fue como Viktor se enteró de que Yuuri era un patinador, que terminó en último lugar en dicha competencia, que se emborrachó y escapó del banquete posterior a la misma mientras dudaba si renunciar o seguir en el patinaje. Y el astuto genio ideó una manera para que su deseo y el de Yuuri se hicieran realidad.

-Muy bien. Ganarás el próximo Grand Prix, lo prometo.

El rostro de Yuuri se iluminó y lo abrazó. Viktor soltó una risita. Iba a cumplirlo, aunque no la forma en que imaginaba.

A la mañana siguiente, Yuuri despertó en su cuarto de hotel con una terrible resaca, sin recordar nada de la noche anterior y con un atractivo hombre en su cama. Al notarlo, su grito de pavor resonó en todo el edificio. Por contraste, el desconocido lo contemplaba con una sonrisa ladina.

-¿Quién eres?-preguntó alarmado-¿Qué haces aquí? El hombre arqueó las cejas, confundido, pero no tardó en recuperar su alegría.

-¡Buenos días, Yuuri! Mi nombre es Viktor y soy un genio. A partir de hoy, ¡voy a ser tu entrenador!

Fandom: Marvel

¡Juro que no pedí eso!

Podía jurar que había tenido un mal día... Bueno, un pésimo día. Horrible, desastroso, lo que sigue de eso. Pero bueno, no fue así, porque al parecer mi corazón roto no era suficiente para que el día sea tachado de malo. Realmente algo en el universo quería que fuera algo muy, muy malo y se encargó de dejarlo frente a mi puerta.

Observé a la ¿persona? frente a mi caminar de un lado a otro y reprimí la necesidad de decirle que deje las cosas que tomaba en su lugar, que antes de tomar esa manzana debía lavarse las manos porque tocó a mi perro, aunque mi perro estuviera pulcro, claro, pero aun así... No dejaba de ser algo incómodo.

—Amm... Dony...—empecé mientras me acercaba a él, aún con la lámpara en manos aunque enseguida fue interrumpido por un ademán de su mano y una mueca de confusión.

—¡Es Tony!— exclamó girando los ojos y haciéndome una mueca.. Quise replicar que solo me lo había dicho una vez cuando salió de esa extraña lámpara y que tenía todo el derecho a confundirme pero preferí no entablar otra de las quince discusiones que tuvimos a lo largo de esa media hora y solo le extendí la lámpara.

— ¿Por qué no solo vuelves a entrar?

— ¿Por qué mejor no entras tú y me dices como se siente estar en un lugar tan pequeño y aburrido?

Lo miré unos segundos y tuve que volver a contar hasta diez para no replicar algo grosero. Lenguaje, Steve, lenguaje—Bien... Entonces podrías explicarme, por favor, ¿qué se supone que te pedí para que no hagas nada más que pasear por todos lados, sin decirme nada? Me estás poniendo nervioso...— murmuré dejando la lámpara a un lado y concentrándome en sus facciones. Era atractivo ese tal Tony Stark pero el hecho de que haya salido esa lámpara en forma de humo lo hacía todo más extraño. Decidí dejar eso de lado y solo esperar una respuesta de su parte, aunque a juzgar por cómo empezó a mirar a todos lados con una mueca de indecisión y los hombros tensos supuse que no sería fácil sacarle más información.

— ¿No se supone que eso hacen las novias cuando están molestas?... ¿Ignorar a su pareja?

—... ¿Qué?

—Es que... tú deseaste tener una pareja que te amara y nunca te dejara, ¿no?... ¡Puede que sea un genio de la lámpara primerizo pero no estoy sordo, Steve! ¿¡Y quieres dejar de mirarme así?! ¿Cuál es tu jodido problema?... Por Dios...—refunfuño negando con la cabeza y caminando hacia la cocina sin esperar nada más— Tal vez si te cocino algo, se te pase... Eso también hacen las parejas, ¿no?

No pude escuchar nada más de lo que decía, su voz fue haciéndose menos clara mientras más se alejaba y mis pensamientos más ruidosos. Recordaba haber deseado eso... pero... ¡no se supone que así funcionen los deseos, maldito Stark!

Y ni siquiera pensando en eso, pude imaginar que tras un par de años, tras muchas discusiones y malentendidos terminaría perdida y locamente enamorado de un genio de la lámpara muy malhumorado.