Ace estaba comiendo con su división. No se supone que los comandantes coman en su división; tienen que comer con papá porque tienen que hablar de las situaciones del día, comunicar cosas y recibir órdenes de papá.

¿Entonces Deuce se unió formalmente a Jozu como almas gemelas? ¿Y tú, Ace? - Ace miró a sus hermanos que lo miraban esperando un poco de chisme para animar el día.

Yo... Dejé a Marco llorando en la puerta solo porque me escapé por la ventana. Además, es un idiota y no lo quiero escuchar - Todos vieron cómo Marco miró a Ace desde la mesa de los comandantes, ofreciendo una sonrisa amable, y Ace se dio la vuelta para mirar a otro lado mientras mascaba un pollo.

¿Esto es como cuando mandan a los alfas a dormir al sofá? - Banshee miró a los demás, que asentían divertidos.

Marco es mi novio pero aún no es mi alfa - Ace miró a Deuce, que lo miraba seriamente.

Ace... ¿Cómo te digo esto? Tú y Marco ya se unieron sin darse cuenta - Ace se congeló.

Pero... ¿los libros dicen que tiene que haber una vibración especial? - Ace miró a todos. Qué inocente era su chico de fuego.

Bueno, se supone que eso solo pasa cuando es una unión de almas consentida. Es muy normal que al ver a tu alma gemela la sensación sea tan fuerte que te unas sin darte cuenta y ni lo sientas - Barry suspiró.

¿O sea que ya no me puedo unir con Marco? - Los ojos de Ace se llenaron de lágrimas y escapó de la zona de comida. Antes de que le pudieran decir que sí podía, Ace lo había leído en los libros y había pensado que sería especial, pero parece que ya no se podrá.

¿Qué le pasó a Ace? - Como siempre, el más rápido para enterarse de todo en el barco, Haruta consultando por el estado de su hermano menor.

El cree que ya no puede unirse con Marco. Íbamos a explicarle, pero... se nos fue - Kukai miró a Haruta, que asintió y fue directo a susurrarle algo a Marco, que se escapó, para ir directamente detrás de Ace.

Ahora, sin Ace en la habitación, Deuce se sentía incómodo y un poco fuera de lugar. Miró a sus hermanos mientras comía; parecían felices, ningún solo pensamiento malo pasando por sus cerebros, felices de haber encontrado un lugar donde encajar.

Cuando la cena terminó, Deuce decidió ir a su cuarto para hacer su mochila. Estaban en una isla, podía recorrerla. Se sentía con ganas de correr. Después de todo, la idea de tener un padre era incómoda. Sus padres lo habían querido obligar a casarse y solo lo veían como un arma. Así que su vista sobre las familias era un poco tóxica.

Deuce estaba bajando del barco cuando sintió los pasos de Barba Blanca detrás de él. Deuce se dio la vuelta rápido, y el hombre estaba detrás de él.

Vamos a dar una vuelta - Barba Blanca comenzó a caminar, y Deuce dudó un poco. Pero al final suspiró; no le quedaba mucho que hacer.

Había un silencio un poco incómodo. Deuce miraba a todos lados.

¿Usas siempre esa máscara? Sabes que puedes dejar de usarla con la familia, nadie te juzgará - Barba Blanca miró al chico que se acomodó el antifaz nervioso. Deuce miró a Barba Blanca; sabía que no responderle al capitán era de mala educación, así que tenía que responder.

Sí, si me la quito, mis padres vendrán por mí... bueno, esas personas vendrán por mí. Eran nobles. Me escapé - Deuce fue sincero; sabía que si mentía, Barba Blanca lo sabría.

Bueno, si algún día decides quitártela y vienen por ti, yo me encargo, hijo - Deuce se estremeció por lo bien que se sentía ser llamado hijo.

Ey... - Deuce miró un poco asustado hacia abajo y luego se abrazó a la chaleca de Barba Blanca un poco asustado de caer.

Oh, lo siento, es lo que hago con mis hijos - Deuce se sonrojó.

Eso fue intencional, ¿verdad? - Deuce sonrió y se rió por la actitud tan infantil de su ahora padre.

Bueno, eso no te lo puedo negar; eres un niño muy astuto - Deuce disfrutó de la caminata en el hombro de su padre. Nunca había sentido este amor paternal y lo amaba.

Deuce... - Deuce miró a Barba Blanca, esperando sus palabras con una sonrisa.

¿Sí, Oyaji? - Deuce lo miró.

Tienes derecho a amar. Nadie decidirá nunca por ti solo porque eres omega. Eres libre bajo mi bandera - Deuce lloró un poco en silencio mientras iba en el hombro.

Sí... papá - Barba Blanca sonrió.