Día 27: Johnny es atacado por Kreese
Advertencias: Contiene violencia, no se que tan explícita sea, pero trate de no escribirlo tan gráfico.
...
Kreese no planeaba detenerse, debió eliminar a LaRusso cuando pudo y ahora que de nuevo se le presentaba una oportunidad, no la desperdiciaría.
El brazo y pierna izquierda de Daniel quedaron lastimados gracias a la caída, no había manera de usar los puntos de presión.
Cerró los ojos esperando sentir dolor, pero en su lugar escuchó a Johnny gritar.
Kreese mantenía la boca abierta con la saliva escurriéndole por los bordes. Sus ojos estaban más abiertos de lo común y su mano sangraba por la presión ejercida contra el vidrio.
─ ¡Papá! ─ Robby despertó solo para ver a su padre en el piso.
─ ¡Papá! ─ Lo llamaba Sam quien había llegado junto a Miguel.
─ Sensei. ─ Miguel y Robby intentaban parar el sangrado.
Kreese levantó las manos y huyó como el cobarde que siempre fue.
─ Sam, llama a urgencias. ─ La ojiazul marcó rápidamente.
─ Tienen que venir rápido, un hombre atacó a nuestro sensei. ─ Dio la dirección y colgó.
─ ¡Papá! ─ La voz de su hija era lejana. Quería hacer reaccionar su cuerpo, pero no podía. ─ Vamos al auto. ─ Sam lo dejó esperando en el asiento del pasajero y regresó con los chicos.
La ambulancia no tardó en llegar, Robby subió para acompañar a su padre y Miguel se fue con Sam.
...
Despertó en el hospital. Como pudo se quito el suero e investigo sobre el estado de Johnny.
─ Lo están operando, no creemos que pueda soportarlo.
Esas palabras encendieron un fuego en su interior, no permitiría que Kreese se saliera con la suya esta vez.
..
Terry tocaba el piano, Cheyenne le avisó de la inesperada visita.
─ ¿Danielito?
─ ¿Dónde está Kreese? ─ Silver ríe como si le hubiera contado un mal chiste.
─ No se nada de él desde el 85.
─ ¿Te abandono? ¿Después de todo lo que arriesgaste por él?
─ Terrence ... ─ Interrumpió Cheyenne. ─ no me parece prudente ...
─ Vete, te llamaré mañana.
─ ¿Qué?
─ Ya me oíste, puedo dejar que intervengas en todos mis asuntos, pero en este no. ─ Ella recoge el bolso y se va no sin antes darle una mirada de desagrado a Daniel.
─ No le des importancia. ¿Qué hizo Kreese ahora?
─ Intento matarme, Johnny me salvó y ahora su vida peligra, necesito encontrar a ese bastardo.
─ Sabia que tenias un poco de Cobra Kai en tú interior. ─ Daniel hizo a un lado su mano cuando Silver intento acariciarlo.
─ Nos debe cuentas a los dos, si me ayudas ... ─ Terry camino a su alrededor.
─ Si te ayudo ¿me lo traerás con vida?
─ ¿Es lo único que quieres?
─ No, desearía más, pero no te obligaría.
Basta con que Silver haga un par de llamadas. Su detective más eficiente y confiable ha encontrado el nuevo escondite de Kreese.
Terry lo envía con sus mejores guardaespaldas, Daniel insiste en que puede hacerlo por su cuenta, tiene el suficiente odio como para acabarlo él solo, y eso es lo que Silver teme, por eso lo envía con niñeras, para calmarlo si se le pasa la mano.
Sube al auto que le prestó para la ocasión, los otros dos van en camionetas diferentes a distancia segura.
La dirección lo lleva a un lugar de mala muerte, un intento de departamento escondido en un maloliente callejón.
Se estaciona en la parte más oscura que encuentra y hace una llamada.
─ No digas que soy yo, ve a otro lugar. ─ Espera poco tiempo hasta que vuelve a oír la voz del otro lado.
─ ¿Señor LaRusso?
─ Sí, soy yo. ¿Ya se dieron cuenta de mi ausencia?
─ No, la doctora dijo que despertaría por lo menos en otras dos horas por el sedante.
─ Perfecto, intenta que sigan sin descubrirme.
─ ¿Dónde está?
─ No puedo decirte, pero te aseguro que la rata que lastimó a Johnny no volverá lastimar a nadie más. ¿Saben algo de Johnny?
─ Mi mamá se las arregló para entrar, ─ Miguel solloza. ─ lo perdemos. ─ Daniel cierra los ojos. ─ Robby entró en crisis nerviosas y también tuvieron que sedarlo, su madre está con él.
─ Tengo que colgar.
─ Señor LaRusso, ¿puedo pedirle algo?
─ Dime.
─ No tenga piedad.
─ No habrá piedad esta noche.
Finaliza la llamada al ver a Kreese. Baja del auto sigilosamente y lo sigue. En su andar se topa con una tabla de madera gruesa, pelear sucio no es una opción, no es Miyagi-Do, pero se convirtió en algo personal.
Kreese se detiene a buscar sus llaves, Daniel lo golpea en la cabeza y las bolsas de compras caen al suelo.
...
Miguel toca la puerta, Shannon lo ve y le invita a entrar.
─ Gracias por aceptar cuidarlo, no quisiera dejarlo, pero debo volver mi rehabilitación aún no acaba.
─ La mantendré informada de todo.
─ No puedo encontrar la manera de agradecerte, después de todo lo que pasó con Robby.
─ No se preocupe, eso quedó en el pasado, ahora nos necesitaremos el uno al otro. ─ Shannon lo abraza, besa la frente de su hijo y se va angustiada.
Miguel ocupa el lugar de Shannon, se acerca al oído de Robby y susurra:
─ El señor LaRusso se encargará de todo. ─ A pesar de estar sedado, el castaño mueve la mano. ─ Lo sé, debemos confiar en él.
...
Kreese despierta gracias al agua fría. Descubre que está amarrado a una silla y la luz sobre él lastima sus ojos. Aun así, logra identificar a su captor.
─ ¿LaRusso?
─ ¿Te sorprende? Supongo que has de tener más de un enemigo y esperabas que fuera cualquiera de ellos.
─ Me sorprende porque el viejo nunca haría algo como esto. ─ Daniel le da el primer puñetazo y la sangre escurre por la comisura de sus labios.
─ No vuelvas a mencionarlo. ─ Le da otro golpe y escupe líquido rojo.
─ ¿Todo este circo es por Lawrence?
─ ¿Qué esperabas? Por tu culpa Johnny se está debatiendo entre la vida y la muerte.
...
Tory recorre todo el hospital buscando a Miguel, le informan que puede encontrarlo en la habitación 315.
Ella se entera por las noticias, se curaba las heridas de la reciente pelea y quiere vomitar por lo que descubre, todo este tiempo actuó bajo las órdenes de un criminal.
─ Lo siento, no sabia que Kreese es un demente. ─ Miguel le pide bajar el tono de voz y señala a Robby durmiendo. La lleva afuera y siguen hablando.
─ No te preocupes, ese hombre sabe cómo envolver a las personas.
─ Necesito hacer algo, de no ser por la pelea tu sensei y el papá de Sam jamás habrían ido a enfrentarlo.
─ Entonces ayúdame distrayendo a Sam, evita a toda costa que intente ver al señor LaRusso.
─ ¿Por qué?
─ No puedo explicarte por ahora, si las cosas salen bien te lo contaré todo.
Sam se enoja al verla, pero Tory levanta las manos en señal de tregua.
─ No sabía lo que pasaría, te juro que de saber el tipo de loco que es Kreese jamás lo hubiera escuchado.
─ Si Johnny no se interpone, yo ... yo estaría en el lugar de Robby. ─ Esa noche llora en brazos de Tory.
...
Daniel enciende un cigarro, odia el olor, pero no le queda de otra.
─ Por desgracia me pidieron llevarte vivo, de lo contrario te estrangularía con mis propias manos. ─ Por segunda vez apaga el cigarro en la piel de Kreese y los gritos que suelta es como música para sus oídos. ─ ¿te duele? Piensa que a Johnny le duele peor.
─ Soporte torturas más horribles, no me importa.
─ Oh ¿eso es un reto? ─ Avienta la colilla y busca algo más interesante. Elige una pequeña navaja, es más interesante. Daniel se acerca y la pasa por el rostro del mayor. ─ Tal vez lo resistas, pero te dolerá igual. ─ Sin que Kreese lo espere, clava la navaja en su pierna y la mueve hacia abajo. No quiere demostrar debilidad y se muerde el labio la detener sus gritos. Daniel lo entierra más profundo y lo deje ahí.
─ No entiendo por que él te quiere vivo. Espero que sea para torturarte más. ─ Patea la silla y Kreese cae al piso. ─ Más te vale tener buena suerte, ¡porque si Johnny muere ya no tengo más por perder y le daré a ese tipo lo que sea con tal de verte rogando por tu vida! ─ Grita más fuerte y los guardias se alertan. Se pone en cuclillas y quita la tapa del encendedor, Kreese se remueve en y Daniel se satisface por verlo atemorizado. ─ ¿Tan poco resiste, Capitán? ─ Pasa la flama por los dedos, Kreese no puede evitarlo más y grita de dolor. La piel está al rojo vivo y su pierna no deja de sangrar. ─ ¡Te odio! ─ Guarda el encendedor y con fuerza pisa la mano, aplica toda la presión que puede hasta que escucha los huesos romperse. Quita la navaja de la pierna y su acto final es enterrar el arma en la mano ya gravemente lastimada. ─ Planeaba hacer cosas mucho peores. ─ Daniel lo toma por el cabello. ─ Miserable con suerte.
...
Johnny despierta, el sonido de la alarma hace que el doctor y las enfermeras entren de prisa.
─ Da ... Da ...
─ No se esfuerce. ─ El doctor lo revisa meticulosamente y vuelve a desmayarse por el cansancio.
Sam quiere avisarle a su papá que Johnny reaccionó y va a recuperarse. Miguel le hace una señal a Tory, ella deja que vaya al cuarto de Daniel.
Ve a su padre dormir tranquilamente, lo mueve un poco repitiendo que Johnny despertó. Daniel abre los ojos y le sonríe.
...
─ John, por fin estamos juntos de nuevo. ─ Pasó de ser el prisionero de Daniel a ser el prisionero de Terry. ─ Tenemos tantas cuentas pendientes por resolver.
─ No te atrevas a tocarme, salve tu vida, me lo deberás por siempre.
─ Que equivocado estas. ─ Gatea sobre la cama y rompe sus pantalones. ─ Nos divertiremos tanto.
...
Lo primero que hace Daniel es besarlo, y luego lo regaña por arriesgarse de esa manera.
─ Nunca permitiría que te dañen.
─ No volverá a pasar, Kreese huyó en cuanto la policía puso su fotografía en las noticas, tiene una orden de aprehensión y si lo ven merodeando por aquí lo arrestaran.
─ Ojalá nunca vuelva. ─ Daniel se acuesta a su lado y sonríe.
─ Estoy seguro que no volverá a molestar.
...
Desde hace mucho tiempo quería escribir algo como esto. Creo que es mi día favorito hasta ahora.
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