Era un día estupendo, por así decirlo en pocas palabras, los pájaros cantaban, los niños jugaban, los perros ladraban, la alarma sonaba...

-¡CONCHETUMARE!

Oh si~ ese era el grito de un joven chileno que al enredarse con las sábanas de su cama terminó en el suelo.

-¡VOY A LLEGAR TARDE!

Rápidamente aquel muchacho de piel blanca y cabellos castaños se levantó como pudo del suelo, y sin importarle el desastre que hacia en su habitación sacaba ropa de su armario y corría algo desesperado al baño para darse una ducha.

del otro lado del pasillo un rubio lo miraba entre divertido y con ganas de golpearlo por todo el escándalo que estaba haciendo sin dejar que disfrutara de su alfajor. Pacientemente se colocó a un lado de la puerta ¿Para qué?, pues otra maldición responde las dudas, ya que el chileno había olvidado su toalla y Martín como buen primo que era(o se consideraba a él mismo) le lanzó aquel objeto en la cara y se retiró riendo por lo divertido que era ver a Manuel tan nervioso y en especial torpe.

-Apurate si no querés que tú "NO" novio se aburra de esperarte.

-Callate conchetumare- le sacó el dedo de en medio y se fue sin más de vuelta a su cuarto para terminar de alistarse y  luego salir apresuradamente de la casa.

-Sos un pelotudo- el argentino sonrió traviesamente terminando su alfajor de un mordisco  y sosteniendo rápidamente su celular- ya salió el pibe este, yo saldré a ponerme en posición.

Luego de ello colgó el aparato y emprendió el rumbo detrás de Manuel, claro, a una distancia prudente para que no se diera cuenta de que lo estaba siguiendo, aunque para ser sinceros, de seguro Manuel ni siquiera se daría cuenta pues estaba muy apurado para siquiera fijarse .

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-¿Por qué demora tanto Manuel?... 

Un chico de piel tostada y mirada dorada se encontraba mirando un tanto ansioso los alrededores de ese parque en busca del chico de ojos almendrados con el cual había quedado ese día, no quería admitirlo pero estaba muy nervioso por aquel encuentro, no es como si nunca hubieran salido juntos pero de algún modo presentía este día sería distinto a los demás.

soltó nuevamente un suspiro algo divertido y un poco sonrojado, pues el chileno venía a su encuentro muy agitado y casi desmayado, se le notaba que había corrido mucho para llegar con él y de solo pensar en su "amigo", si entre comillas pues él ya sabía sentía algo más que amistad por aquel chileno.

cuando estuvieron frente a frente ambos se sonrojaron y quedaron mudos, no podían evitarlo, cuando estaban juntos el mundo parecía detenerse y se volvían un par de niños inexpertos y muy torpes. Después de unos largos minutos rompieron el contacto visual y Manuel tímidamente desvió la mirada por la vergüenza.  

-Perdón Weón... me quedé dormido.

Miguel no pudo evitar reír tiernamente ante esas disculpas y la cara que su amado(por que si, en su mente ya lo trataba cariñosamente) había puesto, le parecía tan tierna esa faceta que algunas veces lograba ver de él, solo lograba enamorarlo cada día más.

-No hay que perder tiempo manu...

Con algo de timidez Miguel tomó una de las manos de su amigo y lo tiró levemente para comenzar a caminar en alguna dirección, en ese momento Manuel sintió como el calor recorría rápidamente por todo su cuerpo, al tener la piel más clara se le podía notar con mayor facilidad y eso lo ponía en evidencia.

Miguel solo sonreía mientras guiaba al más alto por un sendero del parque en busca de una heladería, pues sí, como buen peruano todas las salidas debía tener un paradero para comer, en especial un momento tan especial con una persona tan importante en su vida... así fue desde que conoció a su chilenito, hace muchos años en la escuela, en ese tiempo no se había dado cuenta al ser tan inexperto pero fue flechado desde  la primera vez que cruzaron miradas, en ese instante su corazón supo que había encontrado a su otra mitad.

Manuel sin saberlo tenía los mismos pensamientos que el peruano... Su primer encuentro aún vivía en su mente, y en especial en su corazón, esperaba en algún momento también en su piel, amaba todo de aquel que rondaba día y noche en su mente, su piel, su tacto y en especial la voz, lo que lo embobaba era la risa de Miguel, no importaba si era suave o escandalosa. 

tan concentrados estaban en sus pensamientos y las sensaciones que el contrario provocaba en sus cuerpos y nervios, que cuando volvieron a pisar tierra ya estaban ubicados frente a frente en una pequeña mesa de aquella heladería que Miguel había encontrado de casualidad mientras paseaba junto a su hermano menor, en esa oportunidad no entró al lugar a pesar de las insistencias de Julio, ¿La razón? quería que su primera experiencia en ese lugar fuera con Manuel, su hermano se indignó aquella vez y no le habló durante todo el día... o bueno hasta que le sobornó con un arroz con leche, solo así pudo controlar el temperamento del menor.

-Esta bien bonito el lugar...

-¿Verdad que sí? ¡Cuando lo vi inmediatamente pensé que debía traerte! Quería probar estos helados contigo manu porque fuiste el primero que pensé cuando lo vi- lo dijo tan emocionado y en un arranque de sinceridad que al darse cuenta que había soltado de más la lengua se percató que prácticamente se había inclinado sobre la mesa levemente quedando muy cerca del rostro sonrojado de Manuel- y..yo ehhh.. digo... jajajaja, que...

-M..migue...

-Q..quise decir que... b..bueno como a ti también te gusta comer como a mi y nos llevamos bien, pues ¡pensé en que serías perfecto para mi! DIGO NO no para mi sino... para ¿acompañarme? - estaba tan nervioso que al tratar de sentarse nuevamente no se fijó y se cayó.

-¡Miguel! ¿estaí bien?- Manuel se levantó preocupado de su puesto y ver al peruano sobándose el trasero- Weón me asustaste. Ven te ayudo- Con una leve sonrisa y aún el rostro sonrojado le extendió la mano y ayudó a que se sentará.

-Gracias... soy algo imbecil.

-Bueno... si lo eres algunas veces, pero encuentro que te hace ver tierno.

-Tú también eres muy tierno manu.

y ambos sonrieron.

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-Esos boludos son re tiernos pero...

-Frustra verlos...

-Totalmente.

-AHHHHHH me dan ganas de ir y hacer que se besen chingadamadre.

-você tem que dar a eles o tempo deles(tienes que darles su tiempo).

-No se porque me dejé convencer por ustedes de seguirlos.

-Porque también te gusta el chisme.

-No son muy discretos en esto, en cualquier momento se darán cuenta de que estamos aquí.

-Callate.

Un grupo de "espías" se encontraban detrás de algunos arbustos espiando a la "futura" pareja, autodenominado "cupidos de idiotas". La verdad es que de cupidos no tenían nada y más bien ellos eran muy idiotas para no darse cuenta que se veían demasiados sospechosos, en especial por los bigotes ridículos que estaban utilizando y lo nada disimulados que eran. Pero quienes somos para juzgarlos.

-JAJAJAJA que menso el Miguel.

-Con tantos madrazos se le va a hundir la mollera al cabron.

-Isso me lembra de quando Martin caiu em nosso primeiro encontro.(me recuerda cuando martín se cayó en nuestra primera cita).

-Si lo recuerdo JAJAJAJA tremendo putazo que se dio.

-Se veía muy gracioso su cabello lleno de hojas secas.

-¿Ustedes como saben de eso? se supone que solo estábamos Lu y yo.

-Carnal... ¿si te das cuenta que AHORA estamos espiando a Manuel y Miguel? creo queda muy claro como sabemos de tú vergonzosa caída.

-Julio hasta te grabó.

-Ese hijo de...

-Martin acalme-se, foi um dia especial para mim...e não me incomoda se você for um pouco desajeitado, te amo como você é.(martín calmate, fue un día especial para mi...y no me molesta que seas un poco torpe, te amo como eres).

-Awwww mi lulu, por vos soy capaz de dejar mis alfajores- acaricio la mejilla de su pareja con dulzura sin dejar de sonreír enamorado- .

-oh não, eu não seria capaz de fazer você deixar algo que você ama(oh no, no podría hacerte dejar algo que amas)

Luego de aquellas palabras martín se abalanzó contra Luciano besándolo en frente de los demás.

-Vayan a un hotel par de puercos.

-¡OIGAN! se fueron...

-¿¡QUE!?

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-¿Te gustaron los helados?

-Si, estaban ricos, aunque me gustan más tus postres, no se... creo podría volverme adicto- Manuel se sonrojo y miró a su contrario con un poco de timidez.

-Si te vuelves adicto no me molestaría ser quien te de esa "droga"- Le devolvió la sonrisa mientras volvía a tomar con delicadeza la mano del chileno.

-Incluso si son... todos los días?.

-Incluso si es 24/7, los 365 días del año...

-Miguel... eso, suena casi como si quisieras alimentarme el resto de mi vida- una suave risa salió de entre sus labios, dandole una hermosa imagen a Miguel, lo cual hizo que su corazón se acelerara y quisiera enmarcar esa imagen para la eternidad.

-No le veo lo malo a eso, sería... feliz si lo hago- sus dientes mordieron con suavidad su labio inferior queriendo ver la reacción que tendría el mayor.

-Yo.. creo que también sería muy feliz si lo hací weón.

-Manu... y..yo.. hace un tiempo quería decirte algo...-bajó la mirada.

-¿Hm?

-Yo...-conecta nuevamente su mirada con la de Manuel.

-¿Si?

Se acercaban lentamente hacia el rostro del otro entrecerrando los ojos un poco, mirando levemente los labios del contrario.

-Pues...

Un pequeño roce hizo que sus corazones se sincronizaran y cerraran completamente los ojos, el mundo desapareció para ellos, solo un poco más y conectarían sus bocas.

-¡MIGUEL!

Su burbuja se rompió rápidamente y ambos sobresaltados se separaron algo confundidos y a su lado llegó el hermano menor del peruano y no se le veía muy feliz.

-¡Julio! ¿Qué haces aquí?

-Yo debería preguntarte eso, y aún más con este chileno, creí tenía un trabajo que hacer.

-Julio...

-¿Acaso... tienen una cita?

-pues...

-¡Bien! los acompaño.

-¿Qué?

-¿Que wea tú hermano?

-No te preocupes, el ya se va.

-No voy a irme.

-Julio

-No me obligarás.

-Esta bien migue, déjalo, igual no se va a ir.

-Pero Manu...

-¿Viste? esta de acuerdo, ahora avancen que quiero caminar un poco.

y sin esperarlos avanzó lentamente despreocupadamente, detrás de Julio los dos individuos restantes suspiraron derrotados y solo pudieron mirarse mutuamente algo incomodos.

-Perdón manu.

-Nah, no te preocupí, no es tú culpa, mejor avancemos antes de que el enano enojón haga rabieta - ríe divertido y vuelve a tomar la mano de su "amigo" y ambos avanzar tras los pasos del más joven de los tres.

-¡TE ESCUHE BIRLOCHA!

-¡ya weón!

Se la pasaron caminando por el parque dando algunas vueltas, mirando los arboles mecerse con la fresca brisa, Julio podía darse cuenta de las pequeñas miradas y sonrojos que se enviaban su hermano y su "mejor amigo". 

Trato de molestarlos un poco así que cuando tenía la oportunidad se ponía entremedio de ambos y lanzaba bromas que fastidiaban a Manuel e incomodaba a Miguel. Eso hasta que sorpresivamente preguntó algo que dejó a sus acompañantes expectantes, y lo cual podría significar un quiebre o la unión 

-¿Manuel te gusta alguien?

-¿A que viene esa pregunta cabro chico?

-simple curiosidad.

Manuel miró disimuladamente a Miguel y tragó saliva, Julio se percato de eso.

-Bueno...

-Le gustas a Arthur.

En ese momento el silencio fue imposible de romper, Manuel no sabia que contestar, Miguel apretó los puños y julio parecía indiferente y solo analizaba las reacciones de ambos.

-A mi no me gusta Arthur...

-Pero podrías darle una oportunidad-

-Yo no puedo hacerlo-

-¿Por qué?

-porque no.

-esa no es una gran justificación González.

-Julio para tú wea, no estoy interesado en Arthur.

-Pero.. tal vez con el tiempo puedas enamorarte profundamente de él.

Ambos chicos se enfrascaron en una pequeña discusión con respecto al tema de que si Manuel debería empezar a salir con Arthur, lo cual ya empezaba a enojar al pelicastaño y también a Miguel, el cual ya no pudo contenerse

-Julio no.

-¿Por qué no Miguel?

-Porque Manuel no quiere.

-ya, pero se llevan super bien, de seguro algo bueno saldrá ahí.

-¡Yo soy su mejor amigo!

-¿y eso qué?

-Que yo me llevo mejor con él que ese ingles cejón.

-Suenas celoso hermano.

-C..callate, ese tema no debiste de mencionarlo Julio.

-No se porque te enojas tanto

-¡¡¡Porque estoy en una cita con Manuel, Y LAS ESTAS ARRUINANDO!!!

-Pensé que solo era una "salida de amigos".

-pues para mi no lo es.

-¿ya son novios?

-¡NO!

-Entonces no le veo el problema que Manuel corresponda los sentimientos de...

-¡NO! PORQUE A MI ME GUSTA MANUEL Y QUERIA PEDIRLE SEA MI PAREJA, PERO LO ARRUINASTE TODO JULIO.

y la paciencia de Miguel había explotado ante la sola idea y las provocaciones que julio estaba haciendo, fue un impulso que sin querer lo había dejado al descubierto, aunque era un secreto a voces para los que conocían a estos dos idiotas .

Julio y Manuel se quedaron callados ante la confesión de Miguel que se encontraba totalmente rojo, no sabemos si de la vergüenza o de la cólera, tal vez... ¿Ambas?

-¿Qué piensas de eso Manuel? - tranquilamente observó al chileno quien no dejaba de sentir como si su corazón quisiera escaparse de su pecho.

-Julio no... por favor ya me humille lo suficiente... n..no quiero saber que Manuel solo me ve como un amigo- bajó la cabeza totalmente apenado y con la voz algo temblorosa- p..por favor manu... olvida lo que dije...por favor.

y sin siquiera esperar a la respuesta de manuel, miguel se giró y trató de huir de ahí, pero... sintió como unos cálidos brazos rodeaban su abdomen.

-Me gustaí...

-¿Eh?

-Erí un desconsiderado Miguel.

Manuel con ese Abrazo trataba de transmitirle todos sus sentimientos al que había robado su corazón. sonrío un poco por el dramatismo del peruano, pero era una de las tantas cosas que amaba de él, su carisma, su humor...

Sintió con lentamente Miguel se giraba sin romper el contacto y lo miró divertido por la cara de sorpresa que tenía el morocho- erí un aweonao, pero creo que yo soy más weón por enamorarme de tí... dramático. 

-Yo también soy un cojudo por enamorarme de un huraño... pero no me arrepiento...

-Entonces... ¿Querí pololear conmigo?

-Si... si quiero que seas mi flaco.

-Te amo weón...-Manuel sonrío levemente acariciando la mejilla de Miguel.

-Yo también te amo huevón...

Ambos juntaron sus frentes entre pequeñas risas en su propia burbuja de amor e idiotez, parecían dos chiquillos embelesados y profundamente enamorados sin separarse del abrazo.

detrás de ellos Julio sonrío satisfecho viendo que su plan había funcionado, ya lo tenían algo harto  con su torpeza y timidez al no confesarse, cuando todos ya se habían dado cuenta que estaban locos por el otro, y la pequeña mentira del supuesto pretendiente de Manuel fue lo que le dio el coraje a Miguel de ser sincero.

-idiotas, bueno, mi trabajo aquí ya esta hecho.

-¿Ustedes sabían que todo fue plan de Julio?

-surpreendente.

-Ese cabrón si que la hizo, estaba a punto de sacarle su madre, pensé que quería sabotear todo.

-hay que darle su mérito. 

-Al menos ya están juntos.