Lycans. Guerras y sangre

En aquel lugar... dónde solo hay tinieblas. Podría ser el abismo o con tan solo oír el ruido de los buitres pensarías que es hasta el mismo infierno. Pues ahí nada más y nada menos estaba el ser más despreciable, cruel, el que no le tiene piedad a nadie que es capaz de matar y desmembrar al mismo tiempo.

Simplemente su objetivo es ella y solo ella y no va parar hasta tenerla aunque tenga que hacerle daño hasta verla caer a sus pies y erradicar a todo lo que la rodea solo por quedársela.

-Porque no deja el asunto mi Sr.. hay muchas mujeres puras aquí ¿porque insiste con ella?-mencionó uno de sus mejores hombres, su mejor amigo

- ¡ESO NO TE INCUMBE A TI! VETE FÉLIX-dijo Timberlan

- Antes de irme dime que tienes pensado hacer-preguntó Félix

-Se aproxima el fin... para dar comienzo a los pura sangre-musitó Timberlan

Se carcajeó de manera maniática ante la presencia del azabache quién lo miró entrecerrando los ojos y se fue de sus aposentos, conocía bien a donde podían llegar su amigo.

- Por otro lado -

             Con Arley y los demás

Por otra parte cierta castaña rubia estaba que deambulaba de aquí para allá debido a una hermosa noticia. Pensó reunir a todos para dar a conocerla pero mejor se lo guardo para la noche, tanto que solo haría cena para dos esa noche.

-Vaya, vaya. De que me he perdido-dijo Kerim mirando a la tía demasiado de buenas-

-Vete aquí Kerim no me interrumpas la armonía y felicidad de esta cabaña-soltó Arley mientras se cepillaba su largo y sedoso cabello

-Un momento aquí huele mal-añadió Kerim entrecerrando los ojos y se acercó a ella-Pero que...-Le coge unas mechas-¡¡¡Pero que es esto!!! Tú nunca te lo cepillas-volvió a entrecerrar los ojos de nuevo-¿qué sucede aquí? ¿porque tu cabello tomó un tono más claro?-

-¡¡¡Cállate por un momento!!! Quieres-escupió Arley

Ante su tono el castaño abrió los ojos cómo búho, asintió y se sentó de golpe en un sofá, esperando una respuesta a porque su tía estaba así

-¡¡¡Voy a tener un lobezno!!!-dijo Arley

-Wow. Ya no seré el consentido-preguntó Kerim

-¿No estas feliz?-contestó Arley y se sentó a su lado, besó su frente-Siempre serás mi bebe, mi todo

-¿Neta? Mi madre siempre va a serlo pero tú me criaste y me diste el calor y cariño de madre. Tú eres el amor de mi vida mi madre tía-sonrió Kerim para luego abrazarla

-Solo quiero que guardes el secreto hasta que llegué el momento oportuno-dijo Arley sonriendo

-Lo haré y a Luna?-preguntó Kerim

-Ni a luna-respondió Arley

-De acuerdo madre-dijo Kerim

-Sihak va tardar en venir salió a recorrer Licanidon con mi abuelo joven-comentó Arley

-¿Con el bisabuelo joven? Vaya eso si es sorpresa eso me dice que algo bueno va pasar-se sorprendió Kerim

-Si y necesito que me acompañes a ver al Ancestro supremo-dijo Arley

-¿Norstein? Claro vamos-dijo Kerim

~*~*~ Entre los lugares de Licanidon ~*~*~

-No sé que esta planeando y tampoco el que este aquí. Pero no va a separarme de Kristian Arley yo la amo y soy capaz de todo por ella-anunció Sihak

Kristian el abuelo de Arley sonrió ante sus palabras aunque no entendía muchas cosas, porque los Licánidos no entienden razones, se guian por el instinto y en este caso su instinto no se equivocaba, ya que sabía que ese Lobo era el ser correcto, el segundo destinado a reinar junto a su querida nieta.

-Eso me gusta que saquen las garras por ella-comentó Kristian

Sihak no entendía nada.

-Estamos enterados de todo de lo que pasa y pasará en el planeta Tierra pero no de los planes de Timberlan. El que si podría saber sería mi hijo Zac y Arley ya que ellos poseen el don vidente asertivo-explicó Kristian

-Lo supuse... ¿Vidente asertivo?-dijo Sihak

-Que nunca se equivocan sobre lo que va pasar y lo que ocurriría en un futuro más lejano-dijo Kristian

-Entiendo. Se que estamos capacitados para cualquier ataque pero no sería suficiente ya que los hechiceros están unidos con Timberlan-añadió Sihak

-Esos son solo marionetas para llegar a ti y después de eso los matará, no hay magia blanca ni oscura ni hechizo que pueda doblegar a Reik Timberlan ni a nosotros-dijo Kristian

-Eso suena a que nos va dar refuerzos, entrenamiento y seguridad, que no habrá muchos muertos-preguntó Sihak

-A eso iba Sihak, te daremos todo lo que necesitas siempre y cuándo te cases con mi nieta el fin de semana cómo lo llaman los humanos, de esta manera uniremos tú raza y mi raza para formar una sola-explicó con firmeza Kristian

Al escuchar eso el rubio casi se le iban las quijadas al suelo de lo sorprendido ante esas palabras. No se lo esperaba y menos que él le pidiera unir ambas razas.

-Me casaré con ella cómo me lo pide e uniremos ambas razas, siempre y cuándo acepte a Kay la mujer que su hijo quiere-dijo Sihak poniendo la mano en su barbilla

-Cásate con Arley para unir ambas razas. Lo demás lo decidirá tu hembra-dijo Kristian suspirando profundamente

-Pan comido la aceptará-aclaró Sihak

-Debo disculparme con ella por decirle Impura, aunque siempre lo será para nosotros. Ella a salvado a mi hijo en muchas ocasiones y le debo mucho-dijo Kristian

-¿Disculparse? Vaya ya veo-dijo Sihak aún más sorprendido

-Aunque hay algo para deshacer su impureza por hechicería y también hay algo para que sea un Vampiro totalmente puro para que ande libremente por Licanidon sin que le hagan el feo-comentó Kristian

-¿De verdad tiene cura?-preguntó Sihak

-Así es. Ahora acompáñame a ver al Ancestro Supremo para hablar más sobre el asunto de Kay-respondió Kristian

- Esta bien-

            Con el Ancestro Supremo

-¿Se puede?-preguntó Arley

-Me ofende mi princesa-respondió Norstein haciendo una reverencia-Para que soy bueno

-Pues para muchas cosas-dijo Arley

-A... A que vino-dijo Norstein levemente sonrojado

-Necesito permiso para poder irme con mi padre que me necesita-dijo Arley

-Si lo ve conveniente no veo problema alguno-dijo Norstein

Justo ahí llegan Sihak y Kristian, el Rey de Licanidon

-No irás castañita-aseguró Sihak entrecerrando los ojos

-Por si no lo sabías mi hermanito esta también en peligro-reprochó Arley

-Madre tú no puedes ir en tus condiciones-contraatacó Kerim

-Kerim no es el momento oportuno-escupió Arley

-¿Que sucede?-preguntó Sihak

-Si es el momento oportuno-respondió Kerim

-¡¡¡Voy a tener un Lobezno!!!-dijo Arley abrazando a su rubio

-¿Eh? ¡¡¡Vamos hacer padres!!!-proclamó Sihak alzando estilo avióncito

El rubio por su semblante estaba más que por sorprendido, no pensaba en que algún día pasaría y menos así de esa forma. La bajó y la besó con mucho sentimiento y ternura a lo que ella gustosa lo siguió.

-Ahora más que nunca deben estar unidos por el par de lobeznos-comentó Kristian

-¿Par de Lobeznos?-dijeron Sihak, Arley y Kerim

-Wow esto es maravilloso significa que habrá gemelos-sonrió Arley demasiado emocionada

-¡¡¡Gemelos!!!-dijo Sihak y se desmaya felizmente

-¡¡¡Ups!!! Imagínense cuando Arley los vaya a parir-comentó Kerim rodando los ojos

- Al menos se que esta feliz de que seremos padres-dijo Arley

-Yo iré en busca de mi hijo Zac y traeré a mi nuera junto con mi nieto-explicó Kristian

-¿A la Impura?-preguntó Norstein

-Si-respondió Kristian

-¿Te sientes bien abuelo joven?-dijo Arley tocándole la frente

-Estoy mejor que nunca y no hay discusión, voy por ellos-dijo Kristian caminando para alejarse

-Si es oportuno traerlos, bienvenidos sean ya que tienen un buen corazón-dijo Norstein

-Que gusto le va a dar a padre-sonrió Arley

-Iré avisarle a padre de esto ¡¡¡que emoción!!!-dijo Kerim y se va corriendo

-Padre espero que estés bien-murmuró Arley sentada a lado de Sihak

- Por otro lado -

Mientras tanto el Rey de Licanidon se preparaba para partir a la Tierra. Había dejado su orgullo a un lado, sus estrictas funciones de Rey. Para él era algo difícil pero ahora estaba usando la razón y quería de corazón ayudar a su hijo, a su nieto y su Impura nuera porque eso era Kay, su nuera, aunque fuera sido convertida por un hechizo. Ahora más que nunca quería a su hijo, su nieto y hasta su hijo menor Dylan más cerca de él. Se vistió con un pantalón estilo militar azul se colocó aquellas botas negras y chaqueta del mismo color que ya tenían tiempo empolvadas, se agachó para sacar de bajo de su cama un cofre dónde tenía una espada de doble filo cristalizada con unas insignias en su idioma Licánido y la empuñadura no era de oro sino de plata que fue heredada de su padre quien murió antes de haber alcanzado su inmortalidad cuándo Kristian era solo un bebe, se la ciñó y bajó para alimentarse con unas bolsas de sangre. Cuándo se sintió satisfecho cogió unas del refrigerador, carne y las guardó en una maletita con unas manzanas y unas botellas de agua por si acaso. Salió afuera besó a su esposa y se dispuso a irse pero Leverkusen apareció.

-¿Pensaba irse sin mí, mi Sr?-preguntó Leverkusen

-Para nada ya iba por ti-respondió Kristian riendo

-Siempre fiel, siempre lo protegeré-sonrió Leverkusen

-Sabes bien que no vas a morir, así que vámonos-dijo Kristian

Leverkusen lo teletransporto a la Tierra, exactamente a 1 hora de distancia de la antigua Ciudadela para luego ir hasta donde vivía la manada de Sihak.

            Con Arley

De un momento a otro apareció Reik Timberlan frente a Arley que se encontraba entrenando con Derek el hijo de crianza de Sihak. Eso era raro ya que no se llevaba muy bien con él pero de verdad que quería ser una familia. Aquél ser intentó seducir a la Licánida pero en realidad la molestaba, ella sabía como era Timberlan.

-Así que dos Lobeznos, he Arley-anunció Timberlan

-No permitiré que le hagas daño-dijo Arley tocándose el vientre dejando a un Derek sorprendido

-¿Hermanos? Bueno Kerim es cómo si lo fuera-pensó Dereck

-¿No se lo dijiste aún?-dijo Timberlan molestándole

-Se lo iba a decir con Sihak después de cenar. No tienes tacto para decir las cosas-escupió Arley molesta

-A mi me da igual cómo te lo diga. A decir verdad no estoy aquí por eso, los lobeznos no me interesan al menos no por ahora. He estado muy pendiente de tu madre adoptiva ya que somos de la misma raza, pero ese es otro asunto-dijo Timberlan

-Le pones un dedo encima a mi madre y hermana. ¡Te parto en dos, Timberlan!-bufó Arley dejando ver sus ojos de un rojo a una heterocromía

-Oh, no te sulfures–dijo Timberlan sin intimidarse-Theo, Theo no sé pero me estoy enfocando mucho en ese hechicero-cortó un manzana y procedió a comerla

-¡¡¡No te metas con el tio Theo!-dijo Dereck tratando de atacarlo pero Arley lo detuvo con su brazo

-Tranquilo Derek, este lo que quiere es molestar-aclaró Arley

-Si tenés razon. Pero es verdad necesito a ese hechicero, sus hechizos no funcionan en nosotros pero igualmente lo necesito-dijo Timberlan

-¿Que? Para que te puede servir Theo-dijo Arley frunciendo el ceño-No Timberlan, él no, no te lo permitiré-

-¿Preocupada de lo que pueda hacer con ese hechicero? Pero si los Licánidos no se mezclan con ellos-escupió Timberlan

-A ti que te importa si me preocupa o si nos mezclamos con ellos. Con que sepas que es Familia y no permitiremos que le hagas daño-atacó Arley

¿Cómo era posible que los considerase familia? A Timberlan se le cayó la manzana al oír eso. ¿Arley ya no era la misma? Para nada, ella no había cambiado en nada solo que ya comenzaba a razonar y no dejarse llevar más por su instinto en cuestiones de vidas, por eso a Theo lo consideraba cómo un amigo.

-Entiendo... Pero aún así iré por él dónde quiera que se encuentre. Solo debo decir, Arley, mi amada Arley prepárate. No tendré más piedad de ti, los Licánidos y todo lo que se relaciona con ustedes. ¡Serán extinguidos! Los Vampiros puros somos los únicos que podemos hacerles frente-dijo Timberlan dándole la espalda-Poco a poco les haré saber de mis planes, solo vine a decirte sobre Theo y también que se cuidarán de lo que beben-

Timberlan desapareció sin decir más, dejándolos confundidos pero alerta por lo que él pudiera hacer.

-¿Que quiso decir, madre? La sangre-preguntó Dereck

-No estoy segura de eso... espera ¿acabas de llamarme mamá?-se sorprendió Arley

-Yo...-

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-Ya casi llegamos, Sr-dijo Leverkusen

-¡¡¡Zac!!!-dijo Kristian alcanzando a verlo

-¿Padre?-dijo Zac sorprendido

-Así que es él-dijo Ashley

-Si. ¿Que haces aquí?-asintió Zac

-Vine ayudarte a traer a mi nieto y mi Impura nuera-contestó Krisitan

-¿Eh?-dijo Zac abriendo los ojos cómo un búho de lo sorprendido que estaba-Debo estar soñando-Leverkusen le pellizcó

-Vamos ¿o no?-apresuró Kristian

De acuerdo-dijo Zac

-¿Ya comiste?-comentó Kristian

-No tengo hambre... ¿Que traes en la maletita?-dijo Zac olfateando

-Pues-dijo Leverkusen poniendo la mano en su barbilla-Creo que trae manzanas, agua y unos trozos de carne

-¿Carne? ¡Dame!-dijo Zac quitándole la maleta y su amiga lo miraba cómo devoraba la carne

-No te la acabes todo. Guarda para mi nieto-dijo Kristian preocupado por su nieto

-En lugar de caminar deberíamos usar la teletransportación-ofreció Leverkusen

-¿Me pueden explicar con más detalle sobre eso?-dijo Ashley

-Después de regresar con mi nieto e Impura nuera, te diremos lo que quieras saber-zanjó Kristian

Al haber terminado de comer algo de carne se puso serio y estrechó la mano a su padre, a pesar de cómo fueran las cosas era su padre. No entendía su cambio de actitud pero le gustaba este nuevo padre, ahora más que nada su relación con Kay marcharía mejor que nunca. No sabía si le permitirían ir y venir de Licanidon con ella pero eso ya era lo de menos, pues las cosas aparentemente estaban marchando bien. Una vez del apretón entre padre e hijo, Leverkusen se dispuso a llevarlos a ese lugar.

Estando allí, en la fortaleza del Consejo de los Doce se podía percibir un poder fuerte pero no superior al de un Licánido. De repente aparecieron las gemelas Géminis con sus cetros imponiendo cualquier objeción y no permitir el paso a nadie. Al ver a Zac retrocedieron un poco, más cuándo sintieron la presencia de su padre. Y antes de que este mismo hablara, apareció alguien más frente a las gemelas e intentó atacar al Sr Rey, este lo esquivó con agilidad, mientras que el otro individuo soltó una risita y los miró fijamente.

Se trataba de Saul, el líder del Consejo de los Doce, a comparación de las Geminis era más poderoso pero ninguno de ellos se sentía intimidado. Zac se abalanzo sobre Saul y comenzó a atacarlo con fiereza mientras que Kristian, Leverkusen y Ashley lidiaban con las gemelas. Las fuerzas no estaban igualadas pero ni aún así no pudieron lograr la victoria y Saul pidió una tregua, sabía que no tenía nada que hacer.

-Alto-gritó Saul haciendo que todos se detuvieran

-Maestro-

-Hagamos una tregua y hablemos-expuso Saul

-Bien pero quiero ver a mi nieto-inquirió Kristian

-Enis ve a buscar al niño-dijo Saul

Se marchó y regresó con el pequeño que gritaba pero al ver a su padre sonrió.

-Papi-chilló Damon

-Ya veis que está bien-dijo Saul

-Papi-volvió a chillar Damon tratando de ir a junto de su padre

-Tranquilo peque-dijo Zac

-Enis deja que vaya con ellos, el niño no es ninguna amenaza-anunció Saul y Enis lo soltó

-Papi-corrió Damon hacia Zac

Zac lo cargó y el pequeño le beso la mejilla, después cayo rendido ante el sueño.

-Mejor vamos a dentro y hablamos con más tranquilidad-comentó Saul y todos lo siguieron

-Nosotros no tenemos nada que decir-soltó Zac

-Pero nosotros si-añadió Saul rascándose la barbilla-Géminis asegurad la fortaleza, presiento que se acerca algo-

-Escuchemos al menos lo que tienes que decir-añadió Kristian viendo a su nieto

-Bien-asintió Zac, Damon dormían en los brazos de Zac

-Digamos que no nos gusta lo que son pero vosotros pertenecéis a una nueva raza y vivís en vuestro planeta, así que no tenemos problemas con vosotros. Solo no queremos que sigan en la Tierra, por eso nos unimos todos los hechiceros y brujas. De ahí viene la marca que tenemos todos y que Kay por raro que parezca también tiene a pesar de que es vampiro-explicó Saul

-Dices que su misión es acabar con todos los seres sobrenaturales que existen-preguntó Zac

-Exacto, así que si regresan a su planeta no les haremos daño-respondió Saul

-Siendo así tenemos información que ofrecerles-añadió Kristian

-Ya esta maestro-dijo Gem

-De acuerdo-asintió Saul

-Timberlan planea algo gordo y aunque no sabemos que es, lo conocemos y sabemos que se va a derramar mucha sangre-contó Kristian

-Probablemente él sea esa amenaza que presiento-dijo Saul

-Si, también exigimos que dejen a Kay fuera de esto-dijo Zac

-Papi tengo hambre-dijo Damon despertando

-Toma-dijo Kristian tendiéndole un poco de carne

Damon se veía algo temeroso, no conocía a Kristian y su esencia era muy fuerte para que el pequeño pudiera percibir algo.

-Tranquilo peque. Es tu abuelo-le explicó Zac

-¿Abuelo?-

-Si, anda come-

Damon cogió el trozo y empezó a comer, mientras que Kristian les explicaba en detalle sobre Reik Timberlan, si Saul quería enfrentarse a él debía conocer a su enemigo. Luego Leverkusen le murmuró algo a Kristian, lo que le tomo por sorpresa.

-Si, Kay queda fuera de esto os ofrecemos una alianza. Sería algo temporal para acabar con Timberlan-propuso Kristian

Saul estaba por contestar cuando apareció Kay con las manos cubiertas en sangre, Zac dejo al pequeño en el suelo y le pidió que se quedase ahí quieto. Kristian la observaba con atención, desde luego esa impura era muy hermosa. Zac quiso acercarse pero Kay le mostró los colmillos, haciéndolo retroceder y supo que su amada estaba diferente. El señor Rey analizó la situación e informo a su hijo que siendo así no había nada que hacer, que debía olvidarse de ella. 

Zac movió la cabeza, se negaba a aceptar eso, él conocía a Kay algo le pasaba, ella no era así, ella lo amaba. Estaba enfadado y no dejaba de gritarle a su padre que la estaban manipulando, que no pensaba dejarla ir. Damon trato de ir hacía su madre pero Zac lo cargo y el pequeño se puso a patalear, al final lo dejó en el suelo pero le explicó que mamá estaba enferma. El niño chilló y se marchó corriendo, quería ir a casa con sus padres pero no podía.

-Damon espera-gritó Zac

-Ve por él hijo. Te esperaremos aquí-dijo Kristian

-Si, arreglaremos lo de Kay luego-anunció Zac

Zac corrió tras Damon, con Timberlan suelto no dejaría a su hijo desprotegido, nunca, lo protegería de lo que fuera. Estaba por alcanzarlo cuando escucho una voz que lo llamo, aunque sabía a quien pertenecía se giro. Se trataba de la nueva Kay, tenía un aspecto muy intimidante y sus ojos eran completamente rojos.

-Kay...-

-Voy a matarte, eres una abominación-dijo Kay en posición de ataque

-Amor tu no eres así-se acercó Zac

-Te arrancaré el corazón-bramó Kay

-Por favor Kay-Zac le acarició la mejilla-Tu me amas, nos amamos-

Entonces Kay lo derribo y atacó a Zac, lo lógico habría sido que se defendiera pero no podía hacerle daño, así que simplemente se quedo quieto y Kay lo amordazo, luego lo ato con cadenas de plomo, resistentes ante la fuerza de los Licánidos.

Luego Kay regresó a la fortaleza, lo llevó ante Saul y las Géminis. Cuando Kristian se percató de que Zac estaba encadenado enfureció, como se atrevían a tratar a su hijo de semejante manera. Kay los miraba con odio, Leverkusen se preparó para atacar y Saul se levantó de su silla.

-Kristian yo...-

-Exijo que suelten a mi hijo-bramó Kristian

-Perdona todo esto-se disculpo Saul

-No lo haré hasta que no liberéis a...-escupió Kristian

-Haced lo que pide-ordenó Saul

Enis asintió y miraron a Kay, ella libero a Zac, luego él se froto las manos para después encararse a las Géminis, ahora estaba seguro de que ellas eran las responsables de lo que le pasaba a su amada. En un principio lo negaron pero a petición de Saul le explicaron que estaba bajo un hechizo pero que no lo iban a revertir porque Kay era un vampiro y cuando les dejase de ser útil la matarían. Al oír eso Zac enfureció por completo y se transformo mostrando sus enormes colmillos, las Géminis retrocedieron, aunque ellas eran muy fuertes, Zac lo era más debido a su naturaleza. 

-Revertir el hechizo ahora-gritó Zac en posición de ataque

-No, Kay debe morir-escupió Gem

-Si, no podemos dejarla viva-añadió Enis

-Kay no es una una marioneta a quien utilizar cuando crean oportuno. Si es un vampiro pero aún así siente y la amo-bufó Zac

Kristian miró a su hijo, se veía furioso por eso a pesar de que no era así como quería darle la noticia, en vista de la situación decidió decirlo, sino lo hacía matarían a Kay y su hijo nunca se lo perdonaría.

-Kay no es ninguna amenaza-declaró Kristian

-¿Cómo estás tan seguro?-preguntó Saul

-Porque vine no solo por mi hijo, sino también por mi nieto y Kay-respondió Kristian

-¿Qué?-

-¿Qué tratas de decir?-

-Cuando regresemos a Licanidon, Kay vendrá con nosotros-explicó Kristian

-Es enserio-dijo Zac sorprendido

-Si, así es-asintió Kristian

-Bueno siendo así la cosa cambia. Géminis deshacer el hechizo-dijo Saul

Las Géminis alzaron sus cetros y emitieron una intensa luz azulada que lo cubrió todo, minutos después, cuando todo volvió a la normalidad Kay estaba en el suelo, Zac corrió hacia ella, si le habían hecho algo se las verían con él. Kristian observaba a su hijo, ahora que lo veía personalmente podía decir que amaba a esa Impura y que si los separaba Zac nunca se perdonaría, por eso ahora estaba más decidido que nunca a conseguir que Kay dejase de ser una impura ante los ojos de su gente.

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