── Exactamente cuarenta grados, princesa. ──pudo escucharse la voz del androide de protocolo── me temo que el amo Luke ha tomado un resfriado.

Leia tan solo soltó un suspiro y acarició el tronco de su nariz, intentando no perder el control. ¿Por qué su hermano tenía que enfermarse justo ese día? ¡podría haberlo hecho cualquier otro!

── Perdóname, Leia... ──habló el rubio con la voz cambiada. estaba congestionado, cómo no. Era el colmo para la castaña.

── Ugh, en fin. Alguien tendrá que quedarse a cuidarte, no tenemos androides médicos disponibles para ti.

── Pero, yo no soy un niño...

Ni respondió. No tenía tiempo para discutir, debía rápidamente irse a distintos sistemas en unos minutos para ver si algo quedaba del imperio, era algo arriesgado, pero ella insistió en ir a tal misión.

Fue descartando gente, nadie de alto rango podía ocuparse de su hermano, Lando iba a acompañarla, los pilotos tenían sus propios asuntos, Chewbacca seguro ni sabría como cuidarlo, C-3P0 y R2D2 eran acompañantes al igual que el moreno, entonces, el único que quedaba era...

── ¿Y? ¿cómo está el niño? ¿enfermo? ──Han Solo hizo aparición en la habitación, con su típica voz ronca y madura, que podría sacarle escalofríos a cualquiera.

Leia encontró al perfecto cuidador.

── Sí, enfermó, y te vas a quedar a cuidarlo. ──ya tenía listas las palabras si el castaño presentaba quejas, todo listo.

── ¿Qué? ¡ni hablar! no tengo porque cuidar-

── ¡No quisiste acompañarnos, ahora te quedas y te aguantas! no tengo tiempo para esto, vamos, o la nave se irá sin nosotros.

Lo único que se escuchó fueron los molestos pasos de la princesa salir de la habitación, un "cuídese, amo Luke" por parte de C-3PO y aquellos sonidos que R2D2 normalmente emitía, despidiéndose al igual que el otro androide de dorados tonos.

Han tan solo chasqueó la lengua, fastidiado, ahora se arrepentía de haberse negado a ir. Pero intentó verle el lado positivo, era un resfriado común y Leia estaría el día siguiente en la base para cuidar al rubio, cero preocupación, dar medicina, verificar que todo estuviera bien y listo.

No se veía tan mal en su cabeza.
Claro, en su cabeza.

── ¡No quiero tomarme esa absurda medicina! ──y ahí estaba su nuevo dolor de cabeza: Luke Skywalker, negándose en chillidos. Ya llevaban alrededor de tres minutos discutiendo y no llegaban a nada.

── ¡Deja de discutir! ¿qué me dirá Leia mañana cuando llegue si estás peor, eh? ¿crees que va a tragarse la idea de que te comportaste como un bebito mal criado y no quisiste tomarte una medicina cada seis horas? ¡si siempre está de tu lado! ──alzó la voz, estaba harto, lo obligaría a tomársela, de alguna forma u otra.

Impulsivamente, se tiró encima del contrario, apresando sus manos con su diestra, agradecía que estaba enfermo, por ende: débil.

Dicha acción no hizo más que sacarle un fuerte sonrojo al menor, que gracias a la tan mencionada enfermedad pareciera como si ella fuera la causante, eso acompañado de unos forcejeos inútiles.── ¡S-Suéltame, Han!

── Oh, claro que no, chico, vas a tomarte esto de una forma u otra. ──con la ayuda de su mano libre, fue quitándose su chaqueta, algo difícil, pero de alguna forma consiguió.
Utilizó la prenda para amarrar al Jedi por las manos, sí, no podía tener solo una libre. El nudo era fuerte, llegaba hasta a lastimar un poco al pequeño, pero nada que soportar no pudiera.

Bien, ya tenía al rubio completamente desarmado, sin alguna posibilidad de escape. Ahora tranquilamente vertió la medicina en una cuchara, volvió a encimarse a Luke, agarrándolo por las mejillas y evitar que moviese la cabeza, guió el cubierto a su boca, y obligó a que abriera esta.

── Te, la vas, a... ¡tomar! ──sin ser tan brusco, logró su cometido que si Luke no hubiera alargado con tontas negaciones, lo habría hecho en segundos.

Ya más relajado, suspiró y dejó la cuchara a un lado.

── Han... ──de repente escuchó la voz menor.

── ¿Qué quieres ahora, niño?

── ¿Puedes.... desatarme y quitarte de encima mío? ──el tono de voz bajaba mediante hablaba, tal vez era por culpa de la vergüenza.

El contrabandista volvió en si, estaban en una posición... bastante prometedora. Sonrojándose, hizo caso a lo que el chico quería, tembloroso.── l-lo siento, yo- cielos. ──no tenía palabras, tapó el envase del medicamento y lo dejó al lado de la cuchara, dio una última mirada al chico, dijo un "volveré a la tarde-noche, aunque si necesitas algo vendré enseguida, nos vemos", luego se marchó.

En el transcurso del día no pudo trabajar bien, ¿la causa? aunque la mayoría lo supone ya, es porque no ha dejado de pensar en esa extraña escena que tuvo con Luke, le hacía pensar en cosas que tal vez no debería y lo desconcentraba al máximo, un desastre total.

Para su mala suerte, las seis horas pasaron, y como había mencionado, tenía que volver con él. "A ver, Han, entras, le das la medicina, deseas las buenas noches y te largas a tu habitación a descansar, sí, lo tienes todo controlado.", se decía a si mismo.

De la nada ya estaba ahí, ¿que cómo había llegado tan rápido? ni idea, sus pies se movieron s o l i t o s.

Ingresó al lugar, encontrándose a un niño —a su parecer— aburrido jugando con los dedos, ¿es que Luke no podía ser un pelín menos infantil? aunque... no negaba que eso lo hacía ver tier- Han deja tus pensamientos raros.

── ¿Aburrido? ──preguntó divertido, haciéndose el que estaba bien, como siempre.

── Bastante. No puedo hacer nada, intenté levantar una caja para entretenerme pero justo estornudé, se me cayó y casi la hago pedazos, decidí no intentar otra vez... ──respondió el de menor edad a medida que un suspiro salía de sus labios.

── Bueno, ya es hora de que el pequeño tome su medicina y vaya a dormir.

── Jaja, muy gracioso, tonto.
Dame esa asquerosidad de una vez.

Y lo hizo, fue demasiado rápido esta vez.

El silencio dominaba el cuarto, ambos mantenían sus miradas fijas en el otro, era... tan extraño... o al menos para uno.

De la nada, el extrañado molió a golpes al silencio, haciéndolo desaparecer.

── Bien, ya hice lo que necesitaba hacer, al parecer se te quitó la fiebre y eso es bastante bueno, al menos no tendré un regaño de Leia mañana. Buenas noches, descansa. ──giró en media vuelta, dispuesto a retirarse.

Pero, algo lo detuvo.

── Han... quédate a dormir conmigo.

Pasó saliva, ¿escuchó bien? ¿Luke le acaba de pedir que se quedara con él?
── P-Pff, ¿qué estás diciendo, niño? ¿acaso el resfriado te afectó demasiado?

── Tan solo hazlo... por favor. ──ahora parecía estarle suplicando, oh demonios, ¿el chico se estaba volviendo su nueva debilidad o qué?

── De acuerdo, me quedaré, pero nunca más. ──ante esto, Luke sonrió, contento.── solo no me vayas a contagiar, eh.

── Que nooo, Ven. ──le hizo un espacio, y ahí se recostó. El lugar no era para nada espacioso.

Ya no podía con tantas preguntas acumuladas en su cabeza sin respuestas, estaba hartado. Se dejó llevar por sus impulsos, y lo que sus impulsos hicieron fue abrazar al contrario.

Luke estaba pasmado, y por qué no, ruborizado hasta las orejas, después de todo, había tenido esos mismos problemas de sentimientos que Han, solo que días atrás. Quizás semanas, o meses...

Tomó la decisión de corresponder, escondiendo su rostro en el pecho mayor, acción que a este le derritió. ¡Qué tierno!

── Descansa. ──fue lo único que dijo, depositando un cariñoso beso, —esos que nunca Han entregaba— en los dorados cabellos del Jedi. El ambiente tuvo un cambio bastante drástico, ¿y qué importaba? tenía los sentimientos claros ahora.

── Tú igual... te amo. ──susurró, quizás fue por el sueño, o cualquier cosa pero eso último se le escapó, Luke había planeado sus guardarse sus sentimientos, fracasó.

Han tardó en dormirse, "este día fue muy agitado" pensó para luego reírse adentro, no quería despertar a ese pequeño durmiente que tenía en brazos.

Comenzaba a darle sueño de pronto, acarició la cabeza de Luke, cerró sus ojos, y finalmente pronunció:

── yo igual te amo.

Leia no era el Skywalker que buscaba, claro, jamás negaría que era una chica fuerte, atractiva, pff, podría estar todo el tiempo dando sus virtudes.

A pesar de eso, Luke era diferente, Luke tenía algo, que lo hacía sentir bien, en casa, podría decirse.
Luke era especial.
Luke era su amor.

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aaaaaa no es lo mejor, pero espero les guste. <3 uff, tiene muuuchos cambios, pero no se desvía de lo que escribí a inicios del 2018.
Esto va dedicado únicamente para wwwhomosexuality ó canonkings .
Uno de mis regalos de San Valentín, es poder entregarte mi historia SkySolo una vez más; para que la leas las veces que quieras. Te amo mucho, bebii.

¡Gracias por leer, que la fuerza los acompañe!