L.2 Capítulo 25
Todoroki Shoto
¿El destino quería esto para mí? ¿Cuáles eran las probabilidades de que Izuku fuese el hijo del Sr. Toshinori? ¿Por qué el destino nos guio hasta este punto? ¿Por qué terminé aceptando comer pizza con él cuando claramente el pobre quiere huir? No sé, pero de alguna forma las acciones de Izuku me parecen interesantes.
Una mirada rota, pero existía ese brillo deseoso de vida, un brillo que muchos desearían tener.
Durante el pasar de los minutos Izuku se veía incómodo y preocupado al hablar, su mirada lo delataba, pero honestamente a mí no me parecía molesto charlar con él, es un cambio de aire que no me esté mirando como el malo de la película, como un drogadicto, con decepción o como si fuese el peor ser vivo del planeta Tierra.
Soy malo, de eso estoy seguro, pero... duele.
Izuku me parecía alguien interesante, un misterio, un chico que se ve a distancia que es inocente, pero de alguna forma hacía vandalismo o al menos es lo único que se me ocurre.
¿Por qué usaría de noche ropa negra y tendría sprays de pintura en su mochila?
-¿Qué hacías en el callejón el otro día?- Pregunté deseoso por su respuesta.
-Soy un súper héroe que salva a las víctimas de asaltos con pintura en spray- Respondió con una sonrisa burlona, no me esperaba esa respuesta, al menos no de parte de él.
Reí y respondí con honestidad -Estoy seguro de que haces vandalismo.
-Prefiero el término decorar la ciudad- Dijo sin más, esa respuesta en verdad me sorprendió.
-¿Decorar? ¿Tu decoración son firmas, dibujos locos o cosas sin sentido?- Insistí, enserio necesitaba su respuesta.
-Si te lo dijera terminaría arrestado- Respondió burlón -Ya he tenido problemas con las autoridades... broma, la policía jamás me ha encontrado.
Creo que analizaba demasiado lo que decía, hasta un punto me estaba debatiendo si él decía la verdad o no.
-Eres peculiar Izuku- Solo eso pude decir como respuesta.
Peculiar era una buena palabra para ese chico que usaba una máscara para verse normal.
-Pregunta seria, ¿Enserio era un cumpleaños?- Esa pregunta me hizo sonreír en mis adentros, no solo yo era el curioso.
-Te lo diré cuando me digas qué era lo que pintabas- Respondí al instante, tal vez así hablaría, aunque una duda me surge ¿Yo le diría la verdad si responde?
-Bien jugado Shoto, pero creo que estaremos disconformes los dos por toda la eternidad- Dijo sin más, aún sonaba con gracia, pero era honesto y se notaba que por nada en el mundo hablaría.
Mi curiosidad aumenta por el pasar de los segundos.
-Algún día te sacaré esa información- Afirmé, lo iba a lograr.
-El primero que lo logra gana un premio- Su mirada reflejaba determinación, él también deseaba descubrir la verdad.
No soy el único curioso.
Formé una sonrisa al pensar, pero negué, nadie externo a mis conocidos debe saber la verdad... aunque era divertido seguirle el juego.
-¿Qué ganaré a cambio?
-La satisfacción de ganar- Su respuesta me hizo reír, era la segunda vez que reía hoy.
-Bueno, eso significa que yo seré el ganador.
Yo iba a ganar, era una promesa que me iba hacer.
-¡Suerte!
Esa última palabra selló una promesa, una que iba cumplir a pesar de que iba a perder sí o sí, sea la forma que sea, Izuku descubrirá el propósito de la salida que hice.
Llegó la pizza, comenzamos a comer, era deliciosa, jamás imaginé lo bien que debía saber una pizza preparada en una pizzería.
-Jamás conocí a un adulto como él, siempre han sido...
Esa frase y mirada dolorosa me hicieron comprender que Izuku era como yo, él había sufrido al menos algo parecido.
Tal vez al fin encontré a esa persona que me comprenda.
Luego me habló sobre su amiga Ochako, parecía ser una buena persona.
-¿Querer vivir sirve?- Esa respuesta combinada con esa mirada causaba escalofríos.
¿Querer vivir sirve como una meta de vida?
Una respuesta interesante, dolorosa y que usualmente las personas tenderían a dar un discurso sobre la importancia de vivir, cuando ellos mismos no tienen una respuesta clara, porque cada persona es un mundo distinto.
-Sí, vivir es más difícil que morir- Respondí con honestidad, en mi vida cada día respirando es peor que la muerte, porque si muero ya no estarán mis padres, solo seré yo sin sufrir nuevamente.
Vivir es duro y no lo tienes tan claro hasta que comienza a azotarte la dura realidad con sus injusticias.
-¿Y tú?- Preguntó curioso el peliverde.
La diversión se esfumó, la pregunta provocó que volviera a la realidad, una donde mis metas estaban hechas en base a lo que Enji deseaba.
El tema cambió de rumbo a Yuuei, sentí pánico, pero al parecer Izuku logró entender mi desagrado, formulando otra pregunta.
Comenzamos a hablar de videojuegos y sobre la escuela, temas normales y fáciles de seguir un hilo en la charla.
La cara de Izuku cambió a una nerviosa y aterrada, tal vez él no se estaba dando cuenta que su mirada esmeralda se veía perdida, estaba aquí y a la vez no.
Ese chico sufría demasiado, sus gestos lo decían todo, en ciertas preguntas se medía a la forma de hablar o sus muecas demostraban ese temor.
-La noche pasada estaba de policía en cubierto, me dedico a buscar bandas de narcotráfico...- Mentí de forma descarada para poder hacerlo volver, al ver que regresó continué fingiendo un tono de voz sincero -Ahora que te dije la verdad, eres el ganador, así que dime qué pintaste.
Izuku comenzó a reír nuevamente, me gustaba encontrar a una persona que se riese de las estupideces que digo intencionalmente y no de mi estando bajo el efecto de la droga.
Continuamos la tarde conversando de distintos temas, Izuku era divertido, era ese tipo de persona que es fácil de congeniar o tal vez nuestra forma de ser calzaba, pero eso no importaba, yo quería conocerlo más, quería descubrir qué hizo esa noche y por qué el uso de aquella máscara.
Nos dimos nuestros números telefónicos cuando terminamos de comer, era hora de volver a esa aterradora mansión.
Al final tenía razón, tarde o temprano le iba a devolver la chaqueta a ese chico de ojos esmeraldas.
"El vándalo", así lo nombré en su número de contacto, al menos por el momento.
12/12/2018
Era molesto no saber nada de Fumikage, sabía que estaría bien con Hawks, pero de alguna forma se sentía como esas vacaciones de invierno donde los Tokoyami lo llevaron al centro de rehabilitación, temía que era algo relacionado con ello... tengo miedo de descubrir que fui yo el causante de que sus padres tomaran la decisión de "aislarlo" de todos nosotros.
Aunque por el momento iba ignorar esa gran incógnita, hoy iba a venir a esta mansión Izuku, de alguna forma me emocionaba que alguien nuevo conociera un poco de mi vida, solo la parte "buena".
Izuku nunca iba a enterarse de nada del tema de las drogas, jamás conocería a Neito, ni a ninguno de mis amigos... temo que por culpa de ellos él descubra mi peor parte.
¿Está mal querer separar ciertas partes de tu vida para mantener a la otra bajo la ignorancia? No le mentiré sobre mí, omitiré la parte mala de mi persona.
Cuando llegó me emocioné, me sentía como un niño pequeño apunto de mostrarle a su nuevo amigo sus juguetes.
Por un momento tuve miedo al ver como veía mis cómics, la gente usualmente me tacharía de nerd, sabía que mis compañeros de seguro lo pensaban, pero al ser Todoroki Shoto no decían nada, soy de alguna forma intocable a nivel de popularidad. Si fuese solo Shoto estaría siendo acosado en la escuela.
Usualmente los niños y adolescentes se ríen de los chicos introvertidos, con calificaciones perfectas y con un gran fanatismo por los cómics, pero el dinero y el renombre de mi familia ayuda.
Me sentí verdaderamente feliz cuando Izuku demostró verdadero interés por los cómics, aquello dio como resultado que ambos estuviésemos gran parte de la tarde leyéndolos, se sentía bien, Fumikage ya no era tan fan de ellos, yo los leía en el sofá de mi dormitorio mientras él pintaba concentrado lo primero que venía a su mente, en el caso de las chicas nunca le gustaron como a mí.
Por un momento la expresión de Izuku cambió de golpe, su cara antes se veía tranquila, pero por alguna razón parecía como si viese a un muerto; intenté arreglar la situación invitándolo a jugar un videojuego, él aceptó, pero en el fondo parecía asustado.
¿Qué ocurría en su mente?
Luego vino el momento de explicarle de quién era el atril de mi dormitorio...
–Es de mi amigo, él pinta en todos lados... al final decidió dejar un atril en mi dormitorio... también irá a Yuuei.
Yuuei, todo terminaba en torno a esa maldita academia.
-Que genial que tu amigo vaya a esa academia, no todos tienen la suerte de seguir con sus amigos- Respondió con una sonrisa falsa, otras personas habrían sido engañadas fácilmente, pero en mi caso no me pueden engañar, estoy rodeado de esas sonrisas falsas -Mis amigas también irán a Yuuei...
¿Yuuei? ¿Ellas también? ¿Acaso esto es el karma?
Decidí seguir la conversación, al parecer sus amigas irán a mí mismo departamento, la vida es curiosa a no más poder; me entró la duda, sí sus amigas iban a entrar a Yuuei, ¿Dónde asistiría Izuku?
-Iré a la escuela que Toshinori escoja- Respondió con un tono de voz firme, pero su mirada se veía extraña –La que tenga un mejor plan educacional para ingresar a la Universidad me servirá.
Parecía un robot, como si estuviesen sus palabras escogidas minuciosamente.
-¿Universidad?- Pregunté curioso, no le creía al 100%, pero continué con la pregunta clásica -¿Qué carrera deseas estudiar?
-Eh...- No se le ocurría ninguna carrera, pero es lo normal para los chicos de 15 años, aunque la sociedad nos impone desde pequeños lo que creemos querer hacer con nuestro futuro, mi padre lo hace con el violín.
-En realidad no me interesa la Universidad o cualquier cosa, jamás he pensado siquiera en ser adulto...- Lo último fue acompañado con una mirada que me causó escalofríos, sus palabras no eran las de un chico que solo piensa en el día a día.
¿Sobreanalizo demasiado las palabras que dice Izuku? Tal vez, pero es interesante deducir cosas de él, porque si me equivoco lo hace más divertido.
A pesar de lo que decía Izuku, al menos él tenía alternativas, yo estaba atrapado entre las garras de Enji.
-Al menos puedes escoger en tu vida- Dije accidentalmente, no me gustaba demostrar esa pesades, usualmente el único que ve esto en mi es Fumikage.
-Solo desde que vivo con Toshinori- Respondió con un tono de voz amargo –Antes de noviembre mi vida tenía un destino marcado, ahora... quiero creer que vencí al destino.
-¿Vivías antes en un hogar de menores?- Pregunté con curiosidad, luego me di cuenta de lo intrusiva que era la pregunta, por lo tanto, dije –No es necesario responder...
-Hagamos un trato- Dijo con una sonrisa -Yo te digo, si tú me dices por qué tu violín está botado ahí.
Sonreí en mis adentros, me importaba poco demostrar mi desprecio hacia el violín, a veces incluso se lo demostraba a Enji.
-No me interesa tenerlo bien cuidado, por lo tanto, en la esquina- Respondí con frialdad, por mí que se destruyera en mil pedazos.
–Hasta el 31 de octubre viví con ellos, casi termino en un hogar de menores, pero ahora me cuida Toshinori- Cumplió parte del trato finalizando otra vez con esa sonrisa falsa.
¿Qué podría haberle pasado para terminar alejado de sus padres? Tal vez es como yo, pero él tuvo la suerte de que sus padres fuesen castigados por las autoridades.
De golpe terminamos en el comedor recogiendo una silla para colocar el violín sobre ésta, como si estuviese castigado en un rincón.
Fue una experiencia divertida, pero todo se transformó cuando le pregunté si pintaba, esquivó la pregunta rápidamente, algo le pasaba a Izuku con respecto a la pintura y estoy decidido a descubrir lo que sucede con él.
13/12/2018
Estaba harto, Enji criticaba cada movimiento que hacía con el violín, no se callaba, insistía en que lo hacía mal, que no estaba demostrando lo bueno que era...
Le grité, me importaba poco el resultado, el cual fue un golpe en el estómago, odiaba a Enji, odiaba su mirada zafiro, odiaba su personalidad... odiaba todo lo que él representaba.
Enji es un monstruo que usa una máscara como fachada, si bien se nota que puede ser un engreído, no demuestra la maldad que existe en él y es irritante que nadie note la monstruosidad que es ese hombre.
Estaba cansado, harto de vivir con él... esa noche él se fue de seguro con su amante dejándome en mi cómoda soledad; decidí consumir coca para despejarme, pero mi plan se vio interrumpido al recibir un mensaje de Izuku.
El Vándalo
"Chicas, hoy me pasó algo raro..."
"Lo siento Shoto, me equivoqué D:"
Solté una pequeña carcajada, decidí llamar a Izuku en un momento de impulsividad, luego la consumiría.
-¿Chicas? ¿Raro? Izuku, coméntame el chisme- Dije burlón, podía imaginarme lo nervioso que estaba el peliverde.
-Eh... bueno, no te rías, pero fui a comer sushi con Toshinori, todo estaba bien en el restaurante, pero en el momento menos indicado una señora comenzó a discutir con quien creo que era su marido, ella casi escupía fuego por la boca, enserio daba miedo, la cosa es que entre insultos ella terminó arrojándole el sushi y lo que creo que era pulpo... desgraciadamente, parte del arroz y camarones cayeron en mi cara, mi ojo terminó ardiéndome, porque un camarón tenía salsa de soya y pues, descubrí de la peor forma el efecto de esa salsa en los ojos.
No pude evitar reírme, era una anécdota sacada de una mala escena de película de comedia.
-No te rías, fue un desastre, Toshinori se enojó con ella y comenzó a discutir, le pidió al garzón que la echaran... es la primera y última vez que comeré en un restaurante de sushi... en realidad no volveré a comerlo, porque no me gustó, imagina todo lo que sufrí para terminar descubriendo que esa comida no te gusta...
Creo que estuve unos cinco minutos riendo sin parar, mis ojos ardían por las lágrimas que caían.
-Que cruel eres y yo confiando en que no te reirías de mi infortunio- Se quejó, pero pude escuchar una pequeña carcajada.
Continuamos hablando hasta altas horas de la noche, Izuku es una persona divertida; sin darme cuenta esa noche no consumí coca.
26/12/2018
Se siente raro no tener a Fumikage en estos momentos tan dolorosos, una sola llamada de él me haría feliz en esta oscura situación donde solo deseo ocultarme y llorar en mi ropero, es la única forma en la cual me siento seguro de él.
Los gritos de mis progenitores y choque de botellas de vino en el suelo de la cocina se escuchaban hasta en mi habitación, estaba cansado de vivir en esta mansión, de ocultarme en el ropero deseando que al día siguiente las cosas sean tranquilas, normales o simplemente silenciosas.
Extraño a Fuyumi, pero no se puede hacer nada, estoy solo en esta aterradora mansión llena de monstruos que me odian.
Deseaba que Enji no golpease demasiado fuerte a Rei, porque ella terminará al día siguiente desquitándose conmigo, porque siempre es mi culpa, mi existencia es la causante de todo lo malo que le sucede a mi entorno.
Hago sufrir a mi novia, a mis amigos y le arruiné la vida a Rei.
Lastimo todo, todo lo bueno lo arruino de alguna forma u otra, me da miedo arruinar a Izuku, me da miedo que termine como mis amigos...
Izuku no puede conocer al Shoto adicto, al malo, al que arruina todo lo que aprecia.
Tic tac, tic tac, tic tac...
¿Estoy maldito?
A veces desearía que ese ropero me encerrase de por vida, que aquella oscuridad me lleve a algún lado...
No quiero morir, pero si muero todos estarán mejor, todos se librarán de este ser que solo sabe destrozar a las personas.
Estoy cansado de fingir que quiero mantenerme de pie, ya no puedo más con esta máscara.
27/12/2018
Como era de esperarse, Rei estaba molesta con Enji y con la vida, por lo tanto, ataca al más débil, a su hijo indeseado, a la persona que le arruinó su vida, ella se suponía que tenía que ser mi zona segura, mi madre tenía que haber sido mi salvadora en los momentos en el que el viejo se volvía loco, ambos éramos víctimas de ese monstruo, pero es mejor desquitarse.
Fue la primera vez que me abofeteó en la cara, era como un acuerdo tácito entre los dos, no lastimar en zonas visibles, aunque da lo mismo, se zafarán de la justicia de alguna forma...
El anillo rompió mi labio, la sangre caía, era la primera vez que Rei me hería de esa forma, una voz en mi cabeza gritó "tírate por la ventana de tu dormitorio y acaba con el dolor de una vez por todas"
Corrí hacia mi habitación, me asomé por la ventana, miré el suelo y sentí pánico, ¿Enserio iba a acabar con mi vida? Yo no quiero morir, pero es la única solución factible para todos, si muero nadie sufrirá, incluyéndome.
Adiós violín, adiós Enji, adiós Rei, adiós adicción, adiós violencia...
Libre, mi muerte era la libertad ansiada, pero allí estaba llamando a Izuku para escuchar una voz amiga, una voz que sé que no me juzgará, porque no lo he lastimado, no he demostrado esa horrible cara mía.
Desearía retroceder el tiempo.
-Hola Izuku, ¿Puedo ir a tu casa?- Pregunté, ni idea dónde estaba su casa, pero necesitaba un amigo con quién hablar.
-Te enviaré la dirección...
Me llegó el mensaje donde señalaba la dirección, me sentía tan ido que ni siquiera intenté curarme o algo, quería huir de esa mansión.
Cuando llegué a la casa de Izuku éste me curó mi herida, se veía tan preocupado, me recordaba la mirada que dio Fumikage la primera vez que vio mis golpes.
Al terminar la curación nos sentamos en el sofá, no sabía qué demonios decirle, estaba herido y mi mente no lograba conectar las ideas.
-¿Qué te ocurrió?- Preguntó con preocupación –¡Puedes ser honesto, seré una tumba!
Sonreí en mis adentros y sin poder evitarlo, hablé de mis padres, mis inseguridades, lo que me hizo Rei, todo, pero mi forma de hablar no reflejaba el dolor que sentía al decir todo esto, me sentía en modo automático.
Aunque no me vi venir ver a Izuku señalar su corazón y decir -Te duele demasiado...
Vaya que duele.
-Y sientes que estás solo en un podrido mundo...
Me siento diminuto, a pesar de tener seres queridos me siento solo, eso me hace una mierda de persona...
Las palabras calzaban con mi forma de vivir, mis ojos ardían al sentir el cúmulo de lágrimas.
-Y-Yo no temo tener hijos, temo tener una familia... ¿Quién dice que no seré la misma basura que ellos?- Dijo Izuku intentado verme fijamente –Te sientes miserable en casa, quieres huir, pero ¿Quién te rescatará?
Sentía que al fin las lágrimas comenzaron a caer, él me describía, por primera vez alguien lograba decir las palabras que me aquejan.
-Crees, "yo soy el culpable de que ella sufra con ese hombre"- Continuó con los ojos llorosos.
Al fin alguien me comprendía y lamentaba que fuese Izuku quien comprendiese este horrible sentimiento, porque a diferencia mía, él es una buena persona.
-Sí...- Me quebré, no podía evitar llorar.
-Gracias por ser honesto- Dijo con un tono de voz más tranquilo.
-Gracias a ti- Susurré un poco más calmado.
-Tenemos unos monstruos de padres, pero... todavía estamos vivos ¡Que se vayan a la mierda y a por un helado!- Dijo con un extraño ánimo.
Acepté ir, los helados eran deliciosos, pero gracias a la breve charla que me dio, comprendí que Izuku es un chico que le cuesta sociabilizar y hacer amigos, lo cual me sorprende bastante, él es una persona agradable y amable, tampoco es aburrida...
¿Qué otras cosas le pasaron para tener esas dificultades? ¿Quién más le hizo daño a alguien tan bueno para que le cueste hacer amigos?
Quiero que Izuku me considere algún día como su amigo.
-Gracias Izuku- Dije con una pequeña sonrisa -Creo que, si no fuese por ti, ya habría estallado y hecho una estupidez.
Es la verdad, tal vez me habría lanzado a una vía del tren o... o haber terminado con una sobredosis.
Izuku me mostró una gran sonrisa y alzando su pulgar dijo -Si tienes nuevamente algún problema eres bienvenido a mi casa para charlar, jugar o solo ver unas películas de súper héroes.
Sonreí de oreja a oreja, incluso mostré mis dientes... tan raro que me sorprendí a mí mismo al sonreír de tal forma, una forma que se había borrado hace mucho -Tu también puedes contar con mi ayuda.
Por fin había logrado encontrar a ese amigo que siempre quise tener, un amigo que en verdad me comprendiese.
Esta vez no quería fallarle a una persona importante en mi vida, me iba esforzar por no arruinarlo, con Izuku sería solo Shoto, no el idiota que lastima a la gente.
No creo que sea tan difícil, ¿Cierto?
Tic tac, tic tac, tic tac...
30/12/2018
Sentía un poco de angustia al saber que mañana era la fiesta de año nuevo, no quería celebrarla, no deseaba ser arrastrado por Neito a la otra fiesta... deseaba continuar en esta burbuja sin fiestas ni nada por el estilo, quiero seguir siendo el Shoto sencillo y sé que si voy a la mansión de los Monoma terminaré arruinando mis días sin consumir nada, siento el deseo, sé que si voy caeré ante esa maldita tentación.
No quiero arruinarlo...
Tic tac, tic tac, tic tac...
Me pareció interesante saber que Izuku también se vería forzado a asistir a una fiesta elegante de final de año, desearía asistir a esa con él, así me salvaré de esa futura caída que tendré...
¿Por qué soy tan débil?
Daba lo mismo hoy iba a visitar a Izuku... lo que no me esperé fue encontrarlo con manchas de pintura en la cara y en especial ver el rostro de mi persona favorita.
Hitoshi Aizawa, ¿Es una broma de mal gusto?
Ese maldito estaba aquí, con una sonrisa burlona plasmada en su cara, de todas las personas él tenía que ser...
Fuimos a la sala de estar, no deseaba hablar, quería mantenerme en silencio, pero al parecer Hitoshi deseaba romperlo.
-¿Quién diría que el gran Shoto es un conocido de Izuku?- Su sonrisa me daba mala espina, él me detestaba y sabía todo, estaba jodido.
Izuku iba a descubrir la mierda de persona que soy...
-Creo que ya se presentaron...- Dijo Izuku apareciendo en la sala, gracias a lo que sea...
-Somos compañeros de clases- Dijo Hitoshi mirándome con desprecio, como lo odio.
-¿Cómo has estado Hitoshi? No nos vemos de la graduación- Respondí intentando no soltar un insulto o algo por el estilo.
Finge cordialidad, no es demasiado y dudo que él quiera sacar el tema... ¿Cierto?
-Nada interesante, practicando para Yuuei y divirtiéndome con mis cosas... ¿Cómo has pasado estos días con Fumikage?- Preguntó con esa irritante sonrisa burlona.
-Fumikage se fue de vacaciones- Respondí ahora molesto, esto se estaba convirtiendo en un futuro campo de indirectas e insultos pasivo-agresivos.
Izuku con un tono de voz sumamente incómodo decidió llamar a la pizzería... es la primera vez que he sentido tanta incomodidad comiendo con alguien, por lo tanto, decidí sutilmente huir de la casa.
Hitoshi también decidió irse conmigo, algo quería ese maldito y no tenía idea qué demonios quería, detesto eso de él, me cuesta leerlo.
-Nos vemos en la fiesta de año nuevo, Izuku- Dijo Hitoshi con una sonrisa que ocultaba sus dobles intenciones.
Hitoshi siempre iba a una fiesta de año nuevo en concreto y era la de Enji...
¿Es una mala broma del destino?
-¿Vas también a la fiesta?- Preguntó Izuku curioso.
Solo quería reírme para no llorar, Izuku iba a conocerlos, Neito lo conocería y...
-Desde los 8 años voy a la fiesta de año nuevo que hacen los Todoroki- Respondió Hitoshi observándome con burla.
Maldito bastardo.
-¿Es en tu hogar?- Me preguntó Izuku tan sorprendido.
Solo pude asentir como respuesta, estaba jodido.
Tic tac, tic tac, tic tac...
Al salir de la casa me sentía demasiado molesto, tanto que ignoraba la presencia de Hitoshi.
-Oye Shoto, ¿Temes que intente robarte a tu nuevo amigo?- Dijo Hitoshi burlón, como lo odio.
-No y cállate- Dije molesto, Hitoshi saca lo peor de mí.
-Eso parece, lo demostraste cuando comíamos pizza- Respondió aún con ese tono burlesco.
Fruncí el ceño y lo miré fijamente, su expresión cambió de golpe, ya no había diversión o intenciones de molestar, porque esa es su cara falsa, una máscara que usa para ocultar su verdadera personalidad.
Una fría y seria actitud, hasta cierto punto molesta e impredecible...
Es molesta verla, porque en el fondo me hace sentir culpable, la personalidad actual de Hitoshi no es como la de antes, esa irritante alegría e inocencia se esfumaron ese día.
-Shoto, la vida de Izuku no ha sido sencilla y un drogadicto como tu va a terminar pudriendo todos sus avances- Dijo con seriedad, malditos sean esos ojos purpuras con su maldita honestidad.
-Cállate Hitoshi, eres un maldito patético que lo único que sabe es vivir en el pasado- Gruñí ante lo último.
Hitoshi es un maldito masoquista que siempre asiste a las fiestas de Neito, ¿Por qué va cuando es notorio que no quiere ir?
-¿Patético?- Rio al decir esa palabra, su mirada purpura irradiaba odio -¿Por qué me alejé de ustedes? ¿Por qué no estoy drogándome? ¿Por qué no soy un Fumikage 2.0, pero con Neito?
Maldita sea, odio cuando Hitoshi habla, porque nunca dice mentiras, es honesto, cada palabra que dice no tiene un propósito para engañarte.
Odio que pueda devolver fácilmente mis palabras.
-No hables de Fumikage- Amenacé, no quería meter a mi mejor amigo en esto.
-O tal vez una Momo esperando a que un drogadicto cambie, al menos no la maltratas o eres un maldito celoso- Dijo nuevamente con esa sonrisa burlona, pero a la vez sonaba serio.
-Tu no entiendes- Dije irritado, él no entendería, Hitoshi siempre fue distinto a todos.
-Entiendo más de lo que tú crees, eres una mierda que daña a sus seres queridos, un egoísta que hace que otros crean promesas falsas- Respondió con frialdad.
Esas palabras eran tan ciertas y dolorosas, pero no podía permitir que él notase que dolieron.
-Al menos no estoy solo lamentando el pasado o con rencores hacia mí- Respondí burlón, porque lo que decía es cierto, siempre actúa como el fuerte, pero termina con nosotros escupiendo comentarios sarcásticos e hirientes.
-Shoto, ustedes se dedican a hacerme recordar que fui su amigo, al menos Neito lo hace, ¿Enserio crees que deseo ir a esas fiestas o al cumpleaños de él?- Dijo con desagrado, su mirada se veía entre molesta y dolida -El hijo de puta le manda la invitación a mi padre y qué le digo, papá no deseo ir, ya que me peleé con ellos porque se volvieron drogadictos.
Sentí un escalofrío pasar por mi columna, su forma de expresarse me hacía sentir un tanto culpable... en realidad lo que dijo fue un golpe de realidad, todo este tiempo pensando que iba porque deseaba, me siento un idiota.
-Me alejo de ustedes, porque mientras menos sé, menos debo mentirle- Dijo mientras miraba sus pies, luego me miró con seriedad –Quiero que te quede claro que no se lo oculto para salvarles el pellejo o algo por el estilo, yo solo quiero ver cuándo tomarás la decisión correcta o simplemente terminarás solo y triste como te lo mereces, será divertido de ver.
Nuevamente Hitoshi decía algo que me hacía olvidar la culpa o cualquier sentimiento de simpatía hacia él.
-Eres un monstruo, te gusta ver sufrir a la gente- Respondí harto, odiaba hablar con Hitoshi, hablar con él es como si lograse ve tu alma.
-Claro que no, siento pena por Momo y Fumikage, desgraciadamente él no me hizo caso cuando le dije que todo terminaría mal...
Sonreí victorioso, tan predecible y a la vez tan molesto, siempre intentando interponerse en amistades ajenas -Porque es mi mejor amigo, tu no sabrías eso, no es mi culpa que tú nunca seas la primera opción de nadie.
Odiaba a Hitoshi, porque provocaba que escupiese mi peor lado, no el imbécil drogadicto o el que arruina todo, el lado hiriente, el que no piensa antes de hablar.
Hitoshi soltó una carcajada y dijo con una sonrisa todo menos divertida -Eres la mierda de amigo más grande, ¿Mejor amigo? Más bien eres su enemigo-, fue un golpe directo en mi cara -No me interesa ser la primera opción de mis compañeros de salón, jamás me importó ser el mejor amigo de Neito, amigo sí, me agradaba, pero los mejores amigos no existen y tú me lo demuestras desde que éramos niños.
-Maldito infeliz- Dije con desagrado.
-Y sí, yo soy la primera opción de personas que me quieren, no amistades vacías y aprovechadas- Su mirada purpura me intimidaba -Infeliz eres tú, yo tengo una madre, un padre, una hermana, un abuelo que me quieren, a todos ellos les gusta pintar, disfruto estar en casa, en mi estudio pintando con mi mamá, voy a asistir a Yuuei en el departamento que amo, no tengo adicciones y amistades tóxicas, soy feliz sin amigos como tú y Neito.
Fue un golpe directo en mi cara, no podía refutar contra ello.
-Arruinarás a Izuku ¿Cierto? Le presentarás a Neito, conociéndolo, se divertirá tentándolo para que sea como ustedes- Dijo con desprecio -O tal vez es como Fumikage y lo niega, pero termina siendo arrastrado para cuidar al pobre e infeliz de Shoto.
-No conocerá a Neito, jamás lo hará- Respondí inmediatamente, no podía presentárselo o su vida se arruinaría.
-Mañana es año nuevo, irá a tu mansión con el tío Toshinori, ahí estará Neito, logré salvarme de la invitación de ese imbécil, pero el tío Toshinori es amable y querrá que Izuku vaya- Dijo con una sonrisa engreída -A que terminas consumiendo de nuevo, ¿Izuku qué hará? Apuesto a que querrá ayudarte.
Lo miré preocupado, dudaba que lo hiciera, no deseaba que terminara envuelto y me viera con lástima o asco.
-Izuku se nota que es alguien que se está esforzando, desde que lo conocí lo entendí- Dijo con una pequeña sonrisa, una como las que antes veía en su cara -Dudo que me haga caso, no nací con el talento de convencer, pero al final siempre sé que tengo la razón, desgraciadamente todos son fáciles de leer, pocos me cuestan entenderlos.
-No le pasará nada idiota, no lo metería a eso- Dije con firmeza.
-Ojalá, lo dudo y algo me dice que terminaré envuelto...- Dijo mientras posaba su mirada en el cielo.
-Acaso crees que ves el futuro? Tan egocéntrico eres- Dije con molestia, enserio odio lo engreído que puede llegar a sonar.
-No, a Neito le gusta arrastrarme, tarde o temprano estaré al lado viéndote joderla y me reiré con tu expresión.
-Demuestras lo infantil que eres con tu rencor hacia mí...
-Bueno, dudo estar feliz por alguien que intentaba alejarme de todos, hice amigos porque le caí bien a Neito, sin él mi infancia sería solitaria, es lo único que le agradezco, no se lo digas que se creerá un rey.
Me reí burlesco, me molestaba su carácter, desde pequeño hacía estupideces, se reía, pero no jugaba a las cosas divertidas, que al final terminaban mal, pero son detalles.
Su cara siempre era de "te lo dije", era tan sabiondo, que me llegaba a estresar.
Se parecía a Fumikage, pero a diferencia de él, mi amigo era más valiente.
Hitoshi no se veía como un cobarde, él subiría.
-Por qué nunca hacías lo que nosotros hacíamos?- Pregunté curioso.
-Simple, si hubiese tenido 6 años lo habría hecho, ni siquiera me deberían haber dicho que soy una gallina como a ti te lo hacían- Dijo lo último con una sonrisa -Sería el primer idiota en subir al techo, incluso saltaría, pero conocí a papá y por primera vez supe que quería llegar sano a casa, porque tenía a alguien que se preocupaba por mí, cuando encuentras a esa persona incondicional querrás cuidarte.
Tragué molesto, otra cosa que detestaba de él, su maldita madurez y forma de hablar, siempre usaba las palabras correctas y costaba hacerle molestar al punto de gritar furioso.
-Y tranquilo, no le diré a Izuku la mierda de persona que eres- Dijo Hitoshi con frialdad.
Antes de alejarse de mi dice suspirando -Nos vemos mañana Shoto.
Me fui a casa, estaba molesto, deseaba golpear algo, gritar, gracioso, tengo tanta ira que ni deseo drogarme.
¿Qué hago mañana con Izuku? ¿Cómo lo alejo de Neito?
Mi teléfono comenzó a sonar, lo saqué y vi que era el número de Fumikage, mi amigo había vuelto.
-Hola Shoto, ¿Qué te parece si voy a tu casa y hacemos un maratón de películas?
Sonreí al pensar en aquello.
-Claro amigo...
Tantas cosas habían pasado desde que él se fue con Hawks, no sabía el motivo, pero no quería preguntar por temor a la respuesta.
Tic tac, tic tac, tic tac...
31/12/2018
Las malas decisiones solo llevan a malos resultados...
Fui un idiota al tomar la decisión de fingir que no conocía a Izuku, pero era la única forma para que a Neito no le diese curiosidad, vaya ingenuo fui, ese imbécil vio esa mirada, intentará corromperla de alguna forma y yo entregué a mi nuevo amigo a su merced.
Podría haberle advertido, pero no quería que supiese cuán mierda es mi entorno, aunque estaba Hitoshi, él lo salvaría en caso de cualquier cosa... ¿Qué pasaría sí Neito le ofrece algo? ¿Cuál será la actitud que tomará?
La fiesta como siempre irradiaba el poder adquisitivo que tenía Enji, tan ostentosa, pero sin perder la elegancia que reflejaba la familia Todoroki, porque el exceso también se ve vulgar y ese viejo sabía combinar ambas cosas.
Tuve que tocar el violín a pedido de Enji, sabía que saldría perfecto, pero me daba asco usar aquel instrumento musical...
Como siempre perfecto y vacío, sin sentimientos, sin pasión, solo era yo con el deseo de que saliera perfecto para largarme del salón, ¿Por qué no puedo tener la pasión que tiene Enji?, ese monstruo toca con amor, raro para un hombre que es malo...
Siempre me dicen que soy un genio, que tengo talento, pero eso es porque son personas que solo escuchan, nada más.
Sí, me es fácil, aprendo rápido, tengo oído musical, puedo fácilmente adaptar una canción hacia el violín... todo es tan sencillo, pero me falta algo que jamás tendré y lo sé, porque Enji lo tiene y él no quiere comprender que yo nunca lo voy a obtener.
Pasión, odio el violín y el violonchelo, no me interesa ser músico, ni nada por el estilo, a veces me pregunto si esa pasión fue arrebatada por el mismo Enji con su método de enseñanza y maldad.
Hawks se ofreció para tocar, él era como Enji, tiene pasión y talento, pero su música y movimientos no se me hacen una tortura, no siento ese asco, todo lo contrario, mi amigo me hace feliz escucharlo, siempre ha transmitido esa emoción cálida, tal vez porque tiene un alma verdaderamente buena y pura.
Desearía tener ese amor por el violín como lo tiene Hawks, desde que lo conocí sostiene su estuche de violín, a pesar de tener un pasado trágico no refleja en su música odio o dolor, creo que eso lo hace incluso más especial.
Ojalá tener esa chispa que irradia Hawks...
Aún no encontraba a Fumikage, tampoco me había topado ni a Izuku, ni a Neito, no sé si eso es bueno o malo, si él se separó del Sr. Toshinori puede conocer a ese bastardo...
Cómo si lo hubiese invocado con mis pensamientos me topé con Izuku, se veía un poco nervioso, de seguro por la cantidad de personas.
Me parecía extraño ver a Izuku con traje, no le quedaba mal, pero no calzaba con su forma de ser.
-Hola Shoto, te vi tocar...
En estos momentos iba a arruinar todo lo que había logrado formar con él, por mis miedos y falta de honestidad nuevamente lastimaría a alguien que no merece nada malo... parece que es parte de mi arruinar todo lo bueno que me sucede.
-¿Te conozco?- Mentí con mi mejor expresión, una tan real y cruel.
Lo había arruinado.
La expresión de Izuku había cambiado, no a una de sorpresa, más bien de molestia -¿Es una broma?
Desde que lo conocí jamás había visto esa expresión en su rostro, mucho menos esa mirada; como era de esperar él se marchó, no sabía si me perdonaría, pero enserio no me gustaría que este fuese un adiós, al menos no de esta forma.
Soy un bastardo, la única persona que actualmente no me miraba con repudio o rencor se había marchado de mi vida por mi culpa, tal vez es lo mejor, Izuku estará bien con Hitoshi, además tiene buenas amigas...
Yo solo lo pudriría.
-Shoto, hasta que te encontré- Dijo Fumikage tocando mi hombro.
-Hola...- Dije con un tono de voz más apagado.
-¿Por qué tan molesto?- Preguntó curioso, más que molesto estaba decepcionado conmigo mismo.
-Toqué el violín- Mentí como siempre, era mejor que decir "me comporté como un cretino con una buena persona".
Asintió como respuesta y dijo -Escuché que el Sr. Toshinori asistirá con su hijo... ¿Qué opinas de conocerlo?
No respondí, no sabía qué decirle.
-Aunque siento un poco de curiosidad y lástima por saber qué hará Neito para molestarlo o tal vez sea como él- Dijo Fumikage colocando su mano en su barbilla.
No se parece en nada a él, Izuku es una buena persona.
-Aunque da lo mismo, Neito sí o sí hará algo malo- Dijo Fumikage con molestia.
-¿Qué malo voy a hacer?- Preguntó el maldito de Neito a nuestras espaldas –Saben que está mal hablar a las espaldas de otros.
Me di la vuelta, lo primero que vi fue esa sonrisa maliciosa y condescendiente que siempre mostraba, enserio detesto esa expresión.
-Lo dice el ángel- Respondió Fumikage con molestia –Mejor no finjas que te duele, porque claramente te importa poco.
-No me importa poco, me llena de curiosidad saber que acto "malvado" haré- Dijo sin borrar su sonrisa –Pero no importa, si es como dices significa que será algo divertido.
Mordí mi mejilla, claro que se divertirá.
Miré a Fumikage, fruncía el ceño, es el posible castigo de sus padres que lo retienen de partirle la cara a Neito.
-Muchachos, estoy tan deprimido- Dijo de forma teatral –Hitoshi no asistirá a la fiesta.
Ya lo sabía.
-Suertudo...- Susurró Fumikage soltando un suspiro.
Sonreí en mis adentros por la respuesta.
-Pero con la motivación suficiente irá, acompáñenme en búsqueda del Sr. Aizawa- Dijo con una mezcla de inocencia y maldad.
Luego de hablar con Hitoshi entiendo más lo que hace Neito, en verdad que es un bastardo con él.
Decidí seguirlo o si no insistirá una y otra vez, mejor ahorrarse las discusiones con él.
Fue una mala idea haberlo hecho...
¿Por qué teníamos que toparnos a Izuku? ¿Qué expresión pondría? ¿Me ignorará? ¿Me insultará?
Tengo miedo.
A Neito le llamó la atención a simple vista, su postura lo decía todo; Izuku se acercó a nosotros.
-Mucho gusto soy Izuku Yagi, estoy buscando a un amigo y me perdí- Dijo Izuku con una sonrisa, una que fácilmente me la habría creído.
Izuku era un buen mentiroso.
-¿Yagi?- Dijo Neito con interés, maldición, esa mirada...
No importaba qué, Izuku ya había caído en la trampa del lobo.
Me percaté que Fumikage también se dio cuenta de esa mirada, esto iba a terminar mal.
-Soy Fumikage Tokoyami- Dijo con un leve nerviosismo.
-Mucho gusto Tokoyami- Sonrió al decir aquello.
Tic tac, tic tac, tic tac...
-Un gusto Izuku, soy Todoroki Shoto- La mentira sonó tan real que hasta me preocupó...
¿Desde cuándo miento tan bien?
No me gusta que mis mentiras suenen tan naturales.
Hitoshi apareció con una caminata tranquila y su usual mirada apagada dirigida a Neito -Hola muchachos, vengo a buscar a Izuku- dijo sin demostrar ninguna expresión en el rostro -El Sr. Toshinori lo está buscando.
Excelente, espero que lo saque pronto de aquí.
-Al menos déjame presentarme- Dijo Neito con una sutil molestia, su mirada azul ya no demostraba diversión -Soy Monoma Neito, espero que puedas ir a la fiesta en...
Sin pensarlo dos veces Hitoshi dijo -Izuku no podrá asistir, está ocupado en unos asuntos.
Por favor, llévatelo pronto de aquí.
-¿Cómo tú?- Respondió Neito, otra vez sus ojos se tornaron burlescos.
-Sí, como yo- Dijo Hitoshi con seriedad y firmeza, odiaba cuando usaba ese tono de voz, a veces llegaba a intimidar cuando lo combinabas con sus severos ojos purpuras, aunque usualmente siempre va dirigido a Neito.
Neito es quien más lo saca de sus casillas.
-Qué lástima Hitoshi, este es el primer año nuevo al que no asistirás desde que empezamos las fiestas- Dijo con esa característica mirada maliciosa -Se te extrañará.
-Me duele desde el fondo de mi corazón no pasar un día sin ustedes- Respondió Hitoshi con sarcasmo.
El ambiente se había vuelto tenso, era una guerra entre el semblante serio de Hitoshi y la malicia de Neito; incómodo a no más poder.
-Vamos Izuku- Dijo sin más el de cabellos índigos.
Suspiré aliviado cuando los dos se marcharon.
Neito soltó una repentina carcajada, nos miró a los dos y dijo con una gran sonrisa –Así que ese es el famoso hijo del Sr. Toshinori, ¿Qué clase de persona será?
Mierda, él ya lo sabía.
-No se te ocurra hacerle nada o terminará mal- Dijo Fumikage inmediatamente -Además, es el hijo de nuestro futuro profesor, no creo que seas tan idiota para molestarlo.
-Molesto a Hitoshi y nada ha sucedido- Una respuesta directa y cruel -Además, si lo molesto eso significa que molestaré a Hitoshi, también si él va a la fiesta...
Una sonrisa bastante preocupante se asomó en su rostro –Hitoshi va a tener que ir.
-Estás bastante obsesionado con él, ¿Por qué no lo dejas en paz de una vez por todas?- Dijo con seriedad Fumikage.
Admito que me sorprendí al escuchar aquello.
-¿Obsesión?- Dijo Neito levantando una ceja -¿Desde cuándo tu perro defiende a Hitoshi?
Lo primero que atiné fue agarrar a Fumikage, esos ojos carmesíes irradiaban ira; mi amigo ya había formado sus puños para golpearlo.
-Cálmate o tus padres te castigarán- Advertí, era la única forma que servía para que Fumikage no saltase a golpearlo.
Neito soltó una gran risotada –Buen chico Rex, hazle caso a tu dueño.
-Neito, te arrepentirás el día en que no esté Shoto para recordarme que no debo sacarte un par de dientes- Dijo mi amigo con un tono de voz demasiado grave.
El rubio sonrió como respuesta y se marchó con elegancia.
-Suéltame Shoto- Dijo con seriedad, en estos momentos mi amigo daba demasiado miedo, sino lo conociese pensaría que es una persona peligrosa.
Lo solté, no quería que su humor empeorara.
-Extraño estar con Hawks- Dijo Fumikage acomodándose la corbata –Todo es más fácil.
Tragué nervioso, aún no hablábamos de las "vacaciones" de Fumikage en el departamento de Hawks.
-Lo siento...- Dije posando mi mirada hacia el suelo.
-No es tu culpa, es la de Neito... pobre Izuku, se nota de lejos que no es un chico cómo Neito- Dijo con una mueca -Será bastante interesante la fiesta.
-Sí...- Susurré temeroso, por primera vez deseaba que Hitoshi fuese a una fiesta, él cuidaría a Izuku de Neito...
¿Cierto?
Tic tac, tic tac, tic tac...
01:30 am
No siempre puedes engañarte a ti mismo, tarde o temprano caerás de la peor forma...
En estos 15 años la vida me ha demostrado cuan débil soy ante las cosas, lo imbécil que puedo llegar a ser y obviamente lo influenciable, no me mentiré a mí mismo que caigo fácilmente ante las provocaciones.
Hitoshi siempre me lo repitió en nuestra niñez y yo lo ignoré...
Me arrepiento de ignorar eso, un punto para ese idiota, pero no tiene por qué saberlo.
Alguien como yo no está capacitado para probar cualquier tipo de droga o algo que te provoque una adicción, es fácil saberlo con tan solo conocerme un poco, mis decisiones lo demuestran cada día...
Todoroki Shoto siempre termina cayendo a fondo y si me ofrecen mi ayuda para alejarme de mi agobiante realidad la aceptaré, aunque siendo honesto no la deseaba, se sentía bien llevar una racha, pero soy un idiota.
Un gran idiota.
Mi novia y amigos están molestos, como es lo usual, ya estoy acostumbrado a esa decepción y odio cuando la consumo o simplemente por respirar.
Siempre arruino todo...
Cuando terminé vi a pocos metros a Izuku, él me miraba fijamente, su mirada esmeralda reflejaba preocupación, estaba preocupado por el idiota que lo ignoró; parecía querer hacer algo, pero se retuvo y se marchó.
Un poco más atrás estaba Hitoshi sonriéndome por lo sucedido.
"Tarde o temprano estaré al lado viéndote joderla y me reiré con tu expresión"
Dudo que alguien me crea si me ve en este estado, mis amigos y novia dirían que es otra mentira, pero en verdad quería mostrar mi mejor lado a Izuku, en realidad quería ser el Shoto alejado de las drogas y todo eso.
¿Me creerían si les digo que no he consumido nada desde que conocí a Izuku?
Pensarían que es una jodida mentira, además ya da lo mismo, la volví a consumir, soy un fracaso, una mierda de persona, lastimé a otra persona que me importaba.
Odio arruinar todo...
¿Fui un iluso al querer creer que una persona tan buena como Izuku quisiese ser amigo de alguien como yo?
Un idiota, no recuerdo qué sucedió después, solo sé que estaba afuera del baño hablando cosas con Izuku, obviamente no me creía.
Alguien como Izuku jamás será amigo de una persona cómo yo...
Enserio duele encontrar una persona que te comprenda y que tú mismo termines arruinando todo.
Voy a intentar mañana hablar con él, tal vez pueda disculparme por todo y que las cosas vuelvan a ser como antes...
Mierda, estoy llorando.
Continuará...
Nota
Espero que les haya gustado el capítulo, a mi me encantó y me dolió hacer la perspectiva de Shoto y que en verdad había estado sin consumirla ;-;
Me da risa que todos se imaginaban que Izuku no se iba defender o que terminaría ganando Monoma, no le tienen fe al brócoli xD
Izuku se volvió hater del sushi.
Ahora que llegamos al presente, ¿Qué hará Izuku con Shoto?
#Izukusalvaltodopendejo
#Todopendejo
#JódeteMonoma
#MuerteaEnji
#Enjihdp
#MuerteaMonoma
#UnfinalfelizparaIzuku
Hasta la próxima 💖
Capítulo 26: Mi verdadero año nuevo
"Ochako, eres la mejor"
Publicado: 08/08/2023
Que la fuerza los acompañe, se despide Autora-chan 🦄💖
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top