Aether, al percatarse de la presencia de Amber y Paimon, decidió jugarles una pequeña broma. Se alejó corriendo y ellas lo persiguieron, manteniendo la distancia para no ser descubiertas. Sin embargo, en un momento dado, Aether desapareció de su vista, lo que llevó a ambas chicas a salir de sus escondites para buscarlo.

Amber: (mirando a su alrededor) ¿Dónde se metió Aether? No puedo creer que nos haya despistado así.

Paimon: (frunciendo el ceño) Parece que se nos escapó. No puedo creer que nos haya ganado en su propio juego.

Mientras buscaban a Aether entre los arbustos y árboles, ambos se sorprendieron al escuchar su voz proveniente de un lugar cercano.

Aether: (sorprendiendo a Amber y Paimon) ¿A quién están buscando? Me apena que no confíen en mí, pero lo comprendo y respeto. Aunque debo decir que son bastante ruidosas para ser espías. Se les escucha a bastante distancia.

Amber: (sonrojada y avergonzada) Lo siento, Aether. No queríamos espiarte ni desconfiar de ti. Solo estábamos curiosas por tus habilidades.

Paimon: (asintiendo) Sí, lo siento mucho también. No queríamos invadir tu privacidad ni molestarte. Solo estábamos tratando de entender mejor tus capacidades.

Aether: (riendo) No se preocupen, chicas. Solo quería hacerles una pequeña broma. Ahora que hemos aclarado las cosas, ¿por qué no regresamos a la sede?

Amber: (sonriendo) Sí, sería lo mejor. Aether, siempre logras sorprendernos.

Paimon: (asintiendo) Tienes razón, Amber. Aether, nunca dejaremos de asombrarnos con tus habilidades y tu ingenio.

Mientras regresaban a la sede de los caballeros de Favonius, Amber aprovechó la oportunidad para preguntar a Aether sobre su habilidad para distraer a los hilichurls con bayas. Estaban caminando juntos, mientras el sol comenzaba a ponerse en el horizonte.

Amber: (curiosa) Aether, ¿de dónde aprendiste a distraer a los hilichurls con bayas? Es una habilidad muy útil.

Aether: (sonriendo) Ah, eso lo aprendí de un familiar durante mis viajes. Me enseñó varios trucos y técnicas para lidiar con diferentes situaciones. Las bayas son una de las formas más simples de distraer a los hilichurls. Parece funcionar muy bien.

Paimon: (interesada) ¡Eso es genial! Aether, cada vez nos sorprendes más con tus habilidades. Realmente eres un aventurero excepcional.

Aether: (modesto) Gracias, Paimon. Aunque he enfrentado muchos desafíos en mi camino, he aprendido mucho de cada experiencia. Cada encuentro y cada obstáculo me han ayudado a crecer y desarrollar nuevas habilidades.

Amber: (entusiasmada) ¡Eso es increíble, Aether! Me encanta escuchar sobre tus aventuras y todo lo que has aprendido en tu viaje. Siempre nos sorprendes con algo nuevo.

Aether: (sonriendo) Me alegra poder compartir mis experiencias contigo, Amber. Y gracias por tu interés. Siempre es emocionante aprender y descubrir nuevas formas de enfrentar los desafíos.

Aether regresó a su habitación y se despidió de Amber y Paimon, agradeciéndoles por acompañarlo. Se adentró en su habitación, sintiendo la tranquilidad del lugar. Antes de dormir, decidió practicar un poco con una espada de madera, afianzando sus movimientos y técnicas.

Mientras se concentraba en su entrenamiento, Aether notó la presencia de alguien observándolo en silencio. Sonrió ligeramente, sabiendo quién era.

Aether: (mirando hacia la sombra) Sé que estás ahí, Eula. No puedes ocultarte de mí.

Eula: (apareciendo lentamente) Sorprendente... para ser un simple herrero, has demostrado ser más perceptivo de lo que esperaba.

Aether: (en tono sereno) Siempre es importante estar atento a lo que sucede a tu alrededor, Eula. No subestimes a los demás por su apariencia o profesión.

Eula: (fría) No subestimo a nadie. Pero debo admitir que me sorprendes. No es común encontrar a alguien como tú en la sede de los caballeros de Favonius.

Aether: (tranquilo) Bueno, cada uno tiene su propio camino. Aunque mi profesión sea la de herrero, eso no significa que no pueda tener otras habilidades o conocimientos. Todos tenemos algo único que ofrecer.

Eula: (con un tono de desafío) Veremos si eso es cierto. No te dejaré de lado tan fácilmente, Aether. Quiero ver de qué estás hecho y si realmente eres tan impresionante como pareces.

Aether: (con calma) Estoy dispuesto a demostrarte lo que puedo hacer, Eula. Pero recuerda, el poder no siempre radica en la apariencia o en la posición que ocupamos. Puede residir en el corazón y la determinación de cada persona.

Eula: (frunciendo el ceño) Ya veremos si tus palabras están respaldadas por tus acciones. Estaré observándote de cerca, Aether.

Aether: (sonriendo levemente) Estaré esperando, Eula. Siempre es interesante enfrentarse a nuevos desafíos. Que tengas una buena noche.

Tras su breve intercambio, Aether se dirigió a tomar un relajante baño para recargar energías. Mientras disfrutaba de ese momento de tranquilidad, sabía que su encuentro con Eula podría traer consigo nuevos retos y oportunidades de crecimiento.

Mientras descansaba en la tina del baño, Aether permitió que su mente se sumergiera en el mundo de las ideas, explorando nuevas fórmulas y posibilidades para mejorar las armas que le habían sido confiadas. El agua cálida y relajante lo envolvía, facilitando su concentración.

Aether: (pensando) ¿Qué puedo hacer para maximizar la eficiencia de estas armas? Necesito encontrar una forma de potenciar su poder sin sacrificar la estabilidad y el equilibrio. Tal vez una combinación de materiales y técnicas innovadoras...

Las ideas fluían en su mente mientras se sumergía en los detalles más minuciosos de la forja y la mejora de las armas. Imaginaba cada paso del proceso, visualizaba las reacciones químicas y mecánicas, buscando encontrar el punto óptimo para cada mejora.

Aether: (pensando) Tal vez si añado una aleación de metales específica en la hoja, podría aumentar su resistencia sin comprometer su flexibilidad. Además, si logro afinar el equilibrio del arma...

Sus pensamientos se volvieron más abstractos, casi oníricos, mientras su mente exploraba nuevas posibilidades. Casi se quedó dormido en el cálido abrazo del agua, pero decidió salir del baño, consciente de que necesitaba descansar adecuadamente para llevar a cabo sus planes al día siguiente.

Aether: (suspirando) Ha sido un día agotador, pero valió la pena. Mañana pondré en práctica estas ideas y veré cómo se desenvuelven. Pero por ahora, es momento de descansar y recargar energías.

Salió del baño, envuelto en una suave toalla, listo para entregarse al merecido descanso y dejar que sus pensamientos creativos se desvanecieran en el sueño reparador. Sabía que el amanecer traería consigo nuevas oportunidades para seguir demostrando su valía como herrero y como individuo en constante búsqueda de superación.

Aether se levantó temprano, lleno de determinación y entusiasmo por comenzar a trabajar en la mejora de las armas. Se dirigió al taller con paso decidido, llevando consigo los materiales que había recolectado la noche anterior.

Para mejorar los mandobles, Aether comenzó por examinar cuidadosamente cada uno de ellos, buscando posibles defectos en el filo y la empuñadura. Utilizó un afilador especial para pulir los bordes y hacer que las hojas cortaran con mayor precisión. Luego, aplicó un compuesto de endurecimiento en la empuñadura para aumentar su resistencia y evitar que se desgastara con facilidad.

Con las espadas en sus manos, Aether se concentró en equilibrar el peso de las hojas. Utilizó pequeños trozos de metal para ajustar el centro de gravedad y lograr un manejo más cómodo y ágil. Además, aplicó un revestimiento protector a las hojas para evitar la corrosión y mantener su brillo original.

Las lanzas recibieron especial atención por parte de Aether. Cuidadosamente, revisó cada una de ellas, asegurándose de que los puntos de anclaje estuvieran firmes y seguros. Utilizando un soplete, calentó la punta de las lanzas y las sumergió en una mezcla de minerales especiales, mejorando su resistencia y capacidad de penetración.

Para las flechas, Aether se centró en su punta. Con habilidad y precisión, retiró las puntas desgastadas y las reemplazó con nuevas puntas de acero afiladas como navajas. Además, aplicó una capa de barniz protector para evitar que se debilitaran con el uso constante.

Cada mejora realizada por Aether reflejaba su dedicación y habilidad como herrero. Cada arma recibió una atención meticulosa, y al final del proceso, lucían más afiladas, resistentes y preparadas para enfrentar los desafíos que se les presentaran.

Mientras Aether calentaba el metal para forjar una nueva espada, Lumine llegó apurada y emocionada hacia él.

Lumine: ¡Aether, encontré un material muy extraño y emocionante! ¡Ven conmigo, seguro te va a interesar!

Aether: (Sonriendo) Claro, Lumine. Si tú estás emocionada, seguramente será algo increíble. Estoy listo para acompañarte.

Ambos hermanos emprendieron el camino juntos, caminando por los paisajes de Mondstadt. A medida que avanzaban, Aether admiraba la belleza de la naturaleza y se sentía feliz de estar al lado de su hermana.

Aether: Lumine, estoy realmente feliz de verte tan fuerte y valiente. Ahora eres una verdadera protectora y heroína para las naciones. Me enorgullece ser tu hermano.

Lumine: (Abrazándolo con cariño) Aether, siempre supe que eras tú. Siempre sentí un lazo especial contigo. No te preocupes, guardaré el secreto y seguiré apoyándote en tu nueva vida como herrero. Estoy contenta de verte feliz.

Continuaron caminando juntos, compartiendo risas y recuerdos de su pasado. Aether se sentía agradecido por tener a Lumine a su lado, alguien en quien podía confiar plenamente.

Aether: Lumine, sabes, me siento realmente feliz siendo herrero. He encontrado una pasión en forjar armas y mejorarlas. Ver cómo los aventureros confían en mi trabajo y cómo mis creaciones les brindan poder y protección, me llena de alegría.

Lumine: Aether, eso es maravilloso. Siempre supe que encontrarías tu propio camino y que serías exitoso en lo que te apasiona. Estoy orgullosa de ti.

Al llegar a la cueva donde Lumine había encontrado el mineral, Aether miró emocionado hacia su hermana.

Aether: Lumine, este mineral es realmente fascinante. ¿Puedes generar una descarga eléctrica? Quisiera probar algo.

Lumine: Lo siento, Aether, pero no puedo usar el elemento Electro. He intentado varias veces, pero no logro hacerlo funcionar. No he podido usar ningún elemento.

Aether: (Sorprendido) ¿En serio? Somos gemelos, deberíamos tener los mismos poderes. Intentaste tocar la estatua, tal vez eso active tus habilidades.

Lumine: (Frunciendo el ceño) Ya lo intenté muchas veces, pero no pasa nada. Parece que mi conexión con los elementos es diferente a la tuya.

Aether: (Tranquilizador) No te preocupes, Lumine. Cada uno de nosotros tiene habilidades únicas. Seguro que hay algo más especial en ti. No necesitas controlar los elementos para ser increíble.

Decidido a no perder la oportunidad de obtener el mineral, Aether sacó una navaja y una pala de su mochila.

Aether: Bueno, si no podemos utilizar el elemento Electro, lo haremos a la antigua usanza. Vamos a extraer este mineral manualmente.

Con cuidado y determinación, Aether comenzó a excavar y cortar la roca circundante, revelando el mineral poco a poco.

Lumine: (Impresionada) Aether, eres increíble. Siempre encuentras una solución para todo.

Aether: (Sonriendo) Gracias, Lumine. No hay obstáculo que no pueda superar. Estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para obtener este mineral y aprovecharlo al máximo.

Juntos, Aether y Lumine continuaron trabajando en la extracción del mineral, fortaleciendo su vínculo como hermanos y compartiendo una aventura emocionante. A pesar de las diferencias en sus habilidades elementales, su determinación y apoyo mutuo les permitirían enfrentar cualquier desafío que se les presentara en su camino.

Aether regresó a su taller en la sede de los Caballeros de Favonius, llevando consigo el mineral que había conseguido junto a Lumine. Se despidió cariñosamente de su hermana antes de sumergirse en su experimento.

Aether: (Sonriendo) Lumine, ha sido genial tener esta aventura contigo. Gracias por ayudarme a encontrar este mineral. Ahora es hora de que me sumerja en mis experimentos.

Lumine: (Emocionada) Ha sido maravilloso acompañarte, Aether. Estoy ansiosa por ver qué descubres con ese mineral. Buena suerte en tus experimentos, hermano.

Aether ingresó a su taller y colocó cuidadosamente el mineral sobre una mesa de trabajo. Observó su brillo y textura con curiosidad, pensando en todas las posibilidades que podía ofrecer.

Aether: (Pensativo) Este mineral tiene una energía especial. Me pregunto si puedo aprovechar su capacidad para almacenar energía elemental. ¡Es hora de experimentar!

Aether, emocionado por las posibilidades del mineral, salió de la sede de los Caballeros de Favonius y se adentró en un área apartada para llevar a cabo sus experimentos sin llamar la atención.

Aether: (Susurrando) Es asombroso, este mineral puede almacenar energía elemental. Voy a probar su potencial.

Con determinación en sus ojos, Aether invocó una cuchilla anemo y la lanzó hacia el mineral blanco. Al entrar en contacto, el mineral cambió su color a un vibrante verde marino, dejando a Aether sorprendido por el resultado.

Aether: ¡Increíble! El mineral ha adquirido las propiedades del viento. Esto abre un mundo de posibilidades.

Decidido a explorar aún más las capacidades del mineral, Aether extendió su mano hacia él, sintiendo una energía vibrante y poderosa. Entonces, con un rápido movimiento, lanzó la piedra hacia un árbol cercano.

Aether: ¡Vamos a ver qué puedes hacer!

El mineral, en su trayectoria hacia el árbol, generó una ráfaga de aire intensa que cortó el tronco en dos, dejando a Aether impresionado por el poder desencadenado.

Aether: (Emocionado) ¡Funciona! Este mineral puede manipular el viento de una manera sorprendente. Imagina las aplicaciones que podría tener en la creación de nuevas armas o herramientas.

A medida que Aether experimentaba y descubría más sobre las propiedades del mineral, su entusiasmo crecía. Se dio cuenta de que tenía en sus manos un material único y valioso que le permitiría llevar sus habilidades de herrero a un nivel completamente nuevo.

Aether: (Sonriendo con determinación) Ha llegado el momento de hacer realidad mis ideas y forjar armas excepcionales. Con este mineral, puedo crear herramientas capaces de aprovechar la energía elemental de una manera nunca antes vista. ¡Estoy listo para el desafío!

Aether regresó a la sede de los Caballeros de Favonius y se dirigió hacia la biblioteca, decidido a buscar información sobre reacciones elementales y el uso de las visiones. Al llegar, se encontró con Lisa, la bibliotecaria, quien estaba ocupada organizando algunos libros.

Aether: Hola, Lisa. ¿Podría pedirte prestado un par de libros sobre reacciones elementales y el uso de las visiones?

Lisa: ¡Oh, querido Aether! Siempre tan interesado en ampliar tus conocimientos. Por supuesto, te puedo prestar los libros que necesitas. (Le entrega los libros con una sonrisa juguetona)

Mientras Aether agradecía a Lisa por su ayuda, apareció Collei, la otra bibliotecaria, con su actitud fría y distante.

Collei: Aether, espero que busques rápidamente la información que necesitas. Recuerda que la biblioteca no es un lugar para perder el tiempo. Vuelve a tu lugar en la herrería y continúa con tu trabajo.

Aether: Entendido, Collei. Me pondré a buscar enseguida. Gracias.

Aether se sumergió en la lectura de los libros, buscando información valiosa sobre reacciones elementales y cómo se relacionaban con el uso de las visiones. Mientras leía, su emoción crecía a medida que descubría nuevas posibilidades y aplicaciones para el mineral que había encontrado.

Aether: (Murmurando para sí mismo) Así que estas reacciones elementales pueden ser potenciadas con el uso adecuado de las visiones. ¡Esto es realmente emocionante! Si puedo dominar estas técnicas, podría aprovechar al máximo el poder del mineral.

Concentrado en su búsqueda, Aether continuó leyendo, tomando notas y absorbiendo todo el conocimiento que los libros le proporcionaban. Sabía que esta información era crucial para su desarrollo como herrero y para descubrir todo el potencial de su nuevo hallazgo.

Después de haber terminado su lectura, Aether decidió despedirse de las dos chicas. Se acercó a Collei, quien respondió con su típica indiferencia.

Aether: Hasta luego, Collei. Gracias por permitirme usar la biblioteca.

Collei: (Fríamente) No es necesario agradecer. Solo cumple con tus responsabilidades adecuadamente.

Aether luego se dirigió a Lisa, quien tenía una expresión dominante en su rostro. Ella agarró suavemente el borde de su traje de herrero y lo miró con una sonrisa traviesa.

Lisa: Querido, me alegra verte aprovechando al máximo el conocimiento que te brindan los libros. Espero verte pronto por aquí de nuevo. Y recuerda, si necesitas más información, no dudes en pedirla.

Aether: (Sonrojado) Gracias, Lisa. Definitivamente volveré. Aprecio tu apoyo y guía.

Lisa soltó su agarre, riendo ligeramente, y Aether se alejó de la biblioteca con una mezcla de emoción y timidez por el encuentro con Lisa. Sabía que había dejado una buena impresión y que su regreso sería esperado en la biblioteca.

Aether regresó a su herrería y comenzó a trabajar en la fabricación del colgante. Tomó los marcos plateados y con cuidado colocó en el centro el pedazo de mineral, asegurándose de que estuviera firmemente sujeto. Con habilidad y precisión, fue dando forma al colgante hasta que estuvo completamente terminado. Era una pieza hermosa y única, emanando un brillo verdoso por la energía anemo del mineral.

Una vez finalizado, Aether se dirigió en busca de Amber, quien se encontraba en su puesto como Caballera de Favonius. La encontró revisando su arco y flechas, lista para una misión.

Aether: Amber, ¿podrías hacerme un favor?

Amber: ¡Claro, Aether! ¿En qué puedo ayudarte?

Aether mostró el colgante que acababa de terminar y explicó su propósito.

Aether: He creado este colgante con un mineral especial que posee energía anemo. Me gustaría que lo llevaras junto a tu visión y tratemos de canalizar esa energía en tu arco.

Amber: (Entusiasmada) ¡Eso suena genial! Nunca antes he utilizado energía anemo en mis flechas. Estoy emocionada por probarlo.

Amber tomó el colgante y lo colocó junto a su visión. Cerró los ojos por un momento, concentrándose en sentir la energía anemo que emanaba del colgante. Luego, tomó una flecha y la colocó en su arco.

Aether: Recuerda, Amber, siente la energía anemo y canalízala en tu arco. No te enfoques en la energía pyro.

Amber asintió con determinación y disparó la flecha. Al contacto con un árbol, la flecha liberó una ráfaga de viento, creando un pequeño vórtice que desapareció poco después.

Amber: (Sorprendida) ¡Wow! ¡Lo logré! Nunca había sentido una energía como esta antes. Aether, esto es increíble. Gracias por ayudarme a descubrir algo nuevo.

Amber abrazó a Aether, agradecida por su ayuda y emocionada por las posibilidades que se abrían ante ella con esta nueva habilidad. Ambos compartieron un momento de alegría y satisfacción por el éxito de su experimento.

Aether: Estoy feliz de haber podido ayudarte, Amber. Siempre estaré aquí para apoyarte en tus nuevas aventuras y descubrimientos.

Amber entregó el colgante a Aether con una sonrisa de satisfacción.

Amber: Aquí tienes, Aether. Estoy emocionada por mostrar este nuevo artefacto a los líderes de Mondstadt. Creo que será un gran avance para nuestras habilidades y defensa.

Aether: Gracias, Amber. Estoy ansioso por compartirlo con todos y ver su reacción.

Juntos, Aether y Amber regresaron a la ciudad de Mondstadt, dirigiéndose al lugar de la reunión donde se encontraban Jean como líder, Eula como maestra intendente, Lisa y Collei como bibliotecarias. La sala estaba llena de expectativas mientras esperaban la presentación del nuevo artefacto.

Amber: (Dirigiéndose a todos) ¡Hola a todos! Hoy estamos aquí para presentarles un increíble artefacto creado por Aether, nuestro talentoso herrero.

Jean: (Interesada) Amber, siempre es emocionante ver nuevas creaciones. ¿Podrías explicarnos más sobre este artefacto?

Amber: Por supuesto, Jean. Aether ha creado un colgante único que posee una energía anemo muy poderosa. Permite canalizar y liberar esa energía a través de nuestras armas, otorgándonos habilidades y ataques especiales relacionados con el viento.

Eula: (Sorprendida) ¿Energía anemo? Esto suena realmente interesante. ¿Aether, podrías mostrarnos cómo funciona?

Aether asintió y se acercó al frente de la sala, sosteniendo el colgante en su mano.

Aether: Claro, lo haré con gusto. Observen.

Aether activó el colgante, permitiendo que la energía anemo se desplegara a su alrededor. Luego, canalizó esa energía en una espada cercana y realizó un corte rápido en el aire. Un viento poderoso se formó, creando una ráfaga que se extendió por la sala y causó asombro en los presentes.

Lisa: (Maravillada) ¡Eso es increíble! Nunca había visto una habilidad como esta. Aether, has creado algo realmente especial.

Collei: (Agregando) Estoy impresionada por tu destreza, Aether. Esta nueva herramienta puede ser de gran utilidad en nuestras misiones.

Eula: (Sonriendo) Debo admitir que al principio estaba escéptica, pero veo ahora que es un avance valioso. Felicitaciones, Aether.

Jean: (Aplaudiendo) Estoy orgullosa de ti, Aether. Has demostrado una vez más tu habilidad y creatividad. Este artefacto será una gran adición a nuestras fuerzas defensivas.

La sala se llenó de aplausos y felicitaciones para Aether, quien recibió el reconocimiento con modestia y gratitud.

Aether: Muchas gracias a todos por su apoyo y palabras amables. Espero que este artefacto sea de gran utilidad para todos nosotros. Siempre estaré dispuesto a ayudar y seguir mejorando nuestras habilidades.

Aether se acercó a cada aventurero con una sonrisa en su rostro, sosteniendo un colgante con un poder elemental diferente para cada uno. La emoción y el asombro llenaron la habitación mientras cada aventurero esperaba ansiosamente recibir su nuevo colgante.

Eula: (Mirando el colgante de fuego) Aether, no puedo creer que ahora pueda controlar el fuego además de mi visión de hielo. Esto es increíble. Gracias.

Aether: Es un honor, Eula. Sé que serás capaz de aprovechar al máximo el poder del fuego. Cuídalo bien.

Jean: (Sosteniendo el colgante de fuego) Aether, esto es maravilloso. Ahora puedo combinar el fuego con mi visión de anemo. Me siento muy agradecida.

Aether: Estoy contento de poder ayudarte, Jean. Con tu habilidad para usar el viento y ahora el fuego, serás una gran fuerza en nuestros combates.

Collei: (Observando su colgante de electro) Aether, esto es inesperado. Ahora puedo manejar el elemento electro además de mi visión dendro. Realmente aprecio tu trabajo.

Aether: Me alegra que te guste, Collei. Estoy seguro de que tu control sobre el dendro y el electro te convertirá en una poderosa combatiente.

Lisa: (Sosteniendo su colgante de agua) Aether, esto es fascinante. Ahora puedo manipular el agua junto con mi visión de electro. Esto amplía mis posibilidades. Gracias.

Aether: Lisa, siempre me asombras con tu conocimiento y habilidades. Estoy seguro de que encontrarás formas creativas de usar el elemento hydro en tus ataques.

Amber: (Sorprendida con su colgante de hielo) Aether, no puedo creerlo. Ahora puedo controlar el hielo junto con mi visión de fuego. Esto es increíble. Muchas gracias.

Aether: Amber, sé que eres una gran arquera y ahora con el hielo en tus manos, tus flechas serán aún más formidables. Espero ver grandes hazañas tuyas.

Fischl: (Sosteniendo su colgante de agua) Oh, estimado Aether, no me esperaba este regalo. Ahora puedo controlar el agua junto con mi visión de electro. Mi Oz estará encantado con este nuevo poder. Gracias por tu consideración.

Aether: Fischl, siempre es un placer sorprenderte. Estoy seguro de que tu dominio del electro y el agua será magnífico. Haz que Oz despliegue su poder con esta nueva combinación.

Bennet: (Mirando el colgante de tierra) ¡Wow, esto es alucinante! Ahora puedo usar la tierra junto con mi visión de fuego. Seré aún más resistente y poderoso. ¡Gracias, Aether!

Aether: Bennet, siempre eres una fuente de energía y valentía. Ahora, con la tierra fortaleciendo tu fuego, ten cuidado de no causar demasiados incendios. Utiliza tus habilidades con prudencia.

Razor: (Sosteniendo su colgante de dendro) Aether, esto ser impresionante. Poder usar hierba y trueno. Razor agradecido.

Aether: Razor, eres un luchador formidable.

Rosaria: (Observando el colgante de fuego) Interesante elección, Aether. Ahora puedo manejar el fuego además de mi visión de hielo. Esto abre nuevas posibilidades en mis habilidades de combate. Gracias.

Aether: Rosaria, tu destreza con la visión de hielo es indiscutible. Ahora, con el fuego a tu disposición, serás capaz de enfrentar cualquier desafío con aún más resolución. Sigue protegiendo a Mondstadt.

Kaeya: (Sonriendo al ver su colgante de viento) Aether, esto es sorprendente. Ahora puedo controlar el viento junto con mi visión de cryo. Seré un espadachín aún más ágil y versátil. Gracias por esta oportunidad.

Aether: Kaeya, tu habilidad con la espada es innegable. Ahora, con el viento complementando tu control sobre el hielo, ten cuidado con congelar a todos. Utiliza esta nueva fuerza sabiamente.

Diluc: (Sosteniendo el colgante de electro) Aether, veo que has pensado en todo. Ahora puedo usar el electro además de mi visión de fuego. Mi espada brillará con un nuevo resplandor. Gracias.

Aether: Diluc, tu dominio del fuego es legendario. Ahora, con el electro a tu lado, tus llamas serán aún más intensas y destructivas. Utiliza esta combinación con responsabilidad y sabiduría.

Mona: (Observando el colgante de tierra) Aether, qué curioso obsequio has creado. Ahora puedo controlar la tierra junto con mi visión de agua. Seré capaz de predecir los movimientos del enemigo con mayor precisión. Gracias.

Aether: Mona, tus habilidades para la adivinación ya son impresionantes. Ahora, con la tierra bajo tu control, estarás aún más en sintonía con los secretos del destino. Utiliza esta nueva capacidad para guiar a los demás.

Diona: (Sosteniendo el colgante de fuego) Aether, esto es magnífico. Ahora puedo manejar el fuego junto con mi visión de hielo. Seré capaz de ofrecer cócteles explosivos aún más ardientes. ¡Gracias!

Aether: Diona, tu talento para la alquimia es excepcional. Ahora, con el fuego complementando tu control sobre el hielo, tus cócteles serán aún más impresionantes y ardientes. ¡Celebra con responsabilidad!

Klee: (Contemplando el colgante de agua) ¡Wooow! ¡Esto es genial! Ahora puedo usar el agua junto con mi visión de fuego. ¡Mis explosiones serán aún más espectaculares! ¡Gracias, Aether!

Aether: Klee, tus habilidades explosivas son legendarias. Ahora, con el agua complementando tu fuego, asegúrate de tener mucho cuidado al utilizar tus explosiones. ¡Que tus travesuras sigan iluminando nuestros días!

Sucrose: (Mirando el colgante de tierra) ¡Oh, esto es fascinante! Ahora puedo controlar la tierra junto con mi visión de viento. ¡Podré estudiar la naturaleza de una manera completamente nueva! ¡Muchas gracias, Aether!

Aether: Sucrose, tu amor por la ciencia y la alquimia es inspirador. Ahora, con la tierra a tu disposición, tus experimentos serán aún más fascinantes. ¡Que tus descubrimientos sigan sorprendiéndonos a todos!

Albedo: (Sosteniendo el colgante de fuego) Aether, esto es realmente interesante. Ahora puedo usar el fuego junto con mi visión de tierra. ¡Seré capaz de crear maravillas aún más asombrosas! Gracias por esta oportunidad.

Aether: Albedo, tus habilidades alquímicas son incomparables. Ahora, con el fuego fortaleciendo tu dominio sobre la tierra, seguramente crearás obras maestras aún más impresionantes. ¡Continúa inspirándonos con tu genialidad!

Aether caminó hacia Lumine, quien lo esperaba con una sonrisa en el rostro.

Aether: Lumine, he traído algo especial para ti. Este colgante está hecho con siete piedras, cada una representa un elemento diferente: Hydro, Cryo, Pyro, Dendro, Anemo, Electro y Geo. Es un símbolo de tu poder y de tu capacidad para dominar cada uno de ellos.

Lumine: (Emocionada) ¡Wow, Aether! Esto es increíble. No puedo creer que pueda tener el control de todos estos elementos. ¿Puedo probarlo ahora mismo?

Aether: Claro, Lumine. Imagina que vas a lanzar una bola de fuego. Visualiza la llama en tu mente y luego intenta invocarla.

Lumine: (Cerrando los ojos, concentrada) Bola de fuego... Bola de fuego...

En ese momento, Lumine levantó su mano y una gran bola de fuego se materializó frente a ella, bailando y crepitando con intensidad.

Lumine: ¡Lo logré, Aether! Mira, puedo controlar el fuego. ¡Esto es increíble! Ahora podré proteger a todos de una manera aún más poderosa. Gracias, hermano. Gracias por siempre estar a mi lado.

Aether: Lumine, siempre has sido una gran protectora. Ahora, con el control de todos los elementos, podrás alcanzar nuevas alturas. Pero recuerda, no importa cuánto poder tengamos, lo más importante es usarlo para proteger y ayudar a los demás.

Lumine asintió con determinación y abrazó a Aether con gratitud.

Lumine: Entiendo, Aether. Seguiré protegiendo a los demás con todo lo que tengo. Pero, ¿qué hay de ti? ¿Volverás a usar los elementos, serás el héroe de antes?

Aether: No, Lumine. Mi camino ahora es el de un simple herrero. Me siento feliz y satisfecho con mi nueva vida. Ver tu crecimiento y saber que estás protegida es suficiente para mí.

Lumine asintió con tristeza, pero también con comprensión.

Lumine: Entiendo, Aether. Estoy agradecida por todo lo que has hecho por mí. Siempre serás mi hermano y siempre te llevaré en mi corazón.

Ambos se abrazaron una vez más, despidiéndose con amor y gratitud. Aether se alejó, dejando a Lumine con el colgante y su nueva capacidad para controlar los elementos. Sabía que su hermana estaría segura y protegida, y eso era lo más importante para él.