27-PERDIDO Y REENCONTRADO
-Hola Goku...- dijo Chizuru viendo como el saiyajin se dio media vuelta, sin prestarle atención como normalmente lo hacía.
-Ah hola, es raro que no digas Goku-kun, pero bueno no te preocupes, no te pediré por un tiempo salir para ver a mi abuela- dijo Goku con un tono cansando volviendo a caminar.
-¡No es sobre eso!... escuché lo que pasó, bueno en realidad todo el recinto lo sabe, esa persona... era tu amigo ¿verdad?- preguntó Chizuru un poco insegura de cómo hablarle.
-Así es ¿por?- preguntó Goku molesto de que le volvieran a recordar eso.
-Bueno sé que no es lo mismo, pero también he perdido gente importante, conozco el sentimiento de haber perdido a alguien importante y, lo último que deberías hacer es estar solo en esos momentos, es por eso que si no tienes a alguien con quien hablar, puedes venir conmigo- dijo Chizuru preocupada por el saiyajin.
-Ya veo... bueno nos vemos tengo que comprar mi almuerzo- dijo Goku tocándose la cara cansado.
La novia de alquiler veía como se iba, estando aún más preocupada por lo dicho, debido a que eran las 5 de la tarde, así suspirando sólo pudo volver a entrar a su departamento, esperando que se recuperara rápido su extraño alquilador, ya que desde lejos se podía ver esa aura de desolación que le rodeaba.
Ya una vez en la tienda veía las diferentes cosas a comprar, ojeando los productos de comida como eran el arroz y fideos, una cosa es cierta, era difícil que el saiyajin cocinara, pero otra cosa es que no supiera hacer las cosas básicas, como un simple plato de arroz, pero por su actitud actual, pasó de comprar cosas que le demorarán, comprando ramen instantáneo, y obviamente por su colosal estómago compró más de 30 unidades, ahora importándole muy poco gastar dinero por la gran suma que había recibido.
Una vez pagado se le veía caminar por las calles en dirección a su casa, pero algo le molestaba constantemente, y de un segundo a otro su paciencia se quebrantó. Desapareciendo cómo por arte de magia, apareció al lado de un sujeto que lo vigilaba, el tipo impactado por la repentina aparición del que vigilaba, no pudo reaccionar más que lanzando un puño, el cual el saiyajin ni siquiera se dignó a esquivarlo, viendo con desinterés como es que el sujeto se retorcía en dolor al quebrarse su mano. Con fuerza lo tomó de la boca, no era un tipo muy alto, tal vez 1,68 para pasar desapercibido, agregando a su ropa casual más un gorro y lentes, le hacían verse poco sospechoso para su misión, que era observar los movimientos de Goku.
-He soportado que me hayas seguido los últimos días, ¡pero tengo mis límites idiota!- dijo Goku golpeándolo contra el suelo, quedando completamente inconsciente.
Un rato después se veía al saiyajin caminando con los ojos cerrados, para después ver de reojo como el sujeto que noqueó hace unos momentos, dormía plácidamente en una banca, lo que generó una leve sonrisa en el saiyajin, que al instante la quitó ya que no habían muchas razones por las que estar feliz.
Una vez en su casa las horas pasaron, los envases de comida tirados por todo el suelo era lo que más se veía, más un saiyajin viendo la televisión de cabeza, viéndose como tenía restos de comida en su cara, además de otro pote al lado suyo a medio terminar. Él nunca había sido de estas costumbres más parecidas a la de sus amigos, pero ahora mismo no tenía ninguna intención de hacer nada más, sus motivaciones se habían ido y, aunque no lo admitiera o lo quisiera reconocer, esto había sido a causa de la muerte de su amigo.
Unos días después.
El saiyajin se encontraba durmiendo mientras baba caía de su mejilla, empapando la almohada que fue su compañera estos días, y eso hubiera seguido así, si no fuera por un constante sonido que retumbaba en su oído. Ya una vez que se logró despertar, escucharía con molestia el timbre de su casa sonar y sonar, con rabia se levantaba estirándose en el proceso, haciendo sonar varios de sus huesos entre ellos el cuellos, para sin mirar quien era la persona de afuera, abrir la puerta molesto.
-Ya cálmate ya salí- dijo Goku mientras bostezaba y se frotaba los ojos, viendo como era su vecina de al lado.
-Tienes un pepperoni en tu ropa- dijo Chizuru viéndose seria al saiyajin.
-Ah es cierto.
(Comiéndolo para el desagrado de la mujer).
¿Y bien qué es lo que quieres? ¿acaso vienes a hablar sobre lo de ayer?- preguntó Goku todavía con sueño.
-¿Lo de ayer?, han pasado 5 días desde que nos vimos- dijo Chizuru sorprendida de lo dicho por el saiyajin.
El saiyajin vería su celular volviendo a bostezar.
-Tienes razón ya es domingo como pasan los días, ¿y bueno qué quieres Chizuru?- preguntó Goku cansado.
-Nos vemos a las 4 en la avenida Yuni, así que prepárate, y toma un baño apestas- dijo Chizuru mientras se iba del sitio.
El saiyajin recién reacciona sobre que la novia de alquiler estaba bien arreglada, pareciendo su aspecto habitual de Chizuru Mizuhara, pero mucho más importante y es que no se había bañado en varios días, así con pereza no tuvo más opción que hacer lo pedido, ya que en dos horas tendría que estar en el lugar pedido.
Después de un rato se veía al saiyajin ya arreglado, estaba en el sitio pedido por la mujer, pero una clara mirada de molestia se veía, siendo lo más constante en su cabeza, para que venir aquí si le quería hablar de algo. Unos pasos se escucharon detrás suyo, esa fragancia que inundaba el lugar junto a una hermosa belleza, era lo único que desprendía Chizuru, al estar en su actitud de novia de alquiler, siempre manteniendo esa sonrisa imperturbable.
-¡Hola me alegra que hayas venido!- dijo Chizuru con una gran sonrisa.
-¿De qué hablas?, si fuiste tú la que casi me obligó- dijo Goku confundido por la actitud de la mujer.
-Sé que dijiste que no tenías ganar de pasar todo esto de las novias de alquiler, y lo entiendo, es lo último que querría al pasar por lo tuyo, pero tampoco es sano que vivas de esa forma, es por eso... ¡que hoy te alquilaré!- declaró Chizuru apuntando con su dedo a Goku, que se notaba sorprendido por eso, al mismo tiempo que recibía un sobre con dinero.
-¿Eh?-
Fue lo único que pudo decir el saiyajin tras lo escuchado, viendo el sobre en sus manos, revisando su contenido vería como es que poseía una cantidad de dinero, lo que le dejó claro qué lo que decía la mujer, no era una broma.
-E-espera no puedo aceptar esto... además no entiendo a qué quieres llegar- dijo Goku pasándole el sobre, sin recibir un aporte por la mujer que se veía recia a aceptarlo.
La mirada que le dedicó fue lo suficientemente efectiva, para que guardará el sobre entre su chaqueta, así viendo con desinterés como empezaba a caminar, para al darse la vuelta darle una gran sonrisa que sólo podía ella hacer.
-¡Vamos a tener nuestra cita Goku-kun!- dijo Chizuru con una gran sonrisa.
Sin decir una palabra el saiyajin empezaría a seguirla, sabiendo que era mejor no discutir nada con ella, además de que le estaba pagando, así que no podía decir nada, aunque la verdad se sentía mal al quitarle este dinero, cuando sabía que actualmente era millonario, o al menos contaba con una cantidad superior a lo que ganarían muchos en toda su vida. Nuevamente ante el día soleado, los dos universitarios empezaban a caminar tranquilamente tomados de la mano, ante el leve descontento del saiyajin que se lo guardaba para sí mismo.
Los dos comían en uno de los restaurantes constante que visitaban en sus citas, pero a diferencia de la mayoría de veces, quien pagaba no era nadie más que Chizuru, la que mantenía una conversa agradable para el saiyajin, que se sorprendió de que estuviera tan falto de fluidez, por no hablar con nadie en 5 días. Seguido los dos visitaron un salón de juegos, cientos de máquinas recreativas abarcaban la zona, el saiyajin fue abrazado por la mujer, que sonreía al ver como capturó un peluche con forma de zorro, que eventualmente terminó en manos de la mujer, que agradecía el regalo del joven. Después los dos se encontraban en una sala de boliche, cada uno concentrado en una cosa, ella era acertar la bola para hacer una puntuación perfecta, mientras que él se preocupaba de usar la fuerza correcta, para no destruir todo, siendo eso lo que causó el paso del tiempo, en dónde el saiyajin en ningún momento se preocupó por lo que le atormentaba estos últimos días.
Más tarde ellos se encontraban en el metro, el saiyajin veía con detenimiento las estaciones avanzadas, sin hacer ninguna pregunta siendo sólo llevado por donde la mujer lo movía, hasta que finalmente se detendría en una estación, que llamó levemente su atención.
-¿Heiwajima?- preguntó Goku curioso por el lugar donde se bajarían.
-Así es, dicen que hay un gran observatorio en la noche, y como todavía es muy temprano, podríamos pasar al parque de diversiones cercano- dijo Chizuru mientras se bajaba jalando al saiyajin.
-¿Estás segura?, con la comida y las cosas que hemos visitado, te has gastado casi diez mil yenes, ¿no crees que es mucho?- preguntó Goku sintiéndose culpable de que pagara todo eso.
-No me ha salido barato, ¿pero acaso he gastado más que tú en todas nuestras salidas?- preguntó Chizuru con una sonrisa al saber la respuesta, la que el saiyajin también sabía por lo que no diría nada.
Los dos después de una larga fila pero sorprendentemente rápida, habrían entrado al lugar viendo los cientos de juegos y puestos que habían, el lugar estaba tan animado desde el inicio del día, las personas que varían entre amigos, parejas, familias y compañeros de colegio, era lo que los rodeaba en grandes multitudes, pero a pesar de todo eso, lo que más reluce en todo ese lugar es la sonrisa de la mujer, que sostenía la mano del saiyajin en ese mismo momento.
-¡Vamos a subirnos a una montaña rusa!- exclamó Chizuru emocionada.
Contagiado de la emoción de la chica sólo pudo seguirla, para al instante verse a los dos como caían cientos de metros en una carreta, la cual hace unos momentos había subido toda la zona, escuchándose gritos seguidos de las grandes curvas que se daban, y nuevamente a pesar de la gran velocidad que iban, una persona veía todo eso el cámara lenta y con aburrimiento, quedándose absorto en una cosa, que era mirar la sonrisa que se mantenía por la chica, a pesar de sus pelos alborotados por la gran velocidad que iban.
-No entiendo a qué quieres llegar, esto es diferente a las otras veces, tú siempre tenías un objetivo claro, y era el practicar para tus clases de actriz, ¿qué como lo sé?, sé que va a sonar a que soy un acosador, pero una vez te busqué para pedirte una cosa, y la sorpresa que me llevé fue ver que de donde sentía tu presencia, era una escuela de actuación... por fin esa duda que me carcomía por tantos días a supe, que era el saber el porqué de porque elegiste este trabajo, que traía más problema que uno normal, además de una paga no era fuera de lo común, fue para enterarme de que todo era por tus prácticas, logrando mejorar tus habilidades al mismo tiempos que ganabas dinero, en ese momento me parecías impresionante, pero ahora mismo no sé con que fin lo llevas.
¿Acaso te doy lástima y lo único que quieres hacer es tratar de aliviarme después de la pérdida de un amigo?, sorpresa lo has logrado, a pesar de que a veces me llegó a molestar tener que soportar a Chizuru Mizuhara, su actuación de la novia perfecta, su labia a la hora de hablarte te relaja, pero si soy sincero eso no es lo que quiero ahora mismo... no quiero ni a Ichinose ni a mis amigos que me molesten, sólo quiero estar solo, pero creo que eso es mucho pedir, además ya pasamos todo el día divirtiéndonos y aunque me moleste decirlo, si que me ha gustado- dijo Goku tocándose su cara, mientras el tiempo volvía a la normalidad, yendo hasta el final de la vía con rapidez.
Después de bajarse se subieron a muchas más atracciones del lugar, desde las más intensas hasta las más lentas, siendo todo una buena distracción para el saiyajin, que nunca tenía tiempo para detenerse a pensar en Silver. Unas horas después los dos ya se veían ante la luz de la luna, viéndose como ya habían salido del parque de diversiones, dirigiéndose en dirección al mirador que era la primera opción de la mujer a ir, y así es como los dos terminaron viendo las estrellas, junto a una hermosa luna.
El saiyajin observaba detenidamente a Chizuru, que desde uno de los telescopios del lugar veía las estrellas, para así al mismo tiempo que se funciona con el cielo estrellado, poner un semblante serio por lo que iba a decir.
-Agradezco todo lo que hiciste el día de hoy, en verdad me divertí, ¿pero cuál fue el propósito de todo esto?, sacarme de mi habitación para decirme que huelo mal, o tal vez tratar de no recordar lo que pasó hace unos días- dijo Goku que veía seriamente a Chizuru que lo escuchaba atentamente, aunque siempre cambiando de ángulo para ver otra estrella.
Un suspiro salió por parte de la novia de alquiler, que dejaba el telescopio para ver seriamente al saiyajin, que lo hacía de la misma manera.
-Todas las razones que dijiste... estás enojado, yo también lo estuve... en el pasado cuando murió mi abuelo, pasé las primeras dos semanas encerrada en mi habitación, lo último que quería era que alguien me viniera a decir que todo mejoraría, odiaba a los que me trataban de consolar, y eso habría seguido así... ¿pero sabes qué fue lo que me hizo mejorar?, el hacer locuras e irme un día de todo lo común, me hizo distraerme de todo lo malo de ese momento, no sé si es lo que tú necesites, pero la vez que te vi saliendo de tu apartamento, la mirada que me diste era la misma que tenía en ese tiempo, no es bueno estar solo, todo terminará hacia un camino que no te gustará, pero mucho más importante, no será bueno para la persona que querías- dijo Chizuru recordando lo que tuvo que pasar después de la muerte de su abuelo.
-¿Crees qué no lo sé?, sé que si me viera ahora ni siquiera una sonrisa le sacaría, sería simplemente decepción, ¡hasta yo me doy asco actualmente!, me juré ser fuerte y tomarlo como un aprendizaje, ¿pero qué he hecho?, estar todo el día como un puto vago, cuando mi familia y amigos se están preocupando, ¡y yo estoy como un idiota lamentándome, cuando hay gente que la está pasando peor!- dijo Goku frustrado con su propia actitud.
Lentamente la mujer se acercó al saiyajin, arrementiendo a él con un abrazo, dejándolo muy confundido por la mirada determinada que le daba.
-¿Y quién dice que tú no eres quién peor la pasa?, está bien que haya gente que también lo lamente, es cierto que tal vez sólo era tu amigo, y tal vez no estés a la altura de familiares, pero eso no me quita relevancia a que fue alguien importante para ti, en cambio eso demuestra lo mucho que de verdad lo querías, y eso no significa tener que ser fuerte para honrarlo, puedes mostrar debilidad a veces, sólo ten en cuenta que también hay personas que te apoyarán, y eso no significa que te tengas que echar todos los problemas y lamentos encima de ti- dijo Chizuru mientras seguía abrazando al saiyajin.
El saiyajin se soltó del abrazo con facilidad, viendo seriamente a la mujer, para sentarse en una banca, viendo como es que un grupo de personas venía, por lo que sería mejor ahorrarse un drama, pero lejos de parar la novia de alquiler volvió a sentarse al lado de él.
-Tú no lo entiendes... la razón de la porque murió fue por mi culpa, si hubiera llegado antes... si tan sólo me hubiera preocupado más en él, que en mis propias metas- dijo Goku apretando sus manos.
-Dices que el no tener metas propias y vivir tu vida está mal, dices que podrías haber hecho algo por salvarlo de unos asesinos, te estás echando unas culpas que sabes que no son ciertas, no podrías haber hecho nada aunque quisieras, y si hubiera habido la posibilidad de que fuera cierto, estoy segura de que no le hubiera gustado.
(Viendo la cara molesta del saiyajin al decir eso).
No sé mucho de él, pero lo conocí la vez que pasó todo lo de la banda de Scrukers, fue el primero en ir a verte, y la verdad sé notaba lo mucho que te apreciaba, no sé qué clase de relación habrán tenido, pero estoy segura que era una buena, ya que viéndose como la estás pasando mal se ve con claridad, pero lo que me deja claro es la únicas palabras que me dijo.
"Ese idiota siempre se mete en problemas... me alegra que no haya ido a más, gracias por preocuparse por él, pero deberían ir ya a sus casas, aunque si hay una cosa que les podría pedir, es que lo cuiden de que no cometa más locuras como estas"
Alguien que de verdad se preocupa por ti de esa manera, lo único que querría sería ver que aceptas su muerte y no te hunde, y para eso mostrarse fuerte o actuar como un idiota no es la solución, sé que estoy siendo dura ya que sé lo que es perder a alguien, pero la vez que me pasó esto no quise escuchar a nadie, por lo que debes estar pasando por algo igual, es por eso que quiero que te quede claro.
(Tomando al saiyajin de los hombros, que no podía mantener la mirada ya que le temblaba por las palabras dichas).
Tienes amigos y familia que te apoyan, no tienes porque pasar por algo así y mucho menos solo, si necesitas a alguien puedes contar conmigo, pero recuerda algo mucho más importante, aunque haya sido desafortunada la muerte de tu amigo, aunque duela perder a alguien, no podemos parar nuestra vida, ya que una vez que continuemos con ellos, lo único que podemos hacer para hacerlos felices, es mostrarles lo mucho que nos esforzamos, y como vivimos nuestra vida... además, estoy segura qué eso es lo que le gustaría ver a tu amigo- dijo Chizuru viendo al cielo recordando su pasado.
Una leve risa salió por el saiyajin, que no paraba de ver el cielo mientras era observado por la mujer, que veía con sorpresa como unas lágrimas caían por parte del saiyajin.
-¿Sabes qué es lo gracioso?, eso si suena mucho a él- dijo Goku mientras empezaba a derramar lágrimas, abrazándome a Chizuru que se veía sorprendida por eso.
Lentamente acaricia su pelo, mientras sonreía viendo el cielo al recordar gran parte de sí en él, pero lo más importante, es que estaba segura que de ahora en adelante, por lo menos irá a mejora su estado emocional, y ante esa información qué sabría que era cierta por experiencia propia, se le ocurrió la primera broma a decir de las muchas que diría en sus siguientes encuentros, ya que conociendo al saiyajin, estaban muy lejos de separarse, ya sea para bien o para mal.
-No te preocupes, puedes llorar todo lo que quieras en mi pecho para que no te vean llorar como un bebé- susurró Chizuru al oído.
-Cállate- dijo Goku sin poder evitar reír por la broma.
Unos momentos después se veía a los dos caminar por las calles nocturnas, ahora tomados de las manos a diferencia de las otras veces por gusto de los dos, pero mucho más importante, el saiyajin ya no mantenía esa aura de soledad absoluta, ahora había un leve brillo en esa tristeza, lo que era sostenido por la mujer que ayudaba en la mejora del saiyajin, que aunque no lo quisiera admitir, la pérdida de su amigo le fue realmente dura, tal vez ahora no podría más que lamentarse al recordarlo, pero seguramente en un futuro cercano, lo único que habría al recordarlo, no serían más que risas y sonrisas.
Ya se veía a los dos en los departamentos que vivían, cada uno estaba abriendo su puerta, pero por alguna razón ninguno de los dos lo hacía, para así verse fijamente notándose claramente como el saiyajin quería decir algo.
-Oye Chizuru, gracias por todo lo de este día, prometo que algún día te lo compensaré- dijo Goku viendo seriamente a la mujer.
-No hay problema, puedes llamarme cuando quieras- dijo Chizuru sonriendo.
-Pensé que sólo sería cuando tuviera que ver con alquilarte- dijo Goku en tono burlón.
-A veces tendré que hacer una excepción, tómalo como un regalo de cumpleaños adelantado- dijo Chizuru mientras entraba a su casa.
-Todavía falta mucho para mí cumpleaños, creo que te adelantaste demasiado, pero me pregunto si seré capaz de celebrarlo- dijo Goku viendo el cielo nocturno.
A cientis de kilómetros o mejor dicho miles, una nave se acercaba en dirección a la tierra, hace unos pocos días había salido de la mismísima estación del planeta de Freezer, su navegante era Radizt, ¿y cuál era su objetivo?, claramente buscar a su hermano perdido, y descubrir la razón por la que nunca volvió a saber de él, siendo un largo transcurso antes de poder volver a verlo si es que estaba vivo, pero eso era preferible a tener que pasar en misiones con sus otros dos insoportables compañeros.
Al día siguiente.
Se puede ver al saiyajin caminando tranquilamente por la universidad, hoy había sido su primer día desde que volvió de su descanso por la muerte de su amigo, ahora caminaba con su grupo de amigos los tres vírgenes como los conocen, pero lo que más se notaba era una sonrisa en el saiyajin, que no podía parar de reír ante las bromas que hacían.
-Me voy a presentar nuevamente, soy un saiyajin que terminó en la tierra, tengo un pasado muy oscuro que no me dejó dormir hasta cierto punto, no sé si mi nombre es Son Goku o Kinoshita Goku, sólo sé una cosa y es por la que me muevo, puede que actualmente sea un simple universitario que pasa en citas falsas con las conocidas novias de alquiler, y que hasta cierto punto me avergüenza, pero no dejaré de disfrutar mis días en la tierra, ya que tarde o temprano dos de mis objetivos se cumplirán... derrumbaré la base de los Scrukers ya sea que tenga que ir hasta los estados unidos para derrotar sus pilares, pero tengan por seguro que acabarán cayendo, y lo principal que haré una vez que termine eso, es acabar con el maldito que mató a toda mi especie, ya sea que eso lleve a mi muerte o no, estoy seguro de lo que cumpliré, y es por eso que desde el día de hoy viviré mi vida de la forma más divertida.
Silver si me estás viendo de un lugar, no seas un idiota y deséame suerte para que te vaya a ver en un largo tiempo y no en unos pocos años, ya que preferiría morir de viejo, y si lo he aceptado, no quiero morir me oyeron... bueno en realidad no sé a quién le estoy hablando y espero respuesta, si sólo estoy pensando para motivarme- pensó Goku mientras mantenía una sonrisa confiada.
-¿Y bien hoy vamos a beber o jugar en la casa de alguien?- preguntó Kibe emocionado.
-En la mía no, no quiero tener que limpiar tu vómito, y ni creas que te voy a cargar si vamos a la de Shun- dijo Goku riendo al recordar las cosas que habían pasado.
-Está bien está bien será en mi casa, pero no quiero mierdas de que te vas temprano, ¡es ir a jugar hasta la madrugada o es quedarte hasta el día siguiente!- exigió Kibe seriamente.
-Sí sí lo que tú digas, nos vemos en la tarde entonces- dijo Goku mientras se despedía empezando a dirigirse a una de sus clases.
Su melancolía no se había ido por completo, pero lo pasado con la novia de alquiler el día de ayer le había ayudado, pero mucho más importante, el saber que podía contar con ella nuevamente le era reconfortante, por lo que el mero de hecho de verla pasar al lado suyo, no hacía más que hacerle sonreír, al ver con gracia como trataba de que no la viera, siendo algo imposible debido a que era poseedor de la técnica detectora de energías, y así sin dirigirse ni una palabra, los dos pasearon tranquilos el resto de su día en la universidad.
Goku pasó por un momento difícil por la muerte de Silver, pero por suertes tuvo la ayuda de alguien que le diera un abrazo en el momento complicado, ¿cómo lo habrá pasado Aoi? ¿se hará lo que declaró Goku de destruir a los Scrukers?, véanlo en el próximo capítulo para verlo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top