Capítulo 139: Zarhlagas, Reina de los Dragones
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Nuestro querido dragón de la desesperación está sujetando con fuerza el antebrazo del hijo biológico de su viejo amigo Igneel, quien posee una pequeña sonrisa desafiante en su rostro a la par que intenta liberarse del agarre, mientras este pequeño conflicto ocurre Selene se mantiene en su posición viendo detenidamente al padre de la apodada reina de las hadas, la verdad no entiende la razón por la cual intenta proteger a ese anciano, algo que se asegurara de cambiar con el tiempo, ya que sabe que nuestro protagonista no podrá abandonar este lugar. Tras unos pocos segundos Ignia y Selene se sorprendieron un poco al sentir la inmensa presión mágica que está liberando Kai, comprendiendo que no es alguien a quien deba subestimar, incluso en ellos existe la duda de poder vencerlo, en especial para la mujer ya que no esperaba que el antiguo general del reino de Dragnof cambiase tanto en estos años, con respecto a este aspecto, ya que incluso a ella le costó demasiado alcanzar el nivel que posee, y aun así no sabe si sería capaz de someterlo, en cambio a pesar de sentir la diferencia entre ambos el hijo biológico del rey dragón de fuego parece estar sumamente emocionado, al punto de no poder esconderlo por culpa de la inmensa sonrisa en su rostro. Toda la infraestructura dentro de la montaña empezó a temblar por la presión que está liberando el dragón de la desesperación, con la intención de disciplinar al hijo biológico de su amigo, aunque la peor parte se la está llevando el anciano, quien sufre la presión mágica, impidiendo que pueda levantarse del suelo además de que la sensación de estar a punto de morir lo invade continuamente, mientras que con todas su fuerzas logra levantar la mirada, viendo a los dos dragones en su forma humana, algo de lo que el padre de Erza Scarlet se percató, e instantáneamente detuvo su presión confundiendo a Ignia y Selene, para acto seguido acercarse rápidamente al viejo hombre.
Kai: Lo siento, debí atenderlo primero antes de dejarme llevar, deje que lo ayude –mencionó con un tono amable a la vez que se arrodilla mientras le extiende su mano al viejo hombre-
Anciano: No se preocupe por mí, fue mi culpa... no debe preocuparse –dijo con un tono tranquilo, negando la ayuda del padre de la apodada reina de las hadas, pero este de todas maneras sujeto el antebrazo de hombre y con cuidado lo ayudó a ponerse de pie, ignorando las miradas fulminantes de los otros dos dragones-
El hombre de un momento a otro se tensó llamando la atención del padre de Erza Scarlet, quien noto un pequeño brillo imperceptible en los ojos del anciano, el cual duró unos pocos segundos, aunque Kai noto que algo no estaba bien al ver el leve temblor en las manos del hombre, pero este hizo una pequeña reverencia y tras agradecer totalmente por todo a nuestro querido protagonista para acto seguido empezar a retirarse. Kai se limita a ver con un poco de preocupación, pero no pudo permitirse perder el tiempo a ver como una gran llamarada se acerca al anciano rápidamente, sin dudarlo a una gran velocidad se colocó en frente del ataque recibiéndolo de lleno, sorprendiendo al viejo hombre, quien no espero que el padre de Titania estuviese dispuesto a protegerlo, cuando él estaba dispuesto a aceptar su muerte como castigo, aunque como era de esperarse el ataque no causó ningún rasguño sobre el cuerpo del dragón de la desesperación, aunque algunas pequeñas partes de su camiseta tienen leves quemaduras.
Kai: Anciano, váyase ahora... no quiero que se vea involucrado en esto –mencionó con seriedad, sin siquiera dirigirle la mirada al hombre, ya que su total atención está centrada en el hijo biológico de Igneel, quien fue el responsable de ese ataque, aunque este parece tener una expresión de éxtasis y emoción-
Selene: ¿Por qué proteges al humano?, no tiene nada que ver contigo, además... eres un dragón, no debes mezclarte con ellos –cuestionó con seriedad, mientras fulmina con la mirada al padre de la apodada reina de las hadas, aunque este la ignora ya que está cruzando miradas con Ignea-
Kai: Tu padre Igneel nunca atacaría por la espalda –mencionó con seriedad mientras fulmina con la mirada al pelirrojo-
Ignea: Yo no soy como el viejo... además, tampoco entiendo cómo se te ocurre siquiera mencionarlo... después de todo tu dejaste que muera a manos del Dragón del apocalipsis –mencionó con seriedad, mientras una sonrisa desafiante decora su rostro, ya que su objetivo es provocar al antiguo general del ejército de Dragnof, pero parece que no está rindiendo frutos, ya que este se mantiene bastante calmado conservando una expresión seria-
Una enorme presión apareció de repente provocando que todo el lugar e inclusive la propia ciudad tiemble como si de un potente terremoto se tratase, Selene y Ignia, cayeron de rodillas al suelo, incluso a pesar de utilizar todas sus fuerzas para no caer completamente, aunque no son los únicos, ya que incluso el poderoso dragón de la desesperación está en un pequeño estado de shock al sentir una presión mágica de esta magnitud, aunque algo dentro de él parece entender que esta presión es familiar. El padre de Titania está manteniéndose de pie demostrando que es alguien muy poderoso para poder soportar todo esto, aunque en su rostro se puede entender que no es una tarea fácil, unos pasos empezaron a escucharse de la misma dirección por donde apareció el anciano hace unos momentos, al cabo de un par de minutos, de las sombras apareció una hermosa mujer que aparenta estar en mitad de sus treinta años, de piel pálida, tiene una lacia y larga cabellera negra, sus ojos son violetas, los cuales emiten un intenso brillo de la misma tonalidad de sus ojos, las vestimenta de la desconocida mujer se compone de un largo vestido con mangas de una sola pieza totalmente negro. Kai puede sentir como la profunda mirada de la mujer se centra completamente en él, ignorando la presencia del hijo biológico de Igneel y de la dragona lunar, esa mirada provocó en nuestro querido protagonista una rara sensación que nunca en su vida había experimentado, dando como resultado que su cuerpo de manera instintiva levemente empiece a temblar, a la par que una extraña presión en su pecho apareció de repente, provocando que el respirar se dificulte un poco debido a que puede percibir que la desconocida es la responsable de esta sofocante presión, aunque nunca espero que de un segundo a otro, la mujer esté frente a frente con él, separados por menos de medio metro de distancia, permitiendo que se pueda ver que inclusive la mujer es un poco más alta que nuestro protagonista.
Kai: "No recuerdo una sensación así desde que vi por primera vez al primer Rey de los Dragones... no es igual de intensa, pero es suficiente para hacer que mi cuerpo no responda... además de que no pude ver en qué momento se movió" –dijo en sus pensamientos, mientras cruza miradas con la mujer-
Mujer: No tienes nada que temer mi pequeño, no voy a hacerte daño –mencionó con un tono frío, a la vez que acaricia con cuidado la mejilla derecha del padre de la apodada reina de las hadas, quien al recibir esta pequeña muestra de afecto pudo sentir una gran calidez recorrer su cuerpo, provocando que todas esas malas sensaciones desaparezcan, e incluso la imagen de Martha apareció como un repentino rayo de luz, ya que aquella mujer, fue como su figura materna a pesar de ser especies totalmente diferentes, aunque gracias al calmarse pudo percatarse de algo muy importante al sentir el aroma de la mujer-
Kai: Tu olor... es muy parecido al mío –dijo en voz baja, estando confundido a la vez que sorprendido, aunque sus palabras fueron oídas por los presentes-
Mujer: En verdad se trataba de ti... Selene, Ignia, ya pueden retirarse... los volveré a llamar si los necesito, ahora quiero que nos dejen solos – mencionó con un tono melancólico mientras detiene su presión, provocando que todo vuelva a estar en calma, para acto seguido ordenar a los dos dragones se pusieron de pie y sin decir ni una palabra se retiraron, aunque nuestro querido dragón de la desesperación sintió que para el hijo biológico de su viejo amigo no fue de su agrado la orden de la mujer-
Kai: ¿Quién demonios eres? –cuestionó confundido, mientras ve que la mujer dejó de acariciar su mejilla, para acto seguido sentir como sujeta sus manos con fuerza, sintiendo nuevamente esa reconfortante sensación de calidez-
Mujer: Sígueme, tenemos mucho de qué hablar, y comprenderás todo pequeño –mencionó con un tono dulce al ver que ya se encuentran completamente solos, para acto seguido soltar las manos de nuestro protagonista, quien solo se limitó a seguir a la mujer por instinto, aunque no sepa cómo explicarlo, siendo la primera vez que le ocurre algo como esto y no tiene idea de cómo evitarlo-
Kai: ¿Cuál es tu nombre? –cuestionó de forma respetuosa-
Mujer: Pronto tendrás tus respuestas, pequeño, aunque si puedes saber mi nombre... soy Zarhlagas –mencionó con un tono maternal, mientras una pequeña sonrisa se dibuja en su rostro-
Ubicación desconocida, con Acnologia
Podemos ver al Dragón del Apocalipsis volando sobre un gigantesco bosque por un par de minutos, hasta que se detuvo de golpe, manteniéndose en el cielo mientras observa a sus alrededores en busca de algún rastro aunque sea mínimo para poder localizar a su hermano mayor, ya que desde que sintió aquellas dos presencias cuando su hermano se retiró a las montañas decidió seguirlo, pero este no llegó a tiempo para impedir que Kai haya seguido a Selene e Ignia. A pesar de que su rostro no expresa absolutamente nada, su aura actual transmite enojo y preocupación, aunque su enojo es para sí mismo ya que no puede creer que haya podido perder el rastro de su hermano, por esa razón soltó un poderoso rugido a la nada para poder descargar su frustración por un par de minutos, tras un par de minutos sin hacer nada, captó en el aire un grupo de aromas familiares, en especial uno, aunque el rastro es muy pequeño, dando a entender que se encuentran lejos de su posición, e inclusive se aleja cada vez más. El hermano menor de nuestro querido Dragón de la Desesperación sin perder más tiempo y a gran velocidad empezó a seguir el pequeño rastro, el cual gracias a su velocidad se volvía cada vez más fuerte, además de que a cada minuto un nuevo aroma aparece en compañía de los demás, despertando un poco la curiosidad de Acnologia, ya que reconoció a quienes pertenecen estos aromas, pero no sabe la razón por la cual se encuentran en este continente, en especial una persona, que debería encontrarse muy lejos de aquí.
Tras unos quince minutos el Dragón negro alcanzó a su objetivo, tratándose del transporte con el cual los miembros restantes del gremio más poderoso de Fiore, el cual está detenido, como si lo estuviesen esperando, Acnologia se acercó rápidamente hasta estar al frente del transporte, encontrándose a la antigua dirigente de Dragnof en compañía del actual maestro de Fairy Tail y del As del Gremio, aunque puede sentir el aroma de los demás escondidos. Irene cruzó miradas con el hermano menor de nuestro protagonista, una inesperada tensión empezó a sentirse en el aire, la cual empezó a incomodar a los magos de Fairy Tail, incluso Makarov y Gildarts están un poco confundidos por la repentina tensión que se formó, ya que suponían que se llevaban bien al ser familia.
Agnologia: ¿Qué haces aquí Irene? –Cuestionó con seriedad, para acto seguido tomar forma humana, quedando frente a frente a los demás-
Irene: La razón es más que obvia, vine para apoyar a Kai... no puedo permitirme perderlo –respondió con seriedad, manteniendo una expresión calmada, mientras cruza miradas con el hermano menor de nuestro querido protagonista-
Acnologia: ¿Y qué hay de Kim? –Mencionó con la misma seriedad, frunciendo un poco el ceño, acción que la pelirroja imito-
Irene: Obviamente está en manos confiables... pero aunque no me guste la idea de dejarlo, tampoco permitiré que mi hijo crezca sin su padre –explicó con seriedad, mientras deja ver su aura escarlata, dando a entender que está dispuesta a cualquier cosa por llevar al dragón de la desesperación de regreso a casa-
Acnologia: ¿Cuál es la razón que tienen ustedes? –preguntó con un tono un poco más relajado al ver que no podrá cambiar la decisión de la antigua reina de Dragnof, dirigiendo ahora su atención a Makarov y Gildarts, quienes no pudieron tensarse un poco al ver los ojos serios del dragón del apocalipsis-
Gildarts: Eres un gran amigo, además de que todos en el gremio somos familia... es normal que nos ayudemos cuando estamos en problemas –respondió con determinación, mientras una sonrisa filosa decora su rostro-
Makarov: Kai ha hecho muchas cosas por el gremio y los mocosos... y aunque sea un dragón, también es uno de mis muchachos –agregó a las palabras del As de Fairy Tail, recibiendo una sonrisa por parte de Irene, mientras que el Dragón del Apocalipsis soltó un pequeño suspiro-
Acnologia: Entonces no queda más que hacer... síganme los guiaré con los demás, tenemos que localizar a Kai, ya que perdí su rastro –mencionó con seriedad, recibiendo un asentimiento con la cabeza por parte de Irene, Makarov y Gildarts-
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Espero que les este gustando la historia hasta ahora, los invito a que si les gusta voten y comenten.
Para los que les guste mi forma de narrar reencarnados, ya se encuentran los primeros dos capítulos de reencarnando en Nanatsu no Taizai: Familia o Deber.
Los invito también a que lean mis otros fics, además de preguntarme cualquier duda que tengan hasta ahora.
El link del discord de la Demons Crew esta en mi perfil, gracias por unirse.
Nos vemos en el siguiente capítulo y gracias por el apoyo.
Se despide vuestro Dios Demonio.
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