De repente, Sasuke pudo sentir como su amado; ahora rubio con mechones rojos; comenzó a despertar y no pudo evitar soltar un gran suspiro repleto de alivio.

—Eh?… Dó…dónde estoy?…Dohko? Eres tú?— preguntó Naruto. Reconocería el cosmos de la persona que estaba a su lado donde fuera.
—Tranquilo, estás en el hospital. Así es Shion, soy yo. No sabes lo preocupado que estaba por ti. Por un momento creí…creí que te perdería de nuevo…— dijo el Uchiha sonriéndole aliviado al rubio quien le devolvió la sonrisa.
— Lamento mucho haberte preocupado. Pero estoy bien ahora gracias a ti. Salvaste mi vida Dohko…por cierto, y Sakura?—
—Ya no tienes que preocuparte por ella. Ya Kakashi-sensei le fue a hablar al Hokage para que reciba su merecido por lo que nos hizo— dijo el joven Uchiha.
—Exactamente qué fue lo que le dijiste a Kakashi-sensei sobre lo sucedido?—
—Que Sakura nos vendió a los bandidos que quedamos inconscientes, tu despertaste primero y los enfrentaste. Luego que yo desperté, los distraje con clones de sombras y logramos escapar—
—No le dijiste a Kakashi sobre los caballeros de Athena?—
—Decidí consultarlo contigo primero—
—Creo que no tendremos de otra que contarles a Kakashi-sensei y al Hokage la verdad. Después de todo, necesitamos ayuda para encontrar al resto y para encontrar a Athena—

Fue en ese momento que escucharon como la puerta de la habitación se habría y por ella entraban dos personas que ambos jóvenes conocían muy bien. Uno era su sensei, y el otro era el Sandaime Hokage. Ambos, al ver a Naruto despierto soltaron un suspiro de alivio. El primero en hablar fue Kakashi.

—Naruto, cómo te sientes?—
—Me siento bien Kakashi-sensei…pero hay algo que Sasuke y yo debemos contarles…—
—Antes que nada me gustaría preguntar si hay alguna forma de que nadie pueda escuchar desde fuera todo lo que digamos— consultó Sasuke
—Claro que si…yo me encargo de eso muchachos— dijo el anciano Hokage lanzando un jutsu que impedía que todo lo que se dijera en esa habitación, fuese escuchado desde fuera de la misma.
—Listo. Ahora, ¿De qué se trata?— preguntó el Hokage.
—¿Qué es lo que saben sobre la diosa Athena y sus caballeros?— preguntó el Uchiha.
—Athena es la diosa griega de la sabiduría que reencarna en éste mundo cada cierta cantidad de años para protegerlo de la ira de los otros dioses que intentan destruirlo. Sus caballeros son quienes están destinados a protegerla usando el cosmos. Que lo por lo que se es un tipo de energía que se compara con la energía del universo.— dijo Kakashi sorprendiendo a Sasuke y a Naruto de que supiera eso.
—¿Cómo es que sabe eso Kakashi-sensei?— se animó a preguntar Naruto.
—Es una historia algo larga pero…por qué preguntaron sobre la diosa Athena, chicos?—
—Bueno…eso es porque Sasuke y yo somos la reencarnación de dos de los guerreros destinados a protegerla. Yo en mi vida pasada fuí conocido como Shion. Caballero dorado de Aries y luego gran Patriarca del santuario—dijo Naruto.
—Y yo en mi vida pasada fuí conocido como Dohko, caballero dorado de Libra— dijo Sasuke.

Lo que ambos jóvenes dijeron sorprendió de sobremanera al peliplata y al tercer Hokage. Pero por la seriedad con la que ambos jóvenes habían hablado, ambos supieron de inmediato que ninguno de los dos estaba mintiendo y de que no se trataba de una broma. Eso le dió a Kakashi la suficiente seguridad para revelar algo que había Sido un secreto que solo sabían: su mejor amigo Maito Gai, su sensei, Kushina y el tercer Hokage.

—Ahora Kakashi-sensei, ¿Cómo es que sabe de Athena, sus caballeros y del cosmos?— preguntó Sasuke.
—Bueno…eso se debe a qué mi hija es la nueva reencarnación de Athena— soltó la bomba. Dejando en estado de shock a sus estudiantes.
—¿Co…cómo…?, ¿Dónde está?…— preguntó Naruto. Fue ahí que el rostro de Kakashi reflejó una gran angustia.
—Yo…no lo se… cuando apenas nació la separaron de mi lado. Dese entonces no eh parado de buscarla y yo…ya había perdido a su padre unos meses antes de que ella naciera…— la voz de Kakashi comenzó a quebrarse y lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos. Ambos chicos se miraron. Sintiendo un profunda tristeza por su sensei.
—Kakashi-sensei, nos hubiera dicho que tenía una hija desaparecida, nosotros lo hubiéramos ayudado a buscarla…¿Verdad Sasuke?—
—Por supuesto que si. No sé preocupen Kakashi-sensei, lo ayudaremos a buscar a su hija, la encontraremos, la traeremos de regreso y luego nosotros cumpliremos nuestro deber de protegerla de todo peligro.— dijo Sasuke.

Lo dicho por sus dos alumnos sorprendió de sobremanera al peliplata.

— Kakashi-sensei, dijo que el padre de su hija murió  unos meses antes de su nacimiento. ¿Eso quiere decir que usted es un doncel…?—preguntó Naruto, recibiendo un asentimiento por parte de su sensei.
—En ese caso no se preocupe, su secreto está a salvó con nosotros—volvió a decir Naruto con una sonrisa sincera que tranquilizó a su sensei.
— Entonces, ésto quiere decir que lo que le dijiste a Kakashi sobre cómo escaparon de esos bandidos es mentira. ¿O me equivoco Sasuke?— cambio rápidamente de tema Hiruzen.
— En realidad no fue del todo mentira…Naruto si despertó primero y me defendió mientras yo estaba inconsciente, pero cuando desperté, llamé a mi armadura y me encargué de esos malditos con una sola de mis mejores técnicas antes de traer a Naruto de regreso a la aldea— respondió Sasuke como si lo que acababa de contar fuera lo más normal del mundo, dejando con la boca abierta a Kakashi y a Hiruzen y con una gota de sudor estilo anime a Naruto
—Igual pienso que fuiste un poco exagerado con eso Sasuke…— dijo el rubio con mechones rojos.
—No exageré para nada,  esos malditos planeaban venderte a Kiri y te dejaron al borde de la muerte…además, los dos sabemos que ninguno de los dos tiene su verdadero poder ahora…—
—¿Cómo que ninguno de los dos tiene su verdadero poder aún?— preguntó un sorprendido Hiruzen.
—A lo que Sasuke se refiere es que, como ambos acabámos de recordar nuestras vidas pasadas, no despertamos todo nuestro cosmos aún, sin mencionar que aunque hubiéramos despertado todo nuestro cosmos, tendríamos que entrenar desde cero para poder controlarlo o haríamos una devastación total en toda la zona—
—¿Qué tan devastadora sería?— preguntó Kakashi.
—En es estado en el que nos encontramos ahora, arrasariamos fácilmente con un cuarto de la aldea cada uno. Ya que no contamos con todo nuestro cosmos— dijo Sasuke, dejando sin palabras a los dos mayores. Si en su estado actual podían causar tal grado de devastación, no querían imaginarse como sería cuando posean todo su poder.
—Bueno…dejando el tema de nuestras vidas pasadas de lado. Jiji, ¿Cuando planeaban revelarme quienes fueron mis padres?—
—¿De qué hablas Naruto?— preguntó Hiruzen, sudando frío.
—No trates de verme la cara de idiota, porque no lo soy. ¿Cuándo planeaban decirme que soy el hijo del Yondaime Hokage y de la princesa Uzumaki, más conocida como la habanero sangriento?— dijo muy serio Naruto, dejando a todos los presentes muy sorprendidos.

A Kakashi y a Hiruzen por el hecho de que Naruto supiera exactamente quienes fueron sus padres, y a Sasuke por saber quiénes fueron los padres de su amado. Por la reacción de los dos adultos, Sasuke supo que ambos sabían esa verdad. Entonces muy molesto, y para sorpresa del resto de los presentes, dijo.

—¿Cómo se les ocurre ocultar semejante información? ¿Tienen alguna idea de lo mucho que le pudieron evitar a Naruto si se supiera quienes fueron sus padres? ¿Qué pensaban, mantenerlo en la ignorancia el resto de su vida acaso?—
—Sasuke, cálmate…de segu-— trató de calmarlo Naruto, pero fue interrumpido por Sasuke.
—No me pidas que me calme Naruto. Toda tu vida fuiste tratado como un despojo humano por la gente ignorante que no sabe diferenciar entre el prisionero y el carcelero. Fuiste tratado como si no fueras humano y soy testigo de muchos de los maltratos de la gente de ésta aldea a tu persona. No tienes idea de lo impotente y molesto  que me sentía cada vez que la gente te maltrataba, tanto física como verbalmente, y yo no podía hacer nada por no ser lo suficientemente fuerte para ayudarte. Si la gente hubiera sabido eso, no digo que tú vida hubiera Sido color de rosa. Después de todo, los humanos no somos perfectos. Pero al menos la situación no hubiera Sido tan grave! Incluso una vez te encontré en un charco de tu propia sangre en un callejón cuando éramos niños. NIÑOS Naruto!!! ¿Cómo carajos quieres que me calme cuando TÚ, la persona más importante para mí, tuvo que pasar por algo que claramente pudo en cierto grado evitarse?!— dijo Sasuke, claramente molesto por todo lo que a su amado le había tocado vivir.

Kakashi e Hiruzen estaban sorprendidos de que Sasuke hubiera tenido esa reacción al saber la verdad de los padres del rubio pelirrojo. Estaban claramente arrepentidos por no haber podido ser capaces de proteger a Naruto. Y muy sorprendidos de que Sasuke asegurará que Naruto era la persona más importante para él.
En cuanto al Uzumaki. Bueno, él era un mar de emociones en ese momento. Estaba sumamente molesto y triste por todo lo que le había tocado vivir desde muy temprana edad. Pero también estaba muy asombrado y conmovido por las palabras de Sasuke en cierto modo. Eso le demostraba que es ésta vida también fue muy importante para él caballero de Libra. Aún sin tener sus recuerdos, se había mostrado preocupado por él desde el inicio. Viendo a Naruto más allá de lo que la gente opinar. Tal y como había sucedido en sus vidas pasadas cuando se conocieron. Además de que había asegurado que era la persona más importante para él Uchiha, lo que hizo que inevitablemente el Uzumaki se sonrojara.

—Tranquilo Sasuke…estoy seguro de que tienen una buena explicación para no haberme lo dicho.…—dijo tranquilamente Naruto, con una sonrisa que logró calmar al Uchiha.
—No te dijimos ni revelamos nada porque tus padres hicieron muchos enemigos en vida. Principalmente Kiri y Kumo. Si la información de que Minato y Kushina tuvieron un hijo hubiera llegado a ellos, habrían intentado secuestrarte por eso, además de las sangre de tus clanes y a el echo de que eres un Jinchuriki. Si ocultamos la identidad de tus padres fue para protegerte— dijo Hiruzen.
—Aunque lamento mucho no haber podido protegerte de de la gente y ninjas de nuestra propia aldea— dijo un claramente muy arrepentido Kakashi.

Entonces el semblante de ambos jóvenes se ablando. Entendían las verdaderas razones por las que su sensei y el anciano Hokage hicieron lo que hicieron. Naruto miró a Sasuke con una sonrisa y dijo.

—¿Lo vez?… Te dije que de seguro había una buena razón para lo que hicieron—
—Si lo se, tal vez me deje llevar un poco por el enojo…—
—¿Solo un poco?— dijo burlonamente Naruto.
—Bueno…tal vez bastante…— dijo Sasuke a regañadientes. Sacándole una risa a los presentes y liberando un poco la tensión del momento.
— Bueno Naruto. Ahora que sabes la verdad sobre tus padres, te daré tu herencia. Entre ella las llaves del complejo y la mansión Namikaze - Uzumaki. Si te parece, revelaremos más adelante la verdad a los civiles. Esperemos a que seas chunnin, así no podrán meterse en tu vida ni intervenir en tus decisiones. Además que cuando sean chunnin, tanto tu cómo Sasuke podrán volverse los jefes de sus respectivos clanes y ocupar los lugares que les corresponden en el consejo—

Antes de que alguno pudiera responde, entró uno de los ninjas médicos que atendió a Naruto. Una mujer, que aparentaba unos veintitantos, piel clara, cabello castaño y ojos oscuros. En su rostro se veía una sonrisa amable.

—Lamento interrumpir. Que bueno que ya estés despierto Naruto. El antidoto ya hizo efecto y no tienes ninguna herida grave. Lo que significa que ya puedes irte a casa— lo dicho por la mujer alegró a todos los presentes. En especial a Naruto.
—¡Genial-ttebayo!— dijo el rubio pelirrojo con gran alegría.

*Time skip*
Luego de salir del hospital y de que el Sandaime Hokage le diera las llaves de su nueva casa junto con su herencia a Naruto, éste se dirigió allí acompañado de Sasuke a insistencia del Uchiha. Sasuke sabía que ésto no sería fácil para su amado compañero. Así que decidió acompañarlo para ser su soporte si el rubio pelirrojo llegaba a desmoronarse. Llegaron allí aproximadamente en veinte minutos.
Estaba de más decir que por fuera la casa parecía sacada de un sueño. Era enorme. Pero al intentar abrir la puerta, ésta parecía no dejar siquiera que la llave entrara en la cerradura. Confundiendo a ambos chicos de sobremanera.

—(Kurama, ¿Sabes porqué la llave no entra en la cerradura?)—
—Eso se debe a qué tus padres crearon y colocaron un sello para que no  cualquiera pueda entrar a la mansión. Deja caer unas gotas de tu sangre en la llave e intenta de nuevo— Naruto hizo lo que el gran zorro le dijo. Y para su sorpresa, ésta vez si pudo abrir la puerta.

Si por fuera la casa era hermosa, por dentro lo era aún más. Por fuera era una casa estilo japonés tradicional pero por dentro era una especie de mezcla bien equilibrada entre lo tradicional y lo moderno. Sorprendentemente, no había una sola pisca de polvo en ningún rincón. Pudo ver fotos de sus padres en distintos lugares de la casa.

Se acercó a un mueble que había en el comedor y vio lo más cercano a una foto familiar, su madre embarazada sentada en el sillón y su padre recostado sobre el vientre de su madre. Una escena realmente conmovedora. Naruto no pudo evitar que una lágrima recorriera su rostro y apretó el cuadro contra su pecho. Estaba decidido, ese cuadro lo pondría en la que sería su habitación.
Luego de unos minutos en los que Sasuke decidió darle su espacio a Naruto, ambos jóvenes comenzaron a recorrer el resto de la casa. Fueron a ver las habitaciones. La primera habitación que vieron tenía en el centro una cama de Dos plazas con sábanas blancas y almohadónes rojos, paredes color beige, en las esquinas había dos linternas y había una gran ventana con cortinas que daba a un hermoso jardín estilo japonés. Supusieron que esa era la habitación de invitados.

La segunda habitación, la cual supusieron era la habitación principal, tenía una pared color caoba y las otras color beige. Una cama de Dos plazas con sábanas blancas y naranjas y almohadónes del mismo color con un hermoso bordado. A ambos lados de la cama había dos mesas de luz. Colgando del techo habían dos lámparas que complementaban la luz natural que entraba por el ventanal que había a la izquierda de la cama.

La tercera habitación que vieron era una en cuya puerta había un cartel que decía: "Habitación de Naru-chan". Naruto tembló un poco al abrir la puerta de la habitación. Cuando entraron vieron una hermosa habitación con muebles blancos, paredes color azul piedra con decoraciones de estrellas y repleta de peluches y juguetes. A los chicos se les estrujó el corazón. Estaba más que claro que ambos padres del rubio pelirrojo lo habían esperado con todo el amor del mundo.

Para ese momento, la carga emocional fue demasiada para Naruto, quién cayó de rodillas al suelo con el rostro empapado en lágrimas. Sasuke rápidamente lo abrazó y con suaves caricias intentó consolarlo.

—No reprimas tu llanto…desahógate…no te juzgaré— entonces el llanto de Naruto se intensificó y casi entre gritos decía.
—¡¿Por qué?!…¿Por qué la vida es tan injusta?…¿Por qué los dioses están empeñados en hacerme sufrir?…¿Por qué me tuvieron que arrebatar a mis padres?… Dohko, por favor. Júrame que no te irás de mi lado pase lo que pase…por favor…no quiero perderte a ti también Sasuke…— su voz fue debilitándose hasta volverse un susurro.

Al caballero de Libra se le rompió el corazón al ver a su amado tan destrozado emocionalmente. Acariciando su espalda y cabello, sin dejar de abrazarlo, Sasuke susurro tres simples palabras que para Naruto significaron mucho.

—Te lo juro— permitiendo que Naruto siguiera desahogandose.

Aproximadamente veinte minutos después, rompieron el abrazo para continuar recorriendo la casa. Naruto agradecía enormemente el haber cedido a las insistencias  de Sasuke de acompañarlo. Llegaron al que parecía ser el despacho de Minato. Al igual que el resto de la casa, todo se encontraba perfectamente ordenado. A excepción de un sobre en el escritorio. Al abrirlo, la sorpresa volvió al rostro de Naruto y las lágrimas amenazaron nuevamente con salir. Se trataba de una carta de su padre que iba dirigida a él.
"Querido hijo:
Si estás leyendo esta carta significa que durante tu nacimiento algo salió mal y tanto yo como tu madre perdimos la vida. Si ese es el caso, perdóname mi pequeño. Perdóname por haber puesto sobre tus hombros la pesada carga de ser un Jinchuriki. Pero si lo hize fue porque siempre confié en que el Kyubi te protegería en caso de que tu madre y yo llegáramos a faltar. Siempre confié en que tú usarías ese poder para hacer el bien. Supe y confío en que algún día lograrás grandes cosas. En otras palabras, confié y aún confío en ti hijo mío.
Déjame decirte que si estás leyendo ésto, solo hay una sola cosa de la que me arrepiento. Y eso es no haber Sido capas de proteger a tu madre y el haberte dejado solo. Se que de seguro hay personas que te apoyan, que te cuidan y que están contigo. Así como se perfectamente que hay personas que de seguro te tratarán mal por el simple hecho de ser el Jinchuriki del Kyubi. Se que de seguro el Sandaime, Kakashi, Jiraiya-sensei (tu padrino) y Tsunade-sama (tu madrina) cuidan muy bien de ti, aunque tú no lo notes. Y eso me trae gran calma.
Aunque (y hablo también por tu madre cuando lo digo) me hubiera encantado verte crecer, escuchar tus primeras palabras, ver tus primeros pasos, llevarte a tu primer día en la academia, ayudarte a entrenar cuando me lo pidieras, me hubiera encantado verte venir conmigo para que yo te defendiera de los regaños de tu madre. Me hubiera encantado estar contigo aló largo de tu vida, en cada uno de tus cumpleaños. Pero él hubiera no existe.
Hijo quiero que sepas que las cosas más maravillosas que me pasaron fueron conocer a tu madre y enterarme que sería padre. Por dios, cuando tu madre me dijo que estaba embarazada de tí fue uno de los días más felices de mi vida.
Aquí en mi despacho, tras un cuadro en el que estoy con tu madre verás que hay un sello de almacenamiento en el que encontrarás un pergamino que contiene todo lo que debes saber, tanto sobre el clan de tu madre como del mío.
Espero haber tenido al menos la oportunidad de al menos tenerte entre mis brazos antes de morir. Nunca olvides hijo mío, mi pequeño, que tu madre y yo te amamos con todo el corazón.

Te quiere mucho, tu padre, Minato Namikaze"

Una lágrima traicionera recorrió el rostro de Naruto tras leer la carta de su padre. Se fijó en el cuadro que su padre le había mencionado y en efecto, ahí encontró un sello de almacenamiento del cual sacó un pergamino mediano en el cual pudo identificar aún más sellos de almacenamiento. Decidió que lo vería luego. Ahora lo único que quería era descansar. Fueron muchas emociones para un solo día.
Siendo acompañado por Sasuke, se dirigieron a la habitación principal en la cual ambos se recostaron en la cama para descansar. Con todo lo que había pasado, Sasuke no quería dejar solo a su amado Shion solo ni por un segundo. Así que abrazados y con la luna y las estrellas como únicos testigos, ambos jóvenes quedaron profundamente dormidos.

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Hola! Lamento la demora pero aquí está el nuevo capítulo. A qué no se esperaban que Kakashi tuviera una hija y que ésta fuera la nueva reencarnación de la diosa Athena XD.
Bueno espero que éste capítulo sea de su total agrado. Muy pronto hará su aparición la diosa Athena y despertará un nuevo caballero dorado
Hasta pronto!!