Capítulo V: Acostumbrarse al Futuro

Capítulo V: Acostumbrarse al Futuro

Después de que se sintiera abrumado por aquella tensa discusión, quizás él se lo estaba sobre-pensando demasiado cuando notó que las distintas integrantes de las Alas que conformaban el "Nirvana" lo querían para sus respectivas tareas, él había tomado asiento en una silla ofrecida por un grupo de chicos, a los cuales no había visto. Estaba confundido, mareado, perdido, deseaba no haberse metido en eso y más de que no lo presentaran frente a todo ese grupo que quería, al parecer, "llevarse una parte de él" para cumplir con sus deseos. O quizás era todo producto de una imaginación que solo buscaba perturbarlo y volverlo un paranoico. Sí, podía ser esa la segunda opción y sin mucho que señalar, ya que entre eso y que la gente seguía discutiendo, se percató de que aquellos jóvenes estaban a su lado. Notó y sintió la mano de un muchacho rubio con uniforme militar y una especie de gorra de plato Oficial color café, una que le resultaba del estilo al Ejército Británico pero no era, al 100% correcto de su definición y comparación, ya que éste pertenecía, por lo que pudo leer en uno de sus parches que traía consigo, "Tarak"...

Tarak, qué nombre más curioso, ¿dónde lo había escuchado?. Ese nombre le hacía reverberar la cabeza, queriendo hallar su significado hasta que la mano del citado se posó en sus hombros, llevando a que Gabriel lo mirara a los ojos.

- Oye, chico, ¿estás bien?.- Preguntó, notando que estaba pálido. Pasó su mano por la frente y sintió el frío que le recorría.- Tranquilo, ¿sí?. Tranquilo, todo está bien.- Llevó la calma, oyéndose su voz en medio de todo el griterío que aún continuaba haciéndose presente en el Puente. Alzó la cabeza, miró a su alrededor. Aquello no tenía fin, llevando a que se mordiera los labios y detrás suyo vio que llegaban los otros que iban a su lado, habiéndose tardado un poco más en arribar. El rubio notó a su alrededor todo lo que ocurría y les hizo una seña a los otros que acababan de llegar, tratándose de dos varones, al igual que él, siendo uno de cabello negro picudo y el otro lo tenía largo, del mismo color que el otro chico y de tez morena.

- ¿Quién...Quién eres tú?.- Fue la pregunta que le hizo el chico al rubio.

- Me llamo Bart Garsus.- Se presentó el rubio.- Soy de Tarak, capturado por las Piratas cuando atacaron la nave en la que íbamos mis amigos y yo.- Mostró a los dos chicos que iban con él.

- Yo...Yo...Yo necesito...- Decía el joven entre jadeos y confusión, siendo detenido por aquel rubio de nombre Bart Garsus.

- No, no, no, tú te quedas aquí, sentado y esperas a que te recuperes...- Miró a su alrededor, nuevamente.- Y de que se calme todo el griterío de este lugar.- Pidió con seriedad.

- "This is the Dawning of the rest of our lives".- Volvió a recitar aquella frase de una banda de rock que solo él conocía, la cual llegó hasta los oídos del peli negro picudo.

- ¿Y esa canción? ¿Dónde la has sacado?.- Preguntó aquel muchacho de cabello azul oscuro y ojos café, mirándolo con curiosidad.

- Espera un momento, Hibiki.- Pidió el que debía de ser un médico, quien tenía largos cabellos que le cubrían el lado izquierdo de su rostro y bajaban por la nuca. Éste se acercó y pasó sus manos por el cuello del chico, sintiendo las pulsaciones. Luego bajó la cabeza y pudo percibir los latidos de su corazón. De ahí, éste dirigió la mirada hacia donde estaba el peli negro.- Escúchame, chico, necesito que me mires, ¿sí?.- Pidió y el otro asintió.- Bien, soy el Dr. Duelo McFile, ahora miembro del "Nirvana" junto a Hibiki y Bart. Te contaría la historia pero tu prioridad es más importante.- Señaló el médico, quien le hablaba al muchacho con suma profesionalidad.- Dime tu nombre.

- Gab...Gab...- Decía el peli negro con dificultad por el nerviosismo y la tensión reinante.

- ¿Gab?. Vaya, nunca escuché ese nombre.- Señaló Bart con asombro.

- No, yo creo que dijo Gabo.- Alegó Hibiki, tratando de descubrir el nombre completo.

- Gabo era un títere rival de "Los Simpson", quien llegó a quitarle todo hasta "Tommy y Daly", teniendo que reemplazarlos.- Señaló el peli negro, riéndose de ese recuerdo.- Jajajajaja: "Obrero y Parásito", los favoritos de Europa Oriental.- Señaló, mientras que se veían imágenes de dicha caricatura.

https://youtu.be/7QAqX-TJ1Ho

- ¿Qué rayos es eso?.- Preguntó Hibiki, asombrado por lo que acababa de oír. Acto seguido, el chico de cabello azul oscuro se aclaró la garganta, mirando al presente.- Bueno, amigo, para empezar, te recomiendo que te tranquilices y espera a que todas ellas dejen de pelear.- Respiró hondo y pudo notar que el clima social no parecía calmarse hasta que oyó los pasos firmes de Calessa, quien se aproximó hasta el Centro del "Puente" y miró a todas las que estaba discutiendo con seriedad, pisando con fuerza el suelo.

- ¡SILENCIO!.- Ordenó, el eco retumbó por todo el "Puente". Magno miró a la Sub-Comandante con seriedad, bajó un poco la cabeza, reconociendo que ese era el deber que toda Oficial de Alto Rango debía de llevar a cabo, mientras que se notaba, en el rostro de la morena peli plateada, una expresión de pura seriedad y de querer recuperar el rumbo perdido. Aquel grito que pegó llevó a que Gabriel pegara un respingo, un susto que lo hizo saltar de la silla, siendo agarrado por Bart.- ¡¿Creen que así vamos a solucionar las cosas?! ¡¿Discutiendo sobre qué puesto darle al nuevo?! ¡Demuestren un poco de respeto y subordinación ante mis órdenes junto a las de "Okashira" y no vuelva, JAMÁS, en discutir por una tontería así. Él sabrá qué camino escoger, no lo podemos presionar y más al tratarse de una persona que acaba de despertar de un sueño criogénico y que está perdido, confundido y asustado.- El tono, ahora, sonaba más calmado pero sin dejar de reflejar la seriedad del tema en el que estaban sumergidos.- Ahora, demuestren tener un poco de respeto y no vuelvan a pelearse por algo así: Recuerden contra quiénes luchamos.

- Vaya, sí que lo consiguió.- Quedó el peli negro asombrado al ver lo que Calessa había conseguido, dominar a las que se peleaban por una tontería.-

- Y ahora que las cosas se han calmado, vamos por partes.- Pidió Duelo, recuperando el puesto perdido, en el sentido de lo que era el interrogatorio.- 

- Es verdad, Doc. Para empezar, ¿cómo te llamas?.- Deseó saber el de cabellos azul oscuro.

- Gabriel...Gabriel Lombardo.- Respondió con cierto cansancio, mirando a los tres.

- Muy bien, amigo. Un gusto en conocerte. Yo soy Bart Garsus, Oficial Cadete, Ciudadano de Primera Clase del Planeta Tarak y miembro de una acaudalada familia dedicada a la industria alimenticia.- Se presentó el rubio ante él, dándole la mano a Gabriel, quien lo miró con ciertas dudas.- ¿Eh? ¿Pasa algo?.

- No, no, para nada, Bart. Es un placer conocerte.- Respondió el peli negro, estrechando su mano con la del rubio.

- Yo soy Hibiki Tokai, Operario Mecánico y Ciudadano de Tercera Clase de Tarak.- Añadió el chico de cabello azul oscuro.

- Y yo soy Duelo/Duero McFile, médico de la nave y pertenezco a la misma Clase que Bart.- Se sumó el joven de largos cabellos negros como la noche.- Ahora, déjame ver si tu pulso cardíaco está bien. ¿Cuántos años tienes?.-

- 17 años.- Respondió Gabriel, mientras que el joven tomaba un estetoscopio y sentía latidos de su corazón.

- Mmmmm, bien, muy bien, no veo ningún problema en tus latidos. Estás bien ello y más porque Paiway ha sido de gran ayuda.- Remarcó Duelo, reincorporándose del suelo.

- Y se lo agradezco muchísimo a ella. Estoy en deuda.- Alegó el peli negro ante toda la ayuda que la Enfermera había realizado, sobre todo la operación para quitarle el Asbesto de los pulmones.

Él tenía la mirada algo caída, perdido en sus pensamientos mientras que miraba el suelo, luego a un lado, después a otro, ya que no podía establecer un contacto visual con aquellos que tenía a su lado. Podía notar que Hibiki y Bart deseaban hablar con él pero se mantenía reservado, callado y hasta perdido por si llegaba a decir algo que pudiera afectar la conversación. Respiró hondo, los mareos se habían detenido, por lo que se puso de pie y caminó hasta donde se hallaba el Tramo Central del Puente, el cual daba hacia los grandes ventanales de la nave "Nirvana", reflejando el Espacio, vasto y gélido, sus Estrellas y Planetas con las Galaxias. Un cometa que pasó volando con su estela gélida que desaparecía sin más. Las palabras que Gabriel trataba de articular, tender su mano hasta el vidrio y querer escapar, batir las alas, sintiéndose como un ave presa en la jaula, le llevaba a todo. 

Creía que allí, en algún punto del Universo, encontraría a Lucía, a su amada "Estrella de la Noche", aquella que le hacía sonreír, reír y sentirse vivo. Pero ¿estaría viva? ¿Congelada?. Nadie lo sabía. Solo podía respirar hondo, dejarse llevar por los recuerdos de su vida pasada. ¿Acaso habría alguien vivo de su familia?. No, imposible. Todo ya habrían perecido después de 220 años y eso era algo que le atormentaba a más no poder. 

- ¡Gabriel!.- Le llamó Hibiki al peli negro, pero éste no respondió.- ¿Qué le pasa?. Iré a verlo.

- ¡Hibiki!.- Oyó la voz de una pelirroja, quien bajaba corriendo las escaleras hasta alcanzarlo junto a una chica rubia que venía con ella.

- ¡Dita, Jura!.- Reconoció el joven a las dos muchachas que venían hasta allí.- Vengan, vengan a conocer al nuevo miembro del "Nirvana".

Gabriel escuchó los pasos de la primera de las dos chicas: Una pelirroja de ojos azules, quien llegó hasta allí, abrazando a Hibiki con fuerza, llamando la atención del peli negro y luego ésta enfocó su mirada en éste.

- Vaya, vaya, tenemos a otro Alienígena con nosotras aquí.- Remarcó la chica, tendiendo su mano hacia el joven.- Mucho gusto en conocerte: Me llamo Dita Liebely, Piloto de Combate de los "Dread".- Se presentó ella, acercándose, estrechando su mano con la del muchacho, aunque, para él, al escuchar esa palabra, llevó a que alzara una ceja, confundido. 

- ¿Un alienígena?. Espera un momento. ¿Qué le pasa a esta pelirroja?. No lo entiendo. Además ¿hay otro más al que llaman así?".- Buscó con la mirada a los tres chicos que se encontraban allí, examinando a cuál de todos ellos era llamado "Alienígena". Por su cabeza pasaban varias preguntas pero no obtenía respuestas. Ya con todo el griterío en el que estuvo metido en el medio, esperando a ver con quién iba a estar en las distintas zonas del "Nirvana" como apoyo u Operador de alguna Sección. 

Notaba el temor en su cara, las fábulas podían ser cualquiera que uno tuviera para contar, con excepción de que estuviera mintiendo. Él solo se limitaba a respirar profundo para evitar caer al "Vacío" emocional, su Existencialismo, mientras que el corazón lo llevaba hacia los recuerdos del Pasado: Las calles de Buenos Aires en el Verano, el olor a los árboles después de la lluvia, el ir a jugar al fútbol con sus amigos, su familia, Lucía...Tan hermosa, tan radiante como el Sol. Su "Estrella de la Noche", aquella de cabellos negros y brillantes que parecían habían sido moldeados por una Diosa. ¿En dónde estaría?. Un sentimiento de culpa apareció en su interior, debiendo haber dejado a Paiway con su búsqueda de datos. Quizás estaría viva y la podría ver pero ¿y si no?. Aquellas dudas lo ponían contra la pared, haciendo que temiera por la vida de ella.

Pero, con respecto al otro asunto, miró a la chica pelirroja que le había llamado "Alienígena". ¿A qué se debía ese término?. Él no era un extraterrestre como los que pintaban en las películas como "Star Wars", sino que era un Humano, aunque, con la diferencia de que él pertenecía a los Siglos previos a la guerra entre hombres y mujeres. Notó la emoción y curiosidad de esa muchacha. Deseaba saber quién era, mientras que notaba a Hibiki, el cual trataba de no reírse al escuchar esa palabra.

- Dime, ¿cómo te llamas, Alienígena?.- Deseó saber ella.- Mi nombre es Dita Liebely, Piloto de los "Dreads".- Se presentó ella, tendiendo su mano, cosa que aquello fue atestiguado por Meia, la cual se acercó hasta ellos.

- No deberías establecer contacto con él, todavía, Dita, está perdido, confundido por haber despertado hace poco.- Resaltó la peli celeste, cruzada de brazos y mirándolos con seriedad.- 

- ¿Qué?. Pero si no parece hostil. Míralo.- Señaló la pelirroja, tomándolo del rostro.- Jejejeje, parece que alguien no puede hablar. ¿Qué es lo que tienes, amigo Alienígena?.- Preguntó y de ahí lo soltó.

- Me llamo Gabriel. Gabriel Lombardo.- Se presentó, finalmente, siguiendo el camino correcto y no quedando como un cobarde.- Tengo una duda: ¿Ella está bien?. No es por ofender.

- ¿Qué has dicho?.- Se acercó Hibiki, cambiando su expresión de risa a una de seriedad.- 

- No, no, no, me has entendido mal, yo pregunté si ella está bien en el sentido de por qué me llama alienígena.- Intervino Gabriel, levantando las manos en señal de pedir disculpas, si es que las había.

- Oh, de eso, jajajajaja, bueno...- Hibiki volvió a reírse y le rodeó con uno de sus brazos, en señal de iniciar la camaradería.- Dita también me dice "Alienígena" ya que, cuando me capturaron, al igual que a Bart y Duelo/Duero durante el ataque al "Izakuchi", ella me considera así pero está bien. Menos mal.- En ese momento, se le acercó al chico para decirle algo por lo bajo.- No cometas ese error de nuevo. No es una amenaza, solo un aviso, ya que no tolero que alguien le hable mal a Dita. No querrás conocerme cuando me enojo, amigo.- Le dio ese consejo, mientras que Gabriel alzó la cabeza, asintió en silencio, sintiendo que el sudor le perlaba la frente. De ahí, Hibiki sonrío con tranquilidad y le palmeó la espalda.- Ahora tú también debes de tener tus dudas, ¿no?. Puedes compartirlo con nosotros mientras buscas tu puesto en el "Nirvana".

- Claro sí. De eso no hay problema.- Respondió el peli negro, mientras que caminaba al lado del chico perteneciente a la "Tercera Clase" dentro de la ciudadanía de Tarak.- 

- ¡Genial!.- Festejó Dita al ver que conocerían, más a fondo, al chico de cabello negro.

Sin embargo, para cuando las cosas parecían más tranquilas, alguien más se hizo presente, oyéndose sus pasos sobre el suelo, por lo que todos se giraron para ver a la recién llegada: Se trataba de una chica de largos cabellos rubios, ojos verdes, cuerpo atractivo junto a un vestido negro que remarcaba bien su figura, dejando al descubierto su vientre más los zapatos café, demostrando su elegancia así como también su personalidad.

- Vaya, vaya, vaya.- Dijo aquella rubia, deteniéndose y apoyando una mano en su cintura.- ¿Y este Caballerito de dónde ha salido?.- Preguntó, volviendo a caminar y mirando fijo al recién llegado.

- "¿Caballerito?".- Aquella pregunta que el joven se hizo para sí mismo llamó su atención. Quería cuestionar lo citado pero notó que la muchacha ya estaba frente a frente a él, mirándolo fijo, "intrigada", "curiosa". Su dedo índice de la mano izquierda apoyado sobre el pómulo homónimo, mientras que lo "analizaba" con interés.

Él alzó la mirada y pudo comprobar de qué se trataba el "asunto", notando aquella mirada que tenía la rubia consigo.

- Disculpe, ¿todo está bien?.- Deseó saber el chico de cabello negro, "intrigando" a la que tenía frente a él.

- Sí...- Jura lo examinaba de pies a cabeza, murmurando por lo bajo, demasiado "curiosa".- "Nada mal. Nada mal".- Pensó.- "No es como Hibiki, lo supera por unos centímetros en altura pero....Jejejeje, ya tengo con quien divertirme, un segundo "Compañero de Juegos".- Siguió pensando para sus adentros.

- "La concha de la lora. ¿Qué le pasa a la rubia? ¿Se piensa que soy un objeto? ¿Una estatua?".- Pensó Gabriel con una profunda respiración.

- Jura.- Oyó la chica la voz de Barnett, quien se dio la vuelta.

- Bonito nombre. ¿Es de Alemania?. Suena Germano o incluso Nórdico. Quizás de Noruega.- Remarcó el peli negro por eso, llevando a que ambas lo miraran intrigadas.

- ¿Qué has dicho?.- Preguntó Barnett.-

- Por el nombre de tu amiga.- Respondió Gabriel.

- Ahh, ¿con que esas tenemos?.- Deseó "saber" Jura, mientras que desplegaba su "Arsenal" de narcisismo y carisma que le caracterizaban, cerrando los ojos y levantando una mano hasta llevarla hasta el pecho.- Déjame presentarme: Soy Jura Basil Elden, Piloto de Combate de los "Dread" y perteneciente a la "Vanguardia" de Barnett.- Al decir aquello con suma elocuencia y palabras derivadas, desde su punto de vista y vocabulario que sonaban más bien a la afinidad y gusto por la elegancia y belleza misma, Gabriel supo que estaba ante alguien que podía ser una amiga o una futura rival que viviría molestándolo.

Solo el tiempo lo diría.

De ahí sintió las manos de Jura sobre sus hombros, mirándolo con aquellos ojos verde claros, donde podía notarse que le tenía algo en mente.

- Dime una cosa, ¿hace cuánto que eres miembro del "Nirvana"?.- Deseó saber ella.

- Acaba de despertar después de estar 220 años congelado, Jura.- Le informó Meia al respecto.- No lo perturbes.- Alegó con su tono serio.-

- ¿Qué? ¿Perturbarlo?. Jajajaja.- Cerró los ojos aquella rubia y se río.- Pero Meia, yo jamás haría una cosa así. Ni que lo fuera a perseguir.

- Habla por ti misma.- Murmuró Hibiki mirando hacia el suelo y la mirada cansada al ser la "víctima" de Jura, ya que ella siempre lo estaba persiguiendo para que le diera "una semilla de un hombre de Tarak". En simples palabras para que quedara embarazada. Fue entonces que dio un paso al frente, evitando no hacer enojara a Meia, ya que ésta se mostraba fría con respecto a los hombres. Se acercó con franqueza hasta Gabriel y le rodeó con su brazo alrededor de la nuca.- Bueno, amigo, ¿por qué no te sumas y conoces a los miembros del "Nirvana"?. Vamos, no seas tímido.- Le invitó, llevando a que él mirara a su alrededor, todavía un poco confundido y perdido.

- Sí, que venga, así entra en confianza. No tengas miedo, chico.- Le animó Bart Garsus, sonriéndole con calma y así demostrarle que estaba entre buena gente.

Notó que Jura le hacía "ojitos", parte de sus "juegos", mientras que los chicos le invitaban a conocer al resto de la tripulación, por lo que lanzó un suspiro y los miró de frente, con las palabras adecuadas en su mente, listas para salir al exterior.

- De acuerdo. No me vendría mal conocer al resto.- Sostuvo él con calma, mientras que se alejaba de Jura.

- Ahí va alguien con quien poder establecer una amistad, jejejejejeje.- Río la rubia, mientras que Barnett rodaba los ojos.

- ¿No le harás lo mismo que le haces a Hibiki?. Parece que lo asustaste.- Señaló la chica de cabello corto y verde.

- Para nada. Tú tranquila. Sé lo que hago.- Señaló la otra, mientras que caminaba por el "Puente" junto a Meia, ya que habían asuntos por discutir pero dejó que Dita fuera con Hibiki y los otros chicos para que conociera a la tripulación.

Para Jura aquello podía considerarse como un "juego", si es que eso se lo podía llamar de esa manera, mientras que veía a Gabriel alejarse con Hibiki, Dita, Bart y el médico Duelo/Duero McFile. El caso de aquel chico y para él mismo, lo que la rubia le había dicho le intrigaba, deseando no tener nada que ver ni estar involucrado en lo que fuera a tener como proyecto. Respiró hondo al ver que, ahora, estaba manteniendo cierta distancia de la citada. ¿Qué le pasaba por la cabeza?. Fue entonces cuando notó que Dita lo agarraba por detrás, en la zona del cuello, rodeándolo y atrayéndolo hacia donde estaba ella con Hibiki.

- Bueno, Señor Alienígena, ahora que ya estás un poco más tranquilo, dinos, ¿qué tal era la vida en el Siglo XX y XXI?.- Deseó saber la pelirroja con curiosidad, mientras que el joven tomaba su cajita con pastillas "Tic-Tac" sabor naranja. La mano derecha le temblaba un poco y de ahí llevó dos de las citadas a su boca.


- ¿Y eso?.- Preguntó Hibiki con curiosidad.- Qué interesantes compuestos con azúcar.

- De hecho son pastillas.- Respondió Gabriel.

- Oh, como las que comen en Tarak los de mi gente junto a otros alimentos.- Alegó el chico de cabello azul oscuro picudo, llevando a que el peli negro alzara una ceja.- Por cierto, Dita te había hecho una pregunta.- Señaló a su novia, quien se la veía muy interesada y haciendo ojitos con Estrellitas.

Él siguió sintiendo el agarre de la chica, manteniendo una unión junto a Hibiki. Éste levantó su mano, en señal de que se explayara tranquilo, por lo que el joven juntó coraje. No podía estar asustado, temblando como una gelatina al estar rodeado de esa gente. Tenía que abrirse, extender las alas si quería ir progresando, por lo que respiró hondo, exhaló y de ahí buscó las palabras adecuadas para que, así, pudiera expresarse.

- Bueno, ya debes de saber que me llamo Gabriel Lombardo.- Señaló él, pasando su mano por los cabellos, ya que los tenía algo despeinados.- 

- Un nombre muy interesante pero lo oí cuando llegué con Jura hasta el Puente.- Alegó Dita, curiosa al ver cómo se acomodaba los cabellos despeinados.

- Lo que me haría falta sería un peine. Qué lástima que no me traje.- Se lamentó el joven y de ahí sintió que, todavía, tenía varios cabellos congelados, llevando a que le diera una cierta Electricidad Estática.- ¡Agh, la...!.- Iba a lanzar un insulto pero se contuvo.-

- Jejejejeje, eres muy curioso como Hibiki.- Río Dita.- Y ahora, yendo a la pregunta principal: ¿El Siglo XX y XXI cómo era?.- Deseó saber la joven, mientras que iban por los pasillos.

- ¿Cómo explicarlo?. Emmmm, bueno, ni genial ni peor. Todo Siglo tiene sus cosas buenas y malas. No tuvimos la Tercera Guerra Mundial en los Años 70, 80 ni 90, sino conflictos, algunos entre países vecinos o contra grandes potencias. La cultura popular era aceptable, la música, las películas, todo. Pero, lamentablemente, también están sus factores negativos: Corrupción, odio, guerras, terrorismo...Terrorismo...Terrorismo y luego la Tercera Guerra Mundial.- Relató Gabriel y de ahí su andar se detuvo al recordar lo ocurrido en Nueva York, el momento en el que Mundo se había hundido y lo último que veía, antes de que esos edificios se cayeran, fueron los gritos de su novia y amigos, mientras que él trataba de llegar hasta ellos. Al frenarse, casi provocó que Dita e Hibiki s cayeran contra el piso, llevando a que el chico la tomara a su novia y se agarrara de una pared, ayudados por Bart y Duero McFile.

- ¿Gabriel?.- Preguntó el rubio, yendo hacia él, encontrándolo quieto y mirando hacia la Nada.- ¿Estás bien, chico? ¿Qué pasa? ¿Te sientes bien?.- Pasó su mano por el rostro del joven y se percató, al instante, de que sus reflejos volvieron a responder.

- ¿Qué?.- El peli negro se volteó, miró a los que casi había tirado contra el piso.- Oh, chicos, disculpen, en serio, no fue mi intención.- Pidió disculpas.

- Te quedaste congelado un instante cuando nos contabas acerca de la Tercera Guerra Mundial. Debió de ser un momento horrible.- Remarcó Hibiki, yendo hacia él y poniendo una mano en su hombro.- Aún así, ten cuidado, no te quedes congelado tanto tiempo, ¿sí?.- Le pidió y él asintió con la cabeza.

- Sí, es verdad, solo respira hondo, tal y como te lo enseñó Barnett y Paiway.- Continuó Dita.- Ahora, ya que estás recuperado, ven, mientras nos cuentas más sobre ti, te mostraremos a la tripulación del "Nirvana", a los que, todavía, no has visto, empezando por los pasillos.

El primer sitio que alcanzaron se encontraba allí, siendo McFile quien abrió la puerta automática.

[Una lástima que no hayan muchas imágenes del "Nirvana". La de aquí, solo ignoren el fondo de la ciudad y la ventana.].

- Antes que nada, soy Duelo McFile, médico del "Nirvana" y esto de aquí es mi Consultorio. Si tienes algún problema, te puedo dar una mano.- Habló aquel joven de largos cabellos negros, yendo hacia Gabriel.- Dime, ¿cómo estás ahora? ¿Te sientes bien?.

- Por suerte, estoy en buenas condiciones pero gracias, Doctor.- Le agradeció Gabriel a éste, quien asintió en silencio.- Aunque tengo una pregunta.

- Adelante, hazla.- Dijo Duelo, mientras que acomodaba unos archivos en su escritorio.

- Veo que ustedes son los únicos chicos que están aquí en el "Nirvana" pero díganme: ¿Cómo es que acabaron aquí?.- Deseó saber el joven, por lo que Bart le invitó a tomar asiento para que le contaran al respecto.

- De hecho, como bien sabes, somos de Tarak, el Planeta donde los hombres se han instalado. Tanto Duelo como Bart y yo somos Ciudadanos de distintas clases, siendo ellos dos de la Primera y yo de la Tercera. Nos encontrábamos en nuestra nave, el "Izakuchi" donde las Piratas Espaciales nos tomaron por asalto. Fue un combate muy duro pero, al final, nuestros Líderes optaron por separar la nave con el fin de evitar caer prisioneros. Además de que la propaganda ponía a las mujeres como bestias salvajes y...- En ese momento, Hibiki fue detenido por Bart.

- No creo que Gabriel deba conocer lo que se decía de ellas.- Aconsejó el rubio, casi por lo bajo.- Omite esa parte.- Pidió y tras ello el nipón asintió con la cabeza.

- Ellos creían que íbamos a comernos sus entrañas.- Reveló Dita ese dato falso que la propaganda de Tarak imponía sobre sus ciudadanos, llevando a que Bart y Duelo se hicieran un un Face-Palm.

- Ahí va el secreto.- Indagó el médico de abordo.

- Bueno, tampoco es nada "grave", ya que solo era eso: Propaganda.- Remarcó Gabriel, dándole su punto de apoyo a la pelirroja.- No sean duros con ella.

- El punto aquí, Gabriel, es que nosotros fuimos capturados y aquí estamos, sirviendo en el "Nirvana" con nuestras funciones: Bart es Oficial en el Puente, Duelo es médico, además de que monitorea el embarazo de Ezra, la que tú casi chocas cuando escapaste de Meia y yo soy Operario así como también formo parte de la "Vanguardia" para el combate.- Relató Hibiki sobre el contexto vivido y de ahí tocó el tema de aquella chica peli celeste.- Dime una cosa.- EL peli negro alzó la mirada.- ¿Cómo lo ves?. Con respecto a Meia.

- No tengo nada que decir. Hasta no conocerla a fondo, como al resto de ustedes, no puedo dar un juicio crítico. Aunque resalto que es muy Estoica y fría. Se nota que se toma muy en serio su papel.- Dijo el joven y de ahí suspiró.- Espero poder hallar el mío aquí.- Pidió, casi mirando al piso.

- Tranquilo, lo encontrarás.- Le animó Duelo y de ahí se quedó pensativo.- Te propongo algo: ¿Por qué no vas probando con ayudar en las distintas zonas?. Por ejemplo, si yo te necesito para alguna tarea pequeña como administrar los archivos, ayudar en el Ala de Comunicaciones y así sucesivamente. Vas adquiriendo experiencia. Ojo, ninguno es sencillo pero así irás ganando conocimiento y cuando encuentres el puesto que más te interese, podrás unirte al citado.- Remarcó el médico de cabello negro.- Ve haciendo eso pero despacio que nadie asciende de la noche a la mañana.- Continuó el médico con darle su apoyo.

Consideró aquellas palabras como una guía, por lo que alzó la mirada y asintió con la cabeza. Probaría, poco a poco, con distintos puestos hasta ver cuál sería el ideal.

- Eso y que Gascogne quiere entrenarme para que sea Soldado.- Apuntó Gabriel sobre aquella mujer musculosa y de cabello negro.

- Es su afinidad y gusto por las armas, pero descuida, con eso lo veremos más adelante. No puedes ir con un fusil y nada más que eso. No todo es disparar y correr.- Apuntó Dita y estaba en lo correcto.- Además, eres un chico, Gabi.- Dio aquel diminutivo.- ¿No importa que te llame así?.

- No, para nada.- Respondió el joven con calma.

- ¿Y Gabo también?.- Preguntó Hibiki con curiosidad.

- "Tampoco es para tomarme por pelotudo. Además, me hace recordar al títere de ese capítulo de "Los Simpson".- Pensó el muchacho, asintiendo con la cabeza ante el novio de Dita.- No hay problema, Hibiki. Aunque no me confundas con un títere llamado así.- 

- ¿Qué cosa?.- El joven de Tarak se rascó la sien izquierda, confundido al oír esa información.

- Olvídalo, jejeje, no pasa nada.- Alegó Gabriel, mientras que se levantaba, ya que el tour continuaba por el "Nirvana", siguiendo por los pasillos donde se encontraban las otras Dependencias, siendo, la siguiente, el Taller Mecánico donde los "Dreads" eran reparados y recibían actualizaciones en sus formatos tecnológicos. 

En aquel sitio se encontraban varias chicas dedicadas a las labores de reparación y equipamiento de los "Dreads" junto al mantenimiento de la nave. Aquello llamó la atención de Gabriel, quien caminaba cerca de Hibiki y su grupo, notando que el aire estaba cargado del sonido proveniente de las labores llevadas a cabo por las mecánicas e ingenieras.

- "Y decían que las mujeres no podían realizar labores así ¡y miren a las chicas, están haciendo un gran trabajo!. Y no como otros hipócritas que las defienden y luego las ningunean".- Mostró, desde su interior, el respeto que se merecían. De ahí volvió a la caminata, pasando por allí, justo cuando sintió que alguien iba hacia él.

- ¡Con permiso, permiso! ¡Es una situación urgente!.- Pidió una muchacha de lentes, cabello castaño, dos enormes trenzas con moños rosa, un especie de auricular en el oído derecho junto al uniforme naranja con detalles celestes, arremangadas las mangas, guantes blancos, el cuello del uniforme subido además de que podía apreciarse un broche con la imagen de un Oso de Peluche, pantalones del mismo color y unas botas estilo borceguís café.- ¡Abran cancha, chicos!.- Pidió pero, al momento de ir corriendo con un pequeño objeto ovalado en sus manos, no vio que había unos cables conectados al piso, llevando a que tropezara y soltara lo que tenía consigo.

Duelo/Duero se lanzó hacia ella, agarrándola antes de que se golpeara y utilizando los pocos segundos que le quedaban, intentó salvar el objeto que iba cayendo, para desgracia, en la cabeza de Gabriel, el cual recibió el impacto, rebotando y volviendo a elevarse en el aire pero siendo atrapado por Hibiki y Dita. El peli negro, por su parte, quedó atontado por el golpe, dando varios giros y teniendo el escenario completamente giratorio.

- ¡Oh no!.- Exclamó la muchacha mecánica, llevando sus manos hacia el rostro.- ¡Cuánto lo siento! ¡Perdón, perdón!.- Corrió con Duelo hacia donde estaba Gabriel, dando varias vueltas por el mareo.- "Y tenía que caerse eso en la cabeza del chico nuevo. Espero que no haya sido grave".- Pensó con temor, mientras que llevaba una de sus manos hasta la boca.- Chico, chico, ¿estás bien?. Hable, por favor, dime algo.

- "Botes que se agitan. Barco a la deriva".- Recitó aquella frase de una canción que él conocía.

- ¿Eh?.- La chica castaña oscura se quedó confundida.

- Tranquila, Parfet.- Intervino Dita, poniendo una mano en los hombros del joven, siendo ayudada por Hibiki.- Gabi, Gabi, mírame.

- ¿Cuántos dedos ves, Gabriel?.- Pidió Duelo, tomando la visión de él.

- Cinco.- Respondió el joven, todavía mareado.

- Bien, está bien. Solo un poco de conmoción pero ya se le está yendo.- Avisó Duelo.- ¿Dita?.

- Sí, además de que no tiene ninguna fractura en su cabeza.- Respondió la pelirroja.

- Oh, menos mal.- Suspiró la mecánica de nombre Parfet Balblair.- El susto que me pegué al pensar que te había herido. Por cierto, te vi en el "Puente" cuando te presentaron ante la Sub-Comandante Calessa y la Capitana Magno.- Dijo y le tendió su mano.

- Tranquila, no es nada. No hay nada de qué preocuparse.- Llevó la calma y estrechó su mano con la de la joven castaña.- Gabriel Lombardo, un placer en conocerla, Señorita...

- Parfet Balblair, Ingeniera Jefa de los Talleres con la responsabilidad de mantener equipados y listos a los "Dreads" junto al "Nirvana".- Se presentó ella y Gabriel pudo notar que ese tono de voz de la chica sonaba como un verdadero honor en el papel que ejercía. De ahí se giró hacia el doctor.- Y muchas gracias, Duelo/Duero por ayudarme. Ahora, con respecto a lo que llevaba conmigo, ¿saben dónde está Pyoro?.- Preguntó, buscando aquel objeto ovalado y de ahí, a espaldas de Gabriel, pudo notar que el citado estaba activándose, revelando dos ojos con un puntito negro y unas especies de brazos con piernas, dándole un aspecto caricaturesco. 

- Vaya, no me esperaba que fuera a sobrevivir una persona a mi impacto.- Habló el pequeño robot.- 

- ¿Y esta cafetera andante?.- Preguntó Gabriel con asombro.

- ¿Cómo que cafetera?. Mi nombre es Pyoro, soy un robot de navegación. Antiguamente estuve bajo las órdenes de la Flota de Tarak hasta que Hibiki, Bart, Duero y yo fuimos capturados y ahora formo parte del "Nirvana". ¿Tú cómo te llamas?.- Dijo el citado, un tanto "ofendido" por las palabras del peli negro, dando a conocer su nombre.

- Tranquilo que solo era una bromita, ¿sí?.- Pidió el joven.- Mi nombre es Gabriel Lombardo, estudiante de Secundaria. Estuve congelado por 220 años.- Añadió pero sin entrar mucho en detalles.

- Oh, interesante, creo que...Sí, justo aquí tengo tu "Ficha de Información".- Los ojos de Pyoro desaparecieron y mostraron los datos del joven.- Interesante tu historial. Puedo detectar que sufres de Ansiedad por estar en estos nuevos tiempos.- Señalaba el pequeño robot, quien flotaba alrededor de Gabriel y el grupo que lo acompañaba.- Dime una cosa: ¿Cómo es que un chico como tú acabó aquí?. Dices ser del Siglo XXI, ¿no?. 

- Eso es algo que estaré contando con gusto. A Hibiki, Bart, Duero y Dita les he empezado a relatar.

- Ya veo.- Pyoro levantó uno de sus brazos bajo un gesto de curiosidad.- Oh, casi me olvidaba, Parfet.- Se giró y fue hacia ella.- Los datos que me pediste que te entregara.-

- ¡Perfecto! ¡Muy bien, Pyoro!.- Agradeció la castaña Ingeniera y mecánica, mientras que se ponía a trabajar.

- Qué robot más llamativo la cafetera.- Alegó Gabriel, asombrado y de ahí continuaron.

El pasillo finalizaba en un amplio corredor que daba hacia las otras dependencias de la nave, empezando por los carteles que llevaban hacia el Hangar u otras zonas importantes.

- ¿Y este sitio?.- Preguntó el chico de cabello negro.

- Las habitaciones donde descansamos. Las chicas tienen los suyos y nosotros también.- Respondió Bart, rodeándolo con un brazo alrededor del cuello.- Tu habitación ya la podrás ver muy pronto.- Prometió.-

- Te llevarás una sorpresa cuando entres allí.- Le prometió Dita.

- ¿Una sorpresa?.- Se preguntó Gabriel con asombro y alzando una ceja.

- Ya lo verás. Paciencia.- Animó la pelirroja, mientras que reiniciaban el tour.- Además, todavía queda que veas a las demás integrantes de la tripulación: Ya has conocido a Parfet, Ezra, Paiway, Barnett, Meia, Gascogne pero te queda un cierto tramo.- Añadió y de ahí fueron internándose en una zona donde era un poco más oscuro, quizás para darle un toque a ambiente de preparación.

Dentro, el panorama era completamente distinto: Al poner un pie, el ruido de la maquinaria, las bicicletas fijas, las pesas que levantaban las mujeres en ese lugar llamaba la atención, llenando el aire de su poderío. ¿Aquello era un sueño?. Parecía que se estuvieran preparando para alguna guerra y ellas fueran Espartanas. Notó a un par de chicas que hacían bicicleta fija sin detenerse, a pesar de estar, completamente, bañadas en sudor pero no les importaba. Una muchacha de cabello negro hacía deltoides con unas cuantas barras de peso, mientras que otra se hallaba enfocada en los ejercicios cardio-respiratorios. 

Podía sentirse el peso de los ejercicios pero, también, desde una especie de "Jaula de Gladiadores", los gritos de batalla de dos contendientes, siendo apoyadas por sus respectivos grupos, incitaban al combate para ver cuál de las dos era la mejor de todas. Gabriel señaló hacia ese sitio, siendo acompañado por Hibiki y Dita, los cuales se lo enseñaron.

Dándole un aspecto de Arena de Combate de Gladiadores Romanos, desde la parte más alta, Gabriel pudo notar el enfrentamiento entre dos chicas, quienes estaban dando lo mejor, una de cada cual, en una feroz embestida que daría, como resultado, la victoria. Los gritos inundaban el lugar, las aclamaciones y vítores a favor de las contrincantes, mientras que éstas, envalentonadas, se lanzaban cual fieras salvajes para ver quién sería la ganadora. 

- No se puede pasar por aquí. Lo siento.- Le dijo una chica de naranja cuyo flequillo cubría el lado izquierdo de su rostro.- Hay una competencia en estos momentos.

- Oh, qué lástima, íbamos a llevar a nuestro amigo para que pudiera ver aquello.- Se lamentó Bart.-

- No, no, tranquilo, no pasa nada. La próxima será.- Auguró Gabriel y notó que aquella chica tenía el mismo uniforme que las otras que acompañaban a la Sub-Comandante Calessa.- "Deben de ser sus Oficiales,  estos dos más las otras que vi, al principio, también del citado número, son 4. Por ahí hay más pero mejor no digo nada con respecto a que no se puede entrar a la Arena. Sí, mejor, ya que no quisiera causar problemas".- Pensó para sus adentros, reconociendo ese momento, justo cuando estallaban los aplausos y gritos de ovación para una de las competidoras mientras que la otra era retirada para ser llevada a la Enfermería y recibir tratamiento por parte de Paiway.

- Un momento.- Pidió la chica de cabello naranja.- Oh, sí, sí, por aquí, por favor.- Dijo y el tour debió continuar bajo la vigilancia de aquellas dos que respondían a la Sub-Comandante.

- ¿Adónde vamos?.- Deseó saber Gabriel en aquellos momentos.

- La Sub-Comandante ha ordenado de que tu cuarto esté listo para que puedas instalarte.- Le habló la compañera de la peli naranja, una chica de cabello castaño oscuro.- 

- Y además todavía falta unos sectores más para que puedas terminar de conocer el "Nirvana".- Señaló Hibiki.- 

Habían llegado a un sitio de suelo blanco brillante, donde unas cuantas mesas y sillas Futuristas se hallaban desperdigadas por el perímetro junto al sonido que provenía desde las Cocinas y en algunos sitios que ocupaban varias Pilotos de Combate, las cuales estaban tomando un refrigerio antes de continuar con sus misiones asignadas, oyéndose las risas y las conversaciones entre sus compañeras y amigas.

- Wow.- Quedó Gabriel impresionado al tener los enormes ventanales que daban al exterior, hacia el Espacio Exterior, donde podía admirar la belleza misma del Universo.

- ¿Sorprendido?.- Preguntó Dita.- Este es el Comedor, aquí puedes venir a comer y recuperar tus fuerzas. Las comidas que se sirven son muy importantes y nutritivas, en especial si llegas a querer formar parte de las "Vanguardias" nuestras que tenemos al ir a los campos de batalla.

Él no tenía palabra alguna que le ayudara en ese momento, por lo que escuchó los pasos de aquellas chicas que iban hacia él, justo cuando, desde su comunicador, llegaba una señal.

- Muy bien: La habitación de Gabriel está lista.- Anunció.- Por aquí, por favor.- Dijo y lo guiaron hacia su nuevo sitio junto a los demás.

[Nuevo capítulo y Gabriel está empezando a establecer, poco a poco, sus amistades. En este capítulo no habrá votación, ya en el que viene sí lo habrá.

Aprovecho este momento para mandarles saludos y agradecimientos a GrayPadilla8, Alexander_Mond, newmoontonight por los reviews que me mandaron. Muchas gracias, chicos, se los agradezco un montón y en especial por seguir, día a día, esta historia. Vayan preparándose para los demás capítulos y más el que viene, ya que estará más enfocado en los personajes del "Nirvana" y el tema de Gabriel.

También mando saludos y agradecimientos para shadowbellatrix, El Caballero de las Antorchas, LucasAbad0, ElLinternaVerde2814Fy los demás seguidores.

Cuídense, Camaradas y nos estamos viendo en el próximo capítulo.

Que tengan un buen Jueves de mi parte.].

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