Jimin está recién llegado en París, con el firme propósito de sacar su carrera adelante en una de las facultades de negocio más prestigiosas de Europa. Carrera que quedó inconclusa cuando injustamente tuvo que ingresar a prisión.

Jimin vive en un apartamento bastante cómodo, ubicado en un barrio residencial muy exclusivo. El Sr. Park no escatimó en gastos para darle todo lo necesario y más a su hijo para que se sienta cómodo y contento. Sabe que Jimin está sufriendo por el distanciamiento entre él y Jeon y por supuesto desea que se sienta mejor y que logre olvidarse de esa trágica y triste etapa de su vida.

Cada día asiste a la facultad y de a poco se va habituando a su nueva vida. De a poco se va integrando a su nuevo grupo y va conociendo a sus nuevos compañeros de carrera. Aunque solo dentro de las instalaciones de la universidad.

Una tarde, Taehyung, un compañero de su carrera, le comenta que algunos de ellos irán a comer algo después de clases y le pregunta si quiere ir con ellos, ante lo cual Jimin accede con gusto.

Es hora de que empiece a distraerme, piensa.

—Por fin te animas a salir con nosotros —le comenta Taehyung mientras caminan hacia la salida de la facultad.

—Creo que es hora de que empiece a relajarme un poco.

—¿Tienes muchos problemas?

—No realmente. Si comparo mi vida de hace algunos meses, ahora no tengo ninguna otra preocupación más que estudiar —le responde Jimin.

—Y divertirte lo necesario para que no te vuelvas loco con tanto estudio.

—Claro.

—Debemos aprovechar ahora que no nos están atosigando con trabajos y exámenes. Mira que después se pondrá difícil todo esto.

—¡Ey Jimin! ¿Vendrás con nosotros? —le pregunta un entusiasta chico a la salida.

—Así parece —le responde el azabache alzando ambas cejas.

—¿Vienes conmigo? —le pregunta Taehyung.

—Um, traje mi auto.

—Está bien, después puedo traerte para que pases a buscarlo. ¿Te parece?

—De acuerdo.

Entonces Jimin y Taehyung se reúnen con los demás chicos para ir a un bar en donde beberán y comerán.

Al llegar al lugar, se acomodan en una mesa grande que está al final del salón. Jim se sienta en la cabecera de la mesa, al lado de la ventana. Taehyung se sienta a su lado derecho y Luka a su costado izquierdo.

—Hola, Jimin. Qué bueno que hayas podido venir con nosotros.

—Hola Luka —le responde con una sonrisa— necesito distraerme.

—No sales mucho, ¿verdad?

—No. De hecho, es la primera vez que salgo desde que llegué a Paris.

—¿De dónde eres?

—Soy de Seúl. Vivo allá con mi padre.

—¿Y viniste a París solo?

—Sí. Mi padre me alquiló un apartamento y vivo allí, solo.

—Guau. Eso es genial.

—Sí. El apartamento es muy cómodo.

—Podríamos juntarnos allá la próxima vez —interrumpe Taehyung.

—¿En mi apartamento?

—¡Claro! ¿Por qué no?

—Pero...

—Oye Jimin, si la idea no te agrada no tienes que hacerlo. Digo, si no quieres prestar tu apartamento para juntarnos —le aclara Luka.

—No es eso. Solamente quiero asegurarme de que no tendré problemas por eso.

—¿A qué te refieres?

—Nadie podrá llevar drogas. Ni siquiera marihuana.

—Okay. Dalo por hecho —le asegura Taehyung.

—Sí, obvio. Nadie llevará drogas a tu casa —le reafirma Luka.

En ese momento, se acerca el mesero, un joven de unos 25 años aproximadamente quien, muy alegremente, los atiende. En primera instancia, el mesero mira a Jimin y le sonríe antes de querer preguntarle si está listo para ordenar. Sin embargo, Taehyung interrumpe la incipiente conversación y saluda al mesero para posteriormente indicarle que desea pedir una cerveza.

—Yo también quiero una —le pide Luka.

—La misma de siempre, supongo —le dice el mesero, quien ya lo conoce por ser una cliente habitual en el bar junto a su amigo Taehyung.

—Claro.

—¿Y tú? ¿Qué quieres beber? —le pregunta el mesero a Jimin.

—Um, ¿lo mismo?

—Con gusto —le responde el mesero con una gran sonrisa, causando la suspicacia de sus compañeros, los que comienzan a reír.

Jimin los mira y luego baja la mirada. Cuando el mesero comienza a atender al resto de los chicos, Jimin se ríe mientras niega con la cabeza.

—Son unos ridículos —les susurra.

—Creo que tienes un nuevo pretendiente —le comenta Taehyung.

—¡Cállate! —le pide al extrovertido Taehyung.

—¿Otro más? ¡Jimin eres tan irresistible! —lo molesta Luka.

Entonces todos ríen escandalosamente.

—¿Otro más? ¿A quién te refieres Luka? —pregunta Taehyung.

—Ah, no puedo decirlo.

—¡Oh! No nos puedes dejar con la intriga.

—Si sabe que le conté a Jimin, me matará.

—¿Quién es? ¡Vamos Luka, cuéntanos!

El chico de largos cabellos marrones y tez pálida hace un gesto con su rostro indicando que se siente acorralado para hablar.

—Oye, está bien. No tienes que decirnos —le indica el azabache.

—Por supuesto que tiene que decirnos —insiste Taehyung.

—Taehyung... —Jimin intenta persuadirlo.

—Es mi hermano.

—¡Ahh! —exclama Taehyung.

Jimin observa atónito a Taehyung y luego vuelve su mirada hacia Luka.

—No puedes decirle que te dije —le pide Luka a Jimin.

—Um, yo ni siquiera conozco a tu hermano.

—Creo que pronto lo conocerás.

—¿Por qué?

—Me dijo que la próxima vez que te vea se acercará a hablarte.

—¡Noo! —vuelve a exclamar Taehyung.

—¿Qué te ocurre Taehyung? —le pregunta Jimin.

—El hermano de Luka es un bombón.

Luka estalla de la risa. Y Jimin ríe también.

—¿Cuándo me vio? —pregunta el azabache.

—La semana pasada fue a la facultad y tú estabas al lado mío cuando él llegó.

—No lo vi.

—Estabas mirando la pantalla de tu teléfono en ese momento.

—¡Oh! —se lamenta Jimin.

—Pero no te preocupes porque pronto lo conocerás.

—Cómo sabes que yo...

—¿Que cómo sé que eres gay?

—Sí.

—No lo sé. Solamente lo intuí.

—¿Lo intuiste?

—Se te nota Jimin —agrega Taehyung.

Jimin voltea los ojos y ríe.

—Eso no es verdad —dice Jimin.

—Sí, lo es —le confirma Luka.

—¿Lo es? —les pregunta con una expresión seria.

—Sí Jimin. Pero está bien. No te lo decimos como si fuera algo malo. Simplemente es así.

Jimin alza ambos hombros y aprieta sus labios.

—No le diremos a nadie más —le señala Taehyung.

—No tengo problema con que los demás sepan. No es un secreto.

—¿Tu familia sabe?

—Sí, Luka. Mi padre lo sabe.

—¿Y tu mamá?

—Mi mamá murió hace unos años. Nunca lo supo. Bueno, ni siquiera yo lo tenía tan claro en ese entonces.

—Oh, siento mucho lo de tu mamá —le dice Luka.

—También yo —agrega Taehyung.

—Gracias.

Pronto se hace de noche y el grupo decide finalizar el encuentro debido a que al día siguiente deben acudir a clases muy temprano.

Dos semanas después, todo marcha con regularidad en la facultad. Jimin tiene clases todos los días a horario completo. La tarde del jueves, Jimin y Luka esperan por Taehyung en la salida del edificio. Los tres se han hecho muy amigos.

—¿Dónde está Taehyung? —pregunta Jimin..

—Está hablando con el maestro de finanzas. Le fue mal en el examen, ¿te contó?

—Sí. Me dijo que le está costando un poco esa asignatura.

—Mira, ahí viene mi hermano. Te lo presentaré.

—¡Espera!

—¿Uh? ¿Qué pasa Jimin?

—Um, nada.

—¡Hola! —Saluda el hermano de Luka.

—Hola Gabriel. Él es Jimin. Jimin él es mi hermano Gabriel.

—Hola —lo saluda Jimin con una sonrisa de esas que matan.

—Hola Jimin —le responde con una voz grave y la mirada clavada en los labios del azabache.

—Iré a buscar a Taehyung. Volveré enseguida.

Luka se va rápidamente del lugar, dejando a su hermano y a Jimin solos.

—¿Estudias con mi hermano? —le pregunta el chico.

—Sí, somos compañeros de carrera —le responde sabiendo que Gabriel conoce la respuesta.

—Ah, qué bien.

—¿Tú estás estudiando?

—Sí, estudio arquitectura en esta misma universidad.

—Oh muy bien. ¿Y vienes con frecuencia a esta facultad?

—No realmente. Hoy vine a hacer algo muy específico.

—¿Ah sí?

—Sí. Vine a invitarte a salir. ¿Te gustaría salir mañana conmigo?