Sarah's POV

— Yo... tú... ¿cómo...? N-No sé por dónde empezar — Alice tropezó con sus palabras. Parecía tener muchas preguntas que formular pero no sabía cuáles. Para empezar. Sabía lo que ella estaba sintiendo, yo tampoco tenía idea de por dónde empezar.

— ¿Qué tal si empezamos a empacar? — sugirió Ethan — No tenemos tiempo para sentarnos y hablar. Tenemos que movernos antes de que Stern se dé cuenta de que nos recordamos el uno al otro.

Jesse y yo no estábamos confundidos con la declaración de Ethan porque ya nos había informado sobre su situación. Al principio me sorprendió un poco cuando nos habló del hechizo, no podía ni imaginarme que sería posible olvidar a tus mejores amigos. Stern debe ser más poderoso de lo que habíamos asumido.

Alice miró a Benny con el labio inferior entre los dientes.

— Sí, sobre eso — se encogió mientras hablaba, su tono de voz me dijo que a Ethan no le iba a gustar lo que tenían que decir a continuación.

Ethan frunció un poco las cejas y les dio a los dos una mirada curiosa pero preocupada.

— Creo que él tiene una buena idea que nosotros sabemos — explicó Benny.

Ethan respiró lentamente y exhaló aún más lento, pasando su mano por su cabello antes de alisarlo de nuevo a la forma en que estaba.

— Vale, entonces mejor nos movemos.

— ¿Cómo tienes tanta energía? — gemí mirando a Jesse. Desde que me encerraron en el sótano, Jesse parece que siempre encuentra algo nuevo de lo que hablar, quejarse, divagar o todo lo anterior. Y no puedo seguir con eso — Sabes, si el Lucifractor no estuviera agotando mi energía, estoy bastante segura de que tu conversación sería un gran reemplazo para eso.

— Estoy tratando de mantenerte despierta, Sarah. No puedes quedarte dormida cuando tienes tan poca energía y no has tenido una gota de sangre en casi una semana. Es posible que no puedas despertarte — esto era algo nuevo para mí. Aunque, una siesta me pareció atractiva. Como vampiro, no había sentido la necesidad de dormir por mucho tiempo y me estaba resultando cada vez más difícil para no ceder a ello con cada hora que pasa — Solo necesitas mantenerte fuerte.

— ¡Sería mucho más fuerte si me dieras un poco de esa sangre! — apreté los dientes con ira pero mantuve la voz baja en caso de que Stern estuviera escuchando a escondidas. Mis colmillos estaban fuera en este punto, pero no tenía control sobre ellos.

— ¡Paciencia! Solo tenemos un poco, tenemos que guardarla para cuando sea el momento adecuado — argumentó. Tiré mi cabeza perezosamente con un suspiro ruidoso y exagerado — Ahora responde mi pregunta.

Por mucho que lo odiara, tenía razón. Tengo que mantenerme despierta.

— Bueno. Supongo que me casaría con Zac Efron, me acostaría con Channing Tatum y mataría a Justin Bieber.

— ¿De verdad? — dejé de contar la historia cuando escuché la voz de Alice. La miré para ver que ella había dejado de empacar una caja con frascos de suplementos mágicos — ¿No te casarías con Channing Tatum? Yo sí me casaría con ella — Estábamos en el despacho de la abuela/sacerdotisa de la tierra de Benny, agarrando algunos elementos esenciales que podríamos necesitar en el camino, que incluían muchos reemplazos de sangre de la abuela. Benny hizo una lista de cosas que podrían ser útiles en el peor de los casos.

Alice estaba detrás del escritorio, donde los estantes estaban llenos con los diferentes frascos que necesitábamos de la lista, Benny estaba al otro lado de la habitación mirando las pociones y los libros de hechizos con la ayuda de Jesse, y Ethan y yo estábamos por ahí tratando de ver si alguno de los artilugios artesanales de la abuela podría ser útil.

— ¿Y a quién matarías? — le pregunté con curiosidad. Mejor que no diga Zac Efron.

— Pft — se burló, mirando el alto conjunto de estantes y luego volvió a la lista en sus manos. Me di cuenta de que no sabía qué estaba buscando exactamente, solo con la esperanza de que las cosas que necesitábamos estuvieran etiquetadas — A Justin Bieber definitivamente. Ah, ja — se alegró cuando encontró lo que estaba buscando pero el frasco estaba en el segundo estante más alto. Se puso de puntillas y comenzó a tratar de alcanzarlo. Me reí entre dientes ligeramente sabiendo que solo iba a terminar por conseguir una silla. Cogí un cuchillo decretivo y lo examiné, preguntándome si tenía alguna habilidad mágica como la mayoría de las cosas en esta sala — Además, ¿has visto cómo se ve Zac Efron ahora? Ese hombre es un pastel de carne. No me importaría tener una noche-

Cuando ella dejó de hablar bruscamente, miré en su dirección para ver por qué paró. Benny estaba a su lado, con el brazo estirado hacia arriba para obtener el frasco que Alice intentaba alcanzar. Lo llevó a su nivel sin romper el contacto visual con ella, y una sonrisa de advertencia arrastrándose hasta su cara.

— ¿Quieres terminar esa frase? — preguntó él y vi a Alice tragar visiblemente, me costaba contener mi risa. Fue totalmente pillada. Ella sacudió la cabeza de lado a lado rápidamente con los labios apretados.

Esto era muy gracioso.

>> Esa es mi chica — dijo antes de entregarle el frasco y dirigirse de nuevo a Jesse. Alice dejó escapar un suspiro y puso el frasco en la caja. Me miró y fingió secarse el sudor de la frente. No pude aguantarme y esta vez me reí a carcajada limpia, Alice se hubiera unido a mí si no fuera que se sentía humillada.

Sosteniendo el cuchillo entre mis dos dedos índices horizontalmente, para poder admirar sus diseños correctamente, crucé la habitación hacia la mesa en la que estaba Ethan. Estaba usando sus visiones para ver qué podían hacer los artilugios y cómo usarlos. Parece que ha mejorado con sus poderes. Ya no se congela tanto como solía hacerlo. Simplemente toca algo y cierra los ojos, ni siquiera sabrías que lo estaba haciendo.

Cuando lo alcancé, él estaba empacando algunas cosas en una bolsa de tamaño mediano... y sonriendo.

— ¿Qué te tiene tan feliz? — le pregunté mientras colocaba la daga sobre la mesa, junto con las otras cosas que recogí y que pedí que comprobara.

— Solo... olvidé lo que era escucharte reír — dijo, rascándose la nuca y evitando mi mirada. Intenté luchar contra la sonrisa que estaba a punto de aparecer en mi cara, pero fallé. Mi cara se sentía más caliente de lo usual, lo cual era raro porque siempre tengo más frío que calor — Es bueno tenerte de vuelta, Sarah.

— Um... Rachel, Monica y Phoebe de Friends.

— Fácil — comenzó Jesse — me acostaría con Rachel, me casaría con Mónica y mataría a Phoebe — Oh, Phoebe era mi favorita.

— Tu turno — Dios, tenía mucha hambre. A este punto comería comida humana.

Hubo un largo silencio y me preocupé de que se hubiera quedado dormido, demasiado ocupado tratando de mantenerme despierta y no pensando en sí mismo.

— ¿Jesse? ¡Jes-

— Sí, estoy pensando — me interrumpió y suspiré mentalmente de alivio — Um... eh... no... ¡oh! Está bien, tengo una buena.

— Pues di ya.

— Ethan, Benny y yo.

¡No! Ugh, solo... ¡NO! No puedo contestar a eso. ¿Podría? ¡No! No va a pasar.

— Ya no quiero jugar más — dije llanamente.

— Oh, vamos. Es solo un juego, no significa nada. Es una simple pregunta que requiere una simple respuesta — suplicó.

— ¡Bien! ¿Quieres una respuesta?

— Sip.

— Te mataría. Bueno, aquí viene la respuesta aunque me cueste.

— Bueno, ya sé una parte de la respuesta — dijo aburridamente — ¿Qué pasa con los otros dos?

— Ellos son mis amigos. No puedo responder a eso. Comprenderías si de verdad tuvieras amigos — dije rodando los ojos.

— Tengo amigos — se burló en ofensa — Rachel, Monica y Phoebe son mis amigas.

— Ja ja, muy gracioso — me reí sarcásticamente sin responder a su pregunta.

— Bien, responde ya a mi pregunta.

— Te dije que ya no estaba jugando — respondí casi gritando. Por la falta de sangre he tenido terribles cambios de humor, principalmente ira, pero culpo de eso al vampiro extremadamente molesto atado a la silla detrás de mí.

— De acuerdo, luego me haré una yo mismo — se movió un poco en su asiento para que ya no se volviera un poco hacia mí. Mientras no tuviera que responder nada más, podía hablar todo lo que quisiera — Erica, Alice y tú.

— ¡¿Qué?! No, tú-

— Ah ah ah. Es mi turno de responder — Dios, es de lo peor.

— ¡Pero yo no pregunté eso! — ni siquiera quería escuchar su respuesta.

— Mmm... Diría que me casaría contigo, mi dulce dulce Sarah — con esto puse los ojos en blanco — A pesar de que elegiste matarme, por supuesto. Y yo... me acostaría con Alice y mataría a Erica.

— Escucha, no necesitaba escuchar todo- ¡¿Espera, qué?! — dije dándome cuenta de sus palabras — ¿Matarías a Erica? ¿Por qué? Pensé que ustedes dos tenían algo.

— No, eso fue principalmente para ponerte celosa. Pero no me malinterpretes, Erica es sexy y todo, pero el problema es que ella lo sabe. Ella es demasiado arrogante — explicó.

— Uh, tú también — dije como si fuera la cosa más obvia en el mundo- bueno, lo es.

— Sí, y somos iguales. Demasiado similar para mi gusto. Además, Alice se ha vuelto más sexy desde que la conocí.

¿Por qué estábamos hablando de esto? ¿Me había confundido con 'uno de los chicos'?

— Ugh, Jesse, ella tiene un novio. No hables de ella de esa manera — sí, solo jugué 'la tarjeta de novio' para otra persona. Era mi deber como amiga evitar a alguien espeluznante como Jesse cuando no estaba allí para hacerlo ella misma.

— Ah, sí. El niño Benny. Todavía no veo por qué están juntos.

— Lo harías si los vieras todos los días. O cualquier día. Sólo la atmósfera a su alrededor grita que se aman. La forma en que se miran cuando el otro no es consciente. Cuando uno de ellos habla, el otro le presta toda su atención, como si nada más importara, excepto las palabras que salen de su boca. Y ni siquiera necesitan besarse o mostrarse mucho, siempre que sepan cómo se sienten, eso es suficiente para ellos. Él puede parecer tonto a veces, pero siempre la protegerá. Puede parecer tranquila y serena, pero siempre se preocupará por él. Y pueden burlarse el uno del otro como mejores amigos y tener desacuerdos como polos opuestos, pero al final del día, en sus ojos, son solo ellos dos. Espero encontrar algo así algún día.

No me había dado cuenta de que estaba divagando hasta que hubo silencio en el sótano después de que terminé de hablar. Pero como de costumbre, Jesse lo rompió hablando. Pero esta vez no estaba tan enfadado por eso.

— Ojalá algún día lo encuentres, Sarah.

Nunca supe que admiraba tanto la relación de Alice y Benny hasta ahora. Yo quería eso. Cuando sea, quiero eso con alguien. ¿Y la parte más aterradora? Que creo que sé con quién lo quería.

— ¿Necesitas ayuda con eso? — le pregunté a Ethan, que parecía estar luchando para recoger una caja que tenía escrito 'comida' en ella con marcador. Recuerdo haber ayudado a empacar eso. La mitad consistía en alimentos enlatados y la otra mitad con mi sangre falsa.

— Eh, no. Y-yo puedo — tartamudeó, lo que siempre encontré lindo por parte de él. Pero no tan lindo como él tratando de ser un hombre y levantando la pesada caja. La sacó de la mesa del garaje pero casi pierde el equilibrio por el peso de la misma. La agarré antes de que él pudiera soltarla.

— No creo que puedas — me reí, quitándole la caja. Él sonrió tímidamente y se metió las manos en los bolsillos.

— Oye, no todos tenemos una superfuerza — se encogió de hombros mientras se giraba de un lado a otro — Sólo soy un chico aburrido, normal.

— No tienes que burlarte de eso — bromeé ligeramente, pero no tan profundamente. Daría todo por ser una adolescente normal otra vez.

Antes de que pudiera devolver el comentario, giré y caminé hacia el coche para colocar la caja. Era el coche de la abuela de Benny, y tenía un portabulto lo suficientemente grande como para guardar los suministros que necesitaremos el mayor tiempo posible- que no era mucho si lo piensas. Supongo solo era un motivo para que no nos mantuviéramos fuera de Whitechapel por mucho tiempo, ya sea algo bueno o no, no estaba segura.

— ¿Sabes? Nunca terminaste tu historia — anunció Alice cuando entró en el garaje, con su mochila en la espalda y sosteniendo la de Benny en sus brazos. Abrió la puerta trasera del coche y puso ambas mochilas en el piso — Nos contaste cómo obtuviste la sangre pero nunca quién te la dio. Y todavía no sabemos cómo escaparon ustedes — ella levantó su cabeza desde detrás del techo y miró entre Jesse y yo, esperando que uno de nosotros continuara.

— Oh, no me mires — habló Jesse — Ustedes nunca creen lo que yo digo.

— Eso no es cierto. Escucharemos lo que tengas que decir — dijo Alice, sorprendiéndome un poco. No creía que fuera a confiar tan rápido en Jesse.

— Sí, siempre y cuando Sarah esté ahí para confirmarlo todo — agregó Ethan y Alice asintió con la cabeza, de acuerdo con él, haciendo que Jesse pusiera los ojos en blanco. De acuerdo, eso tiene más sentido.

— ¿Eres... una celebridad? — pregunté, comprometiéndome con este juego de '¿qué soy?'. Jesse no respondió. Por un segundo pensé que no me escuchó, pero yo lo había dicho lo suficientemente alto. Además, él estaba literalmente a mi lado — Jesse. Pregunté-

— ¡Shh! — ¿qué demonios? Lo aguanté todo este tiempo y cuando realmente quiero jugar uno de sus estúpidos juegos, ¿me calla? Especialmente después de todas las veces que le dije que se callara y no lo hacía. ¿Espera que lo haga yo ahora?

— ¿Qué?

— Solo escucha — de mala gana hice lo que me dijo y me quedé callada para escuchar, pero no sabía exactamente lo que estaba tratando de escuchar.

Por lo que supuse que venía de afuera, escuché un portazo seguido de un rugido del motor. No fue nada nuevo, Stern ha venido e ido de este lugar muchas veces en los últimos días, así que no pude ver qué era diferente ahora.

Una vez que el sonido del motor del automóvil se desvaneció de nuestra ubicación, Jesse comenzó a moverse en su asiento.

— ¿Qué estás haciendo? — pregunté con impaciencia, torciéndome el cuello para ver qué estaba haciendo.

Se detuvo y me miró.

— He estado siguiendo la rutina de Stern todo este tiempo y hasta ahora ha sido lo mismo. Él nos controla en la mañana antes de irse, regresa dos horas después, nos mira, se va, después de otras dos horas, se va y vuelve por la noche para descansar.

— Espero que vayas a algún lado con esto y no estés obsesionado con Stern — dije medio bromeando medio en serio.

Jesse puso los ojos en blanco pero continuó de todos modos.

— Hoy fue diferente. No regresó a sus dos horas y ni siquiera nos revisó. Tenía prisa por irse y parece estar bajo mucho estrés. Algo está pasando que lo tiene en una situación difícil.

— ¿Y qué? — le pregunté — ¿Qué significa eso para nosotros? — me estaba costando mucho seguirlo.

— Significa... — hizo una pausa mientras se levantaba. Sí, eso es correcto. ¡Se levantó! Como si ya no estuviera atado a la silla. La cuerda que estaba alrededor de los dos cayó pesadamente al suelo, junto con la cuerda de la muñeca de Jesse. Mi boca estaba abierta en shock cuando él hacías las manos de jazz —... que es hora de jugar.

— ¡Ay! ¡Alice! Me estás escachando.

— Lo siento, no era mi intención. Si Ethan supiera cómo mantener los pies de lado, no tendríamos ningún problema.

— ¡Oye! No hay espacio detrás del asiento de Benny debido a sus largas piernas. Y tengo a mi hermana de diez años en mi regazo.

— No me culpes de nada. Ni siquiera quería hacer este viaje en primer lugar.

— ¡Chicos! — gritó Benny desde el asiento del conductor, haciéndonos dejar de discutir. Deberíamos ser más considerados, Benny está tratando de conducir y él no necesita distracciones — Este es mi problema — él se acercó y subió el volumen a la canción 'Primadonna Girl' en la radio. Jesse se aclaró la garganta, dejó caer el mapa en su regazo y levantó una ceja a Benny — Oh. Y... eh... no puedo escuchar a Jesse que me está diciendo por donde debo ir — agregó — Solo.. bajaré esto de nuevo y luego...

— Sí, um, sobre eso — comenzó Alice, inclinándose hacia adelante para que su cabeza estuviera entre los dos asientos delanteros — ¿Deberíamos realmente confiar en el tipo que convirtió a Sarah en un vampiro y que intentó hacer lo mismo con Ethan? ¿Y también que intentó tomar 219 almas de Whitechapel para darnos direcciones? No te ofendas, Jesse.

— Tranquila, no me ofendo. Ni yo mismo confiaría en mí.

— Bueno, considerando que Stern quiere deshacerse de todos los vampiros, estoy bastante seguro de que no tiene más remedio que ayudarnos — dijo Ethan mientras miraba por la ventana.

— Eh... todavía no estoy segura de eso.

— De acuerdo, aunque me encante  escucharlos hablar de mí como si yo no estuviera — Jesse lo reprendió levemente — Pero estoy luchando de vuestro lado para que puedan aceptarlo o no. No les estoy pidiendo que pongan toda su fe en mí, pero quiero que al menos confíen en mí. Fui desterrado de Whitechapel y conozco un buen lugar para que nos quedemos y permanezcamos en la parte baja. He vencido al abuelo de Stern, y por eso ustedes me necesitan — todos se quedaron callados. Incluso Jane, que suele ser la que hace las preguntas — Tanto como yo os necesito — terminó.

Bajé la vista para ocultar la pequeña sonrisa que me picaba en la cara. Siempre puedes contar con Jesse para hacer que todos se queden sin palabras. Nadie sabía qué decir, así que nos sentamos en silencio por un largo momento. Benny, Ethan y Alice parecían estar debatiendo individualmente si podían hacer lo que él dijo.

— ¿Sarah? — preguntaron y volvieron sus cabezas hacia mí al unísono, excepto Benny ya que tenía que mantener la vista en la carretera. Por supuesto que no podían tomar una decisión sobre Jesse sin consultarme. Supongo que solo querían ver si yo podía confiar en él, por lo tanto podrían.

— ¡Sarah!

— ¡Sarah!

— ¡Sarah! ¡Vamos despierta! ¡Por favor despierta!

No me había dado cuenta de que estaba mirando la oscuridad hasta que comenzó a desvanecerse. Todo estaba borroso al principio, luego volvía a ser negro, luego borroso otra vez, y así sucesivamente.

Cuando finalmente tuve el coraje de abrir mis ojos correctamente, pude distinguir lo que era esa figura borrosa delante de mí. Era Jesse.

No pude recordar lo que pasó. Lo último que recordé fue que Jesse me desató de la silla y todo lo que siguió parecía haberse disuelto en nada. No recuerdo haber perdido el conocimiento en cierto punto ni recuerdo caer lentamente en la inconsciencia.

— ¿Sarah? Sarah, mírame. ¿Vale? No te desmayes de nuevo. Sólo aguántate por un rato. ¿Puedes hacer eso por mí? — Al principio, la voz de Jesse estaba apagada para mis oídos, pero todo se estaba aclarando rápidamente. Un poco demasiado rápido para mi gusto, creando un dolor en mi cabeza.

Miré a mi alrededor. Jesse estaba agachado frente a mí, ahuecando mi cara con sus manos. Estaba sentado en el suelo de lo que parecía ser un callejón y mi espalda se apoyaba contra la pared detrás de mí. Mis ojos se movieron para buscar alguna evidencia de cómo llegamos aquí.

Comencé a preguntarme qué podría haber pasado en la celda. ¿Cómo me desmayé? ¿Fue Jesse? ¿Fue Stern? Tal vez esa persona misteriosa?

Mi línea de visión finalmente cayó sobre un pequeño corcho de madera a unos dos pies de distancia de mí. Parpadeando para despertar un poco mis ojos, noté que algo brillaba no muy lejos de él.

Un tubo de ensayo vacío.

Corrección:

Dos tubos de ensayo vacíos.

Por primera vez desde que recuperé la conciencia, levanté mis ojos para encontrarme con los de Jesse. El alivio se apoderó de su rostro cuando me vio mirarlo. Se reclinó en una posición sentada antes de empujarse más hacia atrás para apoyarse en el edificio de ladrillo frente a mí. Dejó escapar un suspiro y apoyó la cabeza en la pared. ¿Por qué estaba tan cansado? Llegó a beber de uno de los tubos de ensayo de sangre.

— ¿Qué pasó? — pregunté temblorosamente. Reconocí este callejón. Era el mismo donde Ethan, Benny y Alice descubrieron que era una vampira cuando intenté comerme una rata. ¡Uf! Más nunca.

— Supongo que el lucifractor te quitó mucha energía porque en el momento en que te pusiste de pie, te desmayaste — oh...

— ¿Cómo salimos entonces? ¿Cómo hemos llegado hasta aquí? — pregunté, tratando de encontrarle sentido a todo esto.

Cerró los ojos y su respiración se estabilizó un poco mejor.

— Stern no estaba allí; Vi una oportunidad; maté a algunos de sus guardias; y te traje aquí.

— ¿Me llevaste en brazos? ¿Con solo beber un pequeño tubo de ensayo lleno de sangre? — me quedé callada, en shock por decir menos. El Jesse que conocí me habría dejado allí para que me muriera se había llevado la sangre con él.

— No pesas mucho — sonrió, pero no mucho después desapareció de su cara, como si estuviera demasiado cansado para fruncir los labios. Tal vez sí que pesaba mucho si estaba tan agotado por llevarme.

— Sin ofender, pero, ¿por qué aquí? ¿Un callejón al azar?

— Puedes ser ligera, pero solo pude llevarte hasta aquí — bromeó, pero con la verdad detrás.

Asentí. Mirando hacia atrás a los tubos de ensayo y los señalé.

— ¿Y eso? — agregué — ¿Me diste uno para que despertara?

Jesse, que ahora estaba mirando al suelo, no respondió al principio, pero antes de que pudiera hablar de nuevo, dejó escapar una risita ahogada.

— Te di de los dos.

— Sí — respondí, parpadeando entre mis tres tontos amigos — Confío en él.

Una vez más, se quedaron sin palabras, probablemente no esperaban que yo fuera tan franca al respecto en lugar de que yo fuera a criticar los pros y los contras sobre él.

— Y ustedes también deberían.

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No voy a mentir, estoy bastante orgullosa de este capítulo (aunque también triste). Si este es el final, tristemente :c mañana subiré la nota que escribió la escritora con lo que pasó después. Y la verdad es que me siento inútil ya que empecé a traducir una historia para luego no terminar de escribir el final (cosa que se me da muy mal y no me viene nada a la cabeza y siento mucho eso) i love you all my sunshines♥