Granja Kent, Smallville
Hace años atrás

— ¿Te gusta?

  Observaste con emoción un enorme espacio donde se encontraban animales de granja, habías hablado con Bruce acerca de venir unos cuantos días a la residencia de Clark en Smallville y aunque por su mirada sabías que esa idea no le agrado mucho, el aceptó porque después de todo Clark es la persona que está a cargo de ti.

  Una vez que habías salido de su auto tu sonrisa aumento, nunca habías visto este tipo de lugares antes y quizás por alguna razón pensabas en lo que hubiera sucedido si te hubieras quedado con tu primo desde el principio.

— Es muy bonito— tomaste tus maletas con un brillo en tus ojos, cosa que causó una sonrisa en tu primo—. ¿Esta Lois en casa?

  Tu pregunta provocó que en Clark apareciera un ligero tono carmesí en sus mejillas, aún no estaban viviendo juntos pero era claro que pronto lo harían pero no aquí en la casa de sus padres. Sabías que tu primo era demasiado obvio con sus reacciones por lo que te agradaba molestarlo, simplemente tomo las maletas que habías tomado para ayudarte a entrar.

— Ella está en su casa— explicó casparreando su garganta.

— Ajá— murmuraste con una sonrisa divertida—. Si me vas a invitar a la boda ¿Verdad?

— ¿Te gustaría ir a la ciudad después de desempacar?— Clark cambio de tema radicalmente, sus mejillas ardían y sentía como es que estás tomando un color carmesí intenso.

— Si, me gustaría— reiste un poco ante su reacción.

— Clark.

  Una mujer un poco mayor apareció en el lugar con una sonrisa amigable y provocando que Clark elevara su mirada, debido a que había olvidado por un momento que su madre también se encontraba en la granja.

— Mamá— formuló él mencionado una vez que su cuerpo se acercó a la fémina, estaba alegre de que finalmente ambas se conocieran.

  Martha Kent la madre de tu primo sabía que aparecerias en el lugar por unos días, todo esto debido a que después de todo el tiempo que tenías en la Tierra no habías tenido tiempo que pasar con tu único familiar. Ella estaba alegre de que su hijo encontrará más personas que formarán parte de su familia biologica.

— Quiero que conozcas a alguien especial— afirmó el joven superhéroe, acercando a la mujer en tu dirección—. Mamá ella es (T/N) Zor-El, ella es mi prima de Krypton.

— Es un gusto— alzaste tú mano en su dirección, la mujer aceptó de manera gustosa—. He escuchado hablar mucho de usted.

— No te preocupes cariño, no me trates de usted— pidió la mayor—. Puedes decirme tía, después de todo soy la mamá de tu primo.

— ¿En serio?— preguntaste con una pequeña emoción.

  Hace mucho tiempo atrás desde la última vez en la que habías llamado tío a alguien, la madre de Clark te aceptaba como a una más de su familia y eso provocó algo sumamente agradable en tu pecho.

— Claro que sí cariño— afirmó Martha nuevamente—. Somos familia.

— Gracias— murmuraste en voz baja.

  El sentimiento de agradecimiento de inundaba en tu pecho, extrañabas ese tipo de afectos familiares que te ayudaban a sentir protegida y amada. Clark agradecía a su madre mentalmente por ser cariñosa con su prima, él sabía que necesitabas mucho cariño y mas si es de personas de las que querías.

  La madre de Clark asintió para dirigirse hacia la cocina de su residencia.

— Cambiando de tema ¿Cómo lo tomo Bruce?— preguntó Clark una vez que terminó de dejar tus maletas dentro de su casa, el de cabellos negros se refería a su ida de la mansión—. Me sorprendió cuando dijiste que había aceptado, de verdad que él se preocupa mucho por ti y pensaba que no te lo iba a permitir.

— Él es una buena persona— Clark sonrió ante tus palabra.

— Lo es— afirmó—. Cree que no voy a poder cuidar bien de mi prima.

— ¿En serio?— una risa sobresalió de tus labios.

  Clark tono las maletas para después dirigirse a una habitación del primer piso, sería la habitación de invitados. Una vez que el se fue lograste observar más a fondo el lugar, a comparación de la mansión Wayne era más chica pero demasiado cálida, definitivamente te hubiese gustado vivir allí.

— (T/N)— escuchaste la voz de tu primo.

— ¿Si?— cuestionaste una vez que te detuviste en una pared dice se encontraban demasiada fotografías de tu primo en cada etapa de su vida.

  Sin embargo era extraño para ti saber que Kal-El ya no es un bebé justo como lo recordaste hacer tiempo, era extraño y difícil saber que te perdiste toda la vida de él, pero era difícil saber que en realidad para ti no habían pasado muchos años como para Clark.

— ¿Cómo te has sentido siendo héroe?— preguntó tu primo, provocando una ligera sonrisa en ti.

  Desde que comenzaste a combatir a los villanos ayudando a los que menos pueden, te has sentido demasiado bien mal error nada porque si podrías utilizar tus poderes para ayudar a los demás.

— Es grandioso pensar en alguien más, aparte de ti— resumiste con una sonrisa—. Me gusta que los demás vean esperanza cuando yo aparezco, la sensación de ayudar a los más necesitados me hace sentir bien, que hay algo en lo que puedo ayudar.

  Clark escucho tus palabras con orgullo, desde la primera ve que te vio sabía que no podía existir ninguna pizca de maldad en tu ser. Ambos son familia, por lo que él sabía que alguien de su familia más cercana no podía ser malo.

— Eso es ser parte de ser héroe, (T/N)— Clark presionó tus hombros con cariño—. Te aseguro que todos van a sentirse felices de ser salvados, más si se tratan de una joven guerrera como tú.

— Gracias Kal— murmuraste—. Se supone que me enviaron para protegerte y ahora es todo lo contrario.

  Clark se sentía un poco mal por lo que había escuchado, no recuerda nada de como es que llegó a este planeta pero agradecía que alguien como tú fuera la persona que lo iba a cuidar. Sin embargo las circunstancias fueron otras y lamentablemente no descubrieron como podía haber sido su vida si tú no te hubieras quedado en el espacio.

— Se que hubieras hecho un gran trabajo con ello— admitió él de cabellos negros—. Y ahora lo estás haciendo demasiado bien, no te concentres en lo que pudo haber sido (T/N)— aconsejó—. Mejor hay que pensar en el presente como tu nueva identidad.

— Aún sigo aprendiendo— le diste una media sonrisa—.  Ser un superhéroe es algo difícil, se que ustedes son sumamente responsables y ya tienen experiencia en esto, yo aún sigo aprendiendo.

  Clark revolvió tus cabellos con cariño.