"Me disculpo por mi venir a estas horas, Su Majestad."

El Marqués Jinwoo me saludó, y agité la mano para indicarle a todos los demás que salieran de la habitación. La Condesa Taeyeon se dio cuenta, y se llevó a las otras dos sirvientas con ella para que yo pudiera hablar en privado.

"¿Qué sucede?"

Tan pronto como estuvimos a solas, el Marqués Jinwoo se sentó en una silla y me contó urgentemente la noticia: el hecho de que TaeHyung era un esclavo fugitivo, que había dado a luz a un bebé antes de conocer a Jeon-

"¿Bebé? ¿El bebé de TaeHyung?

"Si. No sé quién es el padre, pero el Vizconde Daesung está cuidando al bebé porque TaeHyung se escapó y lo dejó atrás."

"El bebé de TaeHyung ..."

Había escuchado rumores de que el Vizconde Daesung tenía un bebé y, aunque nunca lo mencioné abiertamente, sospechaba que podría ser de TaeHyung.

"Nadie sabe quién es el padre. ¿Estás seguro?"

"Bueno, según lo que escuché. De todos modos, si son criados y vendidos como esclavos, no importa quién sea el padre."

El Marqués Jinwoo respondió con frío sarcasmo y agitó la mano antes de continuar.

Su siguiente noticia no fue sobre TaeHyung, sino sobre mi hermano y Jeon. Jungwoo había arremetido violentamente contra el Vizconde Daesung para obtener la información, y en respuesta, Jeon envió a su guardia para confinar a mi hermano en su casa. Quizás sospechaba que Jungwoo podría intentar difundir evidencia de que TaeHyung era un esclavo.

"Estábamos un paso por detrás."

Traté de advertirle a mi hermano sobre su comportamiento temerario, pero ahora la situación había cambiado. Suspiré, pero el Marqués Jinwoo sonrió y sacudió la cabeza.

"Estábamos un paso por delante."

"¿?"

"Debido a que el Vizconde Daesung está aliado con 'ese hombre', no revelará sus secretos a Su Majestad. Y debido a que Su Majestad no confía en Jungwoo en absoluto y lo odia, Jungwoo probablemente no le dirá nada."

"¿Con eso quieres decir... que debería contarle a Su Majestad el secreto de TaeHyung?"

"Si."

"..."

"Sé que no te gusta aprovecharte de los débiles."

El Marqués Jinwoo me miró con una expresión feroz en sus ojos.

"Pero, Su Majestad, ¿no sería mejor que se comiera la carne del ganado en lugar de la carne de un noble y elegante cisne? Uno solo necesita limpiar la sangre y los residuos."

Una vez que el Marqués Jinwoo se fue, la Condesa Taeyeon me trajo en silencio una taza de café caliente. Me senté junto a la ventana del salón y miré la luna, perdido en mis pensamientos.

TaeHyung tenía un pasado asombroso, él no estaba dispuesto a contárselo a Jeon. En los días en que se volvió el hombre amado por el Emperador, había atacado a mi hermano con mentiras y me imitaba, todo con el pretexto de ser el más débil y vulnerable de la casa. Pasar por alto las acciones de TaeHyung en esos días fue la compasión que Jeon me exigió. Era una cuestión de mi orgullo.

Además, no se podía confiar en el Vizconde Daesung. Le dijo a Jungwoo que TaeHyung abandonó a su bebé. ¿Lo abandonó o lo perdió sin querer?

Escuché de Sir ChanYeol que el Vizconde Daesung mantiene al bebé escondido. Si TaeHyung abandonó al bebé, ¿por qué razón lo hacía? Ahora que el Vizconde y TaeHyung estaban cooperando, el vizconde tenía motivos para ocultar el pasado. Un amo y un esclavo normales no tendrían una relación así.

"..."

Sin embargo... el Marqués Jinwoo también tenía razón. Tratar a TaeHyung como un extraño o pasar por alto su pasado solo era posible cuando podíamos ignorarnos mutuamente. Ahora con mi hermano bajo arresto domiciliario, aferrarse a las apariencias era una tontería.

'Primero, hablaré con Jeon sobre mi hermano.'

JiMin no era la única alma envuelta en pensamientos inquietantes. En un carruaje que se dirigía hacia la capital, Jeon trató de enfocarse en el tema de la disminución del número de magos, pero su mente seguía volviendo hacia TaeHyung.

TaeHyung ya tuvo un bebé. Este hecho fue obviamente impactante, así como el hecho de que tuviera antes un enamorado, pero ese no era el problema principal para él. Para Jeon, el problema es que TaeHyung le había mentido.

Sin embargo, Jeon no pudo encontrar en su corazón el culpar a TaeHyung incondicionalmente. Todavía recordaba su forma patética y lamentable cuando lo rescató por primera vez, y no quería juzgarlo todavía sin saber si su bebé fue robado, abandonado o cualquier otra cosa.

Jeon llegó al palacio temprano a la mañana siguiente sin aclarar sus pensamientos. Primero, fue a visitar a TaeHyung.

"El Joven TaeHyung aún no se ha despertado, pero lo llamaré."

La sirvienta iba a despertar a TaeHyung, pero Jeon le indicó que se retirara y personalmente entró en la habitación de TaeHyung.

Estaba durmiendo tranquilamente en la cama. Jeon suspiró y se inclinó en la puerta para mirarlo, cuando su mirada cayó sobre algo inusual en la mesa. Se acercó y vio un mechón de hermoso cabello plateado.

Furtivamente lo tocó con los dedos.

'¿Se cortó el cabello?'

Pensó que era el cabello de TaeHyung, pero después de un momento, le pareció que tenía el aspecto y la textura del cabello de un bebé.

"¿Su Majestad?"

TaeHyung se sentó y lo llamó con una voz de sueño. Se levantó de la cama y le preguntó por qué estaba aquí, pero su rostro se puso pálido cuando notó lo que estaba mirando.

"¿Su Majestad?"

Su voz temblaba de terror.

"Ah, yo... me corté el cabello un poco. Creo que lo dejé por error."

Antes de que Jeon pudiera responder, corrió, agarró rápidamente el cabello y luego regresó a la cama. Su comportamiento incómodo decía mucho. Estaba seguro de ello- el cabello era de su primer bebé.

'¿Él abandonó al bebé?'

Chasqueó la lengua. Quizás TaeHyung no tuvo más remedio que decirle adiós al bebé, y guardó en secreto el cabello porque extrañaba a su hijo. La situación de TaeHyung de repente se volvió más comprensible, y el pensamiento final jugó un papel decisivo en el cambio de opinión de Jeon. Sin embargo, la cuestión de la mentira aún no se había resuelto...

'Él no me lo dijo por miedo a que lo dejara.'

Él fingió no saber nada.