19. Efectos
Había unos labios presionados contra los suyos.
No entendía demasiado bien que estaba pasando, solo que alguien estaba besándolo y que Lukas no tardó tanto en reaccionar, respondiendo al beso, moviendo sus labios hasta entrar en sintonía con los del otro.
Hasta que esos labios ya no estaban sobre los suyos y se habían fugado sobre su piel, su mejilla, su cuello, su hombro, su pecho...
— ¿Cómo se siente? —le susurró la voz del desconocido.
Lukas intentó inclinar su cabeza hacia adelante y dar con el rostro de aquella persona, pero desde aquel lugar, solo alcanzaba a distinguir algunos mechones de cabello, sin una cara a la cual mirar.
Luego sintió algo más, unas manos esta vez, con las finas yemas de sus dedos trazando patrones sobre su cintura, hasta que comenzaron a descender, pasando por sus caderas y llegando hasta sus muslos...
Casi se pierde en aquella sensación, cuando esos labios volvieron a exaltarle y comenzaron a dejar una línea de besos a lo largo de su vientre, yendo peligrosamente bajo.
El toque de esas manos le forzó a separar sus piernas, solo un poco, pero lo suficiente como para que esa persona tomara oportunidad frente al nuevo espacio expuesto.
Intentó estirar su cuello de nuevo, sin éxito, nuevamente, de alcanzar a ver el rostro del desconocido, pero si denotó el lugar donde se encontraba la cabeza del otro, entre sus piernas, mientras mantenía un agarre sobre sus muslos que le proporcionaba mejor acceso.
Lukas jadeó al sentir lo que vino después, sus piernas temblaron en respuesta mientras que dejó caer su cabeza hacia atrás, envolviéndose por la mera sensación de esos labios alrededor suyo—
Hasta que...
que...
...
Lukas abrió los ojos de golpe a su vez que se giraba sobre su colchón y sus piernas en enredaron entre las sábanas, quedando a pocos milímetros de caer de su propia cama y totalmente enroscado como una mosca atrapada dentro de una telaraña.
¿Cama?
¿Qué carajo?
Un dolor punzante invadió su cabeza al segundo siguiente, como si hubiese estado esperando que acabara por espabilarse para atacar a su nublada memoria.
Su cabeza en verdad dolía, y su cuello, y su espalda, y su garganta.
Se sentía como la mierda y eso que aún le quedaban algunos años para llegar sus treinta.
¿Qué le estaba pasando?
No quería salir de su cama. Quiso taparse mejor, pero con la situación de sus enredadas sábanas no tuvo demasiado éxito. Inconscientemente, frente a todo su malestar, juntó sus piernas solo para percatarse de otro detalle que no quería atender ahora mismo.
Su casi caída e incomodidad invasora le habían hecho olvidar ese extraño sueño.
Se sonrojó de solo pensarlo y enterró su cara contra su almohada, quedando en un incómodo ángulo, pero no le importó cuando las imágenes del sueño retornaron a su mente.
Ya ni recordaba la última vez que había tenido un sueño de ese estilo, y encima con una persona sin cara, lo que le faltaba...
Como si un estímulo externo lo hubiese poseído se sentó de golpe, pateando las sábanas lejos, de modo que pudiera tener un rápido vistazo de sí mismo.
Estaba sin pantalones, llevaba solo su bóxer puesto y la camiseta que había elegido usar para ir al bar. Todo lucía en orden, por lo que podía afirmar que solo se había tratado de un sueño y no de que—
El bar.
Su corazón se aceleró en cuanto las memorias comenzaron a tomar forma dentro de su desorientada mente. Él había ido ayer en la noche a La Parada junto con Adam, habían bebido cerveza y luego... ¿Adam lo había dejado?
La trayectoria de sus recuerdos comenzó a sentirse difusa luego de pensar en Adam. ¿Qué había pasado luego? ¿Lukas había bebido demás?
No. Se conocía bastante como para saber que jamás haría aquello. ¿Verdad?
Y, además, ¿cómo había vuelto a casa? ¿Habría comenzado a sentirse mal y decidió volverse?
Debería de buscar su celular, e intentar comer algo de paso, ayer ni siquiera había cenado...
Decidió encaminarse primero a la cocina dado que no tenía idea de donde había dejado su celular, y justo cuando pretendía buscar algo en su heladera sus ojos se enfocaron sobre su pizarrón y el plato de comida envuelta que tenía apoyado sobre la mesada.
Come esto, necesitas reponerte
Y anda con más cuidado
Las palabras tardaron un momento en hacerle sentido, hasta que segundos después, todo llegó a él como un estallido de memorias.
William.
Había llegado a ver a William. Se le había acercado cuando estaba solo, sin Adam, y le había dicho algunas cosas, como que lo conocía, que ya sabía todo y después...alguien había evitado que cayera. Su aliento se atascó en su garganta frente a la mera palabra.
Alguien. El tipo misterioso.
Pero no había alcanzado a ver su rostro, o no recordaba haberlo hecho, solo la sensación de un cuerpo tras el suyo, sujetándolo. No había más.
Lukas solo entonces cayó en cuenta que el motivo de todo su malestar tenía un único origen; había estado drogado, lo habían drogado, mejor dicho. Todo sin que él lo hubiera notado.
Estaba seguro que no había bebido nada cuando William se le había aparecido, o sea que lo habían drogado antes...Y él ni siquiera se había dado cuenta.
Se había creído más listo de la cuenta cuando no lo era, nunca lo fue, él solo—
Solo hasta ese momento denotó que estaba pasando por alto otro detalle más.
Adam.
¿Qué era lo que había dicho William? Había sido algo malo, algo que lo había puesto en alerta incluso en aquel estado, pero Lukas solo se había limitado a dejar a su compañero solo.
Adam le había pedido que hiciese solo una cosa, llamar a Tadeo, y ni ello había podido hacer...
Tenía que buscar su celular, y de ser necesario tendría que salir ahora mismo a buscar a su compañero...A menos que tipo misterioso se hubiera quedado con su celular, pero Lukas eligió creer que no sería capaz de hacerle eso ahora.
Regresó a su habitación y examinó su entorno, todo lucía tan normal, cuando lo que había pasado anoche había estado lejos de ser normal.
Fijó su vista en la ropa que había usado anoche, cayendo en cuenta que el tipo misterioso debió de haberle quitado esas prendas, y si no se hubiese sentido tan ansioso por encontrar su teléfono quizás se hubiera detenido a pensar lo incómodo que era eso realmente.
Al revisar entre esas prendas distinguió un bulto que no tardó en reconocer como su propio teléfono.
Lo tomó con rapidez, solo para notar al instante que apenas le quedaba un 2% de batería y que tenía como 15 llamadas perdidas y varios mensajes más... Ensanchó sus ojos al notar que varias de esas llamadas eran de Adam, Alicia y de...su madre.
Era evidente a quien debía de contestarle primero.
Marcó a su madre y esperó a que sonara, un tono tras otro, donde ni siquiera se dio el tiempo de pensar en una excusa cuando su madre ya le atendió.
— ¿Lukas? —dijo exaltada—. ¿Eres tú? ¿Estás bien?
— Hola, mamá —suspiró—. Sí, soy yo y estoy bien, acabo de-
— ¿Dónde estás ahora?
— En casa, te decía que recién me levanto.
Y que suerte que tenía que hoy era sábado, no sabía cómo explicaría aquello en el trabajo de ser otro caso.
— ¿Por eso no atendías? Nos tenías preocupadas, no te basta con darme el susto de mi vida con Dani y ahora haces esto...
— ¿De qué hablas, ma? —preguntó con una mezcla de fastidio y desconcierto.
¿Había sucedido algo más para que su madre se hubiese puesto así?
— Me llamó tu compañera, Alicia, me preguntó si sabía algo de ti y que no estaba pudiendo contactarte-
— ¿Alicia?
¿Qué tenía que ver Alicia en esto? A menos que...Adam le hubiera hablado y preguntado por él. Le costaba hacerse la idea de un Adam preocupado llegando al punto de tener que consultar con sus conocidos.
— Sí, ella, me dice que no sabía de ti y todo esto pasa básicamente el mismo día en que dicen lo de las muertes en las noticias-
Las noticias y los datos filtrados del caso, lo había olvidado.
— Tuve un problema con mi teléfono —mintió—, y ayer no me sentía bien, es todo —trató de que su voz sonara cansada, a la vez que evadía sin disimulo el tema de las muertes.
— ¿Todo? ¿Sabías que hay un asesino serial dando vueltas por la ciudad y me dices que es todo?
— Aun no sabemos si es un asesino en se-
— ¡Pero sabías que las muertes estaban conectadas y no dijiste nada! —le replicó con frustración.
— ¡En ese momento no lo sabía! —espetó, elevando su tono sin pensar.
— ¿Y si lo hubieras sabido me lo habrías dicho?
Silencio.
Le asustó que la respuesta no le saliera espontánea como hubiera esperado.
— No puedo divulgar cosas así tan pronto...
— Eso es un no, entonces —sonaba consternada, pero a su vez parecía que ya se lo esperaba.
— No es así, mamá, claro que eventualmente se los hubiera contado-
— Y sin embargo me enteré por la televisión —dijo con amargura y luego suspiró—. En fin, ¿estás seguro que te sientes bien? Puedo pasar por allá, quizás-
— Más tarde puedo ir a visitarlas —le interrumpió—, solo...tengo que arreglar un par de cosas antes de eso.
Su madre pareció enfriar su temperamento luego de eso y se le hizo más fácil el poder finalizar la llamada.
Ahora solo le quedaba resolver el asunto con sus compañeros...Miró la pantalla de su celular de nuevo y vaciló, había sido más fácil engañar a su madre, pero, ¿qué iba a decirle a ellos? No podía contarles que había sido drogado... ¿O sí? Eso significaría que tendría que mencionar al tipo misterioso y no había forma de contar aquello sin que sonase bizarro.
Buscó al contacto de Adam, y suspiró con un dejo de alivio al visualizar su última hora de visita dentro del chat, significaba que estaba bien, que William mentía.
Por lo que procedió a escribirle sin creerse que alguna vez experimentaría esa sensación de incomodidad por enviarle un mensaje a Adam de todas las personas.
Tú:
Hola Adam, soy Lukas
Perdón por lo de ayer en la noche
Quería saber si estabas bien
Lukas se arrepintió de escribir aquello apenas envió el mensaje, sonaba estúpido y seguía sin explicarle porque había decidido dejarlo solo mientras él interceptaba a un sospechoso y potencial asesino.
Pero no había muchas formas en hacer que sonara mejor, y, el horario de la última visita de Adam continuaba siendo el mismo, sin mostrar cambios, por lo que Lukas supuso que podría postergar un poco más el momento en el que tendría que darle explicaciones.
Pensó en llamar a Alicia, pero la verdad era que la llamada con su madre ya lo había agotado bastante por el resto de la mañana. Debería de enviarle un mensaje y sería suficiente para dejarla tranquila... Sin embargo, una repentina oleada de curiosidad le invadió mientras miraba su teléfono, lejos de su lista de contactos y de todos sus conocidos.
Antes de que se diera cuenta, ya estaba escribiendo otro mensaje.
Estuviste ahí, anoche.
Fue como si una fuerza externa lo hubiera poseído, retándolo a escribir aquello. La presencia del tipo misterioso era cada vez más tangible a su alrededor, y comenzaba a odiar el hecho de que aún no tuviera un rostro para darle.
La respuesta no se hizo tardar.
Sí, quien sabe qué hubiera pasado de lo contrario
De nada, por cierto.
Así que el tipo misterioso también era humilde. Interesante.
¿Sabías que era lo que William quería?
Solo en parte, tampoco me interesa
Pero lo conoces...
¿Y sabes a dónde fue?
Temo que luego de dejarte en tu casa no supe más nada
Pero dudo que haya vuelto a casa
Lukas hizo una mueca ante la mención de su casa, lo hacía sonar tan natural, como si se tratara de algún amigo que lo hubiera acercado a su casa de favor. Y estaba lejos de ser su situación, claro estaba.
Aun así, no quería pensar en ello como si el otro lo hubiera salvado. No había pasado eso. Por supuesto que no.
Y si tuvieras una idea...
Me la dirías?
Digo, él puede ser que él que está detrás de todo esto
Eh...digamos que no es tan así
Y ayudar a la policía no está entre mis actividades favoritas
Yo no soy policía. Quiso replicar, pero no iba al caso.
Eso le hizo pensar...Si el tipo misterioso estaba más o menos dispuesto a contestar sus preguntas tenía que aprovecharlo.
Entonces tampoco tuviste que ver con la información filtrada?
Todo lo que salió en los medios?
Oh, eso, temo que tampoco fui yo
Por más que me hubiera gustado desestabilizar así a la policía
No puedo tomar crédito de eso
Para su desgracia, Lukas pudo intuir que decía la verdad, significando que tenía otra incógnita abierta.
Se quedó quieto por un momento, mirando su pantalla mientras otra pregunta surgía en su cabeza. El otro había sido un tanto ambiguo antes, pero quizás, si Lukas intentara ser más específico...
Pero, entonces,
William si quería matarme?
El aire abandonó sus pulmones apenas envió aquel mensaje, antes ni siquiera se había deliberado por esa opción en específico, pero, luego de recordar al supuesto asesino en serie, las letras en los nombres de las víctimas, y en como todo parecía encajar realmente-
No, no seguías tú Lukas
Ni tampoco permitiría que pasara algo así
Nunca permitiría que alguien te haga daño
Su rostro permaneció inmutado mientras releía aquella última oración como si no acabase por entender su significado, mientras que su mente, su mente había olvidado que tenía que decir algo al respecto.
Era solo que...no sabía que responder a aquello.
Si esto hubiera pasado antes diría que buscaba confundirlo, solo un poco más, como parte de su juego. Pero, con lo sucedido de anoche, con el hecho de que Lukas estaba ahora en su casa y no drogado o muerto en quién sabe dónde, le hizo pensar, que podía haber algo de verdad en aquellas palabras.
Sigo creyendo que estás demente.
Fue la única respuesta que se le ocurrió, por más que no fuera la más contundente, ni la que expresara la frustración que cruzaba ahora mismo por su mente.
Su estómago rugió en ese instante, y supo que era momento de bloquear su teléfono para volver a la cocina, mientras comenzaba a moverse con pasos perezosos.
Justo cuando revisaba el interior de su vacía heladera, escuchó a su celular vibrar de nuevo.
Quizás cambies de opinión más tarde,
Quién sabe
Lukas optó por ignorar esas últimas palabras, como si nunca hubiera leído el mensaje, solo concentrándose en la idea de que no tenía ganas de cocinarse nada en aquel momento y luego, llevó el plato de comida envuelto dentro del microondas.
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Solo quiero decir, que el inicio del capítulo no estaba planeado, solamente pasó D:
Y, en sí, este fue un capítulo complicado, hasta la mitad venía bien hasta que me debatí bastante por que camino seguir... Y bueno, el acosador necesita más tiempo en pantalla ya jeje
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