Kushina terminaba de preparar la cena con una gran sonrisa, sobaba su estómago abultado con su mano libre, podía sentir a Kakashi fuera de la ventana cuidándola, sonrió con diversión, su Minato era en extremo protector, un rayo amarillo apareció a su espalda, giró con una sonrisa para darle la bienvenida a su marido, cuando lo hizo abrió sus ojos demasiado, su sonrisa se perdió, vio el evidente parecido en ambos, los rubios la veían con cuidado, el cabello rojo comenzó a elevarse, una aura roja la cubrió, sus ojos se hicieron blancos, los rubios la vieron con terror -¿qué demonios significa esto Minato Namikaze?, ¿con quién demonios me engañaste? ttebaneeeee -la pelirroja lanzó la cuchara de madera casi asestando, ambos se pusieron de piedra, negaron con terror -no kushi, no es así, escúchame -el Hokage esquivó una cadena de chakra, dos más, tres, ambos estaban aterrados, una cadena los atrapó, los elevó en el aire dispuesto a golpear al mayor -es Narutooooo, viene del futurooooooo -el rubio menor lloraba en un gigante drama, moqueaba -da mie… mie… miedo… tteba… ttebayooooooo -la peliroja escuchó la muletilla, abrió sus ojos demasiado, comenzó a calmarse -¿co… cómo?-

Kakashi estaba parado en la ventana en cuclillas, abrió sus ojos demasiado al escuchar a su sensei, el rubio menor giró su mirada al percibirlo, levantó sus manos con ansiedad -kakashi-sensei, ayudaaaaaaa -el peliplata lo vio con duda, lo cargó en brazos, giró nuevamente hacia su sensei quien le explicó a la pelirroja a grandes rasgos la situación, la señora Namikaze observaba al pequeño con cuidado mientras Minato seguía dando una explicación, el pequeño moqueaba tratando de calmarse aferrado al cuerpo del Hatake, ambos veían y escuchaban -¿ahora entiendes? -Kushina se acercó al pequeño rubio que se enderezó, tragó pesado al sentir a la peliroja cerca, la Namikaze sonrió emocionada, lo cargó y embarró su mejilla en el pequeño -es tan hermoso ttebaneeeee -

El Uzumaki tenía una gota en la nuca mientras era apapachado y mimado por la señora, sintiéndose realmente feliz de estar con sus padres. kushina giró su mirada, observó la capa kage enrollada en su cuerpo, la vio con ilusión -Mina, también comparte nuestro sueño ttebane -Minato sonrió divertido, apretó el hombro de Kakashi con cariño -¿qué piensas? -el peliplata negó -estoy en blanco sensei-

-Yo pienso que serías un gran kage -Kakashi tragó pesado, negó con terror, el pequeño sonrió con maldad -entonces, ¿cómo leería los libros de Ero-sennin? -el peliplata se puso de piedra, un rojo oscuro cubrió su rostro, Kushina salió de la nada arrancando el libro que tenía en sus manos, la carátula cayó dejando ver la portada del perverso libro del sannin, levantó su mano dándole un coscorrón -pervertido ttebane, siéntense a cenar, ya está lista la comida -

Minato asintió viendo con lástima a su alumno quien se sobaba la cabeza -kakashi toma asiento -los Namikaze vieron con cuidado al niño -necesitamos ropa para Naruto, Mina, tenemos pura de bebé y adulto -ambos asintieron, el pequeño los veía con cuidado, Kushina sacó la capa, la chamarra y el pantalón dejando a un pequeño demasiado sonrojado cubriéndose con su playera blanca bajo la ropa -soy un adulto ttebayooooo, puedo hacerlo solo -la pelirroja lo vio con cuidado, afiló su mirada, levantó su dedo índice y lo apuntó -no es así, te ves como un bebé de cinco años, haces berrinche como un bebé de cinco años, lloraste como un bebé de cinco años, por lo que eres un bebé de cinco años, no hay más siéntate, ahora te sirvo -Minato y Kakashi sonrieron con una gota en su nuca algo nerviosos -Naruto, es mejor que obedezcas -Kakashi asintió de acuerdo, susurró -no te metas en problemas niño -el rubio menor levantó un puchero -pero soy mayor que ustedes ttebayo -la pelirroja giró con una sonrisa extraña, los tres se cuadraron -¿dijiste algo? -negó de inmediato.

-Debemos buscar una coartada Naruto, la aldea sabe que no tenemos hijos aún, de hecho, ni siquiera saben del embarazo de Kushina -el menor comía en una nube, sabía deliciosa la comida de su madre, limpió una lágrima de emoción, esa sí era comida casera, puso atención a su padre, asintió pensando ¿qué hacer? -tampoco puede decir que lo adoptaron, se parece demasiado a usted sensei -el menor los observó con cuidado -mmmmm tal vez si pueden -lo vieron con duda -un sello de imagen, sólo debo esperar encerrado a recuperar un poco de mi chakra y colocarlo, de hecho, en unos meses naceré y no podremos explicar el enorme parecido, tal vez un henge pelirrojo, ocultar mis marcas y decir que me encontraron fuera de la aldea, un Uzumaki -

Minato lo veía con cuidado -¿tienes los kekkei genkai? -el rubio mordió su mejilla -el ojo de kagura y el chakra sanador, nunca lo usé gracias al chakra biju, pero la abuela me dijo que lo tenía -lo vieron con sorpresa, kushina sonrió emocionada -entonces, es muy posible que tengas las cadenas ttebane  -Naruto sonrió -nunca lo intente, nadie sabía cómo hacerlas, no existía un legado, todo se destruyó en el ataque de Kurama -el zorro en el interior de Kushina abrió sus rendijas demasiado, nunca le había dicho su nombre a ningún humano -oye mamá -la pelirroja lo vio con brillitos -que bonito se escucha -los presentes rieron con diversión, Naruto se puso serio, un gran sonrojo lo cubrió, rascó su nuca nervioso -bueno, Kurama es importante para mí -kushina vio a su hijo, entendió a quién se refería. El rubio menor mordió sus labios reteniendo un puchero y lágrimas, sus ojos se veían acuosos por derramarse, el zorro no entendía porque un humano lloraba por él -fue algo así como un hermano mayor, me aconsejó, regañó, cuidó toda mi vida, dio su vida por mí -el zorro abrió demasiado sus ojos -cuando sucedió la guerra, tuvo la oportunidad de ser libre, el viejo Rikudou le dio la oportunidad de elegir y él eligió quedarse a mi lado -la pelirroja lo vio con tristeza, giró su mirada a Minato con una petición silenciosa -¿pu… puedo… hablar con él? -la Namikaze asintió.

Naruto sonrió con lágrimas en sus ojos, levantó su pequeña mano, la colocó en su estómago sintiendo el chakra del sello, cerró sus ojos apareciendo en el espacio mental de su madre, el rubio abrió sus ojos con adoración y emoción, una enorme sonrisa apareció en su rostro, comenzó a llorar al ver al zorro atado a esa piedra, caminó lentamente, hasta que ya nada le importó, corrió hacia él, se abrazó a su pata -ku… kura…ma… kuramaaaaa perdóname, debí morir contigo, no debiste salvarme, tú y yo estábamos juntos, lo prometiste -el zorro estaba sorprendido, sus ojos se ablandaron, indagó un poco en su mente mientras tenían contacto, el chico no mentía, el rubio se aferró con fuerza a él -aún no muero mocoso -el pequeño negó aterrado -no dejaré… que vuelvas a morir, te lo prometo… me haré fuerte nuevamente, aún más que antes -el zorro sonrió, giró su rostro hacia un lado, se sentía bien ser apreciado a ese nivel -ya vete de aquí mocoso -

Naruto sonrió con lágrimas en los ojos -gracias por volver -salió del espacio mental de su madre limpiando sus lágrimas, abrazó a la señora con cariño, la Namikaze lo abrazó con fuerza, besó su frente suavemente -¿estás más tranquilo? -el pequeño asintió, había pasado sólo un minuto en esa conexión, continuaron su comida con tranquilidad.

-Mañana debemos llevarte con Inoichi-san, tenía algunas dudas sobre ti, además, te llevaremos al doctor para revisar que no hayas sufrido daño -el pequeño asintió, sonrió al sentirse amado y procurado -me pregunto, ¿eras así de gritón y escandaloso como kage niño? -el pequeño vio a kakashi, afiló su mirada ofendido -desde chico eras un bastardo sensei -una gota cayó en la nuca de Kakashi, Kushina le dio un cucharazo a su hijo quien la vio ofendido sobándose -lenguaje ttebane -el pequeño levantó un puchero -gritón y escandaloso fui la mayor parte de mi vida, supongo maduré y dejé de hacerlo, aunque desde la muerte de Kurama nada fue igual -lo vieron con cuidado, su mirada se veía vacía a momentos, Kushina jaló su mejilla, la besó -no quiero ver esa mirada triste, todos existimos aún, nadie se ha ido de tu lado y debes grabartelo en esa cabeza tuya ttebane -Naruto sonrió dándose cuenta de ello, asintió feliz devorando su comida con emoción -está delicioso ttebayo -Minato sonrió divertido, era igualito a su Kushina su pequeño hijo, acarició su cabecita suavemente.

Al finalizar la cena Kushina arregló su habitación, Naruto veía con terror la situación, acababa de salir de bañar, su padre le había prestado una playera -¿es enserio? ttebayo -la peliroja soltó una carcajada -lo lamento ttebane, acabamos de mudarnos, sólo tenemos nuestra cama y la cuna, ya sabes, del bebé tú -el rubio se dejó caer con dramatismo y derrota, Kushina lo elevó, lo metió en la cuna, Naruto se veía entre los barrotes sintiéndose Kurama, un aura negra lo rodeaba -no seas dramático ttebane, mañana te compraremos una cama -el pequeño asintió, levantó su mano, apuntó su pancita mostrándole a su madre la ubicación de su sello -tengo mis ahorros aquí, su herencia la repartí, le dí la mitad a Konoha para la reconstrucción de la aldea, lo demás está en la caja de seguridad del banco en el futuro -kushina negó con fastidio -pues ahora tenemos mucho más, mi herencia dudo terminarmela en generaciones, no te preocupes, conserva tus ahorros -

El pequeño sonrió, se acostó y cubrió con la manta, Kushina lo vio con fascinación, Minato entró a su lado abrazándola del hombro -descansa mi niño -Naruto abrió grandes sus gemas, mordió sus labios con ganas de llorar, por fin tenía a sus padres a su lado, siempre anheló que lo arroparan y le dieran las buenas noches, sonrió con cariño -igualmente mamá, papá -Minato despeinó sus cabellos con cariño -descansa pequeño -ambos salieron de la habitación dejándolo dormir, el rubio sonrió quedito, se hizo bolitas con la manta, cayó completamente rendido.