─Hola.──Saludaron la morena y su amiga a Harika.

Harika corrió a recibirlas en un fuerte abrazo a las dos.

──¿Que opinan? ¿Les gusta?──Pregunto mientras les mostraba la decoración.

──Esta hermosa.──Sonrió Gunay.──Felicidades por tu puesto.

──Te lo agradezco.

──También te felicito.──Hablo Nurgul.──Pero no es por eso que habiamos venido Gunaycita y yo.

──¿Entonces?

──Para ponernos al dia de todos los chismes que han pasado.──Explico Nurgul mientras se sentadaba sobre una silla.──Necesito destilar veneno con todas ustedes, como en los viejos tiempos.

Harika y Gunay rieron y se sentarán junto a Nurgul, pidieron que trajeran te y una bandeja con delicias, luego comenzaron hablar tranquilamente, tal y como en los viejos tiempos.

Desde que Harika regresó a Topkapi no habían podido pasar tanto tiempo juntas como les hubiese gustado, puesto a que pasaron un monton de cosas en este palacio.

Gunay ya se encontraba mucho mejor desde la muerte de Kralice, todavía podían verla llorando, pero ya era casi escaso el llanto.

De todas formas la entendían, creian firmemente que no había nada peor que el dolor de una madre al ver el cuerpo de su hijo, como dije, creian, puesto a que ellas aún no habian pasado por ese dolor.

Las horas y risas pasaron volando, lo que comenzó con unos quince minutos, se convirtieron en unas horas.

Su amena charla fue interrumpida por una criada, la cual informó que Yavuz necesitaba ver con urgencia a Harika.

Aquello les llamo la atención a las tres, pero ninguna dijo una sola palabra, solo Harika hablo diciendoles a sus amigas que ahora volvia.

──Mi Sultán.──Reverencio fingiendo una sonrisa, cuando realmente los queria matar por haber interrumpidos su conversación con Gunay y Nurgul.

──Ven, acércate.──Ordenó el hombre.

Harika tomando un suspiro y toda su fuerza para no matarlo, fue en su encuentro, y una vez llego, Yavuz le extendió la mano, ella la tomo confundida, luego le enrolló un pañuelo por los ojos.

──Yavuz.──Dijo en un tono de voz serio.

──No es nada malo, solo dejate guiar por mi.

Con un suspiro más, Harika dejo que Yavuz la guiase por donde el quisiera.

Ni bien empezaron a avanzar, supo de inmediato que se dirigían al patio, camino con nerviosismos y aumento más cuando escucho voces en el.

──¿Aceptas?──Pregunto un hombre a otro.

──Acepto.──Afirmó otro.

¿Desde cuando Yavuz sabia a que a ella le gustaba cosas homosexuales? No, lo más importante, ¿Como lo habia descubierto?

Yavuz le Quito la venda de los ojos y los dos guardaron silencio.

──Ahora, usted, en representación de la Sultana Harika, ¿Acepta al Sultán Yavuz como su legítimo esposo?

──Acepto.

──¿Acepta?

──Acepto.

──¿Acepta?

──Acepto.

──Entonces, bajo los ojos de Allah, ustedes son oficialmente esposos.

La mirada de Harika brillo y se dirigió a Yavuz, el cuál sonreia de oreja a oreja.

──Desde ahora, tu nombre es "Aasiyah.", significa: "Reina de una poderosa dinastía."

Harika, ahora, Aasiyah lo miro con un brillo especial y luego lo abrazo con fuerza a Yavuz.

Ese brillo no era por que lo amara, le importaba un comino el hombre, el brillo era por que sabia el poder que tenia ahora en sus manos.

Ninguna mujer podria desafiarla de ahora en mas, y absolutamente todas las consortes debian reverenciarla.

Y como no estaba Mukerrem ya en este mundo, ella era la mujer mas importante de la historia otomana.

──¿Para que nos junto a todas?──Pregunto Azra con evidente enfado.

Y como si él mundo quisiera respónderle, entro Melek Kalfa.

──Sultanas.──Reverencio.──Debo hacerles un anuncio importante, desde este momento, todas, absolutamente todas las mujeres que esten en este harén, deben rendirle el debido respeto a la Sultana Aasiyah.

──¿Sultana Aasiyah?──Pregunto con curiosidad una concubina.

Nahid, Sahnahz y Mehpare, se preguntaron en susurros quien era esa, y por que no la habían conocido.

──La Sultana Aasiyah, antes llamada Harika, es la esposa legal de nuestro Sultán, y ahora nadie puede hacerle algo o lo pagaran con su vida.

Azahar cayo al suelo al escuchar esta noticia, Emira comenzó a llorar, sentía que su corazon se rompia en mi pedazos.

Azra, por su parte, se quedo helada al escuchar esto, aquello era un problema para la vida de sus hijos.

Nurgul comenzó a aplaudir con fuerza, estando realmente contenta por su amiga.

Y Gunay sonrio, una sonriaa radiante que iba acompañada de un: "Esa es mi chica.", realmente la morena estaba emocionada por ver la gran entrada que haria Aasiyah en él harén.

Y vaya que fue una gran entrada, a los pocos minutos, la mujer del Sultán entro con una corona de cristales y piedras preciosas, bañada en oro blanco y una gran luna en medio.

Rápidamente todas hicieron la reverencia que correspondian, y permanecieron en ese modo hasta que Harika se sentó en él medio del haren, haciendo una seña con la mano para que Nurgul y Gunay se sentarán junto a ellas.

Nurgul iba a la derecha y Gunay a la izquierda, y al lado de cada una, iban sus hijas.

Las otras tres mujeres, se sentarán lejos observando desde una esquina a las otras.

Y con aquel suceso, comenzaria la verdadera batalla por el poder.

¡Hi!

Algo asi me imagino la corona de Harika, ustedes pueden cambiarla a su gusto XD.

Pero algo a si me la imaginaba, como una especie de Diosa de la luna.

Con el próximo cap empezamos todo, por que es evidente que ninguna se va a quedar de brazos cruzados.