¡YO SOY TU ESPOSA!

Ya era medianoche y su amiga no aparecía por ningún lado.

Sakura estaba preocupada, no sabía cómo estaría Ino. Claro que Shikamaru era incapaz de hacerle daño, al menos no intencionalmente; pero Ino aún tenía el corazón dolido y no tenía idea si podía soportar estar tanto tiempo con él nuevamente.

Por otro lado, Temari no estaba preocupada, estaba triste y furiosa.

Quería pensar que su esposo seguía en el bar con su amigo, pero algo le decía que las cosas no quedaban simplemente ahí.

Sabía que no estaba solo con Chouji. O tal vez Chouji ya estaba descansando y su marido seguía por ahí, con su amiga de infancia.

No es que le disgustara el hecho de que pasara tiempo con alguna amiga. Ella muy bien sabía que si fuera Sakura, Hinata o cualquier otra kunoichi de Konoha, no sentiría esa opresión en el pecho.

Era ella. Ino. Esa alta, rubia y despampanante mujer la que le preocupaba.

Claro que ella tampoco era un espantapájaros. Claro que no.

Si quizás no era la mujer más bella del mundo, tampoco tenía nada que envidiarle a la kunoichi platinada.

Ella también era alta y era rubia. Quizás no era tan esbelta como Ino ni tenía esa cabellera tan sedosa, pero eso era porque a diferencia de otras mujeres, ella era una kunoichi que no perdía el tiempo en tontos tratamientos de belleza.

Pero ese no era el punto.

Sabía que entre ellos había una conexión muy fuerte.

Flashback

Temari se sentía adolorida, pero agradecía tener el apoyo de su esposo con ella.

En el campo de batalla vio que Shikamaru estuvo distraído desde que llegó su ex compañera de equipo. Él no dejaba de mirarla. Parecía que de pronto toda su atención estaba en admirarla y ver que no le pasara nada.

Pero luego de que fue herida, fue Ino quien la auxilió, por lo que de cierta manera estaba en deuda con la kunoichi de Konoha.

Ahora Shikamaru estaba con ella, a un lado de su camilla, acompañándola hasta que pudiera descansar. Sin darse cuenta cayó en un profundo sueño.

De un momento a otro despertó. No sabía cuánto tiempo había pasado, pero escuchó la voz de su marido en el pasadizo.

"Te he extrañado, Ino"

Seguido por lo que parecía ser el llanto ahogado de una mujer.

Temari se quedó petrificada sin saber si seguir escuchando o ignorarlo y descansar. Escogió lo primero.

"Verte aquí después de todo este tiempo me hace ver lo que me he estado perdiendo"

Temari despegó la oreja de la puerta. No podía creer lo que había oído. Luego escuchó la voz de Sai y decidió volver a la cama.

El esfuerzo había hecho que su herida volviera a abrirse, por lo que su recuperación demoró un poco más de lo planeado.

Fin del flashback

¿Habrían estado juntos o simplemente se querían el uno al otro?

Cualquiera que fuera la razón, lo cierto era que Shikamaru jamás la miró como la vio a ella en el campo de batalla. Jamás le escuchó decir palabras tan sentidas como las que había escuchado ese día en el hospital. Ni siquiera después de cinco años de matrimonio.

Shikamaru era un ser parco y educado. En la intimidad de su hogar mostraba un lado más amigable con ella pero eso era todo.
Ahora que lo pensaba, todos estos años él siempre la trató como a una buena amiga. A pesar del tiempo su actitud seguía siendo la misma.

En realidad no podía reclamarle nada. Pero ahora ella se había dado cuenta que él tenía una faceta que ella jamás había descubierto.

Sus ojos se empezaron a inundar al saber que su marido, el hombre al que amaba, podía estar con esa otra mujer.

Pero no, no podía demostrar debilidad. Ella no era del tipo de mujeres que rogaban por amor y se humillaban a sí mismas. Pero tampoco se la iba a dejar fácil. Él era SU MARIDO.

Así que decidió esperar sentada en la sala hasta la hora en que él se dignara a aparecer.

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--Te dije que no me esperaras despierta-- habló mientras dejaba sus llaves en la cocina y se servía un vaso con agua.

--Pensé que te había dicho que Gaara te esperaba a primera hora-- respondió.

--Y ahí estaré.

Shikamaru tenía la misma actitud perezosa de siempre.

--Hasta mañana-- dijo él.

No podía dejar las cosas así. Temari lo siguió hasta la habitación que compartían y lo vio entrando al baño, cerrar la puerta y encender la ducha. Se sentó en la cama y decidió esperarlo.

Con la pijama puesta y la toalla en el cabello salió del baño, encontrando a su esposa sentada en la cama, mirándolo fijamente.

--¿Por qué no descansas?-- le preguntó.

--Son casi las 3 de la madrugada, Shikamaru. ¿Te vas y vienes como si nada pretendiendo que me vaya a dormir tranquilamente?-- alzó un poco la voz. --Dime, ¿solo fueron tú y tu amigo Chouji?

--No quiero hablar de ello.

Temari sonrió.

--Entonces yo estaba en lo cierto. Tu amiga Ino también estuvo con ustedes, ¿no? Quizás Chouji vino para tener una excusa y llevarte con ella.

--No metas a Chouji en esto. Él no tiene nada que ver.

--¿Entonces solo fue cosa de ustedes dos? ¿Acordaron verse a escondidas? ¡Habla! ¡Respóndeme!-- elevó aún más la voz.

--Estuve con Chouji. Se embriagó; nos encontramos a Naruto y lo llevó a su casa. Cuando venía de regreso me encontré con Ino por casualidad y estuvimos hablando un rato. Eso fue todo.

Claro que no fue todo.

Hubo un beso, y mil palabras que murieron en sus gargantas porque les era imposible estar juntos.
Él amaba a Ino y ella a él, por ello tuvieron un momento de debilidad; sin embargo, Shikamaru no era un patán que fuera capaz de engañar a su esposa pasando la noche con otra, como quizás Temari se lo pudiera estar imaginando. Además Ino tampoco se lo permitiría.

--¡Pues no me parece correcto! He visto cómo la mirabas, además dijiste que la extrañabas, ¡YO TE ESCUCHÉ!--le recriminó. --Felizmente ya se van a Konoha. Mientras tanto, ¡te prohibo volver a acercarte a ella!

--¿Me prohibes?-- dijo extrañado. --Tú no puedes prohibirme nada-- bufó.

--¡PERO YO SOY TU ESPOSA!-- gritó.

--¡PERO NO PORQUE YO LO ESCOGIERA!-- le colmó la paciencia.

Abrió la puerta y la cerró con fuerza, dejándola sola.

Jamás una persona se había atrevido a tomarse esas atribuciones.

¿Prohibirle algo? Él no era propiedad de nadie para que tuvieran que decirle semejante estupidez.

Él, como hombre, sabía qué es lo que debía hacer sin que ella tuviera que prohibirle nada.

Esa noche, luego de ese beso, había hablado con Ino. La emoción de volverla a ver lo cegó por un momento haciéndolo decir cosas que resultaban imposibles.

Ambos sabían que él no podía dejar Suna de la noche a la mañana.

Ino tampoco se merecía un hombre casado que no podía darle el lugar que le correspondía.

Flashback

Ambos se separaron debido a la culpabilidad que sentían.

Se miraron el uno al otro, sabiendo que lo suyo no podía ser. Al menos no por ahora, pues ambos se resistían a dar su amor por perdido.

--¿Qué es lo que debemos hacer, Shikamaru?-- se acurrucó en su pecho.

Él la abrazó fuertemente. Sabía que debía tomar una decisión con la mente fría y pensando realmente en el futuro de ambos.

--Lo mejor será que nos mantengamos alejados el uno del otro-- dijo ella respondiendo a su propia pregunta. Realmente le costó decir aquello.

--Sabes que te amo, ¿verdad?-- Shikamaru empezó a hablar --Y no quiero que sufras por mi culpa. No quiero que te detengas por mí. Quiero que sigas con tu vida-- la apretó más a su pecho --Pero te prometo que haré hasta lo imposible por regresar, te lo juro-- le dijo. -- No quiero que me esperes, porque no sé cuánto tiempo me tome; pero ten por seguro que siempre te amaré.

Esta vez Ino sintió tanta convicción en sus palabras que no se sintió triste, sino feliz de saber que tarde o temprano él volvería a Konoha. Y aunque no quería decírselo, ella estaría ahí, esperando por él los años que fueran necesarios.

Los dos sabían que ese sería el último recuerdo que tendrían el uno del otro. Hasta que llegara el momento en que se volvieran a ver en Konoha, libres de ataduras.

Fin del flashback.

01/09/19

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