Perdón este es el más largo hasta ahora, intentaré que no vuelva a pasar. Bueno espero que os guste.

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Niall aparcó en un espacio que había delante de la puerta, ambos salieron, tras cerrar las puertas y cerrarlo con el seguro Niall acompañó a la chica a la puerta de su casa, ambos lo habían pasado muy bien en toda la noche y a decir verdad ninguno de los dos quería que eso acabase ahí. Ella abrió su bolso para buscar la llave de su casa mientras el chico miraba los labios para justo en el momento que la puerta se abrió este la besó. La chica al principio no sabía que hacer exactamente, Niall Horan la estaba besando, poco después respondió lo que ocasionó una sonrisa del mayor, lentamente se separaron y se quedaron mirándose fijamente a los ojos sin pronunciar ninguna palabra, ese silencio fue interrumpido por Trice.

—¿Quieres pasar a tomar la última copa?

—Me encantaría —sonrió mientras decía eso, poco después su mano fue cogida por la castaña, la siguió hasta el interior del edificio, ella cerró la puerta y luego lo guió a la sala de estar.

—¿Qué te apetece en especial?

—Un poco de ron estaría bien.

—Perfecto, voy a por una botella y a por dos vasos, ponte cómodo ahora vengo.

—Perfecto —fue a la cocina, cogió dos vasos de cristal y una botella de ron de una estantería con varias botellas de alcohol, tras cerrar la puerta de cristal volvió a la sala con Niall.

Dos o tres copas pasaron para que la conversación que ambos tenían entre risas se convirtiera en algo absurdo para las personas exteriores a ellos pero que para los dos era una de las conversaciones más entretenida que habían tenido nunca. Dos horas después los vasos junto a la botella estaban en la mesa mientras ambos jóvenes estaban unidos en un hermoso beso el cual rompieron por falta de aire, unieron sus frentes para después abrir los ojos y mirarse, ambos tenían las pupilas dilatadas pero ninguno de los dos podría asegurar si era por el sentimiento que ambos estaban sintiendo o si era por el alcohol que ya tenían los dos en sangre. Niall se separó un poco, claro que quería ir a más, esa chica le gustaba pero en ese momento las cosas dichas por los chicos daban vuelta en su cabeza, sabía que Trice no era famosa, no quería que ella se viera involucrada en ese mundo.

Se levantó del sofá, para dirigirse a la salida de la casa, pero justo cuando pasaba justo por el arco de la sala hasta el pasillo la mano de la chica lo detuvo, se giró para verla para en ese momento recibir un dulce beso de ella, eso hizo que el castaño no pudiera retener sus sentimientos y siguió el beso posicionando su mano en la mejilla de la chica, poco después se separaron mientras que la mano del mayor bajaba hasta el hombro de la chica.

—¿Cuál es tu habitación?

—Arriba, la primera por la izquierda —tras decir eso sus labios volvieron a unirse, aunque iban subiendo la escalera con cuidado ninguno de los dos quería separarse, ni perder la guerra de los besos que cada vez se volvían más intensos.

Al llegar al lugar, la puerta fue abierta por la dueña de dicha habitación pero no por ello se separó del hombre al que estaba besando, caminaron hasta la cama y al sentirla a la altura de las rodillas, Niall se sentó y abrazando a Trice por la cintura hizo que esta se sentara en su regazo, en medio del beso la chica le quitó la chaqueta tirándola a alguna zona inexacta de la habitación para después quitarse la suya y aumentar la profundidad del beso pasando sus brazos por los lados del cuello del mayor y entrelazando algunos de los mechones que tenía en la nuca con sus dedos, se separaron por falta de aire y antes de seguir Niall decidió parar cogiéndola suavemente por los hombros y la miró fijamente a los ojos.

—Trice me gustas de verdad y por ello quiero ir lento, no quiero ir a más en una primera cita, ¿lo entiendes?

—Lo entiendo perfectamente —le sonrió ampliamente —¿vas a quedarte a dormir? —le dijo dulcemente mientras se levantaba y cogía las dos chaquetas que había por el suelo para poner la del chico en una silla que tenía allí y la suya en un perchero que tenía detrás de la puerta.

—Si —se dejó caer a la cama con los brazos abiertos, lo que ocasionó una pequeña risa de la ojiverde —, he bebido demasiado, así que prefiero quedarme a dormir contigo.

—Jajaja, voy a por algo de mi padre para que te lo pongas para que duermas cómodo.

—Con unos pantalones me bastarán.

—Vale —aceptó riendo mientras salía de su habitación y se dirigió a la habitación de sus padres para coger un pantalón de pijama de color gris de la cómoda que compartían ambos, tras eso volvió a su habitación y al ver que el mayor seguía en la misma posición le tiró el pantalón a la cara sorprendiendo al chico —cambiate yo voy a ir al baño a cambiarme y a limpiarme el maquillaje y ahora vengo.

—Perfecto —la chica salió de la habitación para hacer lo que había dicho, tardó lo menos posible y al volver a la habitación vio toda la ropa del chico en la silla junto a su chaqueta y debajo de esta sus zapatos, miró a la cama y allí vio a Niall solamente con los pantalones, su pecho descubierto y el pelo despeinado, todo eso unido a una hermosa sonrisa y a esos ojo azules, la chica estaba enamoradísima de esa imagen.

—¿Por qué no te has dormido ya?

—Esperaba mi beso de buenas noches.

—Jajaja— se acercó a él sonriendo, este se levantó y tras destapar la cama ambos se tumbaron y se taparon juntos.

—Buenas noches Trice.

—Buenas noches Niall —ambos se dieron un dulce beso y se durmieron abrazados.

A la siguiente mañana los primeros rayos de sol entraban por la ventana dando de lleno en la cara de la chica quien molesta movió un poco su cabeza y notó que estaba tumbada encima de algo suave pero no era su cama, abrió lentamente sus ojos y estaba apoyada en el pecho de Niall abrazando su abdomen con su brazo izquierdo, este aún seguía dormido profundamente, Trice al verlo sonrió levemente y se acomodó en la misma postura que estaba, llevó su mirada hasta la cara del chico a quien comenzó a mirar de manera hipnótica como si se tratase de una de las obras de artes más bellas del mundo, era cierto que no era la primera vez que se quedaba fija mirando esa cara, pero era la primera vez que estaba tan cerca de ese chico, tan cerca de ese ser que la había convertido en la persona más feliz con solo oír su voz, aunque en este momento la estaba enamorando con el solo hecho de verlo respirar con el semblante tranquilo. Una tos del chico la sacó de sus pensamiento y al ver que este estaba comenzando a abrir lo ojos esta cerró los suyos haciéndole creer al chico que estaba dormida.

Niall abrió sus ojos totalmente, se desperezó suavemente al sentir un peso encima suya miró hacia su lado y allí vió a la chica dormida, sonrió para después acariciarle el pelo suavemente, entrelazando sus dedos entre algunos de los mechones largos, siguió acariciándola dándose cuenta que la chica ya estaba despierta.

—Buenos días, sé que estás despierta pequeña —la chica rió y abrió los ojos.

—Me has pillado, pero es que te vi dormido y sería un demonio si te despertarse.

—Jajajaja, ¿me has hecho alguna foto? —sonrió traviesamente.

—No, todavía no.

—Jajaja —se acercó un poco a ella y le dió un hermoso beso en los labios —voy a ir a cambiarme, ¿dónde esta el baño?

—La puerta está abierta, es la primera que verás al salir.

—Perfecto, ahora vengo.

—Yo me vestiré rápido y bajaré a preparar el desayuno, así que puede que cuando salgas esté ya abajo.

—Bien —Niall se levantó de la cama y tras coger su ropa se dirigió al baño, Trice tras eso se levantó y se puso esta ropa.

Tras estar lista, bajo a la cocina y tras hacer la masa rápidamente comenzó a hacer unas tortitas, ya había hecho unas cuantas cuando sintió los brazos del chico abrazando su cintura y su barbilla apoyada en su hombro.

—Que bien huele, ¿hay para mi?

—Claro que sí, yo esperaba que te quedases a desayunar.

—No puedo decirle que no a esas tortitas que tienen tan buen olor y seguro que sabrán mejor.

—Muchas gracias —sonrió levemente.

—¿Me llevo algo para la mesa?

—Encima de la encimera hay frutos rojos, miel y chocolate, para si quieres echárselo a las tortitas, ah por cierto, ¿Quieres café, té o cacao?

—Café está bien.

—Bien —Niall la soltó para coger las cosas de la encimera y llevarlas a la mesa, mientras Trice encendía la cafetera y la hervidora de agua, ponía una taza en la cafetera para que el café comenzase a verterse en ella y preparaba otra para cuando el agua estuviera lista—¿Algo más? —la chica le dió los cubiertos necesarios dos cucharas, dos cuchillos y dos tenedores.

—¿Al café le vas a echar algo?

—Un poco de leche, si no te importa.

—Claro que no, en el frigorífico está la botella de leche —dijo mientras apartaba las dos últimas tortitas habiendo en el plato un total de seis, apagó el fuego de en la que había estado la sartén de las tortitas y justo en ese momento la cafetera y la tetera pitaron avisando que ya estaban listos. Cogió el recipiente de agua y la vertió en una taza en la que después, puso una bolsa de té de Yorkshire y tras coger el plato con las tortitas fue a la mesa y justo cuando Niall iba a ir a por su café Trice fue y se lo trajo lo cual molestó un poco al chico.

—Ya iba a ir yo a por él.

—Eres mi invitado así que no —dijo con un sonrisa.

—Jeje —ambos comenzaron a desayunar —ahora que lo pienso, ¿vives sola?

—No, pero como si lo estuviera, ya que mis padres, al igual que yo son fotógrafos dedicados mayormente a los paisajes y están siempre viajando.

—¿Y a ti te gustaría eso?

—Adoro viajar, pero yo me quiero dedicar más al diseño gráfico, así que si te digo la verdad me gusta más la idea de tener un sitio fijo al que llamar mi casa.

—Suena hermoso.

—Muchas gracias —sonrió para después seguir desayunando ya terminado Niall ayudó a Trice a recoger la mesa.

—Trice sobre lo que dije lo que dije anoche.

—Tranquilo, sólo ha sido la primera cita, entiendo que quieras ir lento y seguro.

—Gracias por entenderlo, pero eso no quiere decir que no quiera empezar una relación contigo —sonrió levemente y ambos se dirigieron a la puerta principal.

—Genial, pues ya hablamos por WhatsApp novio mío – dijo riéndose.

—Suena genial novia mía— Niall abrió la puerta y tras besar a la chica como despedida, le sonrió y se fue de la casa.

Trice cerró la puerta lentamente, su mente todavía no ponía en orden todo lo ocurrido, se apoyó en la puerta y lamió sus labios lentamente, el sabor del mayor se había impregnado en ellos y amaba ese sabor, sonrió felizmente para después irse de su sitio al estudio, aunque faltaban dos semanas para la sección de fotos de Louis, quería asegurarse de tenerlo todo.

Continuará...