Capítulo I: Algo del corazón

La relación que Michael y yo mantenemos es tan especial que ha dado desde siempre lugar a muchas especulaciones. Suposiciones que van desde los medios a los cuales les encanta hacer comidilla de nuestros asuntos hasta dentro de nuestro propio círculo personal. Así, para algunos de sus hermanos, yo no soy más que una oportunista manipuladora que en algún punto se valió de su fama para incrementar la suya, y en cambio él representa a los ojos de mis pretendientes una amenaza, como uno de esos ex no reconocidos que siempre andan al acecho. Algo que me da gracia porque todos ellos jamás llegarían a entender el profundo cariño que nos une y la verdad es que tampoco me interesa explicárselos.

Hemos estado con Mike en el ir y venir de la vida inmersos en una extraña situación de amor-amistad desde hace muchos años y pareciera que nos hemos acostumbrado a ello. Aunque nunca hemos confirmado una relación, no niego que lo hemos intentado, más al final siempre nuestros compromisos a causa de nuestro trabajo y obligaciones han terminado separándonos. En lo que a mí respecta, no es que no lo quiera pero sé reconocer que él necesita de una mujer que esté de forma permanente a su lado y lo cuide como una pareja ideal y desgraciadamente esa no puedo ser yo. Sin embargo le he dejado en claro que siempre me tendrá si me necesita...

La verdad es que sí quiero a Michael, lo quiero con todo mi corazón, incluso más de lo que reconozco o debería, y una prueba de ello es que hace poco terminé con mi novio debido a un ataque de celos.

Dean Cain no soportó que Michael me propusiera participar en uno de sus videos para su nuevo álbum. Yo ni siquiera había dado una respuesta cuando por oídos de algún conocido en común (ya que también es actor) se enteró y su reclamo lleno de desconfianza en mí colmó mi paciencia.

No acepté al final tampoco ser la modelo, como en el fondo en algún momento sí llegué a considerar debido a la insistencia de Mike, pero sólo para que Dean no pensase que lo hacía por venganza, porque esa no es mi manera de actuar. Ante todo soy una dama y tampoco pienso exponer a Michael a ningún tipo de provocaciones. Lo aprecio demasiado para eso.

Con todo sí fui al primer día de grabación del videoclip, cuando después de excusarme de no poder participar por asuntos estudiantiles y tareas pendientes de la universidad, aun así (comportándose tan lindo) me invitó a asistir.

El proyecto para la canción "Jam" se llevó a cabo aquí mismo en New Jersey pero en las afueras de la ciudad, en un antiguo coliseo de basketball y tuvo como estrella invitada a una de las máximas estrellas del mismo deporte, Michael Jordan. Otra de las tan extraordinarias ideas de Michael.

"¡Tuvimos que cambiar de repente todo el plot gracias a ti!" en algún momento vía teléfono me recriminó. Previamente me había contado que quería filmar una historia visual con su mejor amiga y a decir verdad aunque en mi opinión yo no creí combinar dentro de la canción, respeté su idea, pues al final de cuentas quien puede contradecir a Mike respecto a su ingenio y no salir asombrado.

El resto de mis amistades más cercanas opinaron que escogió la localidad por mí, para estar cerca de donde estoy residiendo, pero la verdad es que se me dificulta creerlo también. Es decir, yo sé que Mike me quiere y que le gusto, que soy su crush de toda la vida así como él lo es para mí, pero no creo que realice cosas así hasta ese punto. En especial, siendo tan admirado como es y pudiendo ligar con quien quiera durante sus viajes, teniendo a sus pies a millones de fans que morirían por él. Hasta sé muy bien que tiene a muchas de sus bailarinas completamente enamoradas... detalle que por alguna razón cada vez que lo pienso no me agrada para nada, pero bueno, no obstante, volviendo a aquel día, algo particular pasó entre nosotros en los entretelones de la grabación... Un beso.

...Todavía se me vuela la mente al recordarlo.

Fue durante el descanso que tomó la producción para almorzar. Mike aprovechó para acercarse a saludarme y presentarme a su equipo de producción y colaboradores, al igual que a la personalidad invitada. Siendo todos encantadores y muy amables conmigo. Luego al compartirle lo impresionada que estaba del lugar de la filmación, se ofreció con gusto a mostrarme las partes más interesantes de la vieja edificación de más de un piso. La cual en un tiempo fuera un colegio y actualmente es administrada por el comité del sector.

Él que previamente ya se había atrevido a explorarla toda, consideraba que su canción pegaría como un fuerte mensaje de lucha contra los problemas de la vida siendo filmado el video desde un ambiente real donde los jóvenes se desenvolviesen y por eso escogió la locación. Yo atendí a la explicación que le dio a su grupo, quedando totalmente de acuerdo.

Y acepté fascinada así la pequeña aventura que me planteara, dejándome embelesar en esa magia infantil que muy aparte de su profesionalismo él emana (una dualidad que sólo hace más increíble su magnánimo ser) y que por lo general consigue atraparnos cuando estamos juntos.

Nos adentramos de tal forma en las entrañas del lugar en una entretenida experiencia.

El sitio estaba en gran parte en desuso y entre paredes garabateadas, pupitres oxidados, techos caídos, ladrillos derrumbados, telarañas, polvo y suciedad así como historias de fantasmas, de esas que tanto le gustan a él (todas salidas de su invención con la finalidad de asustarme, ahora que lo pienso), los dos llegamos hasta el piso más alto, donde dentro de un salón vacío, en el alfeizar de un gran ventanal nos pusimos a conversar.

-No recuerdo desde hace cuánto no me divertía tanto- dijo burlándose de mí, posterior a convencerme cuando nos encontrábamos en el pasillo de que había visto pasearse una sombra dentro de una de las oficinas aledañas, haciéndome de inmediato salir corriendo espantada de allí. Más luego al mirar hacia atrás para comprobar si estaba bien y verle doblarse de la risa, me di cuenta de la tomadura de pelo.

-¡Muy gracioso "señor perfecto"!- todavía con el corazón en la boca donde habíamos llegado entonces, le refuté. Pese a todo, no podía estar por mucho tiempo enojada con él. Ya lo había comprobado antes. La razón, porque tiene ese ángel, ese carisma con el que aún después de realizar una travesura, resulta tan tierno que te hace olvidar con prontitud cualquier enfado. Un arma que bien puede utilizar a su favor. No lo puedo negar, y es esa en definitiva la causa que hace que todo el mundo se vuelva loco por él, porque se nota a leguas que es de esas personas que son como una lucecita que a donde quiera que van iluminan la oscuridad.

-No soy perfecto, ya lo hemos hablado- con modestia ante mi recurrente halago, opinó.

Por mi parte el sólo hecho de que habiendo sido un niño prodigio que creciera para convertirse en todo un ícono de la música, cual si fuera un Mozart moderno y aun así por su humildad no lo reconociera, me hacía admirarlo mucho más.

Siempre tan tímido, reservado y calmado pero a la vez tan apasionado y entregado a su trabajo, y tan persistente y perfeccionista para alcanzar sus metas. Un alma a veces muy vieja y otras veces muy joven, cuya inmensidad y genialidad se notan cuando te mira, de ese modo tan profundo y analítico, con esos ojos oscuros de noche sin luna.

-En cambio, yo sí puedo presumir que me encuentro justo ahora junto a la dama más preciosa del planeta- devolviéndome los elogios agregó y tuve que aun conociéndolo como lo conocía y con la confianza que nos teníamos, bajar la mirada un tanto sonrojada, pues su radiante sonrisa tan cálida como el sol de verano, una vez más me deslumbró –Y aún demasiado predecible, maravillosa además- puntualizó sabiendo que hacía un buen trabajo. Por todo, simulé que le propinaba un codazo para que se moderara, mirándolo de reojo, pero luego me acerqué en forma cariñosa más a él, hasta que nuestros brazos quedaron muy juntos, ya que nuestra cercanía se sentía tan bien.

-Tú y tus cosas- acoté

– ¿Que todavía no lo crees?, ¡Lo digo en serio!, ¿No viste lo encantado que lo dejaste a Michael Jordan? ¡Estaba babeando! Ya empezaba a ponerme celoso- arguyó

-Eso no es cierto. Solo fue cordial, además él es casado y encima sabe que conozco a su esposa- rebatí teniendo que reírme –Además el único "MJ" que me gusta eres tú- añadí coqueteándole para seguirle el juego y como esperaba, él se sintió complacido. Tanto que no tardó en pasar su brazo por mis hombros, como sabía que yo en el fondo quería.

-¡Ven aquí!, uno de estos días me vas a volver loco- me dijo rodeándome en un abrazo y aprovechó de tal forma para contarme de sus nuevos proyectos, entre ellos sus ideas para sus próximos videoclips.

-Imagino que todas tus mágicas ocurrencias con el tiempo se volverán memorables. Saldrán geniales, lo sé- comenté creyéndolo sinceramente, y más porque las tramas y mensajes que me contara quería llegar a transmitir eran realmente impresionantes.

-Sabes Brooke, tengo también algunas nuevas campañas publicitarias por realizar y estaba pensando en proponerle a los productores nuevamente que tú podrías ser la modelo junto a mí en algunas de ellas. Tendrían el triple del éxito si te animaras a participar tú- de repente sorprendiéndome, profirió –Pero claro, primero necesitaba consultarlo contigo para saber si estás de acuerdo-

-Pero... el problema es que no sé si tenga el tiempo suficiente. Princeton por lo pronto, como sabes, tiene comprometidos casi todos mis horarios- excusé y no mentí, pues la vida universitaria y la carrera de Literatura en la cual estaba enfocada, sí habían hecho que se paralizara de momento mi trabajo en el medio artístico.

-Claro, lo suponía- Mike mirando al suelo, lo aceptó –Es igual que cuando te propuse ser la imagen conmigo en mi último comercial de soda...- añadió mencionando aquello para molestarme y que esbozara un puchero de cachorrito ayudó mucho a que me sintiera mal al respecto, porque a decir verdad recordaba aquella publicidad cuya temática de los sueños me había encantado ni bien la oyera, aunque no había aceptado ser parte de ella. Él lo sabía y por eso se divertía de vez en cuando recordándomelo.

-Ya no seas cruel, ya hemos hablado de eso. Además bien que te divertiste con esa chica. Te salió super natural- sin saber por qué, algún tipo de celos guardados se me hizo presente y terminé reclamándole. Sonrió de forma ganadora al oír aquello.

-Pues yo hasta ahora sigo pensando en lo mucho que me hubiese gustado que fueras tú la chica con la que me tocó bailar y también perseguir a través de ese mundo onírico...- contento de haber conseguido captar toda mi atención respecto al tema y también de mi torpe revelación de interés por él, profirió hablándome enseguida de cerquita -...porque al final de cuentas aquello no es tan diferente de nuestra historia...- prosiguió añadiéndole para esos momentos seriedad al asunto, con lo que consiguió de algún modo que mi corazón comenzara a latir más a prisa al instante –Es así como me siento contigo. Persiguiendo siempre a la chica de mis sueños-

Al decir eso me dejó momentáneamente sin palabras y lo captó, por lo que sin darme tampoco oportunidad a opinar nada, no perdió la oportunidad y me besó.

...No supe en qué momento me quedé encandilada con sus palabras, con su dulce voz, tanto que desestimé que enfocara su vista en mis labios sin atinar a apartarme al notar su clara intención de acortar la poca distancia que quedaba entre nosotros. La cuestión fue que cual mago me hechizó y sólo pude reaccionar algunos segundos después, al sentir sus suaves labios contra mi boca, al igual que la delicada manera en que deslizaba su mano por mi cintura buscando atraerme más a él... y mi retorno a la conciencia únicamente fue para corresponderle como era debido.

No fue la primera vez que nos besábamos, pero sí la primera en muchos años. Ya no recordaba cuántos. No le di mucha importancia a eso, impresionada en lugar de ello de percatarme que mi inconsciente sí recordaba bien su forma de besar. En ese rato dejé de lado todo lo demás, concentrándome sólo en sentirlo a él.

Resulta interesante ahora si me pongo a pensar, que en esos instantes dejamos de ser los artistas de quienes todos deseaban conocer sus secretos para convertirnos sólo en un par de confundidos.

Desconociéndome a mí misma en mi accionar. Tal como si mi cuerpo reaccionara por sí solo a sus deseos, fascinado con él, con su cercanía, con sus caricias y sin hacerle caso a mi razón, no tardé en enredar mis manos en su largo cabello rizado que ese día lo llevaba sujetado en una coleta, acariciando luego su nuca y su cara, hasta que nuestra sorpresiva demostración de pasión concluyó y mis manos terminaron sobre su pecho agitado.

"Esto no debió pasar" en mi interior me dije, augurando que tarde o temprano acabaríamos complicándonos respecto a nuestros sentimientos. Con todo, no tuve tiempo de argumentar nada y él tampoco, porque en ese rato fuimos sorprendidos en medio de nuestra propia impresión personal al escuchar una llamada por megáfono de la producción desde la planta baja, pidiéndonos que nos reuniéramos con ellos de inmediato porque se reanudaba la filmación.

-¡Brooke por favor vamos al terminar la grabación por un café! Tenemos que conversar sobre esto nena- ilusionado Michael prácticamente me rogó sosteniéndome del brazo, intuyendo quizá mis ganas de salir corriendo cual heroína de telenovela común.

...Temor fundamentado a decir verdad en el poder lastimarle el corazón, reconociendo en el fondo que yo no creía merecerlo, más cuando recién acababa de cortar con mi novio, y encima al notar lo importante que le había resultado el momento dentro de sus bonitos ojos. Sólo asentí para no retrasarlo y me agradeció dándome un tierno beso en la frente antes de encaminarse a reunirse con parte de su equipo de trabajo que para entonces ya nos llegaban a buscar -¡Ahora tengo que ir a enseñarle a mi tocayo a bailar, pero te prometo que me desocuparé pronto!- me explicó muy animado al llegar a la escalera, antes de bajar primero.

Me quedé vagando por las inmediaciones del set de filmación una media hora más, pero al final tratando de analizar a profundidad el montón de sentimientos entremezclados que tenía y sin poder obtener un resultado específico, decidí que lo mejor era regresar a los dormitorios de la universidad y reunirnos otro día. Me excusé por ello con uno de sus agentes, diciéndole que me retiraba a causa de un dolor de cabeza, pidiéndole además que le hiciera participe de mis disculpas.

Michael lo entendió y tratamos de conversar un poco esa noche por teléfono pero sin mucho éxito, comprendiendo que es un asunto que debemos arreglar frente a frente. Hemos acordado por ello en reunirnos ni bien él tenga tiempo libre, que espera sea pronto teniendo en cuenta los compromisos de su agenda, siempre mucho más ocupada que la mía.

...No le conté en dicha ocasión sobre lo de Dean, no estando segura de sí nuestra ruptura era definitiva o de sí podríamos tener una reconciliación (estando yo ya tan acostumbrada a él dentro de mi vida, más que enamorada), pero la noticia no demoró en salir, filtrada de seguro por alguien a quien mi ex se lo contara, y ahora al cabo de una semana, como esperaba las solicitudes de entrevistas buscando una confirmación no dejan de llegarme. Peticiones que no he contestado por estar ocupada con mis clases. Con todo, a estas alturas la opinión de una sola persona al respecto para mí es importante, y ésta tal como lo intuía no ha tardado tampoco en manifestarse.

Lo hace desde la hora del almuerzo del mismo día en que el chisme sale a la luz pública. Mi móvil personal con insistencia no ha parado de sonar, siendo en su mayoría llamadas de Mike.

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Continuará...

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